Partida Rol por web

Estaba pasándole el comunicador a Raine, cuando Galek pasó por su lado medio agachado y con el bláster firmemente empuñado. Al rodiano se le había agotado la paciencia para las sutilezas. Lo vio avanzar hasta una caja cercana y, tras parapetarse en ella, soltar el primer disparo.

Jax abandonó la conversación con la mecánica y asomó un brazo desde la esquina para secundar a Galek. Si el rodiano había abierto las puertas de la fiesta, no sería Jax quien se quedaría fuera sin bailar.

Asha se sentía revitalizada. Aún estaba tratando de procesar lo que veía cuando el impetuoso Galek inició la reyerta. A penas con tiempo para reaccionar colocó el fusil como había visto hacer a los soldados imperiales, apuntó lo mejor que pudo y… un potente rayo bláster salió del fusil directo al droide dispuesto a reventarlo en mil piezas que no servirían ni para hacer reparaciones.

- Wow! Este juguete mola mucho… - se dijo para si misma sorprendida por la capacidad destructiva del fusil tremendamente letal en sus manos.

¿Buscar la pieza? ¡Espera!

La memoria regresó a Asha como una sucesión de flashes en la que veía como Trex entregaba la pieza a un droide para que Raine la colocara, pero si ella no sabía donde estaba eso no debió suceder por lo que la pieza… ¡todavía la tendría el droide y se la llevaban a Trex!

Asha corrió de vuelta al deslizador confiando en poder ponerlo en marcha de nuevo y manejarlo para que les diera una ventaja a la hora de buscar a los droides.

- ¡Jax! ¡Dale tu comunicador a Raine! ¡Los droides tendrán la pieza que necesitamos! – le dijo por el comunicador mientras corría hasta el deslizador.

Jax no vio a nadie más acechando detrás de los bidones de combustible, o escondido detrás de alguno de los depósitos que poblaban el muelle de amarre. En lo que sí que se percató fue en la manera de actuar del droide que estaba en la rampa, y detectó que, a pesar de estar muy vigilante, en algunos momentos sus patrones de comportamientos le llevaban a distraerse. Asha también echó un vistazo, a pesar de que la situación le incomodaba mucho y se asomó despacio y estirando el cuello hasta el punto de que llegó a dolerle. La muchacha, a pesar de su corta vida, había pasado ya por situaciones como aquella y tras comprobar bien cada rincón del muelle estuvo segura de que allí no había nadie más. Lo que le preocupaba era que el droide de seguridad terminara por descubrirles antes de tiempo si seguían asomándose y se perdiera el factor sorpresa. 

Pero la sangre de cazador del rodiano llevaba demasiado tiempo sin apretar el gatillo y ante un objetivo tan fácil no lo dudo, saltó al frente y disparó contra el droide sin pensárselo. Aunque una vez más no tuvo suerte en el disparo, ya que impactó en la nave en lugar de en el droide, quien se giró alertado hacia ellos. No tuvo tiempo para que su bláster incorporado en el brazo pudiera salir. Primero Jax le acertó un disparo que le hizo dar un tropezón hacia atrás, y después un potente disparo hizo que un montón de tuercas y tornillos que se esparcieran por la rampa de acceso mientras el droide, con un humeante agujero en el pecho, caía al suelo completamente inservible. 

Pero repentinamente, y sin dar tiempo a siquiera celebrar su tremendo acierto, la pelirroja regresó corriendo de vuelta a la calle, con intenciones aparentes de volver al aerodeslizador. 

Jax lanzó un grito de júbilo al ver estallar al droide en mil pedazos. Cuando se disponía a lanzarse a la carrera hacia la rampa de acceso del Colmillo, saboreando ya la victoria y viéndose a sí mismo a bordo de la nave abandonando Tatooine, Asha salió corriendo en dirección contraria, gritando que los otros droides tenían la pieza. ¿Pieza? ¿Qué pieza? ¿El módulo de arranque? ¿Cuándo lo habían perdido? ¿¡Y por qué no lo habían dicho antes!?

