Partida Rol por web

Decero observa la camilla y mira hacia sus compañeros pitando suave e interrogativamente.

- wuoh-wuoh pitipi?*

La voz femenina calma un poco los nervios cargados. El sabernos a amparados por la Rebelión, que hemos logrado nuestro objetivo, hace que puede relajarme más y quitar esa tensión que me invadía. Cuando logramos descender y aterrizamos en tierra firme una ola de alegría me invade, aunque intento contener esas emociones. Otrora me habría dejado embriagar por esa sensación, pero ahora sé que tengo que aprender a contr..

-¿Eiii, quien es esa pelirroja? – digo cuando desciendo del caza, con la mascarilla de respiración puesta.
Le devuelvo el saludo, mientras oigo como el droide médico dice que se llevan a Tiree a curar y salen de inmediato. Eso hace recordar que, aun que he podido sobrevivir, mi cuerpo está herido y necesito atención médica lo antes posible.

-A mí también me iría bien que me echaran un vistazo, aunque Tiree es prioritario. ¿Tendrán enfermeras como esa piloto?

Mientras espero el resto de mis compañeros, oigo el lamento de D0.

-Puedes quedarte con nosotros hasta que Tiree se recupere. Ahora, quieras o no, formas parte de nuestro grupo, con todo lo que hemos vivido.

Arvel suspiró, lo habían conseguido aquellas naves eran reveldes igual que ellos y habían logrado evitar al imperio. - Maldita sea, lo hemos logrado amigos.- Sin tiempo que perder Arvel lanzó su nave al punto de aterrizaje para que pudieran atender al piloto cuanto antes pues seguía inconsciente debido a sus heridas.

Cuando por fin les pusieron al corriente, se llevaron al herido y comenzaban a creerse que estaban a salvo Arvel sintió como si un gran peso se le hubiera quitado de sus hombros. Sólo podía pensar en ir al bar para poder despedirse en su corazón de su compañera y amiga. Pero debían hacer algo antes. - Jack ve si quieres a la enfermería, los que no tengamos heridas podemos ir ha dar el parte de la información. DeCero te necesitamos para dar toda la información cuanto antes al mando. - Dijo ante las preguntas de los compañeros. Nunca había estado en este planeta ni había tenido tratos con esta raza en concreto por lo que su curiosidad surgía a medida que lanzaba miradas intensas a las distintas caras. Tal vez podría hablar después con algunos pilotos de esta parte de la resistencia, sin duda podría aprender algo de ellos.

Shank aterriza el Ala Y suavemente y poco antes de abrir la cabina me pongo el respirador. Cuando bajamos del caza le digo
Gran pilotaje Shanks, muy hábil.
Al otro lado veo a los pilotos de los Ala X una humana alta y pelirroja y un sullustano a los que devuelvo el saludo particularmente mirando al sullustano.
Escucho los pitidos interrogatorios de D0
Tenéis razón - digo mirando a Arvel y Jack - nuestra misión es traerlo aquí para que descargue la información que lleva dentro y hasta que eso no ocurra, no la habremos terminado. Despues ya veremos.
Jack ves al médico a que te miren las heridas no es necesario que nos acompañes, eso sí, no te "pierdas" le digo con una sonrisa sarcástica.
Vamos, esto todavía no ha acabado.

Tras escuchar los argumentos lanzó unos pitidos de consentimiento y se dispuso a seguir a los amos donde vayan. Por el momento no me ha ido tan mal con ellos...

- Tururiru ruri ffufufiiiuu whoop dii duu... - exclama dubitativo Decero.

Asiento al consejo dado por mis compañeros.

-De acuerdo, acudiré al matasanos, luego nos reunimos todos y si os apetece os invitaré a esas rondas que prometí… aunque de hecho tendremos que ser los dos, Arkonat y yo, porque ambos salimos los últimos de la cueva, y casi no lo contamos, ¿eh, viejo amigo? – digo mientras zarandeo amicalmente un poco al ithoriano – Se te da bien esto de pilotar.

