Partida Rol por web

Una vez finalizadas las pruebas, Junichiro miró a Suzue y le hizo un gesto para que le acompañara. Podrían aprovechar el descanso para mirar las puertas.
 

La joven, que no se separó de su amo, asintió,  y se fue con él hacia dentro del templo, caminando a pasos cortos detrás del gran samurai, y logró ponerse a su lado.

- empecemos por la habitación del asesinato, de ahí... rastrearemos el resto de las habitaciones, mi señor - le indica la joven Suzue, ella sentía que su corazón latía con violencia,  si descubrían algo, podrían poner en duda lo que los anfitriones habían asegurado, y no sólo eso, sino que podrían llegar hasta el asesino, el cual, no dudaría en atacarlo. Si, sentía miedo, pero también emoción de poder resolver algo que aún le parecía extraño.

HIroto dejo el lugar luego de su derrota sumando así otra más a las pruebas que había tomado en este torneo. Camino por los pasillos con aquellos movimientos lentos y gráciles.  Paso frente al templo y negó con la cabeza, las palabras de Chomei aún seguían en su cabeza, pero como sacarse tanta muerte de la mente cuando… ya no importaba nada así que tomaría un descanso meditando un poco en los jardines antes de presentarse en la ultima prueba.

Junichiro asintió y se dirigió hasta la habitación del Ide, donde había sido asesinado, y se puso a inspeccionar la puerta en busca de alguna marca distintiva. Tal vez solo estuviesen siguiendo un rastro frío, pero era mejor asegurarse para evitar nuevos incidentes y ahorrarle más vergüenza a los Suzume.

La puerta en si misma no tiene nada de peculiar. Es una buena puerta de madera, nueva y funcional. Los papeles que llenan sus espacios para dejar pasar luz son tambien de buena factura, y el emblema del Ide esta bien dibujado, al igual que adjunto el de la familia Tombo.

No obstante, como pudieron comprobar antes y ahora nuevamente, la puerta no abre lisa y suavemente como es debido, sino que parece raspar en un par de puntos. La madera no exhibe ninguna deformacion rara, solo la normal de la humedad. Tal como señalara el carpintero, si esta puerta se hizo a medida para una abertura, no fue para la que actualmente ocupa. 

Pero fuera de comprobar fehacientemente eso, no hay otro dato que indique de donde pudo corresponder originalmente. Ademas, al estar pintada con un emblema, no pudo salir de cualquier parte. Las unicas puertas de ese estilo son las de los demas participantes.

Cuando sales al jardin, puedes observar que Daidoji y Suzue tambien lo hacen, pero yendo en derechura al cuarto del Ide. Alli se quedan en la puerta, mirando algo atentamente en la misma...

El Grulla suspiró; no había sacado gran cosa en claro de todo aquello y sus sospechas de que podría tratarse de una pista falsa se acentuaban.

- Lo único que saco de todo esto es que el responsable de instalar las puertas se confundió y colocó aquí una puerta que no correspondía con su marco, pero como el emblema ya estaba dibujado, no pudieron cambiarlo. Lo que singifica que debe haber otra puerta mal colocada, la que debería estar aquí.

La joven estaba agachada, constatando lo mismo que su amo, pero también intentó buscar la marca que el carpintero había dicho, sobre las puertas.

- sí, como el símbolo está dibujado, debió hacerse antes del cambio, pero no tiene sentido que el carpintero haya  cometido este error, parecía una persona ya versada en su oficio, como para cometer un error tan pueril...- se puso de pie y se alisó las telas de su kimono - no encuentro la.. marca que el carpintero dijo, la especie de enumeración que siguió para colocarlas -  se mordió el labio inferior -  solo hagamos eso...  y busquemos la habitación... aunque... - la joven llevó su dedo a su barbilla -¿habrá sido esta la habitación original del difundo Ide?.. digo... que tal si quién cambió las puertas, lo hizo desde la habitación original, tomando la puerta ya pintada y la puso aquí por alguna razón?... debemos encontrar la puerta original, mi señor y preguntaré si Ide-sama siempre estuvo destinado a esta habitación -  la joven fue a las otras habitación para abrir y cerrar las puertas, la que estaba mal hecha, debería notarse.

- El carpintero haría las puertas, pero no sería él el que se ocupase de ponerlas en su sitio. Seguramente esto fue el error de algún sirviente -comentó el Daidoji mientras comprobaba otras puertas para verl cual abría mal
 

Mientras revisan son observados por Hiroto, el cual ha salido al patio sumido en sus propios pensamientos. El Escorpión se acomoda el cabello, mirando que están haciendo con moderada curiosidad...

