Partida Rol por web

Tras escuchar las palabras de Zyllah me quedo unos segundos en silencio, como pensativa. Finalmente me encojo suavemente de hombros:

- Supongo que en parte tienes razón, es decir, puede que ocultando los motivos ayudemos a camuflar a los traidores, pero sigo creyendo que también les ayudamos. Menuda situación... -miro a Megan- No sé si seguí mi instinto o sencillamente me decanté por alguien en el último momento porque sí -niego levemente tras éstas palabras- No, no es del todo injustificada mi sospecha. Te vi reaccionar tan rápidamente tras el incidente de Alice que pensé que podrías ser uno de los que le hicieron eso -dibujo una media sonrisa, cargada de resignación- Te vi tan segura, tenías todo tan claro: lo que debíamos de hacer, la presencia de traidores, todo... No sé si es suficiente para sospechar de alguien, pero como dije antes no es nada personal porque no os conozco. Solo espero que acertemos con nuestras sospechas -digo esto último en general, mirándolos a todos.

Suspiro pesadamente y tras mirar al grupo, añado:

- ¿Ahora qué se supone que tenemos que hacer? ¿Vamos a estar aquí encerrados sin posibilidad de defendernos? -digo mirando a las carroñeras vestidas con cuerpos infantiles.

Instinto...Es la clave de esto...Asenti con la cabeza hacia Zyllah, no necesitaba una explicación pero ante su insistencia, solo acepto sus palabras, no le conozco y no me interesa conocerla, Gabriel tiene mi simpatia por que ha sido amable, el unico que se ha dado el tiempo de tenderme una mano amiga, la soledad que alberga mi alma solo es el resultado de mi pasado desolador y solitario, ser lastimera no es algo que me interese demostrar, pero bueno, nadie me conoce y mis recuerdos tampoco son muy compasivos conmigo.

Ira tuvo una reaccion muy parecida a la mia y varios le acercaron a ayudarla, a alentarla...no importa Seele...siempre has estado sola y eso no cambiara nunca...

Megan observa el desarrollo de la batalla con atención. Cuando Tetsuo iba a intervenir, piensa en detenerlo pero decide contenerse y ser una mera espectadora.

Así que esto pasaría en cada atardecer...

Tetsuo reacciona otra vez y Megan sólo alcanza a decir - Mate!* - antes que lo inevitable ocurra. La pequeña bruja había desaparecido del lugar. Ella sabía que algo así ocurriría, aunque sentía el mismo pesar por el joven que acababa de morir y ver cómo la joven devoraba su corazón, hacía hervir su sangre con mucha fuerza. Esas pequeñas estaban jugando con ellos y lo peor de todo es que no podían hacer nada todavía.

Mira con rostro triste el cuerpo del caído y piensa - ¿Será que era inocente? - todos sabían que corrían ese riesgo, pero temía que fuera verdad. De no serlo, tendrían el peso de la muerte de un inocente en sus hombros.

Ella se acerca a Tetsuo y le dice - Es inútil. Al menos hasta que logremos ser libres del sello que nos han puesto - pone una mano en su hombro y dice con tono de resignación. No le gustaba para nada la idea, pero qué más se podía hacer...

Megan escucha las palabras de Jane y no le produce temor ni recelo. Ella misma había votado basada en las reacciones de Syd, así que le parecía lógico. No obstante, se alegra de que haya cambiado de opinión. - Supongo que no es nada personal, como los votos de muchos de los presentes. Sería personal si Gabriel hubiera votado a Yormund, por ejemplo. Él lo acusó en público. No es que supiera realmente lo que sucedía, es sólo que he jugado mucho tiempo al ajusticiamiento y castigar a gente así es mi forma de vivir. Las niñas lo dijeron claramente y era que votar era nuestra única oportunidad de vencer su macabro juego, por esto, lo asumí rápidamente y por eso estoy convencida de que este es el método que debemos usar, pues nuestras habilidades no hacen la diferencia - responde tranquila. Sólo quería expresar lo que pensaaba, pues sabía que muchos no sabían muy bien por qué votar.

