Partida Rol por web

Bajo la máscara de Rever, Kaito esbozó una media sonrisa mientras escuchaba la conversación.

Así que... Nightmare ¿eh? no puedo decir que no sea apropiado... -pensó.

Era la primera vez que escuchaba el nombre de aquella improvisada compañera, al fin y al cabo. Las últimas 48 horas habían estado ocupados con asuntos bastante más importantes como para estarse a formalidades como presentarse.

Fue entonces cuando se dio cuenta, hablando de alter egos, de que seguía con la armadura puesta. Lo cual no estaba nada mal, dados los andrajos rasgados y destrozados que llevaba debajo como "ropa de civil". Estaba mejor vestido con la armadura puesta. Pero para pasar desapercibido por la calle, al menos como un vagabundo más...

Mientras Nightmare terminaba la conversación por teléfono, cerró los ojos y se concentró en apaciguar aquel traje vivo que parecía estar en simbiosis con él. Las placas rígidas se volvieron flexibles, las juntas se retrajeron y separaron, toda la superficie orgánica del traje se contrajo en aquellos apéndices que finalmente se replegaron y desaparecieron en la espalda de Kaito, quien trató de cubrirse lo mejor que pudo con lo que quedaba de sus harapos. Cuando abrió los ojos de nuevo volvía a ver la calle, pero con sus propios ojos y no a través de las lentes de la armadura.

Sí, él está aquí y, si no hay inconveniente, quisiera que nos acompañara... Entonces en el templo Enno, nos ponemos en marcha... Cuelgo el teléfono sin ni tan siquiera despedirme. La situación no me agrada. Pensar que ese ser medio lagarto hubiera vuelto me pone los pelos de punta. Casi como acto reflejo, mientras pienso eso, compruebo una posible vuelta en mi cabina y en las que tenga cerca.

Al girarme, veo que Rever se ha quitado la armadura. Bien, estamos preparados. Lo primero que hago es encaminar nuestros pasos al callejón del restaurante donde vimos a Meika. Una vez allí, recojo mis cosas y emprendo el camino al templo*. Compruebo habitualmente que Rever siga conmigo, casi como si temiera que en cualquier momento me abandone.

Poco a poco, paso a paso, nos acercamos a nuestro destino. Me fijo en la gente que pasa; pocos son los que ni siquiera nos miran, y menos aún los que se preocupan de dos pordioseros cualquiera. Si supierais la verdad... pero mejor, ignoradnos, seguid vuestra fantasía de vida mientras los desheredados os protejemos.

El templo está en la cima de una colina. Hay que seguir andando, siempre andando... Hasta ahora nadie nos ha, ni tan siquiera, preguntado qué hacemos allí. Espero que siga igual.

- ¿Americanos, New York?- Voltio se levantó la parte de abajo de su máscara para poder comer, mientras reflexionaba en las palabras de la sacerdotisa joven, pero antes de poder intervenir fueron la mayor de las dos sacerdotisas y la "chica con poderes" las que añadieron nuevos datos a su perplejidad- Muchas gracias por vuestra hospitalidad, pero tenemos amigos esperando nuestro regreso en nuestra nave. Debemos ir para comprobar que están bien. Somos de Manhattan- dijo finalmente tras unos instantes de duda, confiando pero aún con cierto recelo- No se donde está America ni New York. En cuanto a por qué estamos aquí... no veníamos a este lugar. Atravesamos una especie de vórtice, y caímos aqui.- mira entonces a la chica con poderes- ¿Una kit? ¿es así como llamáis a la gente con poderes en este lugar? ¿te apetece venir conmigo a la nave y que te presente a los amigos con quien hemos venido?

Akai asiente a lo que dice Chiaki con una sonrisa y dice:

Claro… no hay ningún problema en que se queden… a fin de cuentas yo soy también una invitada aquí.

Cuando Voltio hablo le escuchó atentamente, hasta que dijo lo de la gente con poderes, rápidamente mueve las manos negando y añade apresuradamente:

No… no… no, no es así… la gente con poderes tiene un nombre normal, no sé cómo se llaman… yo no soy humana y me llamo Akai Rin jeje

Se rasco la cabeza y rápidamente volvió a hablar en esta ocasión preocupada:

Si tienen más amigos tenemos que ir a ver si están bien o no… no podemos estar tranquilos aquí mientras hay gente herida ¿verdad?

En cuanto Akai asiente a su deseo de ir a por el resto de los compañeros, Voltio mira a Mary Jane, esperando su asentimiento.

Era evidente que había muchas cosas en la pantalla de televisión que le resultaban extrañas al muchacho: esa criatura mitad ser humano-mitad mantis, que los villanos vistieran como gangsters de los años 30, la demoníaca neblina... Su rostro mostraba confusión, incredulidad e incluso enfado según se iban sucediendo las imágenes.

- Entonces si pretenden resucitar - dijo la última palabra con cierta incredulidad - a ese Panther Claw, es necesario reducir sus restos biológicos a la nada... aunque asumiré que no se sabe dónde está su cadáver. Entonces, el siguiente paso es encontrar los demás... ¿ingredientes? para sus planes. Si sabe que la máscara robada entraba en esa ¿ecuación? sabrá la ubicación del resto. Las fuerzas del orden locales deberían estar informadas de esto.