Dicho esto avanzo lo más rápido que puedo esperando llegar a tiempo de alcanzar al droide médico y el séquito que lleva a Tirée a la infermería, con la esperanza de que curen mis heridas. Mientras camino voy observando a mí alrededor. Toda esa gente, todas esas razas hermanadas por un bien común. Supongo que eso es una de las cosas que me quería inculcar mi bisabuelo, lástima que haya tardado tanto en aprenderlo…

Por fin parecía que ya no habría sorpresas y podríamos recuperar el aliento un poco. Una vez aterrice el Ala-Y, me coloque la mascarilla y procedí a bajar el ultimo de la nave. Cuando pose los pies en la luna vi como todos mis compañeros estaban juntos, se respiraba en el ambiente la alegría por estar vivos y haber llegado hasta aquí. Si habíamos llegado tan lejos no era por la habilidad de uno sino por la suma de todos. El genio de Arvel pilotando las naves, la pericia de Arkonat en todos los temas técnicos, la decisión y valentía de Dan-Vid cuando había que dar un paso al frente, incluso los chistes fuera de lugar de Jack en el momento menos oportuno. La verdad es que éramos un grupo de lo más variopinto, pero las dificultades y las penurias, como la muerte de Holly, había hecho que nos uniéramos más aun de lo que lo estábamos, en pocas palabras eran mi familia, a la cual siempre le seria leal.

Me dirigí hacia ellos con paso firme y esbozando una sonrisa de alegría al ver que todos estaban más o menos intactos.

-Terminemos con esto e informemos de lo que haya de informar, y luego tomémonos esas cervezas que dice Jack, que nos las hemos ganado- mientas doy una palmada a mis compañeros como muestra de afecto.

[ GRUPO PRINCIPAL HACIA LA SALA DE MANDO ]

Dentro del edificio ya no se necesitan los respiradores y un droide de servicio se encarga de recogerlos, limpiarlos y guardarlos cerca de la entrada para su siguiente utilización. El grupo es dirigido a través de pasillos y áreas de trabajo hasta una especie de sala de mando cruzándose con gente de muchas razas diferentes atareadas pero amables, educadas y sonrientes.  El ruinoso estado del edificio contrasta con los equipos electrónicos instalados en la enorme sala rectangular que aunque sin ser de última generación (ni de penúltima según Arkonat) parecen bastante modernos y operativos. Una veintena de individuos entre humanos, alienígenas y androides entran, salen y trabajan en esta concurrida estancia. La escolta acompañan al grupo hacia el centro donde hay una gran pantalla holográfica junto a una mesa redonda también holográfica alrededor de la cual hay individuos con mucha presencia acostumbrados a dar órdenes y que éstas sean ejecutadas inmediatamente. En un lugar destacado junto a la pantalla holográfica se encuentra la mismísima jefa del Gobierno Civil rebelde Mon Mothma, una de las cabecillas rebeldes más conocidas y perseguidas por el Imperio quien está siguiendo al grupo recién llegado con una inteligente mirada de quien no se le escapa ningún detalle mientras acaba de impartir unas órdenes. En cuanto el grupo llega hasta la mesa holográfica uno de los escoltas se acerca a un humano que está de espaldas quien se gira al notar la presencia.

- Comandante Sato ya estan aquí los reclutas de Tirée. - y asintiendo con la cabeza de forma marcial retrocede hasta la altura de su otro compañero. El impertérrito humano de pelo castaño y mechas laterales canosas tiene un gesto serio y adusto de alguien a quien no le gusta (o no sabe o ambas cosas) bromear. Mira hacia el grupo como buscando a alguien en particular.

Antes que nadie pueda intervenir Mon Mothma que no ha quitado ojo de ninguno de los recién llegados se dirige a ellos y les saluda uno a uno amablemente y mirándoles fijamente como si pudiera leer los pensamientos de cada uno se presenta:

 - Bienvenidos a la base de operaciones rebelde de Daalang. Me llamo Mon Mothma y soy... - se para brevemente - ... senadora de la Antigua República. A mi derecha les presento al comandante Jun Sato quien está al cargo de esta base y de quien son, por el momento, sus huéspedes. Nos han informado que habéis llegado directamente desde Bothawui. Nuestras últimas informaciones son que el Imperio ha tomado el control del sistema Botham. Si Tirée os ha facilitado nuestras coordenadas es que no son amigos del Imperio Galáctico y si han logrado escapar con vida de sus garras es que son buenos combatientes. Tenemos que agradecer que hayáis podido rescatar con vida a mi amigo Tirée a quien ya están atendiendo nuestros servicios médicos pero antes de dejarles tomar su merecidísimo descanso, Tirée debía entregarnos una información que puede ser de vital importancia para la Rebelión. ¿Saben ustedes a qué me refiero?

[ JACK Y TIRÉE HACIA LA ENFERMERÍA ]

El droide médico y sus ayudantes llevan a Tirée dentro del edificio principal donde se puede respirar sin mascarilla atravesando pasillos y diversos departamentos. La división médica se encuentra en una amplia e iluminada sala con diferentes compartimentos en los que hay una cama. Hay diversos utensilios y maquinaria médica por todos lados. Varios compartimentos estan ocupados por algunos enfermos multirraciales. A Tirée lo llevan hasta la zona de los tanques de bacta donde otro droide médico aparentemente mucho más moderno lo estaba esperando.

