Partida Rol por web

La Alianza Rota de Calebais

Capitulo Uno, parte II: El Velo de Mormul

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22/10/2018, 19:11
Narrador

   En el momento en el que cruzáis la linde del bosque más allá del limite del campamento, el efecto del hechizo de Mormul os envuelve y destroza totalmente vuestras defensas mágicas. Es el legado de Mormul, un hechizo tan poderoso que le ha sobrevivido y que protege y defiende los restos de Calebais para toda la eternidad...

   El choque de la magia os desorienta momentáneamente, aunque no os causa daño ninguno, salvo un leve mareo y durante un segundo la visión borrosa, cuando se aclara, el bosque parece distinto y con algo de espanto os dáis cuenta que sois incapaces de recordar la dirección de vuelta al campamento.

  

- Tiradas (4)

Notas de juego

   La potencia de penetración del hechizo (85) se enfrenta a vuestra parma mágica+menten (17 y 25), al ser más del doble, no sólo os a efectado sino que la potencia mágica a disipado y reventado vuestras parmae mágica.

   No os preocupéis, restaurar la parma mágica es un ritual que se hace en un minuto de tiempo o así. Pero tenéis que indicar si queréis levantar vuestras defensas mágicas ahora o no. Estáis vosotros, Sir Gilbert y Luc.

   Por cierto, el aura del bosque en el Velo de Mormul es un aura faérica +4.

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22/10/2018, 20:56
Narrador

   Una o dos horas después de decidir quien entra y quien se queda en el campamento, os dirigís junto con Sir Gilbert y Luc al interior del bosque. Sir Gilbert avanza confiado, casi siempre en primera línea, mientras Luc camina más rezagado, receloso de daros la espalda en ningún momento.

   En el momento que os alejáis del campamento de Sir Gilbert y entráis en lo profundo del bosque, un leve mareo se apodera durante un instante de vosotros, y la visión se os vuelve borrosa, más al segundo se aclara, pero notáis que algo ha cambiado. El bosque parece distinto, los colores más vivos, el aire más vibrante, los sonidos más claros, de pájaros cantando en el interior. Miráis alrededor, pero no lográis ver ya el campamento de Sir Gilbert, de hecho... no estáis seguros de en que dirección quedaba... ¿era por ahí...? ¿o por el otro lado?.

   Enfrente vuestro se alza un obelisco, aunque las letras están algo borrosas.

  

  

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25/10/2018, 03:35
Sir Gilbert

.

   - Aquí estamos, al comienzo del bosque maldito, este obelisco marca el inicio de tierras paganas y embrujadas, debemos estar alerta. -

   Sir Gilbert desenfunda su espada y la eleva para que los rayos de sol del atardecer se reflejen en ella, el efecto óptico que resulta de ello hace parecer que la espada brilla en la calma del bosque.

   - A partir de aquí espectros, brujas, animales parlantes y quien sabe que más vendrán a tentarnos para que los sigamos. Luc y yo somos del parecer que encierran un acertijo y que hay que seguirlos en orden, si te equivocas en uno sólo, acabas perdido y desorientado. -

   Luego afirma rotundo.

   - El primero es un zorro rojo, estoy seguro de ello, tan información me viene por inspiración divina tras rezar. -

.

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25/10/2018, 13:23
Wolfgang

Bufó ante el hechizo que los envolvía y se llevó una mano a la cabeza hasta que sus sentidos se acostumbraron a los cambios que se sucedieron.  De golpe toda aquella repentina intensidad lo hizo sentir más vivo que nunca y al contrario que Sir Gilbert, entendía aquello como una bendición.  No dijo nada que contradijera al hombre, pero cuando lo vio desenfundar la espada hizo lo propio con su arco y preparó una flecha dejando el arma lista para ser tensada si algún peligro se acercaba.  No tenía idea de a que se refería con los acertijos y los zorros rojos, pero también sabía que su papel en aquella compañía, y por lo que se le pagaba, era acompañar a aquellos hombres y servirles como guardia y protector.  Su espada pendía lista para ser desenvainada si el paisaje cambiaba e impedía el uso del arco o si alguna criatura cortaba distancia.  Avanzó hasta colocarse a la izquierda y un par de pasos detrás de Sir Gilbert, quien parecía tener toda la intención de encabezar la expedición.

