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01. Gran Recibidor Principal

El Gran Recibidor es la primera estancia y la única entrada oficial al Castillo. La estancia está dividida en dos secciones bien delimitadas por un enorme arco de piedra; en la primera estancia se encuentra la Gran Puerta que conduce al Puente de entrada del castillo, mientras que la segunda estancia se encuentran las escaleras para ir a pisos superiores.

-Entrada-

La primera parte del recibidor consta de 6 sillas bien distribuidas alrededor de la estancia; una a cada lado de la puerta de entrada y dos a cada lado de las paredes contiguas a esta. Aunque estas sillas son más que decoración, pues no muchos se han sentado en este lugar, pues es una zona de paso.

La decoración de la estancia consta de dos círculos de hierro forjado con insignias y números en ellos; pegados al suelo por cuatro patas fundidas en el círculo exterior de cada una de aquella decorativa.

Además de esto, pegados a la pared, se encontraban dos arcones de hierro y madera; con otros tantos grabados en oro. Lo que más resalta de estos es que no tienen ningún tipo de manilla o pomo para abrirlos. Pese a ello, ahí se encuentran.

La pared estaba repleta de decoración con temática de caza, cabezas de venado disecadas colgaban de una de las paredes; colmillos de elefante hacían una especie de altar improvisado a una pequeña virgen sobre una pequeña mesilla y un cofrecito. Y algunos platos decorados también colgaban de la pared que menos animales muertos y disecados había. Por lo demás, había algún que otro jarrón en el suelo y alguna que otra estatua insulsa. Y sobre el arco de piedra que permitía llegar a la segunda parte del Gran Recibidor Principal, se encontraba un querubín obeso y dorado.

La ostentación del difunto Barón se dejaba ver nada más entrar a su castillo.

En la parte superior de la estancia hay dos pasarela de madera, que llegan hasta la mitad de la estancia, cada una pegada a las paredes laterales de la misma, las cuales conducían a sendas puertas de madera e hierro forjado. Ambas cerradas.

En la parte inferior de la estancia, a cada lado de la misma también hay dos puertas de madera e hierro forjado, aunque su condición de cerrada a cal y canto era equiparable a las que estaban justo encima.

-Escaleras-

En el primer piso podías encontrar las escaleras en el centro de la estancia; más sillas de terciopelo rojo y alguna mesita de café decoraban la estancia; algún que otro jarrón o escultura también se podía observar. Aunque lo más llamativo eran los cuernos de venados que colgaban por todas las paredes laterales de la estancia. Y algún que otro cuadro también estaba colgado.

Había dos puertas a cada lado de la estancia, la izquierda hacia el Gran Comedor mientras que la Derecha hacia la Cocina. Además de eso; bajo la escalera se encontraba una leve bajada, un arcón cerrado, y una puerta en la pared del frente, la cual conducía al Calabozo del Castillo.

Las escaleras, combinaban a la perfección la piedra y el mármol con la madera, siendo la escalinata principal de mármol, mientras que las dos divisiones superiores a sendos lados, de madera. Cada fin o inicio del pasamanos se encontraba hermosamente adornada con una escultura, las Cuatro estatuas que hay sobre el final y el inicio de cada posamanos de la escalera principal de piedra vistas desde la entrada eran completamente idénticas, el mismo rostro angelical; el mismo ropaje negro con los mismos pliegues; la única diferencia que había, eran los objetos que estas 4 mujeres portaban en sus manos; Una Balanza, Una Guadaña, Una Espada y Un Arco. En la cima, se encontraba un busto del padre del difunto Barón, sobre un pequeño mueble.

En la parte superior se encuentran más premios de antiguas cazas y algún que otro cuadro, aunque de forma mucho más austera que la planta inferior. Además de esto, hay sendas puertas en las paredes de ambos lados, y además aquí inicia la pasarela de madera que va hacia la primera parte de la estancia, cruzando unos pequeños arcos de piedra.