Andrew se pone en guardia cuando siente que la tensión del lugar empieza a aumentar. El ataque puede venir de cualquier lado y tiene que estar atento. Tras asegurarse que no hay nadie a su espalda mira a la izquierda y a la derecha, intentando descubrir algún movimiento en falso, intentando averiguar las intenciones de cada uno, pero nadie parece fijarse en él, por lo que se relaja.

En pocos segundos todo ha acabado y el cuerpo de Zagam yace sin vida en el suelo. Andrew mira con preocupación la escena, sin entender tanto odio hacia aquel joven. No había hecho nada que haga sospechar al Grovehn de su culpabilidad y aún así...

Mira a Poron y se da cuenta de su arrepentimiento. No cree que quisiera participar en todo esto. Da igual. No es hora de lamentar lo que ha pasado, es hora de prepararse para la noche, aunque... Poco podemos hacer.

-Poron, no podías saberlo. No te atormentes.-Se acerca a él con una sonrisa algo triste.-Y sí. Fue una de las primeras preguntas que le hice a Azhariel cuando me contó todo. Que porqué no hicieron guardias... Simplemente no podían. La noche llegaba y todos caían irremediablemente dormidos. Algunos, como Yannick, intentaron no dormirse pero fue en vano. Lo único que podían era recostarse y esperar despertar al día siguiente.

Gabriel se dirige a él. Andrew se gira y le sostiene la mirada.-No sabía a quien votar, así que me fijé en las aptitudes. Ahora mismo hay dos personas en las que desconfío, Seele y tú. No hay más. No entiendo la relación que habéis cogido en un día. Besos en las mejillas, agarrados de la mano... Pero todo con una formalidad calculada. Tal vez me haya equivocado. Tal vez el que ha caído en el juego has sido tú y la que intenta manipularte es ella. Tuve que elegir y te elegí a ti, aunque en la próxima puede que no sea así.-Digo tras escuchar las palabras de Seele y verla dándole otro beso en a mejilla.-Pero seguiré estando atento.

- Yo no...- dijo, una vez hubo terminado todo- No...-negó con el rostro, a medio camino entre la rabia y la frustración- ¿Quién de vosotros lo ha hecho? ¿Quién se ha atrevido a manipularme? ¡Hablad! ¿Quién me ha obligado a atacar a Zagam? ¡Yo no tenía nada en su contra!

Andrew, entiendo perfectamente tu razonamiento, a Gabriel no le conosco, pero ha sido el primero en ayudar a Cameron y el unico que se ha mostrado amable conmigo, si agradecer ese gesto con mas amabilidad te parecer algo extraño, pues observa a tu alrrededor, otros tambien tienen distintas muestras de simpatia, ¿la diferencia es tomarnos de la mano?...¿darle un beso en la mejilla?...no dejare de hacerlo, si ven en eso algo malo...es problema vuestro...es mas cuando Azhariel se apodero de ti y lloraste junto a la tumba de Valfar, otros podrian pensar que fue un acto manipulado para que sintieramos compación por ti...pero no es asi, yo misma se senti afectada por esos sentimientos...¿te juzgo?...no...o mira a Megan y Tetsuo...el que hablen en japones, tambien podria hacerme dudar de ellos...incluso la rivalidad entre Zyllah y Eko...

Eko observa el combate apartado, con la mirada afilada y pasando sus ojos de unos a otros. Al ver que Tetsuo es quien comienza una media sonrisa se forma en su boca. Desea ver pelear al oriental. Sin embargo, que sea Lennish a quien su hoja amenaza no le gusta nada.

El despliegue de poder de unos y otros es asombroso, y la facilidad con la que Poron toma el corazón del chico le hace mirarle de otra manera. Desde luego es alguien a quien temer.