Su mente guerrera volvió a dominar aquella alegría que lo había embargado ante la explosión de vida que había sufrido el mundo, su ceño se frunció producto de la concentración y también con el fin práctico de atenuar un poco los contrastes entres luces y sombras que resultaban perfectos para ocultar algún enemigo.  Así, alerta y en silencio continuó la marcha manteniendo el la distancia entre quien lideraba el grupo y observando por sobre su hombro para asegurarse que nadie se  quedaba atrás.

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25/10/2018, 14:03
Myrddin Emrys

La sacudida mágica nos afecto a nosotros más que a los propios mundanos como cabría esperar. El hechizo era potente, tanto que había reventado metafórica y literalmente nuestras protecciones mágicas, aquellas que vestíamos cada orto y cada ocaso y con las que estabamos tan familiarizados como a nuestras propias ropas, o quizás más, incluso como con nuestra propia piel. Andar de aquí por allí sin la Parma me hacía sentir desnudo, vulnerable, y no era un mero sentimiento, era una realidad; sin Parma estaba vulnerable ante cualquier posible ataque mágico.
.
Mi primer impulso fue restaurar inmediatamente la protección, pero caí en la cuenta de Sir Gilbert y Luc, quienes no estarían acostumbrados a la magia como nuestros hombres, o quizás incluso la viesen con malos ojos. Había que solucionar aquello.
.
Me giré a Sir Gilbert y Luc.
-Mis señores, como sabrán ya o habrán intuido, no todos entre nosotros profesamos la religión de Cristo, algunos seguimos a los antiguos dioses de estas tierras. No es mi intención iniciar un debate sobre creencias. Nosotros respetaremos las suyas, tal y como acordamos, y les pedimos que ustedes respeten las nuestras aunque no las compartan. - levanté ligeramente las cejas para remarcar mis palabras
>>En este bosque encantado, con lo que ustedes nos han relatado y lo que nosotros podemos sentir, nos urge la necesidad de celebrar un pequeño ritual que nos proteja de los malos espíritus - dije con toda la seriedad
>>Pueden aguardar a un lado o alejarse un poco si lo desean, aunque les recomendaría que no tanto como para perderles de vista. En cualquier caso, les ruego que no nos interrumpan. Llevará poco tiempo.
.
Tras lo que espero su contestación.
En caos de ser afirmativa asiento a Dolmen cómo indicándole que inicie ella el ritual, confiando en que haya entendido que mi intención es que camufle la ejecución de la Parma Mágica como un ritual druidico de nuestra tradición.

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25/10/2018, 14:16
Steappa

Este encargo cada vez iba tornandose más extraño. El mercenario no pudo resistirse de agarrar con fuerza el mango de su hacha en el que había clavado un pequeño martillo de hierro, simbolo de Tuor, para alejar los malos espiritus.

Tras desvanecerse las nieblas y recuperar la visión hasta su mente obtusa puede darse cuenta de que algo extraño ocurre aquí. Ese bosque no es normal, aunque quedará en manos de hombres y mujeres más doctos el determinar la causa de tal extrañeza. El por su parte sigue el ejemplo de Wolfgang y apresta su arma. No sin cierto nerviosismo.

Las palabras de su extraño patrón si que resultan tranquilizadoras. Cualquier ritual que aleje a los svartalfar y otros seres máleficos y ocultos que a buen seguro pululan por la espesura será bienvenido.

Quizás no sea tan malo estar empleado por tan extraños personajes al fin y al cabo.

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25/10/2018, 15:33
Albert Fox

Como sucedió unas horas antes al acercarnos al poblado de los sátiros, las perturbaciones que sufren mis sentidos al entrar en esta parte del bosque me desconciertan. Perder mi sentido de la orientación es como perder los dedos con los que tenso el arco. En un movimiento inconsciente me persigno, lo que me hace pensar que no me he vuelto tan cínico hacia mis propias creencias, al fin y al cabo.