Antes de acercarse al comedor, Schultz dejó un disco en Géminis y probó el otro en cada posición haciéndolo girar como una ruleta.

WIIIIIIII. GÑE

Ethan entró acelerado en la estancia. Pequeñas manchas de sudor en su ropa indicaban que llevaba un rato haciendo deporte. – Siento la tardanza. – Dijo el joven al grupo de gente que parecía estar abandonando la habitación. – En la estación de tren me dijeron que la mansión estaba a unos 15 minutos, pero supongo que asumían que iba a ir en coche. – Volvió a abrir la boca para continuar dando explicaciones, pero se calló al darse cuenta de que nadie le estaba escuchando. Parecía que la baronesa no estaba allí, pero había mucha gente, con un poco de suerte no había notado su ausencia.

Mientras el resto se retiraban a sus habitaciones Ethan dedicó un momento a curiosear por la habitación. Después de mirar alrededor un par de minutos encontró un cofre abierto con una esfera de cerámica, que se guardó en el bolsillo discretamente. Dedicó unos segundos a mover las estatuas y a inspeccionar los cofres cerrados y los cuadros. Después se acercó a los círculos de hierro, intentó mover uno de ellos sin éxito, y después el otro que parecía mas fácil. Después de juguetear un poco con el círculo, dejó el exterior en géminis y el interior en sagitario.

Justin Case, detective privado, no era muy dado a resolver puzzles. El único puzzle que le gustaba era el Puzzle Bubble, pero porque había burbujitas y eso le resultaba gracioso. 

Pero en cambio, el retrasado que seguro que no era retrasado de la zanahoria parecía estar resolviendo aquellos acertijos y misterios con la velocidad del rayo. Justin se levanta de un rayo, se acerca a él, le mira y pregunta.

- ¿GÑEE? ¿GÑE? Sin duda, sin duda - pregunta, asintiendo, mientras tuerce la cabeza intentando adentrarse en aquella mente tan compleja.

Luego señala los anillos, mirándolos sin entender nada. El probaría todas las posibilidades (144 si los cálculos no le engañan) pero ... No es Puzzle Bubble. Así que se queda al lado del tío de las zanahorias mientras le observa con curiosidad.

Al ver que jugar con los anillos y colocarlos en posiciones al azar no le iba a llevar muy lejos se puso a investigar el resto de la habitación. Su atención se centró rápidamente en el cofre cerrado, preguntándose que riquezas podría guardar en su interior.

Estuvo un rato observando el cofre, intentando discernir que eran las cosas alrededor del angelito central. Parecían frutas, pero ¿lo eran? – Creo que este cofre se abre con los anillos y que tiene la clave para la posición correcta de los mismos. Los ángeles de fuera llevan arcos, que es el signo de sagitario. Y están en el exterior de la imagen, tal vez indicando que sagitario debería ser el anillo exterior. – Dijo mientras se acercaba a los anillos y colocaba el exterior en sagitario. – Y el interior, al principio no tenía mucho sentido. ¿Qué signo está relacionado con frutas y luz? Ninguno, porque no son frutas, son planetas, y es el sol. – Dijo mientras ponía el círculo interior en Leo, visiblemente entusiasmado y esperando que funcionase. Iba a quedar como un idiota si no funcionaba, pero no sería la primera vez, y probablemente tampoco la última.

Schultz miró con gesto indescifrable a Justin Case al ver que se dirigía a él en términos bastante extraños.

Cuando Justin acabó de proferir sonidos anómalos, le dio un par de palmaditas en el hombro mientras sonreía confortador y asentía con la cabeza. Después se giró hacia el resto de los presentes y trazando círculos con el índice a la altura de la sien les dijo:

GÑÑEEE ¡Cucú! ¡Cucú! ¡Cucú!

Con la correcta combinación por parte de Ethan, se escucha un pequeño "click" proveniente del Cofre más cercano; entonces el perspicaz y ya casi desesperado joven, se abalanzó sobre este para ver su contenido y así hacerse con él ante la atenta mirada de los que habían decidido apostillarse en la entrada.