Durante los minutos siguientes Eko se dedica a observar las reacciones de unos y otros. Unos piden explicaciones, y otros las ofrecen. Hay quien teme haberse equivocado, pero él simplemente lo acepta con resignación. Alguien tenía que morir, y por el momento no tenían nada.

Las palabras de la rubia a la que habían controlado la mente llamaron su atención, y de inmediato Eko llevó su mirada hacia Andrew. En varias ocasiones a Azhariel le habían hecho algo aún peor, e incluso a Nybras la habían obligado a atacar a su propia pantera.

Sin embargo, la discusión que llamó su atención fue la que se centraba en Seele. La siguió, evitando intervenir hasta el momento en que la mujer dijo su nombre.

- ¿Qué cojones estás diciendo? - Le respondió directamente, alucinado y clavándole una mirada llena de incomprensión. - ¿Te resulta sospechoso que nos tratemos como si nos conociéramos? - Preguntó, asombrado, abriendo mucho los ojos. - ¿Hola? ¿Te has dado cuenta de que de verdad nos conocemos? - Añade exasperado.

Si, lo he notado Eko, solo voy al hecho de que, lo que dice Andrew perfectamente puede aplicarse a otros...pero el centra su desconfianza en nosotros...independiente si nos conocemos de antes o no...

Todos quieren oír lo que les conviene, todos ven lo que quieren ver...seguiremos matándonos a ciegas sin saber identificar quienes son los que armaran el circo para esas crías...

No me agradaba la forma en que me habla, un comentario tanto le incomodaba...Vamos Seele, dejadlo ya...que piensen lo que quieras, centrate en buscar la forma de alcanzar a esas malditas niñas...

Miro a la chica del halcón, realmente extrañado, sin comprender a que se refiere.

-¿De qué me estas hablando?-niego con la cabeza, entristecido de que alguien hubiera perdido la cordura tan pronto.- Tienes la cabeza a pájaros.

Después escucho las conversaciones de los demás, y oigo algo que me hace levantarme de la posición en la que me había acomodado preparándome para que el hechizo de las demonios cayera sobre mi.

-Espera, espera, espera...¿Como recuerdas que Gabriel ayudó a Cameron ayer? ¿No decías nada más despertarte que no tenías recuerdos de lo ocurrido? Zorra mentirosa, tus intrigas se van a terminar mañana.

Zyd observo el combate desde su lugar sentado mientras fumaba. Habia resultado muy revelador el combate en cuando a los poderes a los presentes, aunque sabiendo muy poco de los involucrados dejo en duda si habia sido lo correcto. Pero ya estaba hecho no habia manera de reclamarlo ahora.

Cuando termino todo miro al resto y permanecio escuchando. Solo la mirada de Marceline logro que empezara a decir algo. Mi voto ha sido por que has permanecido callada gran parte del tiempo. Habia otra gente como vos que podria haber votado pero al final te elegi a vos. Nada personal. respondio mirandola a ella con una cara de poco interes. Aunque si tu conducta es de venganza ahora que te he votado, talvez he acertado sin darme cuenta. agrego en un tono demasiado pasivo y tranquilo, mientras seguia con su cigarrillo.

Escucho a Megan para comprobar si sus supociones sobre la razon que lo votara eran ciertas. Para él no le parecia raro que alguien del Legado Groveh lo votara por desconfiar de su actitud, eso fue siempre normal en su vida. Aunque al final no se justifico y a pesar de eso él no le pedira que lo haga.

Muestro claro disgusto ante las palabras de Yormund...No caere en tu juego Yormund, acusabas a Gabriel por su poder de controlar el Tiempo y ahora a mi por mis recuerdos, no me detendre a explicar lo fragil que es mi mente...menos a alguien que pierde el control de esa forma, no me insultes...yo no estoy tratando desesperadamente de buscar un culpable para que no vuelvan a votarme...