—¿El módulo? ¿¡No tenemos el módulo de arranque!? —exclamó hacia la espalda de la hija de Daksh, que se alejaba hacia el exterior del muelle y las polvorientas calles de Mos Shuuta. Jax reculó y salió tras Asha. A mitad del pasillo, sin dejar de correr, se dio la vuelta para gritar hacia los que seguían en el muelle—. ¡Buscad ese módulo en la nave! ¡Id calentando motores! ¡Y avisadnos si lo encontráis!

Y con ese último chillido, salió a la luz inclemente de los soles de Tatooine, tras los alocados pasos de Asha.

Fayyn se apresuró a cumplir la orden de Jax. La huida estaba resultando caótica y muy estresante, ¿pero qué escaramuza no lo era? En todo caso faltaban explosiones y sangre, pero la wookie ya estaba lo suficientemente agotada y dolorida como para pedir más gresca. Solo pensaba en abandonar lo antes posible esa maldita roca arenosa abrasada por dos soles.

Tan rápido como se lo permitió su enorme cuerpo se internó en el Colmillo para examinar el interior.

—¿Grrrrfnn, Tggggfj Brrrrrrrrrnhg?*

El rodiano se quedó perplejo mirando como el aerodeslizador pilotado por Asha y Jax como paquete se atravesaba el hangar del muelle Aurek y se perdía de vista.

- K̄hx h̄ı̂ h̄lum dả klụ̄n c̄hạn khuṇ!, ca s̄ūỵ s̄eīy modūl rèng khwāmrĕw pị dị̂ xỳāngrị?, exclamó hacia Raine expresando toda su frustración, pero como no valía la pena lamentarse intentó organizarse con la mecánica para aprovechar el tiempo en poner a punto la nave - Lụ̄m pị ẁā khey bxk pị læ̂w ẁā reụ̄x peid mị̀ dị̂ ca khid yạng ngị t̄ĥā reā dein h̄n̂ā t̀x pị p̄heụ̄̀x t̂xng rīb xxk pị?

Tras esto entró en la nave detrás de la wookie, determinado a encontrar aquella maldita pieza, si es que se encontraba allí.

Todo empezó a ir cada vez más rápido para la cabeza de la mecanica. Asha había destruido al droide, eso estaba muy bien pero para Raine ver como su amiga se iba y Jax detrás de esta la dejó perpleja - Pero... El comunicador lo necesitamos para... ¿SERA POSIBLE? ¿Así de que sirve tener comunicadores si no se pueden usar para comprobar la nave? - Por un lado no podía hacer nada... pero pensó que tendrían que arrancar la nave y los comunicadores le podrian servir  para probar que estaba todo en orden.

No obstante, por el otro tendrían que buscar la otra pieza y al mirar hacia el otro lado viendo a Fay y Galek entrar en la nave a saco, la dejó ennortada en ver como cada uno iba por su lado sin ningún tipo de proposito. Finalmente la mecanica miró a R5 - Creo que solo tu y yo sabemos trabajar en equipo ¿Verdad? Hagamos algo... no sabemos en que estado está la nave. Busquemos el puente de mando y tu revisaras los sistemas de la nave, sin arrancarla, mientras yo me meto en los conductos para quitar las trampas ¿Vale R5? Eso si, primero voy contigo para comprobar que esté todo bien y no haya Droides. Vamos alla R5, grupo mecanico a la carga - Con eso dicho la motivación de la mecánica creció bastante, siendo que dejó que el resto de su grupo hiciera lo que hiciese mientras ella se encargaba de lo que importaba para salir corriendo como le había dicho Galek, evitar que la nave se gripara por las trampas que puso, solo que primero corroboraría que no hubiera amenazas.

Asha se cargó de un disparo tan certero como destructivo al droide de la rampa y repentinamente salió corriendo de vuelta al aerodeslizador gritando que los otros droides tenían la pieza que les habían robado a ella y Raine antes. Jax, aún a pesar de estar atónito y tener la cabeza llena de preguntas sobre cómo habían podido perderla, salió corriendo detrás de la pelirroja para asegurarse que volvía de una pieza, y, ya de paso, con la pieza que les faltaba. Ambos abandonaron a la carrera el muelle Aurek y abordaron el aerodeslizador que ya estaba en las últimas. Intentaron arrancarlo de nuevo con las prisas, pero parecía que aquel cacharro ya había dado su último viaje. El motor empezó a liberar un humo negro y denso que no auguraba nada bueno. 

