Partida Rol por web

Heraldos de la noche

0.4.6 Saolèile Heleborn

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10/02/2009, 17:16
Director

Buffff... pues sí, es bastante maja. Aunque los inconvenientes pueden ser un problema en algunos casos. No creo que Saoleie sea del tipo que muestra sus emociones con frecuncia por lo que deberías estar más o menos a salvo de convertirte en un faro ambulante cada dos por tres xD

Posees una cualidad natural que te permite aprender hechizos con suma facilidad. Empiezas conocienco una lista de hechizos hasta el nivel equivalente a uno escogido por un personaje de tu profesión. Si eres un semihechicero o un no hechicero tus costes de desarrollo para las listas de hechizos son la mitad de lo normal. Sin embargo, cada vez que ríes, lloras, estás aturdido o sangras empiezas a brillar con una luz rojiza brillante como la de una fogata. Incluso invisible, tu "aura" será visible.

:D

Estatus especial es más o menos como habilidad especial pero haciendo referencia más al linaje. Suelen dar más trasfondo que otra cosa, exceptuando las tiradas muy altas o muy bajas :)

EDIT: Los rangos de los idiomas, calcula que es aproximadamente un 7 en hablado y escrito. Luego lo ajustaré yo mismo, pero para que te hagas una idea.

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10/02/2009, 17:30
Saolèile Heleborn

No, nada como Mina. Imaginaba que más bien sería de andar demostrando las emociones contrarias, así que no le imaginaba una sonrisa sincera o muchas lágrimas muy seguido... Lo que espero es que no se la pase sangrando, ¡imagina tú el descalabro! :D

Ah, perfecto, entonces me parece bonito que queden en 7 por ahora. Me anotaré lo anterior. Habiendo gastado 3 de 5 en dos HE y un OE... otra pregunta, ahora que estamos: una vez elegida la habilidad a la que dará el +10, el objeto queda fijado en esa y no cambia a otra, ¿verdad?

Estoy pensando en qué gastar lo otro [y ya termino con tu tortura]. ¿Crees que un +15 en Meditación puede ser útil?

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10/02/2009, 18:09
Director

Pues sí, el +15 de meditación puede ayudar ciertamente, sobretodo al principio. Y nada de torturas, un placer responderte por aqui :)

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10/02/2009, 18:46
Saolèile Heleborn

Entonces queda:

1) Objeto especial: +10 a Algo

2) Habilidad especial: Ojos de dos colores

3) Habilidad especial: Facilidad para aprender la Magia / Cómo transformarse en un faro con una sola sonrisa

4) +15 a Habilidad Secundaria: Meditación.

Y lo último será Estatus Especial. Dame trasfondo para llenar a esta necro, Neijel ;)

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: E E
Resultado: 37

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10/02/2009, 19:24
Director

Estatus especial: Eres multicultural y políglota. Hablas dos o tres idiomas adicionales de tu elección (con rango de habilidad 10 en hablarlos y escribirlos), además de poseer una comprensión básica de las culturas asociadas con ellos.

Ahí tienes algo más de trasfondo :)

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10/02/2009, 19:25
Saolèile Heleborn

Al diablo. Y yo que pensaba seriamente en eso del Idioma a rango 10 XD

Okey, esta parte se ha terminado, creo... Voy a volver a mirar los idiomas y a pensar por dónde es coherente que haya estado Saolèile para decirte cuáles elijo. ¿Qué más queda?

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10/02/2009, 19:28
Director

Esto es basicamente todo. Quedan algunas tiradas por hacer y algún otro detalle pero me encargaré yo mismo cuando revise la ficha de arriba a abajo.

El equipo lo veremos más adelante si te parece. Te puedo dar yo un equipo "básico" y tu modificas lo que quieras o quitas o pones o lo que sea.

Lo que sí tienes que hacer es darle forma ahora a esa ficha y escribir el trasfondo. Dónde tú lo dejes empezará el prólogo :)

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11/02/2009, 23:06
Saolèile Heleborn

Bueno, tal como te dije por MSN, un pedazo de historia de Saolèile y la sociedad Dúranak, desde los ojos de su exclavo:

A veces, al verla aparecer frente a mí en las horas más profundas de la noche, la recuerdo de niña. Era una pequeñez de cabello plateado que miraba las paredes de la caverna principal y preguntaba por qué no había vida sobre la superficie fría. Pasaba horas arrastrando la mano por los grandes murales tallados del Pasaje de las Glorias, el brazo abierto en la piedra que llevaba directo a la metrópolis de Ignatar J’huk. Era el trabajo de mi padre permanecer parado a un lado, fuera de la vista de ella, esperando que terminara de repasar la historia de los Dúranak con los dedos. No se le permitía moverse ni un centímetro, casi ni siquiera respirar, hasta que ella se daba vuelta y decía que quería volver a su casa. En mi infancia me permitieron verla sólo dos o tres veces, más oculto que nadie, para que aprendiera a reconocer a la que sería mi ama.