Vuelve a guardar su katana cuando nota que la niña demonio desapareció. Les dedica una mirada de odio a esos engendros, cuando nota la mano de Megan en su hombro. Se gira a ella y le sonríe de lado.- Había que intentarlo, ¿no? - 

Luego escucha las palabras de cada quién, unos más recelosos de sus motivos que otros, pero pensaba que poco se podía sacar en claro. Bien podría ser una estrategia de cada quién. Miró a todos lados, sin saber que hacer, rascándose la nuca.

Escucho entonces las palabras de Yormund, el tipo tenía una buena memoria, y dio entonces un punto bastante bueno. Sonrío de lado con suficiencia, antes de añadir.- Si er idioma es probrema, puedo tratar de cambiarlo.- 

Marceline volvió a pasarse la mano por el pelo. - ¿Venganza? No, simplemente es que ahora mismo sólo se de 2 inocentes. La primera soy yo. La segunda... Fionna. - dijo con una sonrisa mientras le acariciaba la cabeza - Así que perdóname si sospecho de cualquiera que me acuse a mi. Y más si al parecer no sería la única en desconfiar de dicha persona. - dijo, mirando de reojo a Megan y Alexia - Además, no es mi culpa de ser callada, si cuando pregunto las cosas se me ignora - Marceline hace un falso gesto de tristeza, mientras mira de pasada a Andrew/Azhariel.

Marceline se quedó mirando a Syd como fumaba su cigarillo, y al no notar reacción, sonrió - Aunque tu y yo podríamos hacer fácilmente las paces. Ya sabes...

Las votaciones ya estaban hechas, solo cabía esperar los resultados. Un momento tenso, incluso desesperante, comprensible dado que la vida de uno de los presentes sería juzgada y sacrificada a la “causa” si es que se puede llamar así, yo prefiero llamarlo y un juego de poder.

Un nombre salió, y no fue el irritable individuo al que le endorsé mi voto, alguien no muy popular por lo que pude comprobar. En su lugar salió Zagam, alguien discreto y de pocas palabras, apenas me percaté de su presencia, pero algunos si lo hicieron, y tuvieron que ver algo en él lo suficientemente sospechoso para que varios le acusaran.

Y el espectáculo empezó, una especie de combate donde Lennish, la rubia arquera, otra rubia bastante más cínica cuyo nombre no consigo recordar, el despreocupado que siempre llevaba un bocata en la mano, otro al que ignoro su nombre, y Gabriel, alguien cuya presencia no pasa desapercibida, para bien o para mal. Ellos fueron quienes acusaron al reservado Zagam, y también se convirtieron en sus ejecutores.

Nuestras anfitrionas, pequeñas y crueles, parecían disfrutar de aquel espectáculo. Yo simplemente observé en silencio, no podía sentir lástima por aquel joven ya que ni siquiera llegamos a cruzar palabra alguna. Su cuerpo yacía en la tierra y yo le dediqué una mirada fría, intentando averiguar qué es lo que habían visto tantos para convertirse en el primer objetivo.

Poco después, una de nuestras captoras nos mostró la cabeza de la pequeña que nos encontramos poco después de llegar a Oldland. Esto ya era muy diferente, ella era una niña herida e indefensa, y aquellos monstruos  se aprovecharon de su vulnerabilidad. Eso sí que me hizo de enfadar, apreté los dientes con fuerza y con mi fiel arma empuñada me lancé como loco contra ellas. Una estupidez sin duda, pero quería hacerlo, lo necesitaba.

No tardé en comprobar que fue un malgasto de energía, la molesta barrera me impedía mi cometido. Maldije con ira y desistí, me resigné a estar a su merced, al igual que al resto. No se podía hacer nada más. Mi estomago se revolvía al ver como se comían los restos de aquellos cuerpos, desvié la mirada con una mueca de asco en ella.

