Partida Rol por web

La Casa de Huéspedes de la Calle Arkham

Día Primero; Martes 14 Marzo 1933

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06/04/2015, 06:17
Director@

 

Oh la vieja residencia de la calle Arkham, un viejo edificio  lleno de encanto (ver mapas)

Todos cuando llegaron a esta residencia hace unas pocas semanas encontraron un lugar limpio  y con ambiente hogareño. Las normas son estrictas para los residentes que usualmente trabajan mientras  viven en estas paredes.

La casa de huéspedes lleva unos  25 años de funcionamiento, aunque el edificio en realidad tiene mucho más tiempo de construido.

Cuando cualquier persona entra en la casa de huéspedes  (cosa que a ustedes les pasó) pueden ver un gran cuadro que recuerda lo que era hace unos años.  El mismo edificio unos años atrás, curiosamente dicha pintura muestra un edificio de tres pisos en vez del actual de dos.

Al lado de dicho cuadro, hay otro un poco más pequeño aunque no insignificante. Es el cuadro de una familia, un padre, una madre y una niña, que tiene una curiosa muñeca en sus brazos. El cuadro es antiguo pues dicha familia tiene vestidos victorianos.

La casa esta ordenada y con olor a limpio. Los pisos son de madera, y las paredes están limpias.

Cada habitación de unos 4x 5 metros esta numerada y cuenta con muebles suficientes para que cada uno de ustedes se instale con comodidad. Usualmente cada pieza cuenta con su cama, escritorio y armario, y repisas para libros y varios.  Los baños son compartidos, cosa que no es tan amable si hablamos de muchas personas.

Justo en este momento todos miran la hora y notan que faltan cinco minutos para que comience la cena. Dado que los horarios son estrictos, salen de sus  habitaciones para ir al comedor y así cenar.

La mesa del comedor está preparada con cuidado, los platos están colocados de manera armoniosa junto con los cubiertos y las copas. Al fondo una mujer vestida de vino tinto y con su peinado cuidado  coloca los últimos vasos.

Poco a poco los residentes van entrando al comedor.

Notas de juego

Comenzamos.  Me encantaria que  se describieran y comenzaran a interactuar entre ustedes, no esperen mi aprobación para hablar, si sus personajes quieren comentar, contar chistes, o preguntar cualquier cosa pueden hacerlo. Es más entre más se diviertan mejor para mi, si quieren conversar entre ustedes y  conocerse, mejor.

Ustedes  comparten la casa durante un tiempo, conocen sus nombres, pero posible no mucho más...

Dentro de las escenas visibles estan la introducción a la casa y sus huéspedes, donde conoceran las normas del lugar, y el mapa donde sabran cual es su habitación y la distribución de la casa.

Recuerden el ritmo. Si alguno de ustedes no ha terminado algún detalle de sus fichas es el momento de hacerlo.

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06/04/2015, 19:19
Dr. Emil Saitsef

-Crich, crich-, resuena la escalera de madera al momento que bajo un poco presuroso de mi habitación. Antes de pasar al comedor doy una rápida pasada a mi cabeza verificando mi peinado (a los lados de la calva por supuesto) , paso mi mano sobre la barba para comprobar que esté presentable,  desabrocho mi saco ligero y tomo asiento saludando: -Buenas noches Señora, o bien en ruso Dobry vecher Gaspazhá- Digo tratando de iniciar una conversación.

 Un tanto inquieto saco mi mi reloj de bolsillo y compruebo la hora -18:26-. Mejor tres horas demasiado pronto que un minuto demasiado tarde –Shakespeare.- pienso mientras espero a los demás comensales. 

Notas de juego

Estoy vestido formal de pantalón gris claroa, zapatos negros, camisa blanca desabotonada (sólo el boton del cuello) y saco Azul marino. 

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07/04/2015, 00:47
Anne Marie Collins

Ocupar una de las habitaciones de la planta baja cercana al comedor tenía sus ventajas. De esa forma podía aprovechar hasta el último minuto para dar los últimos retoques a mi aspecto y mi atuendo, tal y como marcaban las estrictas normas de la señora Woliski. Me atusé el cabello, comprobando que mi maquillaje no era demasiado exagerado y dediqué una sonrisa satisfecha al reflejo que me devolvía el espejo en el que me estaba mirando.

