Partida Rol por web

Asentiría con la cabeza ante la preocupación de Zayna y Noctis.

-No se preocupen estoy bien cuidado kupo, ustedes vayan a su cipo, digo vayan trankilospopo- No era el momento para bromas ni para picar a Noctis pero el saber que lo mio era algo que se podía arreglar y que irían a un mundo dentro del mismo castillo donde ni siquiera la luz y la oscuridad pueden entrar hacía ver todo mucho mas sencillo o al menos seguro; ademas las palabras de Laine sobre el experto de la miel sonaban hasta cierto punto entretenidas. Al menos me sentía un poco mejor animicamente, lo físico deberían encargarse ellos.

-Suerte kupo aqui los espero-

Una vez sus amigos abandonasen la sala de cuidados de Laine, el moguri pudo notar el cambio en el ambiente, mas bien, como la tensa realidad que había sido camuflada con esmero por la enfermera, nadie allí había ignorado la situación de Jackal y al ver la reacción de Laine, no hacía falta el preguntar si aquello le molestaba, se notaba lo que sentía o al menos uno podía darse una idea no muy lejos de la realidad.

-Gracias por ser honesta conmigo kupo-diría depositando mi pequeña mano sobre la suya en un intento por regalarle la misma calma que ella me trajo. No bromeaba ni ella ni yo, ambos tratabamos el tema con la seriedad que se merecía y en mi estaba la necesidad de mostrar una sonrisa amigable a pesar de que no sintiese que debía hacerlo, ya de por si su trabajo era difícil como para que perdiese la calma ante ella. -Lo hare kupo, es feo pero lo harepo- No me gustaba la idea de tener que rememorar aquel sitio, quería olvidarme de ello si fuera posible pero no quería correr la misma suerte que Jackal; apenas y lo conocía un poco pero verlo en ese estado era doloroso, era el segundo compañero que perdía. No, no era el segundo.

Mi sonrisa amenazaba con quebrarse y mis ojos se cerraron para que la humedad que invadía el pelaje de mi rostro mas cercano a los antes mencionados podía disimularse si aguantaba un poco mas. -Me quedare aqui en silencio kupo...quizas Jackal nos sorprenda kupo...yo...- Termine por recostarme en la camilla girandome de lado para darle la espalda, no podía irme aun de ese sitio, y no estaba con fuerzas de hacerlo. -Memorizare ese recuerdo, necesito concentrarmepo- Con suerte alcance a mencionar antes de quebrar en un llanto silente.

Era muy difícil, sin mencionar doloroso tener esa imagen en mi cabeza y mantenerme en ello. Las memorias de todos mis amigos, todas las personas que conoci y quise en Rabanastra, todos aquellos que no alcance a conocer en Ivalice, todos se habían ido; estaban en mi corazón como bien sabía, pero aun así era duro el saber que ya no los vería. Nunca mas podría volver a correr por aquel empedrado persiguiendo a Fran en un vano afan de conquistarla, no tendría mis charlas y practicas de esgrima con Balthier, ni sus consejos de ligue ni sus animos. No volvería a atozigar a Montblanc con mis dudas y mis ansias por que me enseñe, y luego realizar una travesura con el cuando nadie mirase. Las arenas, los oasis, las ciudades...Mi mundo se había ido y no podría volver, era un huerfano y eso dolía mucho mas que aquella maldición que me habían hechado.

Pero a pesar de todo, seguiría firme en mentalizar ese sitio, esa sombra malevola e incluso aquellas manos huesudas y el sentimiento de dolor que me marcaron en mi piel, trataría de mantener mi mente y cuerpo enfocados en aquel mundo y aquella escena de mi vida, aunque el dolor por confirmar mis temores desde que pise ese castillo, se hiciera realidad.

