Partida Rol por web

Vraek permanecía recostado en la silla, con os pies sobre la mesa y masticando lentamente una manzana. Atento a las curvas de Xhanty y a su reciente conversación con el gnomo, la cual provocó una sonrisa imperceptible.

"Se muere por otra noche conmigo. Lo sé..."

Otra voz, esta vez femenina, inundó su mente.

"Y tú también te mueres por ella, Vraek. Eres tan débil como lo fue padre..."

Él drow sacudió la cabeza, alejando aquellos pensamientos, cuando vio aparecer a Dalamar y a su querida Akiro.

- ¡Por fin! -susurra sin moverse del sitio...

-Un desayuno fuerte, a saber hasta cuando no probaremos bocado... - dijo Akiro mientras miraba a todos los componentes del grupo que esperaban en la taberna, deteniéndose algo más en Xhanty, aunque pronto apartó la vista para que nadie se percatase.

-A partir de ahora comprobaremos si realmente hicimos bien encomendándoles este trabajo- dijo en un tono no muy elevado para que solo le escuchase Dalamar- parecen valientes...

Kenth se voltea a ver a Dalamar y Akiro...

Buenos días, señor Dalamar... Un verdadero placer verla, señorita Akiro... Ya me aburría de esperarlos, ¿Cuál sería el siguiente paso en nuestro viaje?

Mira fijamente a Akiro mientras habla, pero de vez en cuando mira a Dalamar, esperando una respuesta...

Dalamar asintió a la petición de Akiro y se dirigió hacia la barra para pedir los desayunos.

Si no es de mucha importancia- dijo dirigiéndose a Kenth- El primer paso es que tanto Akiro como yo desayunemos. Porque espero que vos lo habéis hecho ya... ¿Verdad?

Por la mañana, antes de desayunar, solía estar de mal humor... Tampoco sabría explicar ni él mismo el por qué de esa sensación; pero era así.

Sus pasos iban dirigidos hacia la barra y en ningún momento se paró para hablar con ninguno de los presentes. Pero sí miraba a cada uno de ellos.

Tabernero-dijo por fin una vez se encontraba cerca de este- ponga dos desayunos lo mejor servidos que sepa.

Poniendo fin a esta conversación se escuchó el leve tintineo de unas monedas al chocar con la madera que formaba la barra.

Luego se dirigió hacia Akiro, y una vez estaba a su lado le ofreció sentarse en una de las mesas más cercanas.

- Sentémonos-le dijo en voz baja- Pronto nos traerán el desayuno. Y respecto a lo de antes- dijo en el mismo tono y haciendo referencia la última frase que dijo: parecen valientes- preferiría no tener que calificar a ninguno de ellos... Aún valientes, creo que no servirían de nada si mueren de camino-dicho esto, sus ojos buscaron a Vraek, y en ese momento recordó que no hace mucho tuvo que curar algunas de las heridas que le propinaron en la última reyerta.

Dalamar caminaba hacia la barra, sin embargo Akiro espero aún un momento junto a kenth, y de un modo frío y distante le dijo -No se lo tengas en cuenta, por las mañanas suele estar de mal humor-, y sin esperar respuesta alguna se dirigió a Dalamar. Sus pasos eran firmes y contundentes, y su mirada estaba fija en el tabernero.

Al llegar a la barra, siguió el consejo de Dalamar y se sentó a esperar el desayuno que tanto deseaba.

Mientras jugaba distraídamente con su pelo continuaba la conversación con Dalamar diciendo -Esperemos que no muera nadie en el camino y que todo acabe lo mejor posible... ¿porqué tarda tanto ese desayuno?-

El drow aún seguía en la misma postura. Recostado en la silla con los pies cruzados sobre la mesa. Desde el fondo de su capucha, sus ojos se encontraron con los de Dalamar.

El elfo oscuro sostuvo su mirada mientras continuaba mordisqueando la manzana. Un leve asentimiento de cabeza, a modo de saludo, fue la única reacción de Vraek.

"¿¡Qué rollo se traen estos dos!? ¿Serán realmente hermanos? Es demasiado protector con ella... ¡Bah! Me da igual mientras sigan pagando..."

Kenth se molesta con la respuesta de Dalamar, pero al oir la voz de Akiro se calma... Luego se sienta en la barra y termina de comer su desayuno... Cuando termina de comer se pone de pie sobre la banca

Tabernero, por esas cosas de la vida, ¿No conoce algún lugar donde pueda buscar objetos... "especiales"?