Entretanto, puerta tras puerta van revisando, sin aparente resultado, y con la fortuna que nadie ha vuelto a las habitaciones de momento, pues podría ser muy incómodo si abriendo sorprenden a uno de los ocupantes.

Finalmente, casi llegando al final del pasillo, Suzue abre una puerta y nota que esta también está algo dura! Alza la vista, para apreciar el mon pintado en ella...

Es el emblema purpura de Iuchi. La habitacion de su fallecido salvador.

- Hum... Tanto la puerta de Iuchi como la de Ide son las que se encuentran en los lugares equivocados... Esto no es casualidad. Puede que alguien colocara mal las puertas a propósito para marcar los objetivos al asesino -comentó- Hiroto-san, vos estabais preocupado por que el asunto de los asesinatos no se hubiese resuelto del todo, ¿no? Tal vez hayamos encontrado otra prueba.

- imposible, Daidoji-sama, esta o es una casa de cualquier vecino del barrio, esta es la casa de importantes señores, un error así pondría en duda todo el trabajo del artesano, -  la chica estaba con mucha confianza, mientras abría las puertas, una a una, observando dentro, si había alguien, pondría cara de idiota y se disculparía por el "inocente" error - además, de que alguien lo hubiera notado antes, y hubieran mandado a cambiar las puertas... este error es reciente - sentencia la chica.

La joven se puso de pie, había acertado, todos estarían en el evento, y por lo mismo, no notarían que ambos personajes andaban de detectives. Cuando el hombre apareció, Suzue ya tenía un pista, una extraña pista. La chica abrió mucho sus ojos y observó a su amo. Esa era la puerta y era la de si amado Ide, y eso, no era una coincidencia.

- interesante...- dijo entre dientes, pero no se atrevió a seguir hablando cuando apareció aquel hombre, se quedó detrás de  su amo,  con los ojos agachados, en parte deseaba que se fuera para poder seguir hablando, y seguir investigando sobre todo, pero ella no era nadie para pedir tal cosa,  además,  Daidoji  ya lo había hecho parte de lo que estaban haciendo, aunque el Escorpión  había compartido su incredulidad ante la "versión oficial" de los hechos. Esperó sus palabras, para que ella hablara.

- Daidoji-sama, debemos averiguar cual era la distribución original de las habitaciones... es urgente..- murmuró la jovencita, al lado de su amo, con ganas de investigar esa habitación. En su corazón crecía el deseo irrefrenable de encontrar al asesino o al que concertó todo para que Ide-sama muriera...

Hiroto termino por acercarse a Daidoji y Suzue, - Preocupado no dejo de estar – observo con detalle lo dicho por Daidoji pero quedo mudo ante las palabras de la joven mujer.  Entonces podían ahora ser más incógnitas aunque los crímenes realizados parecían mermar o esperar el momento oportuno para volver atacar.

-Pues no esperemos más, debemos preguntar –

En su cabeza había entrado la duda de si todo este torneo se había armado por una especie de venganza o realmente, los asesinatos fueron al azar.

El grulla asintió a las palabras de Suzue

- ¿A quien podríamos preguntar? No creo que los jueces estuvieran al tanto de esto. Tal vez alguno de los Suzume, pero según me dijeron, ahora mismo no se les puede molestar, y la próxima prueba empezará en breve.

La jovencita se cruzó de brazos, estos importantes hombres olvidaban que existían muchas otras personas aparte de ellos mismos, claro, el resto de la humanidad que no fuese samuraís, eran menos que nada, invisibles. Por eso la jovencita emitió un largo suspiro.

- los criados, el encargado de la casa... debió recibir la orden de preparar las habitaciones, incluso, quién pintó los símbolos... si gustan, puedo ir yo a hacer las averiguaciones con ellos, mientras esperan que terminen las eventos, aunque no creo que ellos, los Suzume, quieran dar más datos de un tema que dan por superados -  bajó la mirada y pensó en el joven de los Suzume, quizás, él quiera averiguar más sobre un asunto que los había desgraciado, aunque no sabe si ellos ya se habrán ido...

- La última vez que preguntamos parecían algo raros, como si les hubieran intimidado - Miro a Suzue - Pero tienes razón quizás tu podrías sacarles algo - Agrego mientras esperaba la aprobación de Daidoji.

Se apartó unos pasos y miro por el pasillo un minuto más o menos – Nosotros podríamos recorrer el lugar, al menos podríamos revisar un poco mejor los lugares donde se encontraron los cuerpos-

- pero por lo que sé, Ide-sama no fue asesinado en su cuarto, ¿cierto?.. esa parte de la historia no la tengo demasiado clara - la joven ese encogió de hombros.