Cuando tuvo edad para escaparse de sus padres, ya era mi responsabilidad correr detrás como una sombra, y buscarla hasta el sitio más escondido de aquellos laberintos. Tropezaba siempre por ir con los ojos clavados en los pies, para no cruzar la mirada con ninguno de los habitantes de la ciudad y no ganarme así un castigo. Y lo lograba, pero solía perderle el rastro, y era incapaz de pedir ayuda a ninguno de ellos. Nadie jamás me hubiera ayudado a encontrarla a menos que me arrodillara y rogara, lo que no podía hacer sin traicionarla a ella. Incontables veces tuve que volver solo a la casa, y recibí los castigos en nombre de mi ineficacia y de la vergüenza. Recuerdo haber pensado repetidamente, en el encierro y bajo las luces cegadoras, por qué me había tocado ella justo a mí. Por qué, entre los cuatro hijos, justo ella.

A veces, mientras deja caer las piezas de cuero sobre el suelo a mi alrededor, pienso que hay que recoger ese desorden y recuerdo a la familia que dejé en Ignatar J’huk. Sólo los veo de soslayo y casi en silencio, muy de tanto en tanto, cuando a ella se le ocurre regresar al origen. Desde la primera vez que puso pie fuera de la piedra, y posó sus ojos en la silueta del mundo recortada por los rayos cruzados de Orhan y Charón, no ha vuelto a pasar dos años enteros en lo que fue su hogar. No le costó conseguir la autorización para que la ciudad la dejara marchar, y tampoco le costó conseguir los medios para transitar los caminos. La seguí a través de incontables idiomas y bajo miles de ojos, de aquí allá, y la vi caer bajo el cenit de Charón.

Cada pieza de plata y platino de sus ropas tuvo siempre que estar lustrada hasta alcanzar el brillo de esa luz nocturna. Mi padre me lo enseñó cuando yo era sólo un niño, y jamás olvidé la lección. El cuero negro era la noche amada de los Dúranak, fundiéndose con ellos, sobre sus cuerpos flexionada como el brazo de una madre guardiana; cada hebilla y gemelo era una estrella, un destello, en medio de la más profunda oscuridad. Las sedas de colores no eran más que llamadas, estandartes, que escapaban a la confusión total y contaban una historia de supremacía. Amaban la noche, sí: pero de los amantes, ellos eran los que tenían el control. Como siempre, son ellos los que tienen el control.

Cuando se inclina a vendarme los ojos, y la seda negra me vuelve ciego, casi siempre recuerdo la densa oscuridad de las cavernas. En aquellos laberintos, la luz es eternamente etérea y jamás da calor a las piedras. Apenas dibuja los contornos, excepto en lugares concretos donde los artesanos han permitido que se filtre la luz del día. Allí abajo, a ciegas, el calendario se cuenta según las horas que faltan para la noche que trae a Orhan; y cuando el último rayo desaparece de la abertura vertical sobre la cúpula norte de Ignatar J’huk, la vida resurge en su mayor esplendor, las camas crujen en los despertares, y la actividad comienza a movilizarse.

En los viajes, ella no suele dejar que el día afecte su marcha, pero no se quita la capucha hasta que no sale la primera estrella. Rara vez dejó que su cabello de plata invadiera los ojos de un desconocido en plena hora diurna. Sólo cuando las sombras se ciernen sobre su cabeza, baja la capa y mira allí arriba, más allá de todo, como si pudiera con aquellos ojos bicolor observar el mundo astral. Ella soñó muchas veces que el mundo estaba hecho de tres filamentos o planos superpuestos, y se vio todas ellas con el puño cerrado alrededor del último, el más efímero. Gritaba dormida llamando sombras, como luego despierta logró llamar a las almas de los huesos caídos. A veces creo que es capaz de ver directamente hacia Charón.

Y cuando la seda es su piel atándome, y mis manos quedan quietas sobre mi cabeza, no tengo que hacer esfuerzos para callar. Jamás otra voz que no sea la suya, o la de los suyos, debe ser escuchada en los recintos donde esté su presencia. No importa cuán incontenible sea el dolor, o cuán urgente sea el placer, el silencio es la única posibilidad de expresión. Sólo si me ordena hablar, como muy pocas veces lo hace, gemiré en mi lengua pero nunca la llamaré por su nombre. Sólo si me ordena moverme acompañádola, prestaré mi ayuda como en todo lo demás, pero eso ha pasado sólo una vez, la primera. Mientras escuche su voz ardiendo, pero ninguna de sus palabras me lo exija, no seré nada más.

Sé muy bien que mandan quienes mejor están capacitados para hacerlo. Ellos, los artesanos, que conocen el significado exacto de la belleza y saben encontrarla y crearla en el mundo; ellos, que han sabido de la inteligencia de morar en las sombras evitando la paranoia de andar huyendo a pleno rayo de luz. De ellos he aprendido que la crueldad no es más que una forma de motivación para los más aletargados, innecesaria para los más despiertos. De ellos he escuchado que, gracias a la sangre que corre por sus manos, no hay nada inamovible en el mundo, si no que todo pueden moldearlo si no destruirlo. Y por eso, sé que tengo que dejarla mandar sobre mí en cualquier circunstancia, porque ella sabe cómo hacer las cosas mejor que yo.