Laine finalmente suspiró, mientras se sentaba en el suelo apoyandose en la camilla - Esto es lo peor de vivir en Tierra de Partida, de ser un elegido de la llave espada. Nunca sabes cuando puede ocurrir, pero tienes que estar preparado para ello. Tener miedo a la muerte es... humano, te hace ser más fuerte, pues sabes que algún día te llegará, que no eres inmortal. - Decía filosofando

Pero siempre es duro, cuando vives del lado de la luz, y es la oscuridad quien te arrebata los tuyos... - Podías notar el quebrar de su voz, y un poco del sollozo en su estado. - ¿Sabes? Eraqus mantiene a los maestros que no deben de darle preferencia de un lado a ninguno. Todos tratamos de obedecer esa norma, pero algunos no la escuchan. Así que... se supone que no debería decirte esto... pero si en algún momento has de decidirte, no escojas la luz, ni tampoco la oscuridad. Ambas son un camino de no retorno, en el cual siempre sufriras o haras sufrir. Sin embargo, si te mantienes entre los dos podrás lograr darle equilibrio a ambos extremos. Sobre todo, entre tus dos amigos. - Una vez dicho eso parece sonarse.

Y tras ello parece al fin decirte la conclusión de Jackal. - Morirá, antes de que vuelvan Noctis y Zayna. Antes de que siquiera llegue Eraqus para hablar con vosotros tres... Cuando yo era una aprendiz como tu, también me ocurrió lo mismo con uno de mis compañeros... murió por la oscuridad, juré que les haría pagar por todo pues... en verdad lo amaba. - Las lagrimas ya brotaban sin saberse - Pero nuna tuve odio, nunca ira. Sabía que el camino por el que se los haría pagar, era resolviendo todos y cada uno de aquellos problemas que ellos generaran... Pero siempre hay alguno que se nos escapa, y eso me deja impotente. Por ello la Luz no es buena, por ello la Oscuridad tampoco lo es. - Se levantó finalmente para mirarte

Kosmog, tu eres un ser extraordinario. Pese a las dificiles situaciones que te has encontrado en tu comienzo, no has cedido ninguna vez. No le tengas rencor a aquellos que se llevaron a tus amigos. Ni tampocos dejes que nosotros te digamos que hacer. Manten siempre firme tus valores, y tus amigos presente, pues ellos son la fuente de tu vida, de tu poder, y los que te harán alcanzar metas incluso superiores a los tres maestros. - Dijo por primera vez con toda la sinceridad de su corazón. - Me alegra poder decirte esto ahora que Eraqus no puede meterse en medio de las elecciones. Se que harás grandes cosas, junto con los tuyos. Solo tienes que esperar y ya lo verás - Y tras ello fue hacia Jackal, aunque ya sabía que no podía hacer nada tratar de hacer lo poco posible.

Saludé con un gesto de cabeza a ambos maestros para luego escuchar atentamente las preguntas de Eraqus.

Me crucé de brazos mientras este hablaba.

Luego de eso el muchacho que estaba conmigo dio su reporte y ahora me tocaba a mi.

-Bueno, respecto a los 3 que llevan la llave espada, creo que Noctis es el que la empuñaba más seguro, los otros 2 como que todavía no sabían muy bien que hacían-

Luego vino la pregunta acerca de mi contrario.

-Pues, es un ser decidido y temerario, no se detendrá hasta concretar su objetivo, aunque no tengo idea de cuál será ese pero es obvio que alguno tiene ya que ha reunido también a las partes contrarias de los demás. En cuanto a lo que pasó en el Mundo Oscuro, tuvimos una charla, me tentó varias veces a seguirlo, al rechazarlo se fue y se le cayó esto: dije abriéndome la ropa del pecho para que viesen el orbe rojo- además de eso me dijo que Jackal era un traidor en su mundo y que lo seguiría siendo en este, que por su culpa murió toda su gente. Ante la prueba del acantilado Jackal intentó tirarme, pero lo esquivé y fué el quién calló, por lo que este dicho puede tener algo certeza-

Finalmente vino lo de los mundos.

-Y no es posible entrenar para hacerse más fuerte? No soy mucho de trabajar en equipo digamos y además prácticamente no conozco a nadie y tras lo que pasó se que la mayoría me tiene idea-

Las palabras de Laine calan hondo en mi ser, mas profundo que en mis huesos parecieran que estas tuvieron la fuerza necesaria para llegar a lo mas profundo de mi corazón; estaba asombrado y mi gesta acompaño mi sentir al notar como ella sin verme mucho de lejos había logrado ver mas mi esencia que muchas personas que conocía, tanto desde hace mucho tiempo de conocerlas como desde hace poco. Acaso eramos similares y por ello sabía tan bien sobre mi dualidad e imparcialidad? sobre mi deseo de negarme a escojer uno u otro camino?; aunque bien parecía que ella hablaba desde el dolor en un principio, el mismo que los seres de la oscuridad me habían causado, pero que ahora comenzaba a comprender un poco mejor.