Una enfermera humana con unos enormes ojos negros bloquea el paso a Jack impidiendole continuar caminando. Le dice con amabilidad pero con firmeza: - Cariño, aquí sólo se permite el acceso a enfermos y personal sanitario. Y tu no tienes pinta de médico.

Voy avanzando para llegar a la enfermería cuando una humana se planta delante de mí, imposibilitando que entre.

-Umm, médico no seré, pero si te digo que me han herido en acto de servicio. Gracias a mí un grupo de rebeldes han logrado huir del cerco del ejército Imperial. Ahora están sanos y salvos en esta base, y yo necesito un poco de atención médica. Les he dicho que no, que no lo necesito, que puedo soportar el dolor, pero han insistido… Por cierto, lo que duele es esa mirada clavada en mi corazón. ¿Te puedo invitar a la cantina una vez terminen de curarme las heridas?

Seguimos a nuestro guía a través de la base, las instalaciones eran precarias pero totalmente funcionales. Una vez en nuestro destino nos presentaron a un grupo que parecían ser dirigentes y personas importantes dentro de la rebelión, aunque realmente no sabía quiénes eran ni me sonaban, nunca había estado interesado en la política galáctica ni sabía nada relativo al senado.

Mientras nuestra interlocutora hablaba asentía con la cabeza a las afirmaciones que iba realizando.

-Yo soy Shanks- digo a modo de presentación – No se sí, Bothawui está bajo control imperial, pero en nuestra huida hemos topado con soldados de asalto, miembros de inteligencia imperial, algún AT-AT y algunos cazas, lo que puede indicar que si no está bajo control de ellos pronto lo estará-

-Respecto a la información que Tiree les debía hacer llegar, supongo que se encuentra en este droide- mientras señalo a R2-D0 –Respecto a cómo extraerla ya es algo que está en vuestras manos-

Arvel siguió al grupo hasta el centro de mando del grupo rebelde donde ya los estaban esperando. Con una inclinación de cabeza Arvel saludó a sus interlocutores cuando estos se presentaron no pudiendo más que poner una cara de sorpresa, estaba ante una ex senadora de la antigua república.- Piloto de combate Arvel Cryndyd, es un honor senadora, comandante. - Uno era su máximo superior en la batalla y la senadora tenía un título que Arvel y muchos combatientes habían llegado a adorar como a cosas mitológicas. Encontrarse con aquel recibimiento indicaba que la información que habían llevado era de suma importancia para la guerra y que tenían altas esperanzas que en la información estuviera completa. Lo normal hubiera sido que un encargado de la inteligencia los hubieran recibido para recoger la información y sus respectivos informes de batalla.

Por su parte Arvel también lo deseaba, esperaba que aquellos superiores los vieran con buenos ojos y pudieran ponerlos en posiciones más importantes durante los combates. Aquellos bastardos del imperio habían matado lo más importante que tenía actualmente y por tanto su vida valía poco mientras pudiera masacrar bastardos imperiales. Pasados unos momentos mientras Shanks daba las indicaciones Arvel resistía el impulso de salir a la taberna a ahogar las penas y olvidarse por unas horas de lo que había sucedido.

Después de escuchar a todos, serio y con tono grave me adelanto un poco y mirándola a los ojos digo
Me llamo Dan-Vid y como a dicho Shanks la información de la que habla está en la unidad R2.
Nos habíamos citado con Tiree en Mesa 291 una antigua mina con la idea de coger una lanzadera y unirnos a la Alianza Rebelde.
Cuando llegamos lo único que vimos fue este droide astromecánico con un mensaje holográfico de Tiree en la que básicamente decía que no podría unirse a nosotros pero que en esta unidad había información importante para la rebelión y la ubicación de esta base por lo que la primera prioridad era traerlo aquí y de no poder ser, que no cayese en manos del imperio.
Perseguidos por sus tropas atravesamos la mina a punto de entrar en erupción consiguiendo llegar a un hangar donde encontramos a Tiree en muy mal estado y tres Ala Y.
La pericia de los pilotos Arvel y Shanks enfrentándose a 2 AT-AT nada más salir del hangar permitió paso franco al caza de Arkonat y a Jack que había recibido graves daños. Las habilidades de todos mis compañeros han hecho posible que ahora estemos hablando.
Confío en que los datos valgan verdaderamente la pena pues hemos pagado un precio muy alto, Jack está herido y ahora debe estar en la enfermería y Holly Numb, nuestra líder, murió por esta misión.
Espero que halla merecido la pena.
Cuando termino doy un paso atrás.