Todavía en el muelle de atraque, el resto quedaron algo desconcertados. Galek no solo estaba incrédulo ante la escena que se sucedía a su alrededor, sino que además se preguntaba cómo demonios se había perdido el módulo de arranque. Frustrado y perplejo trató de reconducir la situación animando a Raine a ir quitando las trampas para liberar la nave antes de que aquellos dos volvieran. Y la mecánica y R5 entraron tras el rodiano y la wookiee a la nave, primero para comprobar que no había más amenazas dentro y después para buscar el módulo y ponerse a la tarea de quitar las trampas que Raine había colocado antes de escaparse. 

La wookiee ya se había adelantado vociferando gruñidos y subía la rampa de acceso apartando de una patada los últimos restos del droide de seguridad. El rodiano y ella buscaron por toda la nave hasta dar con la pieza que le habían arrebatado al chatarrero. El módulo de arranque del reactor de hipermateria estaba en el asiento de piloto de la nave, al parecer la habían dejado allí para que más tarde Trex, o uno de sus droides, la instalara. El trandoshano no parecía tener prisa por ello, ya que mientras tuviera el cepo que impedía a la nave despegar poco podía hacer con el Colmillo. Pero ellos tenían prisa, y no había tiempo que perder. En cualquier momento los imperiales darían con ellos, y eso sin olvidar a Trex y a los gamorreanos de Teemo el Hutt, quienes también les andaban buscando. Se habían granjeado un montón de enemigos en muy poco tiempo. 

Galek soltó un gorjeo de alivio cuando localizó en modulo de aceleración en el asiento de piloto de la cabina de mando del colmillo. Por fin, Azagoor les sonreía con su sonrisa llena de afilados dientes. Rápidamente se conectó al sistema de comunicación interna para avisar a Raine y al droide y que pasaran la voz a la joven Asha y al cazarrecompensas.

- Raine, reā mī chîn s̄̀wn xyū̀ mạn xyū̀ bn reụ̄x! Bxk Jax læa Asha!

Acto seguido, el rodiano se instaló en el asiento de piloto y comenzó a verificar los controles y sistema de encendido de motores, si había entendido bien a Raine, la mecánica había capado algunos de los sistemas de arranque para evitar que la nave pudiera despegar, así que mínimamente tendría que esperar a volviera a habilitarlos.

- Fey̒nn̒, mxb chîn s̄̀wn h̄ı̂ kạb h̄ỵing s̄āw dū ẁā ṭhex ca tid tậng mạn nı k̄hṇa thī̀ reụ̄x læ̀n dị̂ h̄rụ̄x mị̀ læa reā ca xxk cāk h̄lum thrāy b̂ā«nī̂ thạnthī, pidió a la wookie, si nada se torcía solo tenían que esperar a que Asha y Jax volvieran a bordo para despegar de una vez por todas de Tattooine.

-Estamos aquí - gritó Raine desde un poco más lejos de donde se encontraba Galek mientras empezaba a abrir el ducto de ventilación para introducirse de nuevo entre las tripas de la nave - Un problema menos, vamos a ver - Conectando el comunicador se lo llevó cercano a la boca - ¿Asha? Asha ¿Me recibes? Tenemos el modulo de hipermateria. Me imaginaba que estaría aquí... Trex es demasiado vanidoso por como se mostró. Volved lo más rápido que podais. - Dicho eso esperó a la respuesta de sus compañeros mientras veía como tras las ordenes de Galek, la Wookie actuaba o no

-Puedo instalarla en pleno vuelo, eso no es problema. Galek, dejo a R5 a tu cuidado, el puede ayudarte a poner a punto la nave también. - Aunque realmente no pensó eso, pues se acercó al astromecanico para susurrarle - Por favor... cuida que no haga locuras... Si prepara naves tan bien como maneja un aerodeslizador, es capaz de quemarme ahí dentro - casi confiando su vida en el pequeño droide.