Escuche cada una de sus palabras, senti sus sentimientos viajar atravez de ellas y los mismos revolotearon en mi ser, en mi propia alma haciendo ver por momentos el mundo con otros ojos, quizas unos ojos parecidos a los de mis viejos amigos, aquellos que jamas intentaron cambiarme, de decirme que siguiera sus pasos, yo los había seguido por voluntad propia pero no para superarles o ser igual a ellos, solo quería caminar a su lado y proponer caminos nuevos a tomar, debatir con ellos y hasta incluso pelear, pero quería ser su igual. En este momento podía empatizar con el dolor de Laine pero aun no era capaz de no odiar a los oscuros por lo que hacían, mi mundo había sido destruido por la oscuridad, me pesase o no que eso fuese parte del orden natural ya que así también estan los mundos tomados por la luz.

-Ninguna tiene que superar a la otra.- Menciones mascullando entre dientes en lo que me sentaba de nuevo en la camilla y con la manga de mi ropa me secase las lagrimas. Estas no dejarían de escapar de mis ojos, aun estaba dolido pero mi voluntad me estaba moviendo en un sendero distinto, y en un momento como ese miraba mi mano vacía antes de ser obstruida por la presencia de Busca Caminos. Solo pense en ella y mi espada reacciono sin que diese una orden mental. La ironía de su nombre me hacía sonreir tras las lagrimas pero así como había llegado ese gesto divertido, se fue cuando vi en dirección hacia Jackal; sabía bien que podia hacer algo, mas bien, debía hacerlo.

Me queje al dejarme caer de la camilla, mis piernas me dolían y no podía levantar las alas, apenas podía arrastras a Busca Caminos por el suelo ya que mi mano vacia ayudaba a la portdora de la keyblade a moverla.

-Laine...Perdona kupo...pero necesito tu ayudapo- Mencione algo adolorido y respirando un poco agitado, las heridas se sentían peor de lo que imaginaba pero podría soportarlas por un rato. -No se magia curativa kupo...pero espero me ayudes a guiarmekupopo- Hice un esfuerzo para agitar mis alas lo suficiente para elevarme hasta pararme con cuidado en la camilla de Jackal, casi al borde de la misma para poder estar a la misma altura que la maestra y poder ver a mi compañero. -Estas hecho un fiaskopo- mencione a modo de burla en una tonta risa entrecortada por un quejido producto de mis costillas dolientes. -Aunque tampoco puedo hablar mucho kupo-.

No sabía como explicarle a Laine lo que pensaba hacer, así que solo me limite a dedicarle una mirada amigable. -Confio en ti kupo- Volviendo la vista a mi compañero y a mi keyblade, alce esta ultima de forma que la parte roma de la hoja de la espada quedase por encima del cuerpo del proximo difunto. Mis ojos se cerraron por un momento para imaginar y visualizar una sensación suave, como una cama muy mullida, el sentimiento de percibir la humedad de una agradable llovizna a travez de mis bigotes o la refrescante brisa que acariciaba mi pelaje cuando un viento frio expulsaba el calor de las calles, aunque fuese un momento.

Mis ojos se abrieron y Busca Caminos comenzo a brillar, soltando sus bolutas de oro en luz sobre el cuerpo de aquel sujeto que parecía un hume. -No te conoci muchopo, pero estas a punto de iniciar un viaje kupo y espero que este sea un buen inicio popo- podía sentir la oscuridad de mi llave espada, mi oscuridad el querer tomar parte de ese ritual que estaba montando. -Laine, puedes curar sus heridas kupo?- Le pregunte casí sin mirarla, mis ojos estban centrados en el. -No lo salvaran kupo, pero se siente bien kupo- Antes habían usado esa amigable magia en mi y pense que sería una buena forma de hacer su paso mas agradable.