[ GRUPO PRINCIPAL EN LA SALA DE MANDO ]

-Sí, creo que tienes razón. Debería volver con mis compañeros, no saben qué hacer sin mí y lo más seguro es que nos manden a salvar a la Galaxia otra vez o algo así y sin mi están perdidos, pobrecitos ¿Sabes cómo me encontraré mejor? Si mañana puedo volver a ver esos ojitos... Ahora te dejo, que debéis tener trabajo curando y esas cosas que hacéis.

Y apretando sus manos todo el trayecto hasta la puerta, salgo por ésta, no sin antes girarme para mirarla por última vez.

-Seguiremos hablando, muñeca, tengo tu contacto en mi toplap... – le digo guiñándole el ojo y sonriéndole. – Que la Fuerza esté contigo y eso.

Y echo a andar por el pasillo, preguntándome donde estarían mis compañeros, por lo que paro al primero que pasa por allí para averiguarlo.

-¿Perdón, sabe dónde están los héroes esos que llegaron hace un rato? Son un grupito algo variopinto, pero buena gente. Hay uno muy bajito, un ithoriano y dos más que aunque parezcan malos, son de los buenos.

Arvel que estaba firme en línea junto al resto de compañeros escucha con atención las palabras de la ex senadora. Aquella voz imponente y fuerte hacía que dieran ganas de darla la razón en todo lo que dijera. Sin duda había sido una gran líder durante la República y las adversidades la habían hecho más fuerte. Cuando recuerdan la situación de Holly, Arvel pone una mueca de dolor que al parecer la senadora ha detectado de forma fácil encogiéndose un poco cuando esta le toca el hombro y le estrecha la mano con las dos suyas. - Gra...Gracias - Consigue musitar ante las palabras de ella.

Al poco la maquinaria se pone en movimiento, la senadora vuelve al puesto de mando, a DeCero se lo llevan a extraer sus datos y a nosotros nos llevan a unos barracones. Aún estaba rojo de vergüenza de cuando la senadora indicó que parecían que habían atravesado la galaxia y era verdad estaban muy guarros todos. Se les habían derrumbado techos, disparado, quemado con lava y se habían arrastrado por suelos de una mina. Nada los vendría mejor que una ducha y un descanso. Así que sin poner objeciones siguen a los dos escoltas. - Es una lástima que no nos dejen ver qué hay dentro del droide, tengo curiosidad por saber si ha valido la pena todo lo que hemos pasado y si sirve para destrozar al imperio. - Añade con una sonrisa ante la idea de destrozarlos a todos ellos.

Aprecio las palabras de la senadora en la que parece hacerse cargo de las dificultades pasadas y el alto preció pagado por estar allí y en particularmente por Arvel.
La referencia de mi breve explicación de lo sucedido y que si este fuese un informe militar sería del agrado del comandante Sato, me hace sonreir. En un principio no era mi intención hacer un informe militar sino hacer un breve relato de lo sucedido pero ¿no es sino eso un informe militar? Parece que así es como los quiere el comandante Sato. Yo no se hacerlos de otra manera.
Seguimos a la escolta hasta nuestras habitaciones donde podremos descansar.
-Si queréis voy a buscar a Jack para decirle donde estamos.Después necesito asearme un poco y descansar un par o tres de horas. Más tarde ya saldaremos la deuda de Arkonat y Jack por salir los últimos últimos de la mina- digo con una leve sonrisa.
-¿De acuerdo?-

Espero un momento por si hay alguna otra propuesta y si no, entro en mi habitación, dejo todo mi equipo menos la pistola blaster (no voy a ir desnudo) y me dirijo en busca del botiquín preguntando al primero que me encuentre.

Bueno el objetivo estaba cumplido y el droide estaba entregado en el sitio adecuado, además parece que Tiree saldría de esta. Tras un breve recorrido llegamos a los aposentos que nos han habilitado para nuestra estancia.