La rapidez y entereza de mis compañeros grogs me anima. Al igual que ello, ocupo una posición defensiva y alerta, con el arco en la mano, y espero a que los señores decidan el próximo movimiento. Miro impresionado a Sir Gilbert, que dice haber recibido inspiración divina en sueños. Me pregunto qué opinará su consejero de todo esto, y hago firme propósito de preguntárselo en cuanto tenga ocasión.

- Tiradas (1)
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25/10/2018, 15:51
Dolmen

 

Dolmen asintió y reforzó el punto.  Sólo es una bendición, y luego nosotros podremos cubrir de peligros mientras ustedes hacen eso suyo de hincarse y cerrar los ojos con las palmas juntas para hablar con su dios.  Cada uno su tiempo.  Todo el respeto.  

Wolfgang.  Con una palabra lo invitó al ritual -para más reforzar la idea de que era algo religioso-, pero también le dio a elegir por si quería seguir con la mirada abierta y el arco tenso.   

Finalmente le era fácil vestir todo esto de algo formal, pues, era cierto, para ella la magia diedne estaba intrincablemente ligada a la religión, así como para algunos de los otros magos estaba relacionada con las religiones del antiguo imperio romano y más atrás aún.  Hermes creo que llamaban su dios alado. 

 

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25/10/2018, 16:54
Wolfgang

No prestó demasiada atención a las palabras que se habían dicho, más preocupado por la extrañes de lo que les albergaba delante, fue por eso que demoró unos instantes en comprender que quería la druida cuando había dicho su nombre.  Viendo que el resto de los luchadores habían adoptado una postura vigilante decidió ser partícipe de celebración y dedicó en silencio sus propias súplicas.  Pidió fuerza, coraje, valor para poder enfrentarse a lo que le esperase más adelante y también pidió protección y buen augurio para él y sus compañeros.  Además de eso se dejó guiar por Dolmen para la práctica litúrgica.

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25/10/2018, 17:15
Sir Gilbert

   Cuando habláis de rituales paganos, podéis sentir que la cara de Luc se pone blanca a medias entre el estupor y la ira, pero nada dice y se contiene bien, pues un segundo después vuelve su rostro impasible.

   Sir Gilbert parece algo sorprendido, pero se limita a decir.

   - Bueno... supongo que no pasa nada si nos paramos a rezar un rato. - Tras ello clava su espada en el suelo formando una cruz y se arrodilla sin prestaros atención mientras repite en silencio las palabras del rezo de Luc.

- Tiradas (1)
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25/10/2018, 17:21
Luc

Pater noster, qui es in caelis:
sanctificetur Nomen Tuum;
adveniat Regnum Tuum;
fiat voluntas Tua,
sicut in caelo, et in terra.
Panem nostrum cotidianum da nobis hodie;
et dimitte nobis debita nostra,
sicut et nos dimittimus debitoribus nostris;
et ne nos inducas in tentationem;
sed libera nos a Malo.

 

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25/10/2018, 22:20
Myrddin Emrys

Ignoro la mala cara de Luc que ya me esperaba y me alegro por que Sir Gilbert se muestre tan comprensivo.

Le hago un gesto de invitación a Steappa ya que antes se declaro seguidor de los antiguos dioses. Quizás quiera sumarse.

A Albert y Mailoc los dejo ya que sé que gustan más de su intimidad y no han demostrado un sentimiento especial por los dioses.

Me uno a Dolmen en la celebración de nuestro pequeño ritual que dura poco más de un par de minutos.

Cuando terminamos Sir Gilbert parece haber terminado también su rápida oración y estamos listos para continuar atentos

- Bien. Estamos dispuesto, Sir Gilbert. El zorro rojo decís, ¿cierto? – pregunto amigablemente - ¿Dónde lo encontrasteis la última vez?