Le pregunta esto discretamente, esperando que sus compañeros no le tomen mucha atención a su pregunta...

Un gnomo sobre un banco siempre llama la atención. Al menos para el más observador. Vraek captó la pregunta de Kenth y decidió olvidar por el momento a Akiro y a Dalamar.

"Objetos especiales... Jejeje... Muy bien, gnomo, muy bien..."

Tanto sus oídos como sus ojos, prestaban atención a la conversación de Kenth con el tabernero. Aunque, dada la proximidad, el drow no podía evitar que su mirada se desviara para posarse sobre la figura de Xhanty.

"Parece abatida. ¡Enhorabuena, drow! Por fin obtienes un pedazo de eso que llaman felicidad y lo pisas, esparciéndolo por el suelo. Será mejor que hable con ella..."

Vraek termina su manzana, dejándola sobre la mesa y se dirige a la barra. Se sitúa entre la mujer y el gnomo, pero se vuelve hacia ella y con voz muy suave, susurra:

- Oye, ¿qué te ocurre? Ayer... Hace unas horas...

"Vamos, Vraek, díselo..."

- Olvídalo...

"¡Gallina!"

El elfo oscuro se vuelve de nuevo hacia la barra, jugando con una pequeña moneda entre sus dedos...

En ahora-empezó a decirle mientras le dedicaba una leve sonrisa- lo único que me importa es que no te ocurra nada a ti.

Esto último venía como respuesta a lo que antes había dicho... Miraba en ese momento como jugaba con su hermoso pelo. Luego agarró con suavidad la mano que la joven apoyaba sobre la mesa y continuó hablando.

Oye Akiro-dijo un poco preocupado- esta mañana, al despertar, te he notado extraña, evadida...-hizo una pausa para mirar con cariño a la joven- ¿Estás bien?

En ese momento el tabernero se acercaba con el desayuno... Dalamar no hizo intención de separar su mano de la de Akiro hasta esperar respuesta, aún provocando que el tipo que traía la comida tuviera que apañárselas para dejar los platos en lo que sobraba de la mesa. Aún con el ruido del movimiento causado por el tabernero, y con los susurros que llegaban como simple eco de unas palabras que antes eran claras, Dalamar siguió esperando la respuesta de la joven.

Xhanty se volvió hacia Vraek, de nuevo notaba su pulso acelerado.

¿Qué te ocurre? sonaron las palabras de Vraek en su mente Ojalá lo supiese... Miedo. Se sentía tan mal...

Pero la chica, en vez de decir nada de esto, se acercó a él y le dijo en un leve susurro:

-¿Qúe es lo que te pasa a tí drow? Hace unos días no me habrías dicho nada de esto. ¿Qué te dije sobre jugar con fuego...? Parece que ya te quemaste.

Vraek se vuelve hacia ella. Un destello de ira brilla en sus ojos.

- ¡Estúpida humana! Puedo olerlo. Apestas a miedo... -se acerca un poco más y susurra- ¿A qué temes, Ojitos Verdes? ¿Acaso a haberte quemado tú?

Xhanty se volvió hacia Vraek, nada en su mirada dejaba translucir el más mínimo atisbo de duda. Sus palabras sonaron con decisión en cada síliba, clavando en sus ojos su mirada:

-Jajaja, hace falta mucho más- le dijo repasándole con la mirada- para que si quiera empiece a notar el calor. Y ahora, tengo que tratar temas más importantes- dijo mientras apartaba la mirada de él y la dirigía hacia Dalamar- negocios, ya sabes, lo primero es lo primero- se encaminó con decisión hacia el lugar en el que estaban el caballero y Akiro desayunando.

El drow sonríe maliciosamente mientras la observa alejarse hacia la mesa del Jinete de Dragón.

- Huye, pequeña, huye hacia zonas más frías... -susurra el elfo oscuro.

Tras su conversación, Vraek permanece apoyado de espaldas en la barra, atento a las sensuales curvas de la mujer, cuando un leve movimiento a su derecha captó su atención. Kenth, el gnomo seguía allí, dando cuenta de su desayuno...

- Oye... Kenth -le cuesta recordar su nombre- No he podido evitar oír ciertas... palabras de tu conversación. En concreto, dos de ellas: Objetos Especiales. Te estaría agradecido si me dijeras dónde puedo encontrar un acero mejor -sonríe.