En cuanto a la Wookie la miró de pies a cabeza - Aprovechemos que aún hace falta que vengan Asha y Jax. Fay, ve a las puertas de la nave y coge todo lo que veas que sea útil que esté cerca. Caja de suministros, piezas... Lo que sea. Hemos robado un modulo de hipermateria y estamos haciendo lo mismo con la nave. Comprueba que los bloqueos están desactivados de verdad, o tendremos un problema... - Fue entonces metiendose poco a poco a la nave por los conductos para resolver el tema de sus trampas, pero antes de desaparecer del todo asomó la cabeza - Oh, y si no te importa... ¿Podrías meter también los resto de los droides? Tienen piezas que nos pueden servir a todos. Ya me encargaré yo de ellos. - Y ahora si que si, dejando al piloto y a R5 a cargo de las comprobaciones y a la musculosa a cargo de subir los suministros y con el resto de sus compañeros avisados, Raine fue directa a donde puso las trampas para quitarlas y llevarlas consigo... Por suerte no eran trampas complejas, solo que simplemente no se veían hasta que era demasiado tarde para el piloto.

El aerodeslizador ni siquiera llegó a alzarse sobre su campo de repulsión. En cuanto Asha giró la llave de contacto, el motor de ese trasto polvoriento empezó a gemir lastimeramente; una oscura y aceitosa nube de humo rodeó el moribundo cacharro como una flatulencia.

—No, joder, ¡no! —exclamó Jax, golpeando furioso el salpicadero. Saltó fuera del vehículo y la emprendió a patadas contra la oxidada placa lateral—. ¡Muévete, maldita basura!

Bajo el cadáver del vetusto deslizador empezó a formarse un charco de líquido viscoso y maloliente. Jax retrocedió un par de pasos para no mancharse las botas. Paseó la mirada calle arriba y calle abajo, para volver a posarla finalmente en esa difunta chatarra.

— ¡Mierda! ¡MIERDA! —gritó a los soles gemelos de Tatooine— ¿¡Es que no puede salirnos una cosa bien!? ¡Una, solo una! ¿¡Cómo vamos a encontrar a esos droides!? ¡No podemos corretear por la ciudad con los imperiales y la gente de Teemo rifándose nuestros culos! ¡Esto es una soberana mierda! ¡Ni un sarlacc cagaría una mierda semejante!

En ese momento el comunicador de Asha empezó a petardear. Cuando la hija de Daksh lo sacó de su cintura, a Jax le pareció escuchar la voz de Raine.

—¿Qué ha dicho? Por favor, dime que han encontrado esa maldita pieza...

Galek fue poniendo en marcha algunos de los sistemas del Colmillo para que, en cuanto Asha y Jax regresaran a la nave, salir pitando de aquel polvoriento planeta de una vez por todas. Pero en cuanto los sistemas se encendieron empezaron a sonar las alarmas que avisaban de varios fallos en los sistemas de la nave y unas cuantas averías se marcaron en rojo en una de las pantallas del piloto. Afortunadamente, era todo cosa de Raine. Las alarmas se apagaron y las marcas rojas se convirtieron en verde conforme la mecánica fue reparando las averías que ella misma había provocado. Eran cosas fáciles, si sabías dónde estaban, de lo contrario uno podía volverse loco. Que era lo que le pasó al propio Trex. 

Raine aprovechó también para avisar a Asha de que la pieza que buscaban estaba a bordo, lo cual facilitaba las cosas tremendamente. Aunque a Jax le costó enterarse de la buena noticia, pues al pagar su frustración contra el aerodeslizador no había escuchado bien a Raine. Una vez que Fayyn lograra quitar el cepo de amarre que sujetaba al Colmillo y que ya estaba desactivado, podrían despegar e instalar el módulo de arranque del reactor de hipermateria en vuelo, ya que pese a no contar con la pieza la nave podía funcionar en velocidad sublumínica.

Y a buena hora, porque Jax y Asha vieron como por la calle que daba al muelle Aurek se acercaba un tropel de soldados imperiales. Uno de ellos señaló hacia la pareja y enseguida comenzaron a llover disparos contra el aerodeslizador. Debían de irse cuanto antes. 

