Partida Rol por web

Jeff contuvo la respiración mientras el guardia pasaba justo por debajo de su posición, iluminando con la linterna todos los recovecos que encontraba. Por suerte, no se le ocurrió apuntar hacia arriba, donde Jeff lo observaba apenas a un metro de distancia...

Tras unos segundos que se hicieron interminables, por fin uno de los gatos dio un salto unos metros más allá, distrayendo al guardia. Este maldijo en voz baja, y siguió su ronda, algo más calmado.

Habiéndose marchado el centinela, luego de pasar unos segundos para asegurar que no volvería a tener un encuentro no deseado con ese individuo, Armstrong bajó hacia el suelo en el mayor silencio. 

La presencia de un guardia en el almacén certificaba la importancia del inmueble. El muelle, aunque a simple vista apenas vigilado, como el inmortal Ninja Americano había comprobado con sus propios ojos, contaba con una mayor seguridad de la que aparentaba.

Jeff salió con sumo sigilo del edificio, yendo a reunirse con Brett y Elizabeth para ponerles al corriente de lo que acababa de descubrir.