Eran tiempos difíciles y el dinero escaseaba, lo cual repercutía en la sencillez de las prendas que colgaban en mi armario. Si por mí fuera, me vestiría con esos elegantes y atrevidos vestidos de noche con los que se veía a las mujeres ricas, pero me tenía que conformar con mis trajes de corte sencillo y mis camisas. Para la cena de esa noche, había optado por un traje compuesto por una falda larga que marcaba mi cintura en tonos oscuros, a juego con una americana de grandes hombreras que tapaba una blusa color crema. Me estiré una imaginaria arruga de mi falda antes de abrir la puerta, un minuto antes de que dieran las seis y media.

Crucé el pasillo luciendo en mi cara una gran sonrisa, la misma con la que aparecí en el comedor saludando a los que ya se encontraban allí.

Buenas noches a todos. —Tenía que reconocer que sentirme rodeada de tanto erudito me ponía algo nerviosa, pensando en que mi conversación no sería de su agrado. Pero mi curiosidad innata me llevaba siempre a preguntar, preguntar y preguntar—. Espero que hayan tenido un estupendo día. Por mi parte, no veo el momento en que me avisen de que ya puedo empezar a trabajar. Menos mal que, entre los apacibles paseos y mis lecturas, se me pasa rápido el tiempo.

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07/04/2015, 02:05
Petula Woliski

 La mujer sonrie diligente mientras  acomoda los platos para sopa. Oh buenas noches Doctor Saitsef, como siempre usted tan formal. Dice la mujer con una risilla agradable. Espero que las conferencias hayan sido productivas, a veces los estudiantes suelen ser un poco impertinentes, hablando con mi sobrino Trevor , que vive en Nueva York ¿sabe usted?, me ha contado que a veces los estudiantes suelen ser insolentes y descarados, y que el respeto ya no es lo que era antes.. verá...

Camina al rededor como buscando algo que hubiese ólvidado y mira a la joven que acaba de ingresar.

Claro que sí querida, es cuestión de tiempo, posiblemente  te llegue el telegrama en cuestion de dias, hay que tener paciencia... sí...

 Mira a la puerta y sonrie a ver que algún otro residente entra a cenar.

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07/04/2015, 02:29
Victor Lusting
Sólo para el director

¿Quien ese que veo en el espejo?, ¡ese!, el de mirada cansada y el rostro torvo que ahora me observa.

¿Acaso ese soy yo?.

El verdadero yo digo, el que pocos han visto.

Sinceramente, no sabría decirlo.

Y ese es mi gran problema.

Soy un gran mentiroso.

¡Tanto!.

Que incluso me he engañado a mí mismo hasta el punto de no saber si realmente soy el gentil y simpático Víctor, o este pálido y triste espejismo que ahora veo frente a mí.

Pienso en ello mientras termino de afeitarme maldiciendo mi humor de hoy.

Será tal vez que ya me estoy quedando casi sin dinero, o tal vez,

Solo tal vez,

Sea que ya me estoy cansando de todo.

Termino casi mecánicamente el trabajo de ponerme presentable.

Me perfumo ligeramente, unas gotitas bastan si el perfume es bueno, - francés en este caso -.

Bien peinado, camisa blanca, chaleco gris de raso, traje a tono y zapatos de cuero negro, - tan pulidos que puedes ver tu rostro reflejado en ellos si te esfuerzas -, me doy una última mirada al espejo  para “calzarme” la máscara de la simpatía.

Me sonrío a mí mismo obligándome a guardar – por el momento -, todas mis penas y mientras giro para salir del cuarto entono mi vieja letanía de siempre.

Come on baby, y que comience el show!

Notas de juego

Pensamientos para mi "Masteresa".

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07/04/2015, 15:26
Charles Szymczack

Mientras aquello  un hombre viejo mira su reloj de mano y entra en el comedor, detrás de él  se acerca Victor  Lusting con una lustrosa sonrisa.

Buenas noches jóvenes y jovensitas. Dice el hombre a todos, que curiosamente los llama jóvenes  a pesar de que no los son tanto, posiblemente porque todos los presentes son menores que él. Ha sido un día con algo de lluvia, pero afortunadamente el clima mejoró, !valgame el cielo!, en mis tiempos el clima no era tan agresivo.

Se sienta en una de las sillas y se queja.