Me tomé mi tiempo mientras descargaba mi inquietud dando recorriendo aquella prisión sin barrotes. Quizás me serviría para recuperar la compostura y pensar mejor, o quizás no. Yormund no quiso averiguar el motivo de mi acusación hacía su persona. Mejor, no pensaba hacerlo de todas formas.

Dudé de si debería relacionarme con el resto, daba igual si lo hiciera o no, ambas posturas causarían sospechas. Pero lo que sí estaba convencido, es que a partir de ahora debería dejar de mirarme el ombligo y prestar atención a los veinte semidemonios restantes que me acompañaban. Cualquier pista sería vital, y yo quería lo mismo que los demás. Salir de aquí…vivo.

- Entonces....ahora solo a esperar que nos duerman, alguien recibirá una paliza durante la noche, votar a los traidores ¿y así hasta repetirlo hasta que no quede ninguno hasta que uno de los bandos ganen? Vaya, que bien.  - Remarqué con fastidio y sarcasmo mis últimas palabras. Nos habíamos visto involucrados en un juego que tenía un patrón, o eso me habían hecho creer las palabras de los más veteranos.

Cuando aquellos horribles engendros abrieron la veda, Ivhone se puso en tensión. Shia se encontraba enredada en su cabello, dormitando, pero sintió el nerviosismo de la joven y abriendo sus ojos se movió, hasta asomar por uno de los lados. 

La joven no sabía cómo iban a ir las cosas y miró a su alrededor, esperando alguna señal. En aquel momento todos empezaron a acusarse. Hubo algunos que recibieron más votos que otros. Ella miró a Gabriel y le señaló... Aquí tienes tus votaciones... Es lo que querías, ¿no...?

Pero... Fue otro el que salió elegido y aquellos que habían decidido que él era uno de los traidores, se encargaron de darle muerte. Ivhone se mantuvo en su sitio, mantenía la mandíbula apretada con fuerza y sus ojos castaños ni pestañearon, mientras contemplaba como Poron le arrancaba el corazón a Zagam. Cuando quiso darse cuenta, había estado manteniendo la respiración y sus puños se habían crispado mientras su cuerpo temblaba recubierto de un sudor frío... 

La criatura que parecía tener un hambre insaciable, se acercó y agarrando el corazón se lo llevó a los labios. Ivhone sintió el gusto de la bilis en su garganta y apartó la mirada, sin poder seguir contemplando aquella escena dantesca. 

Las primeras reacciones no tardaron en aparecer. La joven se sorprendió al escuchar que hablaban de echarse a dormir. Se volvió y les miró con los ojos entrecerrados y una mueca en su rostro. Acababa de morir alguien, ellos eran los causantes de aquella muerte y ¿se ponían a habar del momento en que se echarían a dormir...?

Tras el primer momento de confusión, empezaron las preguntas... Todos querían saber por qué habían sido votados. Ivhone se volvió a mirar a Gabriel y se mantuvo unos segundos en silencio...

- Tú dijiste que teníamos que votar... - Le respondió y enarcó una ceja, esperando su reacción. Ella no conocía a nadie, todos estaban en su misma situación y muchos de ellos parecían tan perdidos como ella. ¿Cómo saber cuál era el rostro que se ocultaba en la oscuridad...? El momento había llegado y ella no había sabido a quién escoger. Pero sabía que tenía que jugar... Señaló a aquél que había hablado con otra voz, que pareció poseído y la había asustado... Pero no supo expresar aquellos pensamientos, así que le miró, casi retándole a que intentara atacarla con sus afiladas palabras.

Me limpié los labios mientras observaba como la niña devoraba el corazón aún palpitante de Zagam, tal situación me hizo girar el rostro, me resultaba repugnante y entonces me encontré con la mirada del oriental

Curioso que haya acabado con uno de los que te votaron...-pensé para mí-

Escuché a cada uno de los presentes, sus motivos por los que habían votado a otros. Yo simplemente miré a quién preguntó por que Zagam y no me dió tiempo a responder cuando Gabriel contestó por mí.