Ella es la artesana. Yo soy sólo una de sus herramientas. Y vivo o muerto, le sirvo igual.

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11/02/2009, 23:21
Saolèile Heleborn

Ideas anexas: estuve observando, y si bien son un pueblo nocturno, no creo que todos vayan necesariamente a los Dioses de la Oscuridad. Quizás alguno sea suficientemente hipócrita para ser esclavista y mirar hacia Reann o Iorak, e incluso Jaysek si recuerdan que ese dios estuvo interesado en ellos. De todas maneras, me parece interesante que los Dùranak sean más bien un pueblo pragmático y práctico de ideas teológicas vagas y de último recurso, en total contraposición a su pueblo vecino odiado y su gobierno de reyes-sacerdotes.

Lo mismo, he pensado que un par de ideas rectoras para este pueblo de hombres deberían ser: Orgullo Racial-Racismo [Esclavitud] / Estética-Muy alta valoración de la Belleza [Artesanos/Forma de vestir y llevar el cabello] / Pragmatismo [El mundo está allí para ser moldeado, por las manos de quienes sean suficiente para ello] / Ocultarse [Cavernas/Pazadizos laberínticos/¿Paranoia? ¿Temor a algo particular, como la luz del día? ¿Aislamiento racial?]

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12/02/2009, 12:48
Director

Me parece muy correcto todo lo que comentas :)

Ultimando detalles...

Tiradas majas :)

- Tiradas (1)

Tirada: 2d8
Motivo: Desarrollo corporal
Resultados: 3, 8

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12/02/2009, 16:44
Saolèile Heleborn

Defíneme... "majas" XDDD

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12/02/2009, 17:36
Director

Mujer, con dos dados de 8 sacar un 12 está bastante bien, ¿no? xD

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12/02/2009, 17:54
Saolèile Heleborn

No me di cuenta que habías puesto lo de "majas" luego de ver los dados. No entendía por qué lo decías "antes de tirar" XD

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13/02/2009, 16:55
Saolèile Heleborn

Neijel, además de lo de la historia que conduce al punto de partida del prólogo [que ya la escribiré], ¿qué más falta ultimar para Saolèile? Estos días estuve de fiesta y posiblemente siga estando el fin de semana, así que quiero aprovechar los huecos para arreglar lo que creas conveniente así empezamos en fecha ;)

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13/02/2009, 16:59
Director

Nada, lo que pueda faltar lo averiguarié cuando pase tu ficha a limpio y si hace falta haré yo mismo las tiradas que tengan que hacerse. Todo lo demás lo haremos sobre la marcha, y con eso me refiero al equipo y todas esas cosas aburridas :P

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13/02/2009, 17:04
Saolèile Heleborn

Okey entonces. Toca si hay algo que no sea sobre la marcha, ¿vale?

Y más o menos perfilé ya la idea del esclavo, un poco de su carácter lavado-de-cerebro y de su historia. ¿Quieres que le busque imagen también, o te encargas tú si lo quieres tener como PNJ activo?

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13/02/2009, 18:41
Director

Si tienes a mano una imagen que te gusta, ponla por aquí. Y si se te ocurre un nombre, dámelo! :D

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13/02/2009, 21:34
Saolèile Heleborn

Había pensado en Sklaer Ard-Áireán. Estoy buscando imagen, y edito este mensaje cuando la encuentre... si la encuentro.

EDITO: Bueno, ésta es la mejor que he encontrado. No sabes lo difícil que es encontrar imagen de hombre rubio alto con músculos y pelo relativamente largo. Si tienes una mejor, encantada de recibirla.

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09/11/2009, 12:42
Director

Me parece bien la imagen, perdona por los... hmm... 9 meses de demora en la respuesta :P

Refréscame una cosa, porfa. ¿Elegiste ya listas de hechizos o lo dejamos sin concretar?

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10/11/2009, 21:49
Sklaer Ard-Áireán

Por cierto, posteando como tu fiel criado (probando probando), debo decir que me descubro una vez más ante ti. No había leído la historia que habías puesto desde el punto de vista Sklaer (no sé cómo se me pasó) y... madre mía. Cada vez que sueltas una joya de esas se me pone la piel de gallina.

Para enlazar lo que ya llevas con el inicio del prólogo me iría de fábula lo siguiente:

De alguna forma entras a trabajar para un necromante más poderoso que te acoge y hace las veces de mentor. El trabajo es sencillo y trivial incluso a veces, pero te permite estar cerca de tu "maestro" y aprender de primera mano la forma de hacer las cosas.

No me importa dónde esté ese otro necromante, es indiferente para la historia. Puedes ubicarlo donde prefieras :)

Si no te parece bien hacerlo así podemos buscar otras formas, por supuesto. Tú dirás :D