Partida Rol por web

El cuerpo de Lord Devirius junto al de uno de los soldados lunars leales se elva del suelo, colocandole junto a la grieta, pero del lado de sus aliados. A continuación, Lezmar cae desmayada al suelo.

Argos ayuda a Devirius y al soldado a alejarse de la grieta una distancia prudencial, tras lo cual acude a Lezmar preparando su cantimplora para vaciar el agua en la cara y la garganta de la hechicera intentando reanimarla.

Lezmar continúa desmayada su pulso es muy débil. Está agotada.

Los soldados lunares de Jar-Eel huyen mientras los goblins al otro lado de la brecha en el suelo regresa hacia el túnel, para poder volver a la cueva, pero lo tienen difícil.

tratemos de salir de aqui, Argos puedes cargar a Lezmar?,

Hey gobblin por donde queda ese sumidero que dijiste, por ahora es nuestra unica opcion. le pregunta devirius al escuchar al pequeño la posibilidad de salir de aquella caverna.

los que me preocupan son Leanan, Drerick, Lommy y Kaa, si esto se viene abajo espero que exista otra salida.

Es por aquí, dice el jefe de los goblins.

Pero no creo que os guste demasiado el camino.

Plesel se acerca a la bruja Ya la llevo yo, vosotros tal vez tengáis que pelear por el camino que espero que no, que ya no estamos como para otra batalla recoge a Lezmar del suelo y poco a poco sigue Tuldar... que habrá querido decir el bicho éste con eso de que no nos va a gustar el camino??

Plesel levanta a Lezmar... pero pesa demasiado para el así que al intentar levantarla del suelo lo único que consigue es ponerse rojo por el esfuerzo y que un sonoro flato se le escape...

al tratar de levantarla Plesel lo que consigue es caerse sobre el cuerpo de la inherte bruja. Apoyando su cara en uno de sus pechos, impidiendole respirar.

Animal, la vas a matar. Argos apartó a Plesel mientras lo ayudaba a levantarse cabreado por la situación con Jar-Eel, aunque era un hombre de palabra, y esa mujer le había dicho que él mismo había jurado protegerla, y eso es lo que haría, por lo que se dispuso a cargarla en brazos con cuidado, sin embargo no lo consiguió, el combate lo había dejado muy débil.

Argos aparta al inoperante comerciante y trata de levantar a Lezmar del suelo, pero no lo consigue, la armadura y armas le estorban en exceso.

Al ver como la cuerda de mi arco se destensa, empiezo a maldecir en voz baja, aunque me callo rápidamente, sorprendido al ver como el cuerpo de Devirius y el de otro soldad flotan sobra la grieta para alcanzar nuestro lado...

Bien hecho Lezmar... - pienso, mientras mis manos trabajan con la cuerda y la tripa del arco, colocandola de nuevo en su sitio para acto seguido colocar el arco a mi espalda. - Larguemonos de aquí. - afirmo, decidido y confiado en que podemos hacerlo, aunque al darme la vuelta observo como Plesel y Argos intentan cargar con Lezmar. Mierda, y ahora que pasa!! - pienso, mientras corro hacia ellos, comprobando que la hechicera esta inconsciente.

Joder, que le ha pasado a Lezmar?? - exclamo, al verla tirada en el suelo. - Dejadme, ya me encargo yo de ella!! - afirmo, abriéndome hueco entre Plesel y Argos, y alzando el cuerpo de la hechicera con facilidad. - Venga, pongámonos en marcha, esto se puede venir abajo en cualquier momento!! ¿Por donde? - finalizo, esperando a que me indiquen por donde diablos vamos a huir...

Taurnil, por primera vez carga con alguien en vez de que alguien cargue con él.

Agarra a la bruja y poniendola sobre su hombro sigue a Tuldar, escaleras abajo, hasta llegar al segundo nivel. Allí tras una baldosa del suelo mal colocada, un respiradero negro y pestilente se desprende hacia abajo, a través de un túnel cenagoso.

Es nuestro pozo negro, llega hasta la parte inferior de la montaña, pero lo de abajo es un lugar repugnante.

Tuldar parece dudar, para con la mano señalar a los goblins que vayan saltando por el túnel. Los pequeños parecen algo remolones, pero finalmente parecen aceptar que no les quedan más opciones. El primero de ellos salta deslizandose carrera abajo por el túnel, en posición sentada, algunos orcos hacen lo mismo, pero totralmente tumabados.

Espero que entréis por el túnel, creo que sí...

Tuldar se prepara para lanzarse rampa abajo cuando cae en la cuenta.

Alguien debería avisar a vuestros amigos de abajo.

Magern muestra una mueca de desagrado ante los ultimos acontecimientos.. Esta ansioso por vengarse y recuperar el trono perdido pero sabe que ahora no es el momento, tendran de nuevo su oportunidad..

Se acerca al cuerpo de Lezmar al tiempo que ve como su compañero por fin consigue carga a la joven. Acto seguido se pone en marcha tras sus compañeros cerrando la comitiva.

Plesel se asoma al hediondo sumidero y toma una decisión... o mejor dicho su estomago toma una decisión:

Yo iré a avisar a las chicas y a Lomy... AH! si, y a Drerick

A ver si tengo suerte y han encontrado otra salida, que ese agujero infecto es asqueroso... ademas así puedo hacerme con algo de valor de este nivel... como recuerdo de esta aventura.

Incluso Tuldar se lanza por la rampa sin pestañear mucho, ante un nuevo y terrible temblor de tierra.

Algunas piedras caen desde lo alto de la cámara intermedia de la cueva.

Dejándo sueltas algunas piedras preciosas. Por el momento las rocas son de pequeño tamaño, pero la enorme cantidad de grietas que se abren paso a través de la roca, anuncian un mal presagio.

Plesel se dirige escaleras abajo hacia la posición que guardaban las dos mujeres, Lomy y Drerick.