Partida Rol por web

Marcus tensa el arco mientras unas molestas gotitas de sudor le empiezan a caer por la frente, es la tensión del momento.

Shade mueve un poco las manos y pronuncia unas palabras en voz baja, al instante se forma ante uds la ilusión que el pequeño gnomo busca. Manteniendo el hechizo y cuidando de no hacer ruido se adentran más en la cueva con la esperanza de poder esclarecer un poco más el asunto. 

Luego de unos cuantos metros, cien o ciento cincuenta, Kosj divisa en el límite de su visión a los sujetos aproximándose, de nuevo son tres criaturas humanoides. Dos cuya figura se puede asemejar a humanos y otros más pequeño, quizá un enano o algo de la misma estatura, uno de los más altos porta lo que parece un arma de grandes dimensiones.

- Ssss- digo con un siseo apenas perceptible...- Chicoss están ahí, cuidado...- digo acercandome a una oquedad de la cueva, esperando que los enemigos se crean la ilusión que acaba de crear Shade.

Despues de avanzar algunos metros cobijados tras el artilugio de ilusión, escucho las advertencias de Kosj, en la oscuridad sólo puedo ver a Zenda y Marcus a mi lado... - Definitivamente necesitamos algo de luz - pienso para mis adentros a la vez que señalo un punto en el espacio y muevo el dedo indice en circulos, de la nada comienzan a generarse cuatro esferas de luz suspendidas en el aire, proporcionando la misma luz que generaría una antorcha, las luces comienzan a moverse y parpadear lentamente mientras el grupo y yo permanecemos ocultos tras la ilusión.

El corredor de la cueva se ilumina casi al instante, la luz repentina enceguece a todos por un instante y puede escuchar la voz de uno de los sujetos. Luego pueden escuchar una rápida charla entre ellos y comienzan a avanzar en su dirección a toda velocidad desenfundando y avanzando listos para atacar.

Lo primero que escuchas es lo siguiente (todo en undercommon):

-¡¡La puta madre!!

Seguido, a ellos, los sujetos se miran y salen corriendo al grito de:

-¿¡Quién carajo está ahí?!

Cuando Shade empieza a gesticular de nuevo, preparando el conjuro de luces danzantes, Zenda engancha el pergamino de luz entre el cinturón y la ropa, y saca de entre los pliegues de la túnica otro de los conjuros escritos comprados esa mañana, que contiene el hechizo de sueño, y lo suejta en la mano izquierda.

Cuatro orbes brillantes se materializan en el aire, iluminando repentinamente la cueva. La mujer parpadea rápidamente, tratando de acostumbrar la visión a la iluminación. Por primera vez, puede ver acercarse las siluetas de los tres individuos de los que les había advertido Kosj. Los tres corren en dirección al grupo, pero es imposible determinar si los han visto, o simplemente buscan una posición más favorable para afrontar el peligro que, con seguridad, están esperando.

Zenda contiene la respiración, sus dedos se cierran como garras sobre ballesta y el pergamino, y sus ojos se entrecierran inconscientemente, tratando de distinguir con mayor claridad a los tipos que se aproximan.

Los dos sujetos de estatura media son humanoides estilizados, con rasgos élficos pero con tonalidad oscura. Ambos parecen masculinos con pelos largos y blancos. Portan armaduras de color negro lo que te dificulta deducir que tipo de armadura llevan.

El sujeto más petacón  parece un enano, pero al igual que el anterior con una tonalidad oscura y la cabeza totalmente rapada, sólo lleva una larga barba blanca.

Como bien dijo Kosj uno de los sujetos lleva un arma grande, una inconfundible Greatsword, el otro parece llevar una ballesta y el enano algún tipo de arma contundente.

No tenés idea de qué clase de raza es a la que pertenece el enano, pero se te pone la piel de gallina al relacionar a los dos tipos altos como posibles Drows, no sabes mucho de ellos, sólo chismes y leyendas escuchadas en bares y tabernas sobre su crueldad y afan por manipular y torturar seres inteligentes. También escuchaste que viven en los lugares más horribles del planeta.

Que quede claro: dejé la escena con los tipos a mitad de camino, puesto que se han lanzado en su dirección, pueden actuar ahora teniendo un round sorpresa (presuponiendo que la ilusión ha funcionado).

Por fin, Zenda se decide y despliega rápidamente el pergamino. Con un ojo en los individuos que se aproximan y otro en el papel, lee en voz baja las palabras del conjuro. La energía contenida consume el papel con una llamarada fría, y el encantamiento es liberado hacia el grupo que se acerca rápidamente.