- ¡Joder! Otra vez ese Panther Claw... Es la segunda vez que oigo su nombre. Ya me enfrenté una vez a su organización... Bueno, en realidad estaba siguiendo unas pista relacionadas con otro caso parecido y una cosa me llevó a la otra... El caso es que hay que combatir a ese tipejo. El y sus chicos son duros de pelar. Tendremos que encontrarles y plantarles cara, no queda otra. Seguro que están preparando algo gordo y con todo el tema de la droga Forte en las calles, no me extrañaría que estuviesen detrás de este asunto. ¿Tenéis alguna información o pista de donde podríamos encontrar a esta gente, Honey? - Comenta Gabriel dirigiéndose a su conocida.

Bien, amigo, muy bien. Continúa así y igual salimos de ésta.

Virginia miró a los orientales y se armó de valor para soltar un:

-¿Y bien, qué a dónde vamos ahora? Siempre he querido ver a Godzilla.

"A ver, espero tener algo más de suerte que en el museo" pienso molesto mientras elijo una puerta, no tenía nada que usar de referencia así que elijo la de la derecha, a ver a donde me llevaba.

- Perfecto entonces- dice Voltio visiblemente aliviado al notar la buena predisposición de las mujeres- Vayamos pues. Gracias por la amables que sois todos.

Entras en lo que es una sala de control de seguridad con multiples monitores que enfocan las diferentes plantas del edificio. Un ordenador central que las gestiona protegido por una contraseña. Luego en la habitacion, no muy grande hay una taquilla y un armario.

Hice ademán de quedarme pero MJ era la líder de grupo, desobedecerla no entraba entre mis ideas. - Seguiremos luego, aun tengo muchas más preguntas - comenté mientras me despedía con la mano.

volvamos, seguro que estarán cansados de esperarnos.

Akai mira a las dos sacerdotisas y con una sonrisa dice:

Les acompañare para saber cómo están… esto, nos vemos en un rato ¿vale?

Tras lo cual se inclina levemente para despedirse y se pone a caminar junto a los extranjeros, se veía que estaba visiblemente animada y contenta, sentía muchísima curiosidad y movía sus orejas y cola de zorro bastante animadamente.

Tambien os acompañare. Me gustará conocer a vuestros compañeros, dice impaciente. Asi todos menos Izune os dirigis hacia el exterior de la casa.

- ¿Puedo esto... hacerte una pregunta personal?- dice al cabo de unos segundos Voltio mirando a Akai mientras caminaba con ella, Chiaki, Bethany y Mary Jane. Repentinamente mira a su alrededor y, por primera vez desde que todo empezó, sonríe- Vaya, sí que estoy bien acompañado, sí.-  pero nada más decir la frase vuelve a sentir una profunda tristeza, recordando que por su culpa su madre está en una situación de terrible peligro.

Kaito y Mitsuki

Tras coger varios transportes, el ultimo autobús os deja en la entrada del templo. Una enorme hilera de escalones sube hacia arriba la montaña. Un total de 100 para ser exactos. Al llegar arriba veis una gran explanada con un templo grande y una casa adosada que sirve de hogar para las sacerdotisas. A vuestra izquierda veis una enorme piedra envuelta por unas cuerdas y varios talismanes a su alrdedor. De alguna forma emana un aire especial y mistico que se palpa en el ambiente.

La zona está tranquila y vuestra visita no ha llegado todavía, tampoco se ve a nadie en los alrededores. Al poco se ve salir de la casa a varias personas: dos chicas pelirrojas acompañadas de una chica vestida de sacerdotisa y un chico vestido con un traje casero de super heroe y la cara medio tapada. Las miradas se cruzan dado que vuestra presencia tambien es particular: dos jovenes parados en mitad de la explanada observando los alrededores. Su posicion parecen esperar a alguien. Su apariencia son los de dos indigentes sin dinero, dado que sus ropas son andrajosas y deterioradas.  Destaca el largo cabello plateado de la chica con una tez delicada (Mitsuki) mientras el aspecto del chico es el de cualquier joven, con pelo corto  y un flequillo que tapa parte de su frente (Kaito).

No siendo los unicos invitados, de la parte trasera del templo, por el lateral izquierdo aparecen una mujer acompañada de una chica joven y seis soldados armados. Por el cielo se observan pasar dos helicopteros militares que cargan con una nave cogida por cables. Algunos de los presentes la reconocen al mirar hacia el cielo.

EL destino o no hizo reunir en un mismo lugar a una gran cantidad de personas. Entre las miradas de cada uno y el sobrevolar de los helicopteros dejo patente que algo podia suceder.

Antes de intentar averiguar la contraseña me dirijo a observar la taquilla y el armario, a lo mejor había algo util. Pero sin dejar de mirar las cámaras por si veo al detective en alguna de ellas, ¿que era este edificio y por qué estaba tan vigilado?.

"Sabía que me estaba ocultando algo" pienso enfadado mientras aprieto mis puños.

-Ho, ho... hola, supongo. Me lamo Virginia Stark y he llegado aquí por equivocación. ¿Y ustedes son?

Dijo lo más amablemente posible.