Dentro del cofre había dos objetos, aunque el que más resaltaba no era otro que aquella llave de metal forjado, a juzgar por la forma del mango, esta coincidía con el grabado que había en una de las puertas del piso superior, lo que presumiblemente sería el Gran Salón, o al menos el Salón Principal.

La segunda cosa que había en aquel cofre era una pequeña lista de unos 21 invitados, entre ellos destacaban dos grupos, uno de 18 miembros y otro de apenas 3 miembros, en las que destacaba el nombre de Alice Backwell de Mandeville, la viuda del Barón de Mandeville. Además de eso, el nombre de "Elora Dannan" estaba presente.

Invitados al Convite

01. Elora Dannan

02. Mustafá Yasaran

03. Tylor MacRury

04. Sean McOwen

05. Diana Lister

06. Brett Xiaojun

07. Eider Relish

08. Inara Serra

09. Umbert O'Janeiro

10. Bruno Evans

11. Luis Montoya

12. Mortimer Mallow

13. Gustavo Montoya Hidalgo

14. Arieth Schroller

15. Gerard Mercier

16. William Smith

17. Jorge Maynard Smith

18. Richi Moctod

 

Invitados Especiales

19. Eon Von Karma

20. Renfri Dakota

21. Alice "Backwell de Mandeville"

-Hola compañeros encontraron algo- indagué curioso mientras me movía por el recibidor principal - Me dirigía a la cocina, pero veo que por aquí hay algo interesante, ¿Puedo unirme a su tertulia?.

Al fin se resuelve lo del zodiaco -Geminis y sagitario ¿eh? supongo que las cabezas de venado no tenían nada que ver-

Observo lo que sale del cofre, interesante

-en la sala hay cuatro puertas cerradas, deberíamos probar la llave en las cuatro a ver que encontramos. Y la lista...-

Vuelvo a releerla, aunque creo que solo reconozco los nombres de la niña y la viuda del Baron -supongo que esta no es la primera "fiesta" que se celebra aquí, tal vez se podría preguntar a la niña, auqnue de momento solo dice tonterías-

Después de mostrarlo a los presentes Ethan dobló el papel con la lista y lo guardó en su bolsillo. Con la llave todavía en la mano se dirigió a los demás. – No sabemos lo que ha sucedido aquí, ya han encontrado a una persona muerta. Es posible que la pobre niña esté traumatizada, no debería ser tan duro con ella, pero podemos preguntarle. – Se calló un instante mientras observaba la llave en su mano. – No tengo muy claro lo que está pasando aquí, tengo la sensación de que alguien está jugando con nosotros y no me da muy buena espina. Pero creo que no podemos hacer mucho mas que jugar a este juego de pistas. – Añadió mientras se acercaba a una de las puertas cerradas e intentaba abrirla con la llave.

 El descubrimiento que había realizado el grupo agarró de buen humor a la bruja, que hasta el momento se encontraba apreciando los cuadros en un tranquilo silencio. Al ver lo encontrado, casi salta de la emoción.

- ¡Oh, una llave y una lista de invitados! Pareciera que estamos a punto de abrir algún hermoso lugar en el cual tendremos alguna hermosa fiesta con alguna pintoresca temática... o por lo menos eso me gusta creer. Soy una amante de las fiestas... aunque me gusta cuando son cosas simples...

 Mientras pensaba en el Gran Salón y en lo que albergaría aquel lugar, la muchacha baila lentamente alguna clase de danza wichita.

- Un simple patio... unas simples velas... una simple guitarra...

-En lo personal espero ver a mi buen amigo Mephistófeles o Mephisto para los amigos- acompañe al extraño grupo - Por cierto señorita sabe usted que un pequeño Imp esta posado en su hombro, no se lo tomé a mal es solo un diablillo juguetón- mencioné caminando con paso tranquilo - Gavin McFlyn, un gusto- volví a presentarme ante estas personas después de todo dudaba que me recordarán.