El suspiro de alivio de Asha al escuchar las palabras de Raine no necesitó traducción alguna para Jax. ¡Tenían la pieza! 

—¡Sí! ¡Gracias! ¡SÍ! —gritó el cazarrecompensas con los dos puños alzados al cielo.

En un patético alarde de alegría, Jax ensayó un par de torpes pasos de baile, que terminaron con un giro de peonza más torpe todavía. Fue al dar media vuelta con esa ridícula pirueta cuando divisó un pelotón de soldados de asalto apareciendo desde la esquina norte de la calle.

—¡No! ¡Joder! ¡NO! —chilló justo antes de que varios de los imperiales empezaran a disparar sobre su posición.

Jax saltó como pudo por encima del morro del deslizador. Asha, que en ese momento estaba al volante hablando con Raine, tuvo el tiempo justo para arrojarse a la arenosa calle por encima de la portezuela. Varios haces de energía impactaron contra el vehículo, provocando chisporroteantes crujidos. Los dos se miraron un segundo con las caras manchadas de polvo.

—Creo que deberíamos irnos... —sugirió la hija de Daksh.

—No podría estar más de acuerdo.

Aprovechando que el deslizador había muerto justo ante la entrada del Muelle de Aurek, los dos fugitivos avanzaron a cuatro patas hasta la seguridad del edificio, dejando siempre la chatarra humeante entre ellos y los soldados. En cuanto estuvieron a cubierto, se incorporaron y cruzaron el pasillo a la carrera hasta el pozo de atraque donde aguardaba el Colmillo de Krayt.

—¡Hay que largarse YA! —berreó la contrabandista. Cruzó el espacio que la separaba de la rampa de acceso de la nave en un santiamén. Cuando ya iba a desaparecer en el interior del Colmillo, se detuvo en seco y señaló hacia el cepo de amarre—. ¡Ayuda a Faynn a quitar ese cepo, DEPRISA!

Jax asintió sin dejar de correr y se lanzó sobre el cepo como si el artefacto le debiera dinero.

—¡Vamos, vamos, vamos...! —mascullaba mientras forcejeaba con el cepo.

Fayyn llevaba unos segundos observando el cepo, preguntándose si sería seguro abrirlo así sin más. Le resultaba extraño que todo estuviese yendo como la seda. Especialmente después de encontrar tan rápido el módulo de arranque.

Por suerte o por desgracia, los disparos de los imperiales sirvieron de motivación a la wookie, amén de los gritos de sus compañeros. No había tiempo que perder: debían arrancar la nave y abandonar Tatooine antes de que la órbita se llenase de cazas TIE.

—Grrrrrrrrrrnnnn Brrrrf Brrr! Ghrrrrrtnnnnnnn!*

Cuando Galek activó los conductores de energía del Colmillo, luces rojas y alarmas comenzaron a sonar por doquier en todo el panel de navegación, al punto de que el rodiano pensó que se encontraba ante una de las máquinas de apuestas de un casino espacial. Por fortuna, a través del comunicador Raine le informó que se trataba de las trampas y pequeños desajustes que la mecánica había causado y que podían ser reparados sobre la marcha con la ayuda de R3-J3.

El rodiano esperó hasta que Faynn y Jax soltaran los amarres físicos que retenían a la nave y se dirigieran a la rampa de acceso, para comenzar la maniobra de despegue, sin embargo, ya fuera por la falta de práctica desde la última vez o por el exceso de adrenalina acumulado la nave dio una brusca sacudida pero no acabó de despegar.

Para suerte o desgracia de Galek ya una ansiosa Asha se había abierto paso hasta la cabina de mando reclamando el puesto de capitán del Colmillo.

- Galek, tío, ¿no te llegó con la experiencia del aerodeslizador?, deberías dejar esto para los profesionales.

El rodiano se levantó del asiento con un suspiró, bien sabía que no había caso de razonar con la impetuosa muchacha.