A pesar de estar conversando con el gnomo, el drow no pierde de vista a Xhanty...

Kenth mira a Vraek sorprendido... hasta ahora no ha sido de hablar mucho, excepto con Xhanty...

Pues... encantado le ayudaría, señor Vraek, pero no conozco la ciudad y el tabernero anda algo distraido al parecer...

- Quizá el Igg'drassil sí que sepa algo -responde refiriéndose a Dalamar- Él va cargado de esas cosas mágicas, por no decir nada del dragón... -permanece unos instantes en silencio y continúa hablando sin mirar al gnomo- ¿Qué hay del enano? Dice que es un mago rúnico. ¿Crees que será capaz de grabar algo efectivo?

Sus ojos seguían fijos en la mesa de Dalamar y Akiro, y ahora también Xhanty...

Xhanty se aproximá al lugar en el que estaban desayunando Dalamar y Akiro, y se inclinó un poco hacia el caballero tratando de suaviza su tono de voz para que no fuese audible para el resto de sus compañeros, aunque era conciente de que Akiro podía oirla.

-Dalamar, si no te importa, me gustaría que cuando terminases tuviesemos una conversación... a solas- después añadió, volviéndose hacia Akiro con una sonrisa- Nada personal, sólo motivos de negocios, supongo que no te importará que te robe al jefe unos minutitos, ¿no?

Akiro apartó suavemente la mano del pelo y la puso sobre la mesa para centrarse en la conversación con Dalamar.

Mientras el tabernero dejaba los platos del desayuno en la mesa, Akiro había estado dudando entre confesarle o no a Dalamar la inseguridad que le transmitía esta nueva aventura. Finalmente concluyó en no decirle nada sobre ello -no es necesario cargarle inútilmente con otra preocupación-.

Cuando el tabernero se hubo ido, se dispuso a hablar -Sí, no te preocupes por nada, simplemente no he dormido bien, además...-, en ese momento las palabras de Xanthy interrumpieron la conversación. -¿A caso no sabe que es de mala educación interrumpir una conversación?- pensó mientras la miraba un tato molesta.

Tras una leve sonrisa hipócrita respondió a Xanthy -Es todo tuyo-, y empezó su desayuno.

Dalamar se encontraba sumido en las palabras de Akiro hasta que Xhanty interrumpió la conversación. Además...- Fue la última palabra de Akiro antes de escuchar las de Xhanty... Y esta última palabra había dejado a Dalamar en suspense.

Encantado de hablar contigo, Xhanty- le dijo a la joven mientras giraba la mirada para observarla. Acabando por mirarla fijamente a los ojos- ¿Te importaría esperar a que termine de desayunar?

El tono de voz con el que pronunció las últimas palabras asemejaba un tono amable. Pero en realidad se sentía algo molesto por aquella interrupción.

Ahora la aviso, señorita- le dijo inclinando un poco la cabeza con motivo de despedida.

Luego volvió a mirar a Akiro, que estaba desayunando... Tan evadida como antes la encontraba.

Lo siento, Akiro-le dijo a la joven interrumpiéndola en su desayuno- Ibas a decir algo, ¿verdad?

Entonces la miró fijamente, esperando respuesta... Sin probar aún, nada de lo que el tabernero había traído.

No puedo soportar verla así-mientras esperaba, como si de forma instantánea se tratase, vino a su mente esta reflexión- Ya sé que tanto ella como cualquiera puede estar triste, alegre... Y no tengo por qué hacerla estar alegre siempre... Tampoco tengo por qué preocuparme si está así... Pero son sus ojos... No muestran el brillo que antes mostraba...

-Cómo quieras- dijo alejándose un poco moelsta durante un momento, pero después volvió a recuperar su sonrisa.

Se dirigió a una esquina de la estancia, sentándose a esperar a que Dalamar terminase.

Parece que a Akiro no le ha sentado muy bien la interrupción... pensó acordándose de la sonrisa de la chica.

Kenth queda algo descolocado con la pregunta de Vraek

A decir verdad... no he hablado mucho con el señor Ibal... es a él a quién deberías preguntarle por la efectividad de su magia...

Luego mira fijamente al tabernero, contal de que este responda alguna vez la pregunta que le planteó hace un rato...