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26/10/2018, 12:43
Narrador

 

   Aún no se ha extinguido el eco de las voces de Myrddin,  cuando las ramas de los árboles parecen agitarse, aunque no hay viento...

   Entonces los veis, una ardilla salta de rama en rama de color rojo intenso y el doble de grande de lo que debería ser una ardilla normal, brincando por el suelo un gallo ¡de un metro de alto! que aparece brincando y pegando saltos desde los matorrales, cuya cresta es plateada. Y un hombre joven ataviado de verde, con un sombrero adornado con una pluma, aparece de entre los árboles y se acerca calmadamente hacia vosotros, hace una reverencia y empieza a hablar.

   ¡Cuando termina veis que al gallo abre el pico y os habla! Apenas ha terminado y antes de que os repongáis una voz chillona atrae vuestra atención a los árboles, ¡es la ardilla la que está hablando ahora!

Bienvenidos al Velo de Mormul, suerte con el enigma.

Notas de juego

   A partir de ahora, se os irán acercando varios guias, cada uno os dirá unas palabras y hará gestos para que le sigáis, debes decidir si seguís a uno de los que han aparecido o esperáis a otros, hagáis lo que hagáis, tras decir sus palabras los guias se van sin esperar a nadie.

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26/10/2018, 13:22
Narrador

Notas de juego

   Os recuerdo la carta que transcribistéis, que habéis llevado con más o menos cuidado.

   Sodales,

   Mis buenos amigos, tengo que daros una triste noticia que contar. Ya no existe Calebais, ha sido destruida. Peligroso es el diablo que nos acosa, pero su entrada en vuestras vidas no es del todo inevitable. Aprended de nuestros errores que cometimos al enfrentarnos al mal que encontramos en nuestras propias cámaras. Prestad atención a mi advertencia si queréis evitar nuestro destino, pues os escribo desde la tumba.

  El Velo de Mormul fue el principio de nuestro fin. Se suponía que era lo que iba a traer la paz a Calebais y a los que vivíamos en ella, pero al final, fue lo que nos destruyó. Aunque por sí mismo no podía hacernos daño, fue lo que permitió que los demonios se introdujeran entre nosotros, y cuando finalmente se usurpó el Código de Hermes, nuestra tentación fue completa.

   Os lo ruego, amigos míos, cuidaos de la codicia de vuestras almas. Esta enfermedad os destruirá de la misma forma que acabó con nosotros. No penséis que es vuestra propia codicia, es de otros, es del Señor Oscuro. Sed fuertes y manteneos unidos, no sea que también os veáis acosados por nuestra misma maldición. Hacedlo para no estrellaros contra las rocas del Infierno.

   Si os veis lo suficientemente fuertes, recuperad la preciada Campana de Ibyn. Este dispositivo de advertencia sirvió a Calebais desde su fundación, aunque no fue capaz de detectar los demonios que entraron en nuestros corazones. Aun así, este preciado tesoro sí que podrá protegeros del peligro del exterior, tal y como nos protegió a nosotros, siempre que estéis a salvo de vosotros mismos.

   Para llegar a la Campana, primero tendréis que atravesar el Velo de Mormul. Sólo lo conseguiréis si encontráis a la dríada que vive en lo alto de la colina Hendida. Los doce guías os conducirán hasta ella si los seguís en el orden correcto y entonces responder al enigma que plantean. El ladrón rojo es el primero, seguido por la criatura que se arrastra por el aire, la que se arrastra por el suelo, la que…

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26/10/2018, 13:47
Dolmen

 

Dolmen vio aparecer a los mensajeros, y llamó a conferenciar a todos, señores, magos y grogs, para que entre todos pudieran descifrar el acertijo que jugaba con ellos entre velos.

Primero, lo obvio: Si es el "ladrón rojo", pues roja es la ardilla y ninguno otro, a menos que sea una alegoría para confundir, y que aplique a uno de los otros dos. 

