Partida Rol por web

La Casa de la Esquina

Buscando la Inspiración.

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30/03/2013, 17:02
Sólo para el director

Pesar que tres años en este lugar serian algo más emocionantes, pero eso no valía cuando uno debía estar pendiente de todo a su alrededor, quizás Fred podía ser el vecino más enigmático de la cuadra. Muchas cosas se decían de él como que era raro, antisocial y un sinfín de cosas mas pero no era así, Fred era sociable y agradable pero nadie tenía la voluntad de ir a visitarle o las ganas haciendo de los rumores algo cierto. Pero no todos eran así, la Sra Lanfort, una viejita de uno 78 años cada semana se hacía tiempo para ir por lo menos a llevarle unas galletas o preguntar cómo había estado el día, quizás su única amiga con la cual tenía una misma pasión y eso era la lectura.
La casa de Fred no era grande pero si tenía lo necesario y una de las habitaciones se había vuelto una biblioteca, un lugar armónico y decorado con tal motivo; hoy el Oscuro se mantenía en su casa debía terminar unos escritos para un diario extranjero al igual que terminar una vieja novela que había llegado a sus manos.

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30/03/2013, 17:31
Director
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Te propones sentarte y comenzar a trabajar en tus proyectos, como de costumbre, pero algo te detuvo, se trataban de susurros extraños, lamentos desgarradores y escalofríos punzantes que te hicieron temblar, puesto que una extraña visión se hace presente a tus ojos.

Observas como un hombre blanco, completamente de blanco y con una capucha que te hacia recordar a un miembro del ku klux klan, asesinaba a otro hombre con una porra, el asesinado no mucho mas mayor que tu caía al suelo tras el mínimercado, cuando termina dicha visión, caes inconsciente y no despiertas hasta que la luz del sol no era ya mas tan fuerte.

Lo curioso de todo es que no despertaste en tu hogar, mas bien, despertaste en una extraña recamara de toque rustico, casi medieval, sumamente cómoda y bella.

Cuando te propones a levantarte, contabas con un fuerte dolor de cabeza, el cual te hace entrecerrar de nuevo los ojos, por lo que no te diste cuenta que alguien estaba en esa habitación junto a ti, se trataba de un joven bien mozo y de aspecto pulcro, el mismo, se encontraba con la cabeza reposada sobre sus manos, las cuales se entrelazaban y descansaban sobre una mesa cercana a tu cama.

- En la mesita de al lado hay agua y una aspirina, me han dicho que la necesitas...¿pero deseas algo mas? - dijo cortestemente sin moverse de su actual posición -

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01/04/2013, 04:05
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Fred abrió los ojos y pronto el dolor se apodero de su cabeza haciéndole achinar los ojos marcando las arrugas en su rostro, las primeras palabras que sintió parecieron gritos sin forma mientras cobraban algo de sentido observo con detenimiento aquel sujeto mientras se sentaba en el borde de la cama – Gracias – fue la primera palabra pero no tomo ni el agua ni la pastilla solo espero unos segundos hasta que el dolor fuera algo más soportable. Recordaba aquellas imágenes en su cabeza y también recordó las palabras de aquel muchacho – Si, quisiera saber donde estoy -

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01/04/2013, 14:25
Director
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- Oh...cuanto lo siento y disculpe mi mala educación...soy Tepeu, pero me llaman Tep, vivo y trabajo en la residencia Lichman, lugar en el que usted esta descansando actualmente...el señor Harry por cierto lo esta esperando en su despacho y créame...mejor tómese esa aspirina, el dolor de cabeza se agudizara luego - dice sonriente, mientras golpea la mesa suavemente con las palmas de las manos y se levanta - acompáñeme por favor -

El joven sale de la habitación y te mira mientras aguarda en el linde de la puerta.

En caso de que tengas mas dudas, te responderá lo que pueda, pero no sabe mucho y por ende cualquier pregunta sobre el señor Harry o algo así, no sera respondida.

Si lo sigues, te encaminara hasta un piso superior, al que se accede mediante una escalera cercana a la habitación donde estabas, una vez arriba, se detendrá ante una puerta, llamara y oirá la palabra: - adelante -.

Cuando ingresas, notas a un anciano tras un escritorio, una par de muchachas jóvenes, un chico pálido y flacucho y un hombre de tez cobriza bastante corpulento, el anciano estaba tomando de una de las manos a una de las muchachas, de cabello oscuro, ojos grandes y verdes.

El anciano te mira y te dice:

- Por favor, siéntate junto a los demás, pronto obtendrás las respuestas que deseas -

Notas de juego

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