- Hummies, phwk k̄heā s̄r̂āng t̀xmn̂ảnm læa khid ẁā phwk k̄heā rū̂ thuk xỳāng..., murmuró mientras sopesaba si sería más útil en la cabina de mando o ayudando a Raine a instalar el módulo de aceleración. Finalmente se decidió por esta última opción abandonando la cabina.

- Xokhe, xær̒ xes, phyāyām xỳā h̄ı̂ mạn chn.

Tras quitar las trampas, Raine golpeó varias veces el conducto - Esto ya está - Para avisarlos de que ya había hecho su trabajo para que pudieran despegar... Lo que no se esperó es que notaría a malas el intento fallido de despegue de Galek - ¡AY! - Respondió en un quejido al golpearse por la vibración misma de la nave - ¿Pero se puede saber que Jawa os ha enseñado a pilotar? - Dijo mientras salía definitivamente de los conductos mirando a malas al grupo en general. - Asha necesitará un copiloto...

Al final la chica cogió aire y lo soltó tranquila - Galek, Asha, poneos a los mandos de la nave y sacadnos de aquí. Respirad antes de tomar una decisión a lo loco y pasad energías a los escudos si es que esta cosa tiene escudos. Así no tendreis que ir con prisas para despegar. Y si tratan de entrar tenemos a Jax y a Fay para cubrirnos. R5 y yo trataremos de poner la pieza. Recordad... Relajaros. Estamos al final del camino, e ir con prisas solo puede ser malo. - Se acercó para tomar la pieza y puso una mano primero en el hombro de Asha y luego en el del rodiano - Confiamos en vosotros, y sabemos que saldrá bien, así que calmad esos nervios.

Finalmente y esperando que esas palabras de aliento sirvieran de algo, la mecanica se acercó a R5 y le dio una caricia a modo de patpat - Vamos R5. Nuestra tarea es la menos importante, pero servirá para alejarnos aún más. - Dicho eso fue buscando con el astromecanico la sala de maquinas y junto a su ayuda e intercambiando opiniones sobre como actuar, fueron buscando colocar la pieza con calma

Una vez quitado el cepo, se habían librado del último impedimento para que la nave pudiera despegar. Fayyn y Jax abordaron a la carrera por la rampa y accionaron el botón que la recogía al tiempo que indicaban a sus compañeros que todo estaba listo. La nave dio una brusca sacudida cuando se alzó del suelo, manejada por Galek. El rodiano no tenía su mejor día en cuanto a pilotaje se refería, después de casi estrellar el aerodeslizador y de aquel brusco despegue. Enseguida llegó Asha para echarlo de los mandos principales y relegarle a un segundo puesto, aunque Galek consideró en ayudar a Raine con la instalación de la pieza que tantos quebraderos de cabeza les había dado. 

La nave salió propulsada a través de las puertas del hangar en el techo del muelle de amarre, rumbo al soleado cielo de Tatooine. En apenas un parpadeo, Mos Shuuta quedó atrás, engullida por el Mar de Dunas en la distancia. Asha tiró de los mandos para elevar la nave hacia el espacio exterior. Pero entonces uno de los monitores empezó a parpadear y una alarma lo acompañaba de modo acompasado. Cuatro puntos rojos aparecieron en el radar dirigiéndose hacia ellos a mucha velocidad y en rumbo de intercepción. Una sacudida hizo temblar la nave y una de aquellas naves pasó frente a ellos. Eran cazas TIE, inconfundibles naves de forma esférica con alas hexagonales a los lados. Habían pasado de largo como una centella escupiendo fuego láser. Las chispas de una de las computadoras de la cabina empezaron a saltar por el sobrecalentamiento provocado por el disparo que acaban de recibir. 

Aún no habían logrado dejar atrás el campo gravitatorio del planeta y todavía no podrían pasar a la velocidad de la luz hasta que el módulo de arranque del reactor de hipermateria estuviera instalado. Iban a tener que cargarse a esos cazas. 