Me limité a observar como la niña terminaba su "aperitivo" y a escuchar....

- Lo cierto es que no tenía nada en contra de Zagam, simplemente su silencio....-dije más bien para mí que para los presentes- 

Observé a Yormund su interés por falsear acciones hacía que desconfiara de él. Decidí sentarme, mirarme el "tatuaje" dejado tras liberarnos del grillete y esperar que nos deparaba el resto de la noche.

La escena se desarrolla ante mis ojos como una pesadilla, los engendros disfrutan del espectáculo mientras los demás observamos la ejecución de Zagam. Un escalofrío recorre mi columna cuando llega el final, con un movimiento diestro, Poron le arranca el corazón, algo que me pareció más un acto compasivo para que acabara lo antes posible. En apenas un par de minutos ya estaba hecho. Sin embargo, cuando parecía que todo había acabado, veo como uno de los monstruos coge el corazón, aún caliente y comienza a comerselo. Una arcada intensa me sube por la garganta, es demasiado, ya nos hemos visto obligados a asesinar a alguien y ahora esto. Sin moverme demasiado, para evitar llamar la atención de nuestras carceleras, cierro los ojos lentamente, no necesito ver más.

La sudadera de Poron está manchada de sangre y su expresión refleja el pesar por lo ocurrido. Andrew trata de consolarle un poco y tiene razón no podía evitarlo.

-Sí, Poron no es culpa tuya. Por lo que parece, los que votan al elegido también deben ser los que le ejecuten, a no ser que seamos los siguientes, todos estaremos en esa situación tarde o temprano.- coloco una mano sobre su brazo tratando de darle apoyo.

Escucho de fondo frases sueltas de las conversaciones de los demás, quién a votado a quien, por qué motivo. Realmente dudo de que alguien tuviera motivos de peso para votar a cualquiera, es cierto que ha habido algunos enfrentamientos, pero nada tan grave como para merecer la muerte.

Desde el lado de la sala en el que estoy, veo a Syd hablando con Marceline, explicandole el motivo de su voto, mientras ella nos lanza una mirada a Megan y a mi.

-Ese el más o menos el motivo por el que te he votado. No es que tenga nada en contra tuya, no lo tengo. Te has mantenido al margen de todos, sin hablar con nadie y sin reaccionar a lo que nos rodeaba hasta que ha llegado el momento de elegir. Como tu has dicho, no es personal, había que elegir a alguien.- explico con tono neutro, en realidad me alegro de que no haya sido él, sobretodo si tengo que participar en la ejecución.

Sonrío ante el contacto de Seele, su beso en la mejilla, y me detengo para acariciar suavemente su rostro, apartando su pelo con delicadeza. 

...No votaste a Yormund...pense que lo harías...

-Ir a por alguien únicamente porque sabes que va a ir a por ti es una decisión cobarde, fácil. Ese es el juego al que quieren que juguemos. Desconfianza. Lo complicado es aceptar su opinión y tratar de demostrarle que se equivoca.

Después me detuve a escuchar la respuesta de Zyllah, compartía su opinión, era mejor hablar y exponer nuestras motivaciones, con ello nos expondríamos, pero también nos ayudaría a identificar a aquellos cuya alma estaba corrupta, aquellos que anhelaban el poder del sello.

...yo también desconfío de los que se han acercado a otros sin motivo aparente, tratándose como si siempre hubiesen sido amigos. O algo más... Aprovecho la pregunta de Zyllah para responder también a las sospechas de Andrew.

-No puedo hablar por los demás. En nuestro caso creo que simplemente éramos dos almas solitarias buscando un poco de afecto. Cuando has estado solo mucho tiempo, no hace falta demasiado para que te aferres a alguien que muestra un mínimo de cariño... un gesto, una mirada... con eso es suficiente. 