-La oscuridad causo esto kupo, pero no por ello es mala kupopo....La luz no te mantendra vivo, pero hara tu viaje mas agradable kupo....Acepta mi luz y también mi oscuridad kupo, que ambos te ayuden a llegar a donde mas quieras ir kupo...- Aun no habia dejado de llorar, pero no me sentía tan triste, en mi corazón sabía que estaba haciendo lo correcto y las lagrimas que caian sobre su cuerpo se convertían en oscuras perlas que se mezclaban y movían entre los haces de luz, conviviendo en armonía como debería ser. -Cuidate Jackalpo...Si vuelves, ven y cuentame tu viaje si po?- Esas últimas palabras las diría con una amplia sonrisa y mis ojos cerrados en un intento de retener al maximo posible mis lagrimas por despedir a un amigo, pero al menos, esta vez tuve la oportunidad de hacerlo en vida.

-Zzz...Condenados... colibríes..ZZZzz... ahogaros...Ahhh... yaa...Zzz- Noté un ajetreo constante y un sonido metálico infernal después... -QUIEN OSA DESPERAR MI SUEÑO!- Dije mientras abría los ojos. Al parecer todos volvían corriendo de vuelta a la nave chicle. -ESPERADME!- Al menos entré a tiempo  -Por las barbas... Arf... de Davy Jones! a... que viene tanto revuelo y pris...- La escena que ví no era tan preciosa como las nativas del Caribe. -Por qué el conejo y el gato están heridos? Que ha... PASADO?!?- 

.......

Mi ancla sale disparada como una bala de cañón a una pared y yo la sigo detrás para empezar a golpearla. -MALDITOS BASTARDOS! *thump* PORQUE AHORA CUANDO ESTABAMOS BIEN! *Kpow* PORQUE *Pum* NO *Paf* HE AYUDADO! *crack* - Eso que salía de mi mano... era sangre?  -AAAAAAAARGH! *PAM*-  Los negativos esos acaban de herir a gente por la liberación de los mundos, y seguro que si liberamos otros estos bastardos de agua dulce volverán... MALDITOS! SE ENCONTRARÁN CONMIGO Y MI FIEL ANCLA SI REGRESAN!.

Al final llegamos a la base, y me encantaría pegar al primero que pasase por allí con cara de pocos amigos, pero antes me voy a la cocina a por un trago la verdad... ESOS DESGRACIADOS PAGARÁN POR LO QUE HAN HECHO.

-CHEF.... deme el mejor ron que tengas en la bodega! Necesito quitarme ese pensamiento de la cabeza!-

Con la nave aparcada escucho atentamente las palabras de Eraqus alternando la mirada entre la nave y los heridos. Había ido todo lo rapido que podía y aun así su estado parecía crítico, ni siquiera mi orgullo impide que me sienta culpable, menudo "capitan" estaba hecho si a la primera complicación perdía a mi tripulación...

Cuando el maestro acaba de hablar veo como Vin se dirige al comedor sin mediar palabra, parecía que le pasaba algo pero no podría decirlo.

Escucho de fondo el discurso de Noctis, parece que intenta animarnos. Esbozo mi mejor sonrisa socarrona, no pensaba que me viesen titubear tan pronto. Estoy unos segundos dubitativo hasta que veo que soy el único que sigue en el hangar. Me dirijo rapidamente al comedor y me acerco al Abuelo Quan.

-Hey Abuelo, pasame uno de esos bocatas tuyos que ha sido una misión movidita.- le digo al cocinero con una sonrisa. Ya con el bocata me siento en la primera silla que veo para comermelo tranquilamente, comer me ayuda a no pensar.

Tras hacer lo que haciais una voz empezaisteis a oir a traves del siemprejuntos - Id viniendo a mi despacho. Hablaremos de ciertos asuntos y, necesito que vengais ya.

Era Eraqus y podiais denotar en sus palabras la prisa que tenía.

Laine te iba ayudando según le pedías y miraba el ritual que hacías, muy melancolicamente se llevaba las manos a la boca al ver como tu llave espada, hecha ahora volutas de luz, entraban dentro de Jackal.

Laine sabía lo que iba a ocurrir a continuación y dejó de curar el cuerpo físico de Jackal, pues, a los pocos segundos de que dejara de haber volutas en su cuerpo, el cuerpo del mismo Jackal, desapareció en pequeñas volutas que se alzaron en el aire y recorrieron el sentido de la brisa que se las llevó lejos.

