Partida Rol por web

Encoje los hombros. Daba igual.

-Sobre las 14 esta bien... En cuanto al lugar, nos comunicamos. No sabemos cuanto halla que caminar. Tal vez tengas que buscarnos en algun lado +dice, mirando a la ciborg+... pero sino, para mi esta bien aqui.

- Genial. Pongámonos en marcha... A las 14 horas aquí. - Ardid mira a Mark y Tifón y moviendo una mano en señal de despedida, se deja arrastrar por Motoko mientras dice - Pasároslo bieeeeen -.
Acto seguido sonríe a sus compañeras mientras dice - Y bien, ¿por dónde queréis que empecemos? -

Mirando a Jhiarr le dice: por mi no hay problema nos reuniremos donde tu dices a esa misma hora, tranquilo Tifón que si os tengo que buscar lo haré...mirando con cara de maldad, a la vez que se aleja de ellos y se despide con un hasta ahora!.

Le comenta ha Ardid,la verdad que no conozco la zona pero podríamos visitar canaletas que es muy famosa y de allí vamos viendo otros sitios, o que te parece?

Ardid se ríe mientras mira a Motoko antes de contestarle - Genial, ¿qué dices tú, Jhiarr? -.

Me temo que yo voy con los chicos - dije apenada. Necesito encontrar un par de armas. Pero nos veremos más tarde. Que paséis un buen rato y llevad cuidado. Yo llevo el teléfono conmigo, para cualquier cosa llamadnos. Me despedí de las chicas con cariño y una gran sonrisa. A continuación miré a los otros dos maromos. Qué, ¿alguno sabe moverse por la ciudad?

- Bueno, pues... Nos dejan solas, Motoko, ¿vamos a por un helado? - Ardid hace un gesto de despedida hacia Jhiarr y los chicos mientras encoge los hombros y sonríe, quitándole importancia y diciéndole que no se preocupe.

-La verdad que no jaja... Pensaba pedir algunas indicaciones. Tiene que haber alguna por aqui, es el centro! +contesta con despreocupacion, mientras las otras dos muchachas se alejan.

Me parece bien, con esta calor que hace aquí lo mejor es resfrescarnos con un helado, pone una sonrisa y le coge del brazo para caminar agarrada a ella.

Quieres que vayamos hasta canaletas y alli vemos alguna heladeria? o si pasamos por alguna paramos allí mismo?

- Mmmmm, podemos ir hacia allí, pero si vemos alguna antes y nos apetece... Podemos tomárnoslo entonces - Ardid sonríe a Motoko mientras siguen andando.

El camino mas corto, ademas de panoramico, es volver al gran cruce de avenidas y tomar la Gran Via de las Cortes Catalanas.

Esta es una avenida de amplias veredas arboladas y altos edificios de aspecto antiguo. El trafico es fuerte, es la hora en que muchos estan llendo al trabajo (casi las 8). Los comercios, al menos en las primeras cuadras, son escasos. A medida que avanzan, tambien notan que hay bastante movimiento de gente... 

Una subita brisa llena los ojos de Fae con arenilla, cegandola momentaneamente... Mientras se restriega, Motoko nota que hay algo en la gente... Hay muchos llendo en la misma direccion que ustedes. Algunos las miran, en especial el bien formado trasero de Motoko. Unos pocos, tienen carteles bajo el brazo, y se lo comenta a su compañera.

-Parece que se estan reuniendo mas alla, para algo. 

Mark empezaba a tener un poco de mala cara, aunque en gran medida lo disimulaba bastante bien... cuando se veía rodeado de tantos humanos el atlante no se sentía nada agusto y empezaba a añorar toda su vida, el mar, sus animales, familia... aunque aceptó aquel encargo de buen agrado, normalmente le pasaba factura - Bueno ¿Qué necesitáis?

-¡Buenas dias!, saludó a Lee cuando lo vio al entrar en los talleres. Era el único al que hoy todavía no había visto. -¿En que trabajas hoy?, preguntó sin esperar respuesta ya que veía que Lee estaba muy concentrado en su trabajo.

Azkarra se dirigió hacia su sección, puso las herramientas en la mesa y se quedo pensativa durante unos segundos. No tenia claro en que tipo de trampa tenia que trabajar, ¿mecánica?¿natural?... No tenia ninguna idea clara pero quería trabajar y así aprovechar el tiempo libre. Haría una que alguien cayera en la fosa de debajo, haría el mecanismo para cuando un peso estuviera encima se abriera hacia abajo.

Lee se giró un momento para ver quién lo saludaba y luego siguió con lo suyo.

- Ehhmm... sí, buen día, Azkarra, estoy tratando de realizar un nuevo diseño más resistente, pero hasta ahora solo consigo que el peso del brazo rompa el pistón y atraviese el pulmón, no es precisamente lo que se busca en un implante.- Explica Lee sin darse cuenta de que Azkarra siguió su camino

Me había quedado sola con los dos guapetones pero no podía quedarme absorta todo el día imaginando lo bonito que sería dedicarse a pasear y hablar de cosas no importantes. En cierto modo sentía la prisa recorrer todo mi cuerpo y no podía parar de pensar que cualquier peligro podía suceder de un momento a otro. Ser parte de una corporación como esta no es nada fácil - comentaba para mí misma - de vez en cuando me gustaría tener una vida normal de humano. No debe ser muy difícil y seguro que si montara una heladería como aquella yo también podría vivir bien. Me planteaba todo aquello mientras miraba aquel puestecito de la esquina. La gente iba y venía con calma, algunos se sentaban en la terraza a disfrutar del sol y otros simplemente se acercaban al mostrador a pagar sus tarrinas para marcharse después. Los niños cogían los cucuruchos con ansia y lamían las bolas de helado con torpeza, lo que causaba más de una mancha en sus vestiduras. Aquel lugar parecía un decorado. Era una imagen muy alegre, como si se tratara de una fotografía de la propia felicidad. Ahí fue cuando me di cuenta. Supuestamente en un mundo idílico y feliz no existen armas de las que yo busco. Entonces lo entendí y comencé a hablar en voz alta:

- Busco hachas Mark, las hachas más grandes, pesadas y fuertes que pueda obtener y guardar. Pero desde luego no vamos a encontrarlas aquí. Aunque no conozcamos Barcelona todavía podemos usar nuestro sentido común. ¿Dónde encontrarías una tienda de armas en una ciudad tan grande? Desde luego no en una calle principal o transitada. A mí se me ocurriría ponerla en un sitio tranquilo, escondido, tal vez un callejón. Podríamos empezar a buscar por ahí. Aunque también podríamos estar malgastando nuestro tiempo. He pensado que si nos acercáramos a un barrio marginal y sobornar a algún listillo, éste nos podría guiar directamente hasta el lugar que busco. Hemos quedado con las chicas a las 14.00 y quisiera acabar cuanto antes con esto e invitaros a comer. ¿Qué me decís?

- ¿Dónde? ¿allí abajo? tal vez debiéramos ir a ver... - Miro a Motoko todavía restregándome el ojo.

Mirando ha Ardid y agarrando su brazo le dice: si allí abajo, vamos a ver de que se trata todo esto.

La lleva consigo al mismo paso y ritmo para llegar al lugar.