Oh que dolor de espalda, no demorará y deberé usar bastón, los años no vienen solos.

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07/04/2015, 17:55
Dr. Emil Saitsef

Escucho atentamente a la Sra. Woliski y mientras ella camina buscando algo le respondo: -Ciertamente hay estudiantes que simplemente no valoran el costo y los esfuerzos que hacen por ellos sus familias, yo siempre les platico de la revolución rusa y las carencias derivadas de ella para tratar de crear conciencia y.....- me interrumpe la entrada de la guapa jovén y me levanto en señal de saludo y digo: -Señorita Collins- me impide tomar asiento la llegada del Profesor: Camino hacia él y le tiendo la mano mostrando la importancia de su llegada (al menos para mí):- Továrishch Profesor, en verdad el clima nos afecta ...ah por cierto, ya tengo listo el ungûento de extractos de aceites esenciales que me encargó para sus dolencias, terminando la cena se lo entregaré-.

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08/04/2015, 03:11
Victor Lusting

Desciendo las cortas escaleras que me separan del comedor comunal como si fuese el mismísimo Felipe el hermoso; mi andar es pausado y medido usualmente, casi “flotando” por sobre el pulido suelo de la vieja casa.

Es en los últimos cinco peldaños cuando un súbito arrebato de felicidad se manifiesta en forma de canción y a través de mis labios.

Es una contagiosa melodía romántica muy famosa por estos días en New Orleans.

“She´s got a smile that it seems to me 
reminds me of chilhood memories 
where everything 
was as fresh as the bright blue sky…”

(“Ella tiene una sonrisa 
Que me hace rememorar recuerdos infantiles 
Donde todo 
Era tan fresco como el brillante cielo azul…”)

Son las primeras estrofas de dicha canción la que todos los presentes pueden escuchar mientras finalmente hago mi ingreso al lugar; mas no me detengo allí, sino más bien, que acompaño la letra con una pequeña actuación – apasionada -, que le dedico a la señora de la casa.

Oh señora mía, le digo abriendo los brazos cual Cristo en la cruz, el aroma de los deliciosos alimentos nacidos de la habilidad de sus prodigiosas manos me acarician los sentidos como si de las tiernas caricias de mi madre se tratasen, concluyo regalándole una sonrisa de catálogo.

Y buenas noches a todos los presentes también, prosigo sonriente mientras tomo asiento al lado de la jovencita Anne Marie.

Notas de juego

Victor viste una camisa blanca, corbata negra, traje en color gris completo - chaleco de raso incluido -, y zapatos de cuero negro primorosamente pulidos.

Victor habla con un acento Francés.

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08/04/2015, 06:52
Petula Woliski

Oh señor Lusting, me hace ruborizar, ¿no sabia que era un poeta?. Dice la mujer con una sonrisa apresurada.

Cocino con mucho amor para todos- mira el reloj- supongo que pronto podemos ir comenzando, la sopa es de Minestrone,  encargue algo de pan para acompañarla, luego tenemos pollo al horno con patatas dulces, espero que les gusten. 

Dice la mujer pasando los platos.

De beber hay refresco de manzana..

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08/04/2015, 06:59
Charles Szymczack

Oh gracias doctor Saitsef, le agradezco mucho, aunque a veces siento que mis viejos huesos no aguantan mucho. Y continua diciendo hablando de la educación. Ciertamente la educación ha cambiado un tanto, he trabajado como docente desde hace mucho tiempo y he visto los cambios, aunque no siempre es así mi señora Pétula, en el colegio de chicas donde estudio veo muchas con un potencial enorme, como usted señorita Collins, que se nota que tiene mcha inteligencia por delante.

Dice entonces al último hombre que acaba de entrar

Señor Lusting, ¿qué tal su día?, su labor es admirable, mucha paciencia ciertamente, yo no podría vender ni un libro.

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08/04/2015, 14:13
Dr. Emil Saitsef

-Bravo-, digo mientras aplaudo la actuación del recién llegado, escucho con atención lo que comenta el profesor y dándole continuidad a su plática digo: -Es verdad el trabajo de ventas es duro y por temporadas, yo lo admiro y pues como dijo el inmortal Dostoievski : "Es mejor equivocarse siguiendo tu propio camino que tener razón siguiendo el camino de otro"-.

