Partida Rol por web

De pronto un soldado entra al comedor y pone una carpeta apenas sin mediar palabra - Teneis prisa. Ciudad de paso esta al limite, vuestra mision es sencilla, puga y desalojo... estamos a punto de perder el unico mundo neutro... y necesitamos sacar a los habitantes de alli. Esta es una mision contrarreloj, y no sabemos cuanto tiempo nos queda. Dirigiros al hangar de inmediato y salvad a todos los que podais.

Sylfine y Sean se ponen rectos y dicen a la vez - Señor si señor. - Sean empieza a adelantarse y Sylfine te dice - Vamos sigueme Vin te vamos a enseñar las naves - Mientras te sonrie

Vin empezó a caminar dejando su vista atrás, donde permanecía aquel hombre, desalojo, mundo neutro, no entendía nada, pero parecía urgente y por ello a paso ligero caminaba detrás de sylfine. Misión contrarreloj decía, y el invocador no pudo evitar pensar si esa era una misión tan sencilla como el hombre decía.

Al ver que tardaba en responder el chico iba a volver a hablarle y me dió un sustillo cuando respondi con un susto. - Ah! - "Me pregunto si tendrá los mismos reflejos si le doy un puñetazo..." Pensé de brazos cruzados mientras hablaba. Me indicó donde conseguir comida, momento en el que mi estomago recidió volver a protestar, y se lo agradecí.

- Jefe! Deme los tres bocadillos mas grandes y potentes que tenga. - Al poco me saca tres bocadillos que no llegaban a un palmo de longitud y lo miré con cara de hambre. - Hum... Damelos. - Empecé a devorar uno de tres bocados. - Ahora hazme un par mas, pero que sean de una barra de medio metro al menos, y asi de gruesa. - dije ahuecando las manos como si cogiese el bocadillo. Al momento cogí otro de los pequeños y lo devoré. - Y le metes lechuga, tomate, cebolla, varios tipos de queso, bacon, huevos fritos y pechuga de pollo por todas partes. Y la grasilla del bacon se la echas dentro del bocadillo para que lo empape bien todo. - Esta gente no sabia hacer buenos bocadillos, ya le enseñaría. Devoré el ultimo de los pequeños mientras esperaba. - Podrias añadirlo a la carta, llamemoslo un "Sieg Special". Que te parece, jefe?

Cuando los tuvo listos me cogí uno en cada mano y me senté con Max.

- El viejo Quan ha quedado impresionado creo. Me parece que la gente de por aqui no tiene mi apetito. - Comenté mientras me preparaba para desayunar en condiciones. - Y de que va esa mision de la que hablas, Max?

El abuelo Quan cuando le pides los primeros bocatas te hace los pequeños, pero al comertelos te da la sensacion de que te comes 3 almacenes repletos de comida hasta arriba incluso el 3º te cuesta un poco mas digerirlo - Son los mas "grandes y potentes" que tengo en mi menu, ñam ñam. Hasta dentro de cinco dias no necesitaras comer ñam, aunque veo estupido que no quieras comer durante un tiempo ñam ñam, la gastronomia es lo mejor de este universo.

No deberias subestimar al abuelito Quan, jiji - Dice Max - Y creo que llegamos tarde, nuestros compañeros no estan aqui, sigueme corre. - Empieza a correr de manera torpe por un pasillo hasta llegar a un hangar repleto de naves gumi

Llegas con tus compañeros a un hangar repleto de naves gumis hasta arriba y un abuelo reparando alguna de ellas. Ves como Sean se adelanta y se pone a hablar con el abuelo mientras Sylfine se dirige a ti de nuevo - Bueno... tecnicamente esta mision ibamos a ser cinco... pero como siempre el pequeño mago ese se retrasa, asi que tendremos que salir sin el en cuanto la nave este preparada.

Tras unos minutos hablando miras como Sylfine mira hacia el pasillo de donde venis y dice...

Hombre ya era hora. ¿Que te ha pasado esta vez Max? ¿De nuevo te has quedado dormido? ¿O como siempre es el maldito libro? - Le dice a Max ahora que acabais de entrar por la puerta una chica con pinta de arquera.

Max: Hola Sylfine, y ya sabes que no puedo evitarlo, es como soy. Bueno de que va la mision, traigo al nuevo - Responde Max, un niño con un libro bajo el brazo

Es contrarreloj, hay que salvar personas en un mundo que esta a punto de caer. ¿Como te llamas chico?

Me sorprendió que esos pequeños bocadillos me llenaran tanto. Le di las gracias al abuelo, con un guiño, pues me sentia a punto de reventar. 

- Me llamo Sigfried Hessell, pero todos me llaman Sieg. - Le dije con una sonrisa y conteniendo un eructo. Al oir de que iba la mision me quedé extrañado. - Bien vamos. - Dije levantandome de golpe. Sabia como responder a las misiones contrarreloj. Preferia las explicaciones en movimiento. - Y de camino cuéntame como es posible que un mundo se "caiga".  

Llegar tarde a una misión contrarreloj, menuda contradicción. Miró la naves esas, y,... en fin, no parecían lo más estable del mundo, tampoco parecía tecnología albhed, y no pudo evitar tragar saliva.