Las lagrimas aún brotaban de los ojos de Laine cuando al mirarte dijo - Kosmog... lo que has hecho es precioso... - El tono de Laine era melancolico, pero parecía que la frase no acababa ahí, entre otra cosa porque su cabeza negó ante lo siguiente que decía y se reafirmó - Es precioso - esta vez terminando la frase con una sonrisa.

Pero no deberías gastar tanta fuerza, estás al borde de tu limite, deberías des... - Su frase se terminó ahí... o más bien el que oyeras su voz acabó ahí, pues solo puedes recordar que todo se volvió negro, y que no recuerdas como, ahora estás vagando en una estela negra. Tan malherido como antes, pero vagando como en una apacible ola de mar, o de viento, siempre desplazandote hacia el sentido de tu cabeza, sin saber cuando esto terminará.

Hasta que derepente empiezas a oir una voz, hueca, vacia, innaudible. Pero sabes que está ahí.

La orden de Eraqus me llega mientras termino de comer los bocadillos, parece muy urgente, me giro hacía Redtide mientras señalo con la cabeza en dirección al despacho.

-¿Vamos? El viejo parece impaciente.-digo con una sonrisa mientras me levanto y me dirijo al despacho.

Mis ojos tuvieron un leve momento de descanzo soltar a todo momento lagrimas de estos, pero no tardarón en volver a salir al ver como la brisa se llevaba lo que quedaba del cuerpo físico de Jackal, pero ahora la diferencia estaba en que sentí la felicidad tras darle el adios a un compañero de la mejor forma que jamas había visto hasta el momento. Mire la mano donde antes estaba Busca Caminos y solo pude cerrar mis dedos en un puño que llevaría con gentileza a mi pecho solo para mascullar un "Gracias", a mi propia llave espada, por haber respondido a mis sentimientos de esa forma, le estaba agradecido a ella y a Laine; quien al voltear a verla pude notar sin problema las lagrimas en su rostro.

Debo reconocer que jamas había visto a una mujer, ya fuese hume o viera el llorar con un gesto tan bonito en su rostro y esa imagen hacia a mi corazón agitarse. Pero basto con agitar mi cabeza para acomodar mis ideas, ascenti con la cabeza ante su elogio antes de perder la noción y que todo se volviese negro.

No podía entender como pero me encontraba en otro sitio, no estaba muy seguro si quizás por el paraje oscuro acaso estaba a punto de encontrarme de nuevo con mi versión oscura, o solamente me encontraba en un sueño, pero fuese una opción u otra, no estaba en la enfermeria con Laine y en parte me preocupaba el saber donde me hayaba.

Busque con la vista en toda dirección mientras aquella corriente me llevaba, sin entender hacía donde iba, tratando de encontrar al dueño de aquella voz.

-Holaaaa!- mencione con claridad aunque sin subir mucho la voz, me dolia aun el cuerpo lo suficiente como para no esforzarme de mas, ni siquiera en mi especialidad que era hablar. -Donde estoy kupooo?-

Eraqus escuchó todo lo que le dijisteis y primero mirando a Fudo dijo - En cuanto a lo de entrenar. Luego os daré objetivos Fudo, no te preocupes. Ahora podeis retiraros, los otros están por llegar. - Dicho esto os hizo un gesto para que os retirarais y se volvió para hablar con los maestros cuando os fuerais.

Os dirigisteis sendos capitanes hacia el despacho y una vez allí visteis a Vin y a Fudo salir primero. Parecía que podíais hablar de algo, pero antes de que cualquiera pudiera abrir la boca para compartir la información Eraqus llamó a Sieg y Redtide adentro.

Poco conforme con que no le dijeran nada, decidió caminar, se cruzaron con sieg y redtide, pero no hubo tiempo para nada, tampoco importaba, no le habían respondido y se sentía un poco molesto...

Miró al tal Fudo, seguro de que tampoco estaría muy conforme, al menos Vin a penas acababa de llegar allí y que le pidiemman tanto sin eccirle casi nada le ponía nervioso.

- ya que poco o nada nos han dicho,... ¿crees que podemos ir a donde la espada llave esa, y hacer la prueba mientras juegan a preguntar sin dar respuestas?