-Gracias por tan sabrosa comida Sra Woliski-, me dirijo con cierto apetito.

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09/04/2015, 00:32
Anne Marie Collins

Ya casi estábamos al completo, lo que significaba que la cena no tardaría en ser servida. Poco a poco habían ido llegando el resto de huéspedes, unos más serios que otros y a todos fui saludando con educación y amabilidad. Pero cuando el señor Lusting entró cantando, con aquella cara de felicidad, dedicándole zalamerías a la dueña de la casa, no pude más que taparme la boca con la mano para ocultar la risita que salió de mi boca.

Se le ve hoy muy feliz señor Lusting.

Había estado prestando atención a las palabras del señor Szymczack antes de aquella interrupción, así que, educadamente, me giré de nuevo hacia él para añadir algunas palabras a las ya dichas por él.

Es usted muy amable señor Szymczack y muy considerado al creer que yo sea una persona inteligente. Pero sí tengo que darle la razón que hay jovencitas muy despiertas y con mucho futuro ahí fuera y no hay nada como una buena educación para hacer de los niños grandes hombres y mujeres. Por lo menos eso es lo que me gustaría conseguir de los niños que vaya a cuidar, que espero sea más pronto que tarde.

Me giré para coger mi plato mientras agradecía con una sonrisa a la señora Woliski su atención a la hora de preparar la cena.

Seguro que está todo riquísimo.

Y volví a centrar mi atención en el viejo educador y en el profesor de Química, exactamente me dirigí a él llevada por mi curiosidad hacia el campo de la enfermería.

Profesor Saitsef, si no es mucha molestia. ¿Con qué ha hecho ese ungüento para el dolor?

 

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09/04/2015, 02:24
Victor Lusting

Oh señor Lusting, me hace ruborizar, ¿no sabía que era un poeta?. Dice la mujer con una sonrisa apresurada.

Solo de alma y no de oficio mi buena señora, le respondo ya sentado sin dejar de sonreír.

Es entonces cuando el señor Charles se dirige a mi persona en estas palabras.

Señor Lusting, ¿qué tal su día?, su labor es admirable, mucha paciencia ciertamente, yo no podría vender ni un libro.

Adopto pues una expresión un tanto más seria y mientras pienso una adecuada replica a su pregunta dejo a mis dedos acariciar mi mentón, - una vieja manía que no puedo quitarme -.

Nunca…nadie me lo había nadie planteado así ciertamente “Monsieur” Charles; Pero…prosigo dejando mis ojos vagar por el lugar, ¡sí!, afirmo mirándole directamente y volviendo a sonreír, ¡sí claro!, puede usted pensar en mi persona, como un cazador dedicado a una única presa.

La rastreo, aprendo de ella, conozco su lugar de pastoreo, su ritmo al andar, espero el tiempo y momento justo y luego…

¡Ataco! Sentencio con énfasis y brío en la voz.

Las palabras del Dr Emil, son por cierto juiciosas y acorde a su naturaleza intima – me presupongo -, cargadas con el peso de la experiencia que solo los años difíciles pueden brindar.

Asiento con cortesía hacia él pues tiene razón.

¡Oh si supiera cuánta razón tiene!

Meditando en ello, me encuentro cuando la jovencita a mi lado me habla.

—Se le ve hoy muy feliz señor Lusting.

Y no hay motivos para no estarlo señorita Anne, le respondo con emoción, el ambiente agradable que nuestra anfitriona nos ofrece, se engalana aún más con la grata compañía que este simple caballero ha tenido la suerte de encontrar.

Felicidad, si tiene ud razón, felicidad plena siento,

Y bastante hambre,

A decir verdad, concluyo entre sonrisas mientras me dispongo a cenar.

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09/04/2015, 06:56
Jonathan Bishop

Jonathan Bishop llega tarde. Apoyandose en su bastón.

No es un hombre de mucha edad, pero cojea, bastante. Sin duda una herida en la pierna, una que contrasta con su rostro, algo más joven.

"Perdonen mi retraso" digo mientras con más buena fe que con gracia, me siento en una silla "Como ya pueden ver, mi condición no me permite actuar con mas premura"

Notas de juego

ESTE va a ser el unico momento del dia para hacer esto

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09/04/2015, 15:09
Anne Marie Collins

—Es usted un zalamero señor Lusting. Pero siempre es bueno comprobar que, en los tiempos tan duros que vivimos, haya alguien capaz de ser feliz... Da esperanzas al mundo.