Ya has visto como Yormund me ha considerado peligroso simplemente por lo que soy capaz de hacer, piénsalo... ¿quién querría acercarse a alguien como yo?. Seele es capaz de aceptarme sin juzgarme, sin preguntarme por el pasado o por el futuro, ella disfruta cada día como uno único. ¿Sabes lo difícil que encontrar a alguien así?

Seele era especial, lo era para mí. Mi naturaleza siempre había sido más una carga que una bendición, mi cara lacerada por los estigmas de mi legado... la gente me temía y me despreciaba a partes iguales. Ojalá yo hubiera nacido con un compañero animal, para no tener nunca que estar solo. Ese amor incondicional que se profesaban con sus animales... yo jamás había sido capaz de sentir nada parecido. 

Después Seele interviene, y Yormund contesta de malas formas. ...Espera, espera, espera...¿Como recuerdas que Gabriel ayudó a Cameron ayer? ¿No decías nada más despertarte que no tenías recuerdos de lo ocurrido?...

-Si hubieras escuchado, Yormund, sabrías que Seele dijo que este lugar, la marca provocada por esos grilletes, retenían parte de sus recuerdos. 

Tu actitud me intriga... ¿eres un gusano aparentando ser un pájaro? ¿o al revés?. 

Observo a aquel personaje con curiosidad, y con una mirada amable le indico a Seele que no tenía que preocuparse. Ese tipo había estado apunto de morir, y parecía empeñado en buscar más motivos irracionales para enemistarse con la gente. ¿No valoraba su vida? O quizá confiaba demasiado en su suerte... ¿pero hasta cuando duraría?. No lo consideraba una amenaza, era como un niño que pataleaba tratando de llamar la atención, y no entraría en su juego. Debía concentrarme en encontrar la verdadera amenaza.

 ...Tú dijiste que teníamos que votar... Respondió finalmente Ivhone tras pensarlo detenidamente.

-Está bien, Ivhone. -Respondí con tono de aceptación. No la juzgaría, por ahora nos habíamos guiado por poco más que la intuición, pero a partir de ahora debíamos estar atentos a los pequeños detalles... y confiar en esas pequeñas variables que irían apareciendo, esas que serían capaces de cambiarlo todo, de esclarecer un futuro incierto.

Se saca el cigarrilo de la boca y deja escapar el humo mientras la mira a los ojos. No sabia que estabamos en guerra nosotros… contesto en tono demasiado serio pareciendo no darse cuenta que podia sonar como una burla su respuesta.

Escucho a Alexia y asintio lentamente luego que terminara de hablar. Entiendo. He hablado poco para dedicarme mas a observar y escuchar. No soy un gran hablador y menos una persona sociable, hasta me parece que soy el unico aca que elegiría la soledad a estar acompañado. Le explico justificándose un poco, solo porque le parecia necesario para que no lo pensaran como alguien normal.

Volviendo a poner su cigarrillo en su boca miro de vuelta a Marceline. No tengo una fuerte razon para acusarte y no deseo enfrentarnos de ninguna manera, así que mi siguiente voto pude cambiar fácilmente a otro que no seas vos Marceline. Le aclaro para terminar el asunto entre ellos.

Las palabras de Annie llamaron mi atención.

-Espera, ¿cómo que alguien te manipuló? ¿Estás diciendo que... alguien te controlaba, de alguna forma, mientras atacabas a Zagam?

La sola posibilidad de que alguien de los presentes pudiese manipular a su antojo a otro de nosotros me puso los pelos de punta. ¿Y si se trataba de un traidor?

Cada vez se ponía más complicado discernir quién estaba de qué lado. Todo el mundo era sospechoso para mí, pero la actitud de Gabriel seguía siendo la que me parecía más sospechosa. Su actitud de superioridad anteriormente, como si supiese algo que los demás no... Y ahora este "amor" tan repentino... Algo no olía bien.