En todo caso, iría por la ardilla primero.  ¿Quién es el "más poderoso de los santos hombres"?  Ya la palabra santo es algo de sus nuevas religiones, no de la nuestra.  ¿No tienen ustedes un jefe religioso que vive en el centro de su antiguo imperio?  -le dijo a Sir Gilbert y Luc.  Uno que llaman como si fuera su padre de todos ustedes.  ¿O es su dios de tres que bajó a la Tierra?  Si es alguno de los dos, ¿cuál sería su don?  ¿La infalibilidad? ¿El perdonar todo?

Miró a todos, y de soslayo a los tres mensajeros que aparecían a saltos y ratos.

El hombre verde o es un árbol grande o la muerte. 

El gallo, -miró entristecida al suelo, algo le dolía a ella de sus palabras pero no sabía que era- tiene plata, podría ser una moneda de esto, y la avaricia que hace nacer en más de uno.

¿Ustedes que piensan?  - Miró a Myrdinn, los acertijos eran más para alguien como él.

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26/10/2018, 14:08
Albert Fox

Una vez me he dado cuenta de que salir corriendo no serviría de nada, y de que servir a los sabios significará estar en contacto frecuente con apariciones y monstruosidades varias, mi mente se tranquiliza y trata de buscar la solución más lógica y pragmática a los problemas, como ha hecho toda la vida.

Aprovechando el momento de sobrecogimiento en el que todos guardan silencio, me dirijo a Wolfgang y a Steappa, como si quisiera entablar una insulsa conversación de grogs, pero me esfuerzo por que mi voz suene lo suficientemente clara y llegue a los oídos de Sir Gilbert:

Por Dios nuestro Señor y todos los santos, amigos. Llevo toda la vida recorriendo y explorando los bosques, que casi diría que me conozco cada especie animal y vegetal que en ellos puso el Señor. Y, aún así, cuando he visto esa enorme ardilla roja, en un primer momento he pensado que era un zorro, por el tamaño y la figura que tenía. Y como saltaba entre las ramas y no se la veía claramente, sino más bien como entre sueños, me parece a mí que cualquiera podría confundir esa ardilla roja con un zorro rojo. Y solo cuando se ha acercado me he dado cuenta de mi error.

Luego, en el corro que formamos los tres grogs y el capitán (siempre atentos a posibles peligros), comento en voz un poco más baja:

- Tuve una hija a la que le gustaban este tipo de adivinanzas, aunque, si os digo la verdad, las prefiero sentado junto al fuego en una noche de invierno. Y prefiero ver jugar a los demás, y o jugar yo mismo. Pero si tuviera que decir algo, yo diría que el joven es el tiempo, ante el que se inclinan hasta los más poderosos. El gallo es la corona, el poder, que Dios nos libre de su carga. Y la ardilla... Si no recuerdo mal las clases de catecismo con el padre Arthur, el mayor don que nos trajo Cristo fue el perdón... Pero que me aspen si estos son asuntos para un cazador como yo.

 

 

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26/10/2018, 17:12
Wolfgang

En cuanto aparecieron las criaturas a punto estuvo Wolfgang de lanzar una flecha, sin embargo se contuvo puesto que anteriormente alguien, no recordaba ahora, en la turbación del momento, quién, había comentado algo acerca de extraños guías, del cuál el primero debía ser un zorro.  Sin embargo de aquellas criaturas ninguna lo era, el guerrero estaba confundido y ante las ideas de Albert se confundió aún más.

-Cielo, Muerte... - dijo casi en un balbuceo.  -El Cielo se alza ante reyes y esclavos- dijo elevando sus manos -Nuestras manos pueden cargar los cuerpos de nuestros muertos tras la batalla, pero nuestros corazones arrastran su peso constantemente- sin pensarlo una rápida sucesión de imágenes le mostró los rostros de los seres queridos y camaradas que había perdido durante su vida, más larga quizás de lo que debería haber sido, y su rostro mostró cierta amargura -La ultima me confunde más, pero creía que vuestro dios promulgaba el Amor como el mayor de los dones, sin embargo sólo hablo por lo que he oído- miró a los demás indicando que no tenía mucho más que decir y continuó vigilante.