Una y otra vez has desdoblado tu cuerpo buscando la compañía de alguien que rompa aquel silencio en tu habitación. Buscando la compañía de alguien que seque tus lágrimas. Miles de tardes sola, buscando un amigo frente al espejo, empañado por surco de tus lágrimas, hasta que por fin ella apareció.

Las tardes parecían más amenas, pero la gente seguía evitando tu trato y mirada, como rechazada por el simple hecho de ser distinta a los demás. Alejada de cualquier odio y cualquier represión.

Pero eso fue hace tiempo, ahora tu corazón esta marchito, inundado en miles de lágrimas y ella y tú sois más fuertes que ayer. Es el momento de devolver la moneda, y el frio silencio de estas ruinas te marca el lugar.

Puede que aquí encuentres el porqué de todo un principio, o las razones por las que un día el mundo empezó a rechazarte por ser ahora igual a todos los demás.

Las lágrimas son la marca que hicieron frio tu pasado, pero serás tú, quien los haga llorar antes de que la muerte inunde el lugar. Ya no estarás sola, nunca más.

-Maldita sea... He fallado vilmente. ¿Por qué? Tan sóla...

Entonces el latigazo consigue dividirme en dos.

Yang: ¿Por qué no nos divertimos un poco...? Creo que Yormund será mejor que ese Zagam, parece más meloso.

Yin: Tenemos trabajo. No quedará nadie vivo, sólo muertos a los que rezar por su sabiduría.

Yang: Eres una aguafiestas... Además, ni siquiera te enteraste de que tenías al gatito detrás tuya.

Yin: Tú tampoco. No me gustan las niñas.

Yang: Vaya, en algo coincidimos. Entonces: primero nos divertimos un poco, y luego si eso matamos hasta que te sacies ¿vale?

Yin: Sin supervivientes.

Y entonces vuelven a juntarse, aunque la balanza comienza a decantarse... El Yang comienza a jugar primero.

Quieres mostrarlo ya??...

Yo pensaba dejarte el gran momento para un linchamiento... ^^

Tu veras...

Vale, espero entonces. xD Ya me invento algo. xDD

Yang: ¡Qué interesante!

Comenta, separándose de su opuesta.

Yin: Los caídos... podríamos ser nosotras.

Yang: O un enemigo interesante... o un aliado.

Yin: Reza por que los caídos no carguen en nuestra contra.

Yang: Paranoica.

Yin: ... tus insultos no me afectan.

Yang: Bah.

Y nuevamente vuelven a ser una. Pero el Yang continúa predominando en la balanza.

deseoso de que escogieras una parte de él....

Dieciseis eran los epigrafes a recordar, pero solo uno a tocar.... Pero... ¿Cuál?...

Dos almas y un destino. XXI. 21.

Como grabado a fuego aquel signo parece hacer mella en ti despertando un instinto algo al parecer nacido de tus recuerdos y del ayer. Recuerdos nacidos del rencor y la soledad, que ahora prodigan como un arma de doble filo, que dan paso a la sangre sin querer..

Un Legado de Soledad

El estar sola ha sido tú única pena, y por ella pagaste con traición y soledad. Parece que nadie entiende el porqué esto sucede a nuestro alrededor.

Es el momento de devolverles la misma moneda... Así que señala a alguien que pienses que deba poseer tu misma maldición, y que desde este momento comenzará a vivir, lo que un día fue de ti, y como llegaste a pensar que todo esto debía ser así.

-En el oriental está la traición... lo sé. Pero no es la traición que yo creía... su alma es oscura, es vil y trata de engañarse a sí mismo. El Yin y el Yang han de bailar... y danzarán para mí esta noche. Muéstrame de lo que eres capaz... Tetsuo.

Digo con una sonrisa malévola. ¿Me serviría para volver? Era posible, aunque lo dudaba. ¿Para derrotar a mis enemigos? Era posible... y bastante la verdad. ¿Era pura venganza, despecho? Con total probabilidad. ¿Tal vez... podría comunicarme con él? Ojalá. Así sabrá que yo... nunca me equivoco.

-Vaya... nos quedamos sin oriental. Será inútil... usé mi gracia en él y encima es engullido por el vacío... ¿se puede ser más incompetente?

Gruño malhumorada. Mi don había ido para con él y ahora se perdía en el vacío.

-Parece que no puedo hacer nada bien... y ahora... ¿sospecharán de los que él alzó? ¿de veras no puedo hacer... nada? ¿aquí termina mi oportunidad?

Mi mirada se desvía hacia otro lado con un aire nostálgico.

Siento mi repentina desaparición, máster. -.-

Espero no haber entorpecido demasiado la cosa y... espera, que estoy muerta. xD

Al menos me alegro de que los malos sigan... vivos. xD Más o menos.