Partida Rol por web

La Casa en los Confines

La Iglesia de Central Hill

Cargando editor
19/04/2017, 14:27
Mike Hammer

En un momento, Don les soltó toda una señora historia. Era larga y compleja, Mike no tenia claro haber entendido todo. Pero una cosa si que tenía clara, le creía. Después de lo que vivieron de pequeños, de sus experiencias pasadas, no podía no creerlo. Y evidentemente, si el yo onírico de Aeryn esta atrapado en algún lado, tenían que ayudarla.

El detective poso una mano sobre el hombro de Don y le dedicó una cálida sonrisa.

-Te creo amigo, te creo. Ahora veamos si se puede abrir esta puerta.

Mike se acercó sacando su juego de ganzúas, y le dijo a Jimmy que le dejase sitio. Entonces intentó forzar la puerta.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Fallo :(

Cargando editor
22/04/2017, 19:30
Don Poppins

Una vez recuperado el aliento y agradecida la confianza solo me quedó observar los intentos de Mike por forzar la cerradura. No funcionó. Tenía medios para evitar un enfrentamiento pero ningún conocimiento de cerrajería, así que tenía que improvisar e intentar que Mike diera lo mejor de si mismo.

¡Vamos, Mike! ¡No desistas! ¡Inténtalo de nuevo! ¡Demuestra que todas esas batallitas eran ciertas! ¡A todos esos que dicen por el pueblo que no eres tan buen investigador como dices y que estás en tu puesto porque a tu tío le dabas pena, a los 4 barbudos de la taberna que tanto te han vilipendiado cuando no estabas diciendo que aún te meas en la cama, a Fluffy, el perro de tu vecino que siempre mea tus mocasines porque te odia! ¡Fuerza esa cerradura y ciérrales el pico!

Esperé si daba resultado con una mezcla entre miedo a que se le fuera el puño hacia mi cara y culpabilidad por tamaña mentira. Le pediría disculpas cuando estuviésemos a salvo... Lo siento, amigo. Sé que no te gusta alterarte.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Master, tú dirás si con esto Mike gana un segundo intento o no.
 

Cargando editor
23/04/2017, 23:09
La Iglesia de Central Hill

Parecía que Mike no lo iba a conseguir. Le faltaban herramientas (para empezar, una buena palanqueta).

Se acercaban por todos los puntos cardinales gentes con antorchas, gentes todavía no vistas más que por los resplandores reflejados por los añosos aleros de las casas, dado que todavía nadie había llegado a la plaza.

¿Por un momento Mike creyó lo que le había dicho Don sin diplomacia alguna? ¿O, quizá, temía a esas gentes que a hora tan tardía caminaban en silencio por Kingsport?

Enterró las manos febriles en unos bultos que la nieve sugería a un lado de la puerta, pensando si no sería algo útil con lo que trabajar. Eran, desprendió la nieve adherida con los dedos ardiendo por el frío, unos adoquines sueltos de peso respetable. Debían estar haciendo unas providenciales reparaciones cerca, así que buscó más, y requirió la ayuda de todos, por si... ¡Bingo! Contra la pared alguien palpó con ojos casi ciegos el mango de una herramienta: un pico, por la silueta contra el cielo.

Un par de golpes junto a lo que el detective calculó que sería el pasador que mantenía la puerta cerrada bastaron para que el camino quedara expedito, porque aquella madera, aunque gruesa, estaba húmeda y deteriorada.

La puerta se abrió sin sonido hacia fuera. Dentro, un vacío oscuro, la más absoluta nada. Una negrura que nada podía horadar salvo una luz.

¡Luz! Una cerilla descubrió los grandes bancos, sólidos, sencillos. Más lejos no llegaba el humilde claro abierto por la llama en aquel desierto negro y lleno de ecos.

DOOOOOOOONNNNNNNNNNGGGGGGGGGG

Aquí la campana reverberaba de tal manera que lastimaba los oídos. La cerilla se apagó quemando los dedos que la habían encendido. Oscuridad. Se podía sentir una corriente de aire que venía del interior de la gran nave de la iglesia, una corriente que traía olor a algas putrefactas, a pescado podrido y a agua salada.

Cargando editor
24/04/2017, 10:30
Serpiente de Plata

Durante todo el discurso de Don, la cadenita no hizo más que agitarse nerviosa en su mano. Cada vez que él la mencