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Juego de Tronos - Castillo de Aguasclaras.

Castillo de Aguasclaras: Todo el castillo.

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19/10/2014, 13:27
Ser Pendrik Tully, "Pendrik Sin Tierra".

La confianza es un edificio difícil de construir, fácil de demoler y muy difícil de reconstruir. ¿Cuál fue el momento padre en después de dar todo lo que tengo por mi sangre merecí no disfrutar de la tuya?

Un par de latidos fue el tiempo que necesitó la habitualmente ligera mente de Pendrik para reordenar su por un momento caótico mundo. La clepsidra de sus pensamientos desgranaba con una parsimonia exacerbada sus granos en la cabeza del heredero de Aguasclaras. Pero finalmente la onda causada por la piedra que habían lanzado violentamente a su estanque terminó por ceder y remitir de un primer oleaje salvaje a una consecución de pulsos que todavía no sabía qué costa podrían alcanzar.

Tomó el cáliz de un vino con el que apenas había humedecido sus labios en aquella velada para levantarse, con ya una sonrisa afable en sus labios. Se adecentó de un papirotazo de una servilleta que prendía en su mano la saya de tonos turquesas que lucía para la ocasión y alzó con energía su copa.

No puedo por menos que sentirme dichoso y afortunado en esta noche. Lord Allos Swann me ha confiado lo que posiblemente sea su más precioso tesoro.- Pendrik pasó de la mirada del Lord a la de su prometida inclinando la cabeza. - Lady Rowenta aúna todo lo que un hombre podría desear, y no habría cosa que pudiera hacerme sentir más orgulloso en todo Poniente que hacerla la mujer más feliz conocida.

Posó la vista en todos los miembros de la sala. Al pasar la vista por los ojos de su madre Lady Olenna no sabe qué, se le rompió dentro del pecho. Finalmente y después de sonreír a sus hermanos pasó de largo premeditadamente al Maestre Ammon y descansó los ojos en los de su padre y ahora comprendió más que nunca, Señor. -¡Brindo por mi prometida! por una dama que únicamente merecerá mi respeto, mi atención y con el tiempo no puedo dudar que todo mi amor. ¡Brindo por Lady Rowenta Swann, por Lord Allos Swann, y por supuesto por el hombre que más he respetado en mi vida, mi señor padre, Ser Hadder Tully!

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19/10/2014, 17:02
[OUT] Lady Olenna Crakehall, viuda de Ser Hadder Tully.

No compartí el sentimiento de alegría. Por supuesto que estaba feliz por que mi hijo tuviera su prometida cerca, y su boda a la vuelta de la esquina, pero no estaba en aquel momento preparada para compartir tal noticia.

Cuando mi señor esposo se levantó, y dio la noticia, y tuve que aguantar y soportar todas las miradas de felicidad que se sucedían en los ojos de todos los presentes. No quería mirar a mi cuñada. No quería que me viera como si la hubiera traicionado. Ojalá hubiera podido hacer algo en toda aquella tela de araña que se estaba formando para evitar el bochorno de Patricya.

Miré a mi señor esposo, y me pregunté por qué había hecho aquello. Por qué había permitido dejar en evidencia de esa manera a su concuñada. Un latigazo de pequeña ira me saltó desde el corazón hasta la punta de mis dedos.

Lo siento, Patricya, pensé, apesadumbrada. 

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19/10/2014, 18:41
Escudero Horace Crakehall "El Enanito".

¿Por qué? eso era lo único que llenaba mi mente. Quizás ayer no me hubiera importado aquella noticia, pero ya me había hecho a la idea de mi enlace que ahora incluso lo deseaba. Probablemente fuera una de esas cosas que no echas en falta hasta que la pierdes, daba igual como fuera lo único que importaba era la nueva humillación a la que era sometido.

Mi sorpresa era grande pero mantuve la serenidad como pude, no sabía bien que hacer si gritar o maldecir a los mismisimos dioses, pero desde luego no era una sensación agradable. Busque los ojos de mi madre con el desafio de mi mirada, no me hacía falta cruzar palabra para decirle lo que sentía en ese momento ¿por qué me hacía aquello?.

Tenía que salir de allí como fuera, no aguantaba más las miradas, las risas y la felicidad acosta de mi humillación. Disimule mi ira cuanto pude pues mis padres me habían enseñado bien, un caballero debe saber guardar la compostura como si de una batalla se tratara.

Miraba a lady Rowenta buscando sus ojos como intentando buscar una respuesta que sabía que ella no tenía, solo deseaba acabar el brindis y la cena para poder escabullirme cuando la celebración lo permitiera...

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19/10/2014, 21:38
Ser Gwraidd Tully.

Gwraidd pudo reprimir a la perfección cualquier gesto de sorpresa y sonrió asintiendo, alzando la copa junto al resto y brindando con una alegría bastante bien fingida pese a su edad. Hecho esto mira a su hermano Pendrik mientras este habla, asiente cuando termina, y le da un fuerte abrazo tras brindar nuevamente cuando este termina su brindis.

Ya hablaremos hermanito- le susurra aprovechando el momento fraternal. Hecho esto felicita a sus padres con cierta formalidad, y hace lo propio con lord Allos Swan y con Lady Rowenta Swann- Será un placer recibiros en la familia. Os doy mi más sincera felicitación.

Tras esto retoma su lugar en la mesa y en el convite, pero atento a Horace. Supone como debe sentirse, y debe hablar con él antes que se retire.

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19/10/2014, 21:51
Lady Rowenta Tully, esposa de Ser Pendrik Tully.

Dedicó una sonrisa amable a las palabras de Pendrik, había sido muy apropiado. Aunque se limitó a devolver a Horace una mirada difícil de interpretar y por un momento hizo ademán de levantarse, pero miró a su padre y permaneció allí: a su lado, tal y como era su deber. Esa noche era para celebrar y el alcohol que ya habría corrido no la hacía la más apropiada para las palabras.

Apenas compartió algunos susurros más con Lord Swann y terminó su copa, para dirigirse por primera vez a Ser Hadder directamente. 

- Es un gran honor que me permitáis desposarme con vuestro hijo, Ser Hadder, si me lo permitís me retiro a descansar. Los preparativos prometen mantenerme ocupada toda la semana y sin duda serán agotadores.

Tras esto, salvo que Ser Hadder la detenga, abandona el salón tras lanzar una última mirada a los invitados.  

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19/10/2014, 23:44
Haudrey Ríos, el Bastardo Rencoroso.

Haudrey afrontó la noticia con su mejor cara de jugador de cartas, aunque se preguntaba qué demonios había pasado o a qué estaban jugando con aquella maniobra repentina. Las diversas implicaciones, tanto del hecho en sí, como de las formas utilizadas, eran de todo menos buenas para el feudo, su familia, o la estabilidad general. 

"¿En serio ha ocurrido eso?" pensó, aún incrédulo, mientras respondía a los brindis, pero sin mucho entusiasmo. No le correspondía a él juzgar o decidir, pero allí se habían hecho las cosas mal. Y aquello iba a tener un precio amargo para todos. 

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20/10/2014, 10:01
Escudero Beldyr "hijo del Traidor" Tormenta.

- ¡¡¡Por los novios!! - digo alzando la copa al igual que han hecho el resto de los presentes.

- ¿Que diantres habrá pasado para que en vez de casarse con Horace se case con Pendrik? - me pregunto mientras observo a ambos y a Lady Rowenta Swann todavía sin entender el reciente devenir de los acontecimientos.

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20/10/2014, 11:00
[RIP] Brandon, 2º hijo de Ser Baltrigar.

Miro a Horace y luego a Pendrik para finalmente detener mi mirada en la que será la esposa de nuestro futuro señor.

- No entiendo nada. - pienso. ¿No se supone que iba a casarse con el Enanito? ¿Como es que ahora se va a casar con el Heredero de Aguasclaras? Menudo cambio para bien ha dado la joven Swann.

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20/10/2014, 11:30
Ser Otter Crakehall.

Otter mantuvo la compostura, pero estaba sorprendido, muy sorprendido. No esperó en ningún momento aquella situación. ¿Lady Rowenta Swann con Pendrik Tully? estaba claro que algo se le debía escapar al castellano, porque sino no podía entender aquel enlace. 

Su mirada se dirige primero a su hijo, que a pesar de todas las circunstancias y la humillación que seguro que podía sentir mantuvo la compostura. Como podía esperar de un Crakehall. 

Luego hablaré con él- pensó. Cuando todo aquel banquete acabase tendría una pequeña charla con su hijo. 

Tras esto, sus ojos se posaron brevemente en su mujer. La conocía demasiado bien para saber que a pesar de su sonrisa, hervía de furia por dentro. 

También tendré que hablar con ella- eso desde luego sería mucho mas complicado. Pero también ella se merecía una explicación, y esperaba poder dársela. Aunque Patrycia nunca la aceptaría.

Otter alzó la copa para brindar como el resto, pero su última mirada fue directamente hacia su señor y luego hacia su hermana. A esta última casi le preguntaba con la mirada ¿por que?

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20/10/2014, 13:20
Lady Arianna Tully, esposa de Ser Trycian de Dorne

La mano que Ser Trycian sostenía bajo la suya se crispó. No había esperado aquello, no sabía nada. Nada en absoluto.

Arianna miró a su padre, y tuvo que hacer un enorme esfuerzo para no quedarse boquiabierta. Y luego, a cada uno de los protagonistas de aquella escena. Y supo que tampoco todos habían sido informados. Una sorpresa, un anuncio muy... comprometido. Porque aquello podía ser una simiente de enemistad, de malestar, incluso de... algo peor.

Levantó la copa en silencio, y sin pronunciar palabra hizo un pequeño gesto de brindis. Sus pupilas saltaron de Ser Hadder a su madre, de ésta a la joven prometida, de ésta al satisfecho padre. Siguieron hasta el novio despechado, parpadeando, cuando ya había bajado de nuevo la copa. Y se posaron, inquisitivas, en Lady Patricia. Pero no se entretuvieron allí. Siguieron buscando, inquietas. Y así se dirigieron a Pendrik.

La mirada se ancló en su hermano. Y entonces con un gesto suave se acercó a Trycian, al que claramente la ataba mucho más que la voluntad de otros. Se apoyó en su hombro, cariñosa, sin dejar de mirar a Pendrik, intentando lanzarle un mudo mensaje. Uno de esperanza, de tranquilidad. No siempre sale mal. Sonrió.

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21/10/2014, 20:34
Ser Orsey Crakehall.

No me molesté en fingir esa alegría que no sentía, y me limité a mantener el semblante serio. Aquello no era más que un insulto por parte de Ser Hadder hacia los Crakehall, y no pensaba reírle la gracia.

Pasados unos minutos, agarré a mi esposa del brazo.

-Me temo que Lydia no se encuentra bien, caballeros. Será mejor que la acompañe a nuestros aposentos, en busca de un descanso reparador que seguro le hará bien.

Abandoné el salón, llevándome a mi esposa, porque sabía que si no me marchaba en breve, iba a formar un espectáculo.

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22/10/2014, 09:08
Escudero Beldyr "hijo del Traidor" Tormenta.

Observo el semblante de mi mentor cuando comenta que su esposa no se encuentra bien.

- Sin duda no se encuentra cómodo. - pienso al contemplar el aspecto de Lidya, la cual luce tan bella como siempre y no muestra síntomas de encontrarse indispuesta. La noticia de que Lady Rowenta no se casará con su hermano sino con Pendrik no creo que haya sentado bien en el seno de la familia Crakehall.

Luego miro con detenimiento a su padre, Ser Otter, el Castellano y a su mujer Lady Patricya Florent. ¿Que pasará por su cabeza en estos momentos?

Finalmente mi mirada se posa en mi padre. ¿Sabría algo de todo esto? Luego hablaría con él al respecto.

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22/10/2014, 19:36
Ser Baltrigar "el Traidor".

La súbita salida del antiguo pupilo de Baltrigar, Orsey, con su esposa Lidya, hizo que el Caballero reaccionara un poco. Obviamente los ánimos estaban caldeados, veía claramente la tensión entre Ser Hadder y algunos miembros de la familia Crakehall, y confiaba en que fuera sólo cosa del momento. Confiaba en que nadie se levantara y que no se increparan unos a otros. Parecía que ser Orsey conocía bien su propio temperamento y había decidido hacer lo mejor dada la situación.

Inevitablemente la mirada de Ser Baltrigar se cruzó un instante con la de Ser Hadder. La pregunta era obvia. ¿Por qué? No dudaba que su Señor tendría sus razones y él no era quién para cuestionarlas, pero hacer todo aquello, sumado a ese anuncio público sin seguramente haber hablado nada antes con los Crakehall…

Y lo que más seguía rondando la cabeza de Baltrigar era que Lord Swann era un banderizo de los Baratheon. ¿Cuáles eran los motivos reales de que Lord Swann estuviera ahí?

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27/10/2014, 08:52
Jeremyed el Herrero.

A Jerem ya no le sorprendía que las personas que visitaban el castillo de Aguasclaras tomaran la herrería como una especie de sitio de reunión y atracción. Entendía que se estaba caliente y no podía negar a los desgraciados que trabajaban fuera en invierno la fortuna que él poseía por oficio. El que los propios habitantes de aguasclaras entre trabajo y trabajo vinieran a charlar y calentarse unos minutos era el día a día. Pero cuando personas que no eran asiduos del castillo merodeaba por allí, para Jeremyed resultaba harina de otro costal.

Cuando los servidores de Lord Allos Swann comenzaron a husmear por allí el herrero se sintió incomodo. Al parecer se había corrido la voz  al respecto de las capacidades del maestro herrero de Aguasclaras.

Si ya resultaba común que tanto Jerem como Aisa se enterasen de todo cuanto se cocía por el castillo debido a que el alcahueteo anidaba allí. No resultó tampoco de extrañar que en aquel interminable invierno, la herrería resultase el punto en que los habitantes del feudo supieran de los devenires de poniente.

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18/11/2014, 10:01
Jeremyed el Herrero.

Un creciente murmullo, con gritos esporádicos se había desatado en el patio de armas del castillo. Jerem cesó en su cansino golpeo de martillo sobre el yunque y aguzó su oído. Algo de gravedad había sucedido en Solaz del soldado.

El herrero arrojó el martillo sobre la gastada mesa de trabajo y se quitó los guantes y el delantal de cuero abrasado por los años. Abrió la puerta y confirmó sus sospechas. Carreras por el patio y cierta confusión se había declarado en el castillo. En ese momento apareció Jodd, con la cara pálida agarró a su padre de los brazos y le comunicó con urgencia:

-¡Han matado a alguno de los nuestros en Solaz, dicen que incluso a nobles!

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18/11/2014, 10:36
Dod el Carpintero.

Me encontraba caminando por el patio del castillo en dirección a la carpintería dispuesto a terminar alguno de los encargos que teníamos pendientes, ya que últimamente padre estaba descuidando demasiado sus obligaciones. Debe estar haciéndose viejo... Mis pensamientos se ven interrumpidos cuando me doy cuenta del alboroto reinante en el patio: gente corriendo como pollos descabezados, murmullos en las esquinas, gritos de angustia...

El hijo del herrero pasa corriendo a mi lado gritando acerca de muertes en Solaz del Soldado lo que parece explicar el revuelo generalizado.

Continúo mi camino hacia la carpintería con la intención de contarle a padre las últimas novedades...

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25/11/2014, 17:28
Lady Rowenta Tully, esposa de Ser Pendrik Tully.

No mucho después de que partieran los últimos hombres armados Lady Rowenta abandonó también el castillo de Aguasclaras a lomos de su yegua negra seguida muy de cerca por Gerrik, su protector. Si bien sus salidas a caballo eran algo habitual y diario, de la compañía de su protector no disfrutaba siempre.