- a parte de que tampoco entiendo del todo eso de "mundo caído" y supongo que os refeís a algún tipo de mal que hace inviable la vida, ¿en esas cosas se supone que llegaremos sanos? ¿y como vamos a meter en eso a todo un "mundo"?

Empezaba a pensar que eso no era ni el cielo ni el infierno, y que estaba vivo, pero o estaba soñando algo muy raro, o la gente no estaba muy bien de la cabeza.

Es algo peor - Explica Sean, el chico que estaba hablando con el abuelo. - Recordais las sombras que os mostraron antes, si esas sombras, o sus personificaciones invaden una cerradura situada en los mundos... que basicamente es como el corazon del mundo, ese mundo se invade de oscuridad y poco a poco puede llegar a desaparecer. Este mundo al que vamos es Ciudad de Paso, es el mundo que queda en transito para todos aquellos que pierden su mundo... llevamos tiempo protegiendolo, pero al final se nos han adelantado. - Señala a Cid - Cid me ha dicho que nos tenemos que llevar un Carguero Gumi y sacar a todas las personas que podamos y trasladarlas a Vergel Radiante. Esa es nuestra mision. ¿Alguna duda?

Sylfine se ve impresionada ante la explicacion de Sean

- a por todo el mundo pues,... pero, si vemos cosas de esas ¿atacamos? Porque no creo que los bichos esos se estén quietecitos - en el fondo Vin creía que con llevar un grupo de 12-20 tomberís acabaría con esas cosas, pero claro, luego a ver quien es el listo que frena y captura a tanto tomberí junto. Tal vez la solución era peor que el mal en si.

Por eso venis Max, Sylfine y tu. - Dice dirigiendose a vosotros - Sylfine es la unica de nosotros que obtuvo la llave espada al mismo tiempo de llegar aqui, en conjunto con la magia vuestra podreis matar enemigos, Sieg, has dicho que te llamabas ¿No? Tu y yo defenderemos a las personas que traten de llegar a la nave gumi y los escoltaremos, no podemos matar a las sombras, pero si defendernos de ellas. - Va hacia la nave gumi - Este es nuestro navio, cuando esteis listos partimos, vuestros equipos y algunos objetos ya estan dentro. - Dice mientra entra en la nave y se pone ha hacer algunas cosas que no veis

Parece que esta mision es mas seria de lo que pensaba - Dice Sylfine mirando como Sean sube - Nunca se pone asi salvo cuando hay peligro de muerte en alguien... y este caso es un mundo. Trataremos de hacerlo lo mejor que podamos ¿vale?

Yo voy subiendo - Dice Max mientras sube torpemente a la nave

- ... - un instante de silencio se adueñó del invocador - ¿supongo que la magia curativa no daña a esos bichos no? - luego miró a su colgante y transmitió sus pensamientos - menos mal que has venido conmigo amigo, estaría perdido sin ti, tras la misión ya nos pelearemos un rato ¿te parece buen plan? - esbozó una sonrisa introduciéndose en la nave.

Asentia de brazos cruzados mientras Sean explicaba la situacion. 

- Vaya, tendre que hacerme con una de esas llaves para pelear contra esos bichos. - Dije al fin. Me metí en la nave junto al resto. - Ayudaré a defender a esa gente. - Sonrié con una sonrisa radienta y llena de confianza. - Ya veran esos bichos como se las gasta un capitán de los SeeD! 

"Desearia que Diablo estuviese conmigo..." Aunque a regañadiente siempre, mi leal GF me ha prestado una ayuda en combate inigualable. Le echaba de menos...

La llegada fue rápida, bajó de la nave con calma, preguntándose que debía hacer al llegar, ¿tenía que informar de algo? ¿a quien? ¿donde? ¿a parte del comedor había algún otro sitio al que ir? Se daba cuenta de que todavía no sabía nada de nada, y aquel sitio era tan desconocido para él, como esa cosa a la que llamaban "llave espada".

- Bueeeno, ya hemos llegado. - Comenté algo decepcionado por no poder llevar la nave. - Y ahora que? - Le pregunté a la chica. Al fin y al cabo era ella quien nos habia reclutado no?

Sean: Yo ire a informar de las misión... no pensaba que sería tan problemático.

Sylfine: Yo te acompaño

Sean: Como quieras, yo después ire a la enfermería. Hasta nueva orden podeis andar por el castillo. De hecho deberiais buscar a Ninasu, son unas niñas que administran las habitaciones... son gemelas, y tened cuidado con ellas.

Max ignorando que estais hablando coge el libro poniendose a leer y avanza por el pasillo sin mirar alante

- ¿Ninasu? Bien. - Le respondí a Sean. Hasta ahora no me habia dado cuenta de que estaba algo cansado. -Hasta luego! - Le dije despidiendome de ellos con la mano. Me volví hacia Vin. - Tienes idea de donde está esa tal Ninasu? Te importa si pasamos antes por el comedor a por algo de papeo? Esa pelea y esa nave me han dado hambre. - Le dije con una enorme sonrisa.