Partida Rol por web

-Lo siento pero la poción, solo muestra el rol del dios a quien se lo entrego, y solo mata si miente, nada mas.-Contesto a Apolo.-Por eso creo mejor usarla con alguien que es acusada de Titan, para saber su verdad y limpiar su nombre, de ser un equivoco o argucia de otro.

Tras las ultimas palabras de Iris, mas intrigado se quedo Asclepio.-Que así sea, diosa del arcoiris. Dime, ¿Que eres? Y te agradecería toda la verdad.-Ya había muerto antes, no tenia miedo a morir de nuevo.

La situación no estaba cambiando demasiado. Más muertes, otro regreso y los mismos sospechosos. Me encamino hacia Perséfone.

- Aguanta, querida. - digo cogiendo sus manos entre las mías. - ya no queda mucho. 

Me quedo a su lado, sin soltar su mano, y vuelvo mi atención sobre el resto de presentes. 

- ¿Quienes sois ahora en ese lugar de sirenas? Zeus, Ares, tu... - cojo una copa de la mesa. - Los titanes podrían estar preocupados por ese asunto, pero si son quienes sospechamos es posible que ya den la guerra por perdida y dejaran que nosotros nos encarguemos. 

Dado que no había argumentos de peso a favor de la inocencia de quienes más sospechas acumulaban, tenía poco que decir. Además tampoco habían grandes avances en su contra. Solo quedaba esperar el efecto de la poción que Asclepio había traído consigo. Con suerte resolvería más dudas de las que podía generar...

Ante las palabras que señalaban que su plan era dominarlos a todos no pudo hacer otra cosa sino reír.

- No me opongo a que Asclepio use su brebaje conmigo.- Mencionó tranquilamente, pues no tenía nada que ocultar.

- Déjalo, Ares. - Le digo al dios de la guerra mientras pongo una mano tranquilizadora en su hombro. - Nadie nos va a decir nada. Están muy concentrados en su propio interés, y el que haya sido, o está muerto, o no se atreverá a decirlo abiertamente. 

Después miro a Apolo con desaprobación.

- Cómo se nota que no es a ti o a la persona a quien amas a quien por poco envían al tártaro sin motivo alguno. Si la razón era que se sospechaba de Ares, podrían al menos haber dicho por qué, haberle dejado defenderse. Atacar así, por la espalda, es muy cobarde. Demasiado. Y me interesa saber quién o quienes tienen el poder de atacar más allá de las votaciones, pues Ares no es el único que cayó misteriosamente. ¿No os habéis dado cuenta? Los titanes atacan a uno, nosotros votamos a otro... pero más de una noche han caído tres dioses*. ¿Por qué?

- Usad la copa en mi padre, Zeus, para demostrar a todos de una vez por todas que él siempre ha luchado por y para el Olimpo, y que sois vosotros los que le acusáis los traidores. Los mismo que me disteis muerte en su día y ahora intentáis acabar con todo nuestro linaje. Mas sabed que mis ojos están puestos en vosotros, y sólo cuándo el último de los traidores caiga, habrá terminado la caza. -

Me siento junto a mi ciervo y, con el ceño frunzido, cruzo los brazos a la espera de lo que ocurra en este día.

Eros había estado escuchando como de costumbre a todo el mundo, tratando de que no hubiese divagaciones en sus conjeturas...

Yo voto por la poción de Asclepio, considero que sería de mucha utilidad por lo menos para descartar a dioses y titanes. Tendríamos una posibilidad de seguir derrotando al infame de cronos...

Miro luego a todos esperando intervención alguna  

Me acerqué a Zeus con pasos lentos. Confiaba en la sabiduría de Asclepio y sabía que saldría bien. Me abracé a mi marido, dándole mi apoyo, y sonreí al dios.

- Yo también voto porque lo uses en Zeus, quiero que por una vez se desvelen todas las dudas sobre él. Mi esposo sólo está haciendo todo lo necesario para salvarnos. Y sino, yo misma me ofrecería para probarlo. Los que no tenemos nada que ocultar y hemos dicho la verdad, nada tenemos que temer.

La poción fue usada conmigo. Y sí, soy un Titán - Respondí sin más - Y no, no habéis acertado ni una en quienes son mis compañeros. Y no, no voy a decir nada más. Y para los que piensan que mentí en todo, os diré que tendréis que votarme dos días seguidos porque no, no moriré.- dije sin más. Las cartas estaban sobre la mesa ya

Asclepio se toco el mentón pensativo.

-Fantástico, se ve que tu necesidad de sobrevivir es mayor que ocultar la verdad, Gracias Iris.-Se dirigió a ella por ultima vez, antes de que dirigirse al resto.

-Con ello, ¿Podemos pensar que Zeus decía la verdad, que Poseidon también es titan y que debemos eliminar a uno de los dos cuanto antes?-Pregunto al resto de los congregados.-Yo voto por Poseidon, de ella ya lo sabemos. ¿De él aun cabe una ligera duda?-Volvió a preguntar el dios de la medicina.

Yo también acusaré a Poseidón. Dijo Apolo después de mirar con desprecio a Iris. Ibas de perdida y en realidad no eres más que otra sucia titán, pero sin embargo considero que darte el voto a ti es una pérdida de tiempo.

Miró a sus hermanos. Con la confirmación de la culpabilidad de Helios y de Iris no debemos dudar más de Zeus. Decía la verdad con ellos y lo decía con los demás también. Podeidón no ha aportado nada al grupo. Nada. Solo excusas y acusaciones sin ningún tipo de base. Es uno de ellos.

¿Por qué deberíamos acabar con Poseidón antes que con Iris? Miró a ésta última. Ella misma nos lo acaba de decir. Si la acusamos no morirá, tendremos que gastar dos días, lo cual podría ser demasiado. La isla se está llenando de gente y no hacemos más que morir. Sin embargo, preguntaros una cosa... ¿Cuál sería la razón de que Iris confesase en vez de aprovechar la ocasión y mentir afirmando ser del bando de los nuevos? Si de verdad tiene dos vidas como afirma, eso conduciría las acusaciones a Zeus por una falsa acusación.

No, no lo ha hecho por una razón. Ella solo está protegida de la muerte por acusaciones. Si llega a mentir habría muerto y de nada hubiera servido. Sin embargo, al decir la verdad, consigue lo que quiere, que la votemos, que perdamos dos días enteros solo para acabar con ella. Sospecho que entre nosotros hay dioses que pueden acabar con la vida de otros. Apuesto a que Iris no está protegida de esos ataques.

Si estoy equivocado no perderemos nada. Poseidón morirá hoy e Iris lo haría al siguiente día, pero si estoy en lo cierto ganaríamos un día. Por eso os pido que acabemos con Poseidón hoy. Las pruebas en contra de ambos están ahí, pero no tenemos tiempo e Iris lo que pretende es ganar tiempo intentando atraer hacia ella las acusaciones. No entremos en su juego.

Otra vez discusiones y más discusiones y otro movimiento sospechoso.

Yo no cambiaré mi voto, aunque el próximo día es posible que lo haga. No se ha probado nada con está actuación. Nada nos puede confirmar que Asclepio no envenenara la mente de Iris para que dijera lo que necesitan que diga. Pero es que además...

No quería continuar, tenía una promesa que cumplir y no seguiría por ese camino...

Ya he dicho más de lo que debería. Si consideráis que la pócima de Asclepio le ha obligado a decir la verdad, entonces Poseidon no podría ser un titan por que es el último de los compañeros de Iris que se ha nombrado, pero Iris habría dicho la verdad, luego él no podría ser un titan, luego habría habido muchas mentiras anteriores. Por otro lado, si la pócima no hubiera funcionado como creemos, Iris podría ser inocente y estaría obligada a contarnos algo falso.

Los sueños... Siempre tan directos y a la vez tan escurridizos.

Todo depende ahora de la confianza que tengamos en Asclepio y su buen hacer.

Niega con la cabeza. Ir primero por Poseidón no era una buena idea.

- Apolo, tu juicio está errado. Si vamos por Poseidón ahora, les estaremos dando tres días a los traidores, y con ello la oportunidad de matar a dos de los nuestros.

- Votemos a por Iris, y dejemos que vuelva a la vida. Una de los dioses con quien tengo conversación puede acabar con la vida de alguien en cada día par. Mañana, el día sexto de esta guerra... Iris y Poseidón terminaran de caer, si es que la mensajera vuelve a la vida. Si elegimos al rey del mar en este día, sólo alargaremos un día esta batalla.

Vaya, vaya...

- Por lo que se había mencionado, la poción solo conseguiría que revelase su verdadero ser. No tenía ninguna obligación en decir más verdades...- Respondo a Morfeo. - ¿No, Asclepio? - le pregunto al dueño de la poción para confirmar mis palabras.

- Tu planteamiento es bueno, Apolo, pero Zeus ya tiene a quien será el ejecutor, por lo que será mejor seguir sus instrucciones. 

Pues ya lo has dicho Iris, necesitamos votar dos veces por ti?, yo aportaré mi voto para que así sea.

Culmino mirándole fijamente.

Así es Eros, necesitáis votar dos veces por mí - respondí - Y aún así, eso no os acerca a la victoria. Luego miré a Morfeo - Y sí, la poción me ha hecho decir la verdad. TODA la verdad. En caso contrario habría muerto. Viendo que eres el único, o de los pocos que desconfía de las palabras de todos, y bien que haces, te sugiero que pienses en ello. De haber dicho alguna mentira estaría muerta.

A continuación miré a Ascepio - Y sí mi querido Ascepio, las ganas de sobrevivir y culminar la obra de Chronos me ha llevado a ello, pero tú no has medido tus actos. Te avisé de que abrías la caja de Pandora y no me escuchaste. A mi ya no me quedan mentiras que decir. No gano ni pierdo nada con ello, pero, ¿y al resto? Piénsalo, has sido tú quien me ha obligado a decir la verdad.

-Oh, venga vamos..Iris...Sabes que eso no es cierto...Hace mucho que estas en el punto de mira.Solo era cuestion de tiempo.Yo vote por que no te votaran..aun...puesto que ya eras culpable.Sin embargo los demas desean tu muerte. Asi sera.Lamento tener que decirte esto pero...temo por ti.No es que te maten...es que lo haran dos veces!!Dos veces sufriras por ello...no pensastes en eso,cierto?Tan solo morir una vez tiene que ser toda una experiencia.

Cojo una manzana del cesto, esta no es dorada, claro...las manzanas doradas estan en el arbol del Eliseo...pero esta manzana podria significar lo mismo que la primera.Me acerco a Iris y la paseo por sus ojos.

-Ahora..moriras dos veces..sufriras el doble...y te arrepentiras mucho mas que otros.Te equivocastes al decir que tenias dos vidas..eso te hizo culpable para mi.Si hubieras sido inteligente, no habrias dicho nada y al verte renacer todos pensariamos que estabamos equivocados al señalarte.Serias libre de acusaciones....Querida..dime...Compensa?El ensañamiento que tendran los dioses contigo no tendra fin.Me temo que la mañana amanezca y el arcoiris sera solo un borron entre las nubes

No puede evitar dirigir una triste mirada a la estatua de Dionisio. Era él quien les había llevado luz y cordura en los peores momentos, era a partir de sus actos que se había comenzado a vislumbrar la verdad. Y ahora estaba allí, atrapada al igual que los traidores, condenado a una jaula de bronce.

Ella iba a seguir sus indicaciones hasta el final, era el primero que le había dado confianza con sus palabras, y sus juicios habían resultado ser acertados.

Cuando Asclepio comentó tener una poción que obligaba a decir la verdad, mostró verdadero interés en la misma. Hasta que Apolo la acusó de querer usarla con ella misma. Hasta le aprecería buena idea si no fuera por el desperdicio que sería.

-No tengo problema en probar la pócima conmigo, Apolo. Sería incluso recomendable para mí, pues me quitaría de cualquier posible acusación en el futuro, pero perderíamos la oportunidad de averiguar la verdad de alguien que sí fuese una amenaza...

Cuendo Hades se acerca, ella se acomoda entre sus brazos, confiada y segura tras las palabras de Dionisio de que allí estaba el ser al que amaba, tan leal como siempre. Le sonrió cálidamente en respuesta a sus palabras. Podría no quedar mucho, pero quizá si lo quedase. Aunque no le importaba demasiado, si ella caía, al menos tenía la confianza de que había tenido hasta el final la fe ciega en la persona a la que siempre había amado.

Cuando la poción fue finalmente usada con Iris, y revelada su verdadera naturaleza, una sombra de duda surgió de su corazón...

¿Decía ella la verdad? Si era así, algo no cuadraba... No se atrevió a hacer públicos sus temores, aún no. Se limitó a afirmar que su voto iría hacia Iris, así al menos se aseguraba de no condenar a nadie inocente. Iris era culpable, ella misma lo había confesado. De la naturaleza de Poseidón las cosas no estaban tan claras..

Las musas parecían cantar su canción inesperadamente y su mirada se dirigió a Iris. Su canción comenzaba a sonar y los rostros de la mayoría se giraron hacia Iris. Esta parecía lista para recibir sus ataques pero en lugar de ello, comenzó a correr a la velocidad que solo la diosa mensajera del arcoiris podía correr.

A su paso, como una estela de luz, se desplegaba un arcoiris, el cual cubría a todos aquellos que la miraban de manera amenazante, pasando de Ares, Pan, Asclepio y Eris, cuyos ojos estaban fijos en otras partes. Todos aquellos cuyo deseo de batalla se había visto encendido por ella, olvidaron su objetivo y solo unos cuantos quedaron esperando la batalla.

Poseidón había olvidado que lucharía contra esta diosa y por el contrario, encontró miradas sobre sí. El dios de la medicina tomó su bastón con fuerza y con una velocidad que pudo haber heredado de su padre corrió hacia el dios de los mares, pero este era uno de los tres grandes, por lo tanto no sería tan fácil de abatir. Bloqueó el ataque con su tridente en varias ocasiones y parecía vencer al dios pero la intervención de su madre titánide lo cambió todo. Desde su celda, Rea miró a su hijo con pesar pero con ira, sabiendo que era despreciable su actuación, pero consciente de que no era su culpa, sino de su padre. Esta mirada petrificó a Poseidón, quien no pudo defenderse más y tras muchos intentos, Asclepio logró conectar un certero golpe en su vientre. El dios encorvó su espalda como reacción y Asclepio le golpeó una vez más en su rostro, haciendo que se tambaleara. Aún sin poder moverse, vio cómo Eris venía hacia él mientras cargaba una lanza que era muy similar a la de su hermano Ares. El dios del mar la miraba con algo de temor en su rostro e intercambiaba miradas con su madre rogando piedad, pidiéndole que le dejara moverse pero Rea solo negaba con la cabeza. Solo pudo ver cómo la lanza atravesaba su pecho y se clavaba en el lugar donde debería estar su corazón, haciendo que el bronce se esparciera por todo su cuerpo y encerrándolo a partir de ese momento. No sabían por qué Rea había intervenido pero gracias a ella, la derrota de Poseidón había sido segura. 

La escena transcurre en un instante. Mi hermano, Poseidón, o el que se hace pasar por él, ha sido derrotado y yo no alcanzo a Iris... Parece que si se ha salvado. Aún así, no nos ha salido tan mal.

- Una sorpresa agradable...

Cejo en mi empeño por alcanzar al titan que se esconde tras la apariencia de Iris y tomo asiento.

- Diría que Morfeo es quien os ha enviado a ese lugar de cantos de sirena... Estaría bien que alguien lo comprobase. - miro cada rostro. - ¿alguien puede hacer algo al respecto? 

Asclepio quedo exhausto y meditabundo.
-Ha esto es lo que te referías con que tenias dos vivas, Iris. ¿Intercambiar tu condena por la de otro? Ya veo. Suerte que aquel que fue el segundo mas votado, fuera Poseidon y no otro.