Asiento a las palabras de Dan-Vid –Yo también necesito una ducha y recuperarme un poco, si os parece bien nos reuniremos todos en tres horas, ¿Qué decís?-

Girándome a los hombres que nos escoltan –Yo necesitaría algo de vestimenta, las ropas que tengo estar raídas y demasiado dañadas de nuestra estancia en la mina-

Entro en la habitación y dejo todo mi equipo, quitándome las harapientas ropas y dirigiéndome a la ducha. Mientras el agua chorreaba por mi cuerpo empecé a darle vueltas a cuál sería el próximo paso que debería de dar. Nunca había creído en la lucha entre el bien y el mal, más que nada porque no me interesaba, siempre había vivido al margen de la ley. Mi lucha contra el imperio era más una cuestión de venganza, primero por la aniquilación de la tripulación de la nave en la que serbia y ahora por la muerte de Holly, simplemente iba a hacer el máximo daño que pudiera al imperio.

Una vez termine en la ducha me dirigí al camastro y me tendí tal cual, a la espera de la cita con mis compañeros y a que me trajeran algo de ropa.

Mientras casi me pierdo por los pasillos de la estación, me encuentro a Dan-vid, que había salido a mi encuentro.

-¡Ei! Qué bien que te encuentro, ya creía que estaba empezando a dar vueltas en círculo. ¿Qué tal ha ido? ¿Ya han sacado la información de Decero?

El pequeño pero enorme cazarecompensas me informa un poco de lo acontecido a la vez que llegamos junto al resto del grupo a la habitación que nos han asignado para refrescarnos y descansar.

-No os preocupéis por Tirée, está en las mejores manos posibles. Ya me gustaría a mí poder estar en esos momentos en la enfermería... – digo mientras rememoro la visión de la enfermera - Tiene para algunas semanas, y aunque sus heridas son de consideración, se recuperará, ahora mismo anda metido en un tanque bacta que le cura las heridas. Y ahora si me lo permitís, voy a cambiarme de ropa y tumbarme un poco, me siento como si me hubiera arrollado un destructor estelar.

Estoy en un profundo sueño cuando un droide nos viene a buscar. Andamos nuevamente por los pasillos hasta que llegamos a una sala con gente que parece realmente importante. Me quedo especialmente abrumado cuando Mon Mothma me saluda. ¡Mon Mothma me ha saludado!

-Ehhh- susurro al compañero que tengo más cerca -¿Quién es Mon Mothma?

Por lo que dicen, realmente hemos hecho algo importante al traer esa magullada unidad R2, la información que contenía parece ser que ayudará a la Rebelión en su lucha por recobrar la paz y la justicia.

Cuando termina su discurso, medito sobre su ofrecimiento a seguir en las filas de la Rebelión, ya sea asignándonos a alguna unidad o... ¡formar nuestra propia unidad de élite!

Miro a mis compañeros, intentando escudriñar en sus rostros cual puede ser la respuesta.

-La verdad, chicos – me animo a hablar primero – es que realmente lo hemos hecho bien en esta misión. Apenas nos conocíamos pero nos hemos unido para seguir adelante y lograr salvar a Tirée y a Decero, sacando lo mejor de cada uno. Creo que hacemos un buen equipo. ¿Qué pensáis? A mí me encantaría que pudiésemos seguir juntos, y en ese sentido es mi voto.

Y permanezco en silencio, esperando las opiniones de mis amigos.

Tras la ducha y el breve descanso en la cama Arvel pudo recomponerse. Físicamente estaba cansado pero mentalmente había sido demasiada aquella experiencia. Por suerte el mando de la rebelión parecía dispuestos a darles unas horas mientras trabajaban en los datos de la unidad droide.

Al rato se escucha a Jack volver con Dan hacia las habitaciones, parecía estar completamente bien y Arvel frunció el entrecejo al ver que lo importante para Jack era que hubiera enfermeras con buenas curvas en la enfermería. Aún así ya comenzaban a conocer a aquel jedi así que no era muy sorprendente. Se quedó tumbado en la cama con los ojos cerrados aunque no pudo llegar a dormirse, el rostro de su amiga volvía una y otra vez. Aún recordaba cuando se presentó para ser transportada hacia un planeta donde realizaron los entrenamientos. Aún pensando en ella fueron llamados de nuevo ante la plana mayor de la rebelión. 

El piloto se sentía lleno de orgullo por él y sus compañeros, habían realizado un buen trabajo y la información podría fastidiar los planes del imperio. Al poco les ofrecieron pertenecer de pleno derecho a la rebelión y luchar contra el imperio. El Jedi estaba a favor de luchar, lo cual ya era algo extraño que no quisiera escaquearse. Arvel no lo pensó mucho, quería venganza y su ira era irreconciliable con el imperio. - Yo estoy dentro, sólo quiero destrozar al imperio y dejarlo sin un solo soldado de asalto. Pero nada de cuevas, eh! que las naves se me dan mejor. - Dijo con una sonrisa forzada intentando sonar alegre.