Dediqué una sonrisa al caballero a mi lado antes de centrar mi atención en el hombre que entraba en esos momentos por la puerta, sintiendo cierta lástima por aquel caballero y su crónica dolencia a pesar de su edad.

No se preocupe señor Bishop, llega justo a tiempo. Como puede comprobar aún no hemos comenzado, aunque viendo la apetitosa apariencia de las viandas que nos ofrece nuestra anfitriona, tengo que reconocer que no podría esperar ni un segundo más para comenzar a cenar.

Me coloqué la servilleta sobre mis rodillas esperando a que diera comienzo la cena.

 

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09/04/2015, 16:31
Dr. Emil Saitsef

Pasada la respuesta del Sr. Lusting y con la reciente llegada del otro camarada profesor. Me dirijo a la educada Señorita con mis codos sobre la mesa y mis manos entrelazadas: -Si mire Señorita Collins, retomando su pregunta, mi remedio esta constituido principalmente de extracto de Árnica como desinflamante, un leve toque de Alcanfor para refrescar el área, y Vaselina para darle el efecto de pomada jejeje. Dado que reconozco su entusiasmo por el área, si usted es gustosa, le puedo prestar uno o dos libros de medicina botánica, que siempre cargo conmigo-.

Volteo hacia el Profesor Bishop y con un movimiento de peinado de mi barba le comento: -Si usted gusta también le podría preparar un poco de solución, para ver si aminora su dolencia-.

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09/04/2015, 16:54
Jonathan Bishop

"Se lo agradezco profundamente" le digo cordialmente, y con plena sinceridad "Pero me temo que fue una herida bastante horrible, y que de no ser por la osadía y abnegación de unos amigos que me ayudaron a salir del apuro, casi me lleva a reunirme con mis abuelos"

"No es por dolor, es por herida en sí. Pero me repito: Le agradezco de todo corazón el ofrecimiento" 

 

 

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09/04/2015, 20:22
Petula Woliski

Oh no se preocupe señor Bishop. Dice la mujer apresurada pasando un tazón enorme con una sopa que olía estupendo.  Comprendo perfectamente, espero haya tenido un buen día, el transporte a veces es difícil en Boston.

 

Cuando abre el tazón  se muestra una sopa rojiza que huele ciertamente estupendo, con fragmentos visibles de pasta, zanahoria y otras delicias.

 Poco a poco  a cada uno de ustedes les va llenando sus platos de la deliciosa sopa la cual, estaba  acompañada con  pedazos de pan francés que evidentemente la mujer había comprado en la panadería cercana.

Pueden seguir. Dice la mujer sentándose en su puesto en la mesa y empezando a tomar la sopa.

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09/04/2015, 20:24
Charles Szymczack

El anciano que  comenzó a tomar la sopa, se limpia la boca con satisfacción. Simplemente estupenda jovensita. Llamando así a la señora Pétula. Es una muy buena sopa.

Y entre otras, ¿la joven Agire no nos acompaña esta noche?

La pronunciación del anciano sobre el apellido de la mujer latina dejaba mucho que desear pero se entendía a qué se refería

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09/04/2015, 20:25
Petula Woliski

Oh mi señor Szymczack, ¿se refiere a la señorita Aguirre? – dice pronunciándolo bien- no lo sé ciertamente, diría que no, aunque a veces suele llegar más temprano- comienza hablar bajo en un tono  usado para cuestionar a las personas- esa mujer  es algo, como decirlo, eh… diferente, posible un poco más liberal de lo que quisiera, eso de estar bailando en las noches, no me parece  una acción de una joven respetable, ¿sabe usted?, en estos tiempos las mujeres deberíamos tener un poco más de recato.

Esa forma de vestir es realmente desastrosa, justo hoy salió con un vestido  que me recordó  tanto a la muñeca que tiene la niña en el óleo que hay en el pasillo- la mujer se rie pues al parecer le es gracioso- es más, hasta la misma muñeca se parece a ella.

Dicho asunto parece ser gracioso para la mujer quien se sonríe.

La mujer señala la canasta del pan. Si les apetece más pan pueden tomarlo, creo que compre más de lo necesario.