El gesto de la joven dama mostraba sin duda un disgusto poco habitual y este gesto se acompañó de un arreo enérgico a su yegua, abandonando en lugar a galope.

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25/11/2014, 18:30
Escudero Horace Crakehall "El Enanito".
Sólo para el director

Que estaba pasando, el castillo se mostraba nervioso y los rumores iban y venian como la lluvia en otoño.

Varios hombres armados salieron apresuradamente probablemente a confirmar los rumores o tras algua orden de Ser Hadder. Pero ver a lady Rowenta salir apresuradamente agoto mi paciencia en tanto entrenar y mantenerme al margen.

Sin ni siquiera pararme a pensar por un instante lo que estaba haciendo, ensillo un caballo y salgo tras el rastro de lady Rowenta a suficiente distancia para que no note mi presencia. ¿A donde se dirigia tan apresudaramente, que es lo que la tormentaba?.

Eran preguntas que rondaban mi cabeza mientras cabalgaba concntrado en no perder el rastro, desde aquella noche no podía quitarmela de la cabeza y el haberla tenido tan cerca cambio algo dentro de mi, algo que por más que quería ya no podía alejarla de mi pensamiento.

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29/11/2014, 18:08
Feudo Aguasclaras: Castillo de Aguasclaras.

- Tras conversar tranquilamente, Lady Rowenta y Gerrik regresaron al Castillo, donde Edder les franqueó la puerta.

- Al rato llegó el Escudero Horace Crakehall, seguido poco después de un carromato conducido por Russ, precedido de Ser Baltrigar y seguido de Ser Madrigal. ¿Qué estaba pasando? Eso se preguntaban los habitantes del Castillo...

Notas de juego

// Regresan al Castillo: Lady Rowenta, Gerrik, Horcace. - Proceden de: Cercanías del Bosquecillo Aguasclaras.

// Regresan al Castillo: Muertos: Jack "Pequeño Cuervo", Brandon, Carlysle, Roy. Moribundos: Armase y Caster. Vivos: Russ, Ser Baltrigar, Ser Madrigal. - Proceden de: Solaz del Soldado.

// Llega al Castillo: Metetripas, con su carromato y su burro. - Procede de: Solaz del Soldado, nunca había estado antes en el Castillo.

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29/11/2014, 19:43
Edder "Clavopié".

Edder intentó hacer cuanto pudo para detener el paso de Lady Rowenta, pero su lentitud y su falta de eficiencia, al parecer estaban igualando a su ya conocida torpeza. Solo restó contemplar como la esposa del Heredero de Aguasclaras y su guarda espalda salían a caballo del castillo, mientras, sus pensamientos iban divagando en las posibles represalias que Ser Hadder podría tener con él por no hacer cumplir sus ordenes. Para colmo de sus males, aquel momento de distracción fue aprovechado por Horace para salir también del castillo.

A Edder no le quedaba mas que encomendarse a los siete para que todo esto no pasara a mayores y que aquellos que se marcharon regresaran con bien. -¡Será mejor que cierre esa maldita puerta de una vez antes de que alguien mas salga!- dice, ordenandose a sí mismo moverse con rapidez a cerrar la puerta.

No haciendo otra cosa que no fuera esperar a que alguien llegara, vió como afortunadamente caras conocidas se acercaban al castillo. Edder abrió las puertas a Lady Rowenta y Gerrik para que entraran, quiso por un momento hacer un reclamo a la dama, pero aquello era bastante inapropiado debido a su estatus, así que no le quedó mas que tragarse sus palabras, pero si que esperaba tener el momento para reclamarle a su guarda espalda.

La llegada de mas personal al castillo hizo desaparecer el mal humor que Edder había alcanzado a ganar por aquel mal rato, aunque al conocer el contenido funesto que poseía el carromato, su rostro se volvió a llenar de pesadez. -Pero... ¿Que ha pasado?- aquella pregunta se hizo inevitable. No iba dirigida a nadie, solo se escapó de sus labios.