- Debemos actuar, la ilusión finalizará en unos segundos - Dije en apenas un susurro, mientras avanzaba unos pasos con cautela y buscaba escabullirme entre alguna ranura de la pared cavernosa a la vez que sacaba un pergamino y lo sostenía firmemente, esperando el momento indicado para usarlo.

Los dos sujetos de estatura media son humanoides estilizados, con rasgos élficos pero con tonalidad oscura. Ambos parecen masculinos con pelos largos y blancos. Portan armaduras de color negro lo que te dificulta deducir que tipo de armadura llevan.

El sujeto más petacón  parece un enano, pero al igual que el anterior con una tonalidad oscura y la cabeza totalmente rapada, sólo lleva una larga barba blanca.

Uno de los sujetos lleva un arma grande, una inconfundible Greatsword, el otro parece llevar una ballesta y el enano algún tipo de arma contundente.

No tenés idea de qué clase de raza es a la que pertenece el enano, pero se te pone la piel de gallina al relacionar a los dos tipos altos como posibles Drows, no sabes mucho de ellos, sólo chismes y leyendas escuchadas de las bocas de algunos kóbolds más ancianos sobre su crueldad y afan por manipular y torturar seres inteligentes. 

Al verlos algo mejor se me erizan las escamas de toda la columna y la parte de la espalda "no me gusta nada, nonono, ya lo decía mi tío abu-" como un resorte lanzo el cuchillo que tenía en mi mano derecha cortando mis propios pensamientos por la proximidad de las criaturas. 

Alcanzo al esbelto ser que porta la ballesta, mientras pongo una pequeña mueca de desaprobación, puesto que no tengo muy claro el daño inflingido.

- Drowsss!!- digo apenas en un susurro serpentino.

Tras esto cambio rápidamente la daga de la mano izquierda a mi mano derecha de nuevo y me pego contra la pared de la caverna esperando que Shade haya echo bien su trabajo con ese muro mágico. 

Ante la advertencia de Shade sobre la ilusión deciden actuar. Los dos sujetos de estatura media son humanoides estilizados, con rasgos élficos pero con tonalidad oscura. Ambos parecen masculinos con pelos largos y blancos. Portan armaduras de color negro lo que se dificulta deducir que tipo de armadura llevan.

El sujeto más petacón  parece un enano, pero al igual que el anterior con una tonalidad oscura y la cabeza totalmente rapada, sólo lleva una larga barba blanca.

Uno de los sujetos lleva un arma grande, una inconfundible Greatsword, el otro parece llevar una ballesta y el enano algún tipo de arma contundente.

El supuesto enano y quien lleva el arma gigante son los que encabezan la corrida seguidos del que porta su ballesta. Al llegar a unos 30 pies aproximadamente de dónde se encuentran uds deciden actuar.

La primera en actuar es Zenda quien saca su pergamino y lo lee inmediatamente haciendo que este se disuelva en sus manos liberando la magia contenida en él. Un aura apenas luminosa destella alrededor de los enemigos, pero sólo el que parece un enano cae dormido al suelo. Instantáneamente después sienten un cuchillo pasar a toda velocidad entre uds y ven como se clava en el portador de la ballesta. Kosj ha lanzado un golpe certero.

MAPA

Comienza el combate con el turno de Kosj

Despues de agazaparme como un relámpago la espera se me está haciendo eterna, todo parece ir muy lento, finalmente la desesperación me gana y actuo antes de que ocurra cualquier cosa, la daga que está en mi mano sale la daga despedida en dirección al ballestero que acababa de alcanzar, pero su oscura armadura me juega una mala pasada y se oye un sonoro ruido contra la pared de la caverna. 

- Agg!! SSssss!!- siseo como gorgojeante con los pabellones auditivos totalmente elevados, como un perro enfadado.

Paso entre mis compañeros mientras saco otra daga de uno de los bolsillos y me coloco delante de Marcus con gesto desafiante. 

Tan pronto aparecen las luces Marcus coloca una flecha, suelta la cuerda y - ¡oh mierda! - la flecha se le ha caido al suelo mientras la cuerda del arco aún reberbera. Vaya ridículo.

- Bueno, esto, Zenda tu puedes - dice dandole una palmadita en el hombro mientras murmura unas palabras arcanas [protección contra el mal] y se retira unos pasos atrás. - Cuentas con la protección de Erastil.

Luego de fallar su ataque, Marcus decide dar ayuda a Zenda, acto seguido viene el ataque del enemigo.

El tipo con la "Hand Crossbow" se posa sobre una de sus rodillas y apunta su arma contra Marcus, pero falla el ataque y el proyectil impacta en la pared de la cueva.

Sigue ZENDA