Cuando Asha despegó el Colmillo y los motores de ignición propulsaron a la nave hacia la densa estratosfera de Tattoine, se vivió un breve momento de euforia en la cabina del Colmillo, en el que Galek se vio irremediablemente atrapado entre los efusivos abrazos de Raine y Asha y los pitidos de alegría de R5. El único consuelo del rodiano fue que Jax se encontraba en la plataforma de carga con la wookie, con lo que al menos se había ahorrado tener que presenciar otro de sus sensuales bailes de la victoria.

El impacto de los láseres en la estructura de la nave los devolvió a todos a la realidad. Puede que hubieran dejado atrás Mos Shuuta pero, con los cazas imperiales a su cola, la prioridad era montar el módulo de aceleración y poner rumbo a cualquier planeta dónde el control imperial fuera lo más difuso posible. 

- Reā mī bris̄ʹạth, Asha, khuṇ khid ẁā khuṇ s̄āmārt̄h tām thạn nạk s̄ū̂ h̄el̀ā nận dị̂ h̄rụ̄x mị̀?, se dirigió a la joven contrabandista mientras se colocaba el intercomunicador y comenzaba a tocar botones en el panel de mando, -Xỳā la s̄āytā cāk s̄ìng nận!

- ¿Tu que crees, Galek?, ¿quién es la mejor piloto de Tattoine?, le respondió guiñándole un ojo la pelirroja.

El rodiano prefirió ignorar la pregunta retórica y activó el intercomunicador para dar instrucciones al resto de tripulantes, debían actuar como una tripulación coordinada si querían tener alguna opción de sobrevivir.

- Fey̒nn̒, Jaks, pị thī̀ p̂xm pụ̄n h̄ıỵ̀!

- Raine, pheìm phlạng h̄ı̂ kạb kerāa tĥāy reụ̄x!

- Pero que pillín… - Asha se dio cuenta en seguida de como Trex había trucado la nave para que pudiera ir más rápido de lo habitual en aquel modelo. Sin pensarlo dos veces aceleró la nave hasta su máximo natural-mejorado; una mayor velocidad siempre era una ventaja en combate.

A la par que iniciaba las maniobras evasivas para evitar que los 3 TIE que tenían detrás les volaran el culo por los aires.

- Voy hacer lo que pueda para ponérselo más difícil a ellos y lo más fácil a vosotros – dijo por los comunicadores a Jax y Fay – pero – un pequeño movimiento como de turbulencia les sorprendió a todos – Trex tiene trucada la máquina y aún tengo que aprender como tocarlo correctamente – como buena pilota para ella todas las naves eran másculinas – A ver si podéis reventar a ese de ahí delante y yo voy a intentar darle más velocidad a esto…

- Raine si puedes encargarte de mejorar los escudos de atrás creo que nos vendrá bien… - añadió antes de centrarse en seguir las indicaciones que Galek le estaba dando.

Asha llevó la palanca que controlaba la aceleración del Colmillo al máximo y enseguida notaron ese repunte en la velocidad de la nave. Galek advirtió a la piloto de que otros cazas estaban fijándoles en sus objetivos y la pelirroja manejó los mandos del Colmillo para evadir los disparos enemigos haciendo un tonel y cambiando bruscamente de dirección. Aquello provocaría que los TIE lo tuvieran más complicado para darles, pero también complicaría las cosas a Jax y Fayyn en las torretas, por eso Asha intentó enfilar al TIE que tenían de frente, aunque una turbulencia dio al traste con su propósito. 

Fayynchawlienga y Jax corrieron a encargarse de las torretas del carguero, la woockiee tenía menos pericia en aquellos asuntos y su disparo no fue nada preciso. Sin embargo, Jax logró impactar de lleno en uno de los cazas que los perseguían, no logró hacerlo saltar en mil pedazos pero lo dejó lo bastante dañado como para que estuviera a punto de hacerlo. 

Uno de los TIEs enemigos pasó barriendo la cubierta del Colmillo y causando serios daños en el casco de la nave. Los otros dos cazas atacaron desde atrás y además dañaron uno de los generadores de la nave, provocando que saltaran más chispas en el interior. Los dos cazas que quedaban ahora frente al Colmillo realizaron maniobras evasivas, conscientes de que pronto serían fijados por la nave, mientras que los que quedaban detrás se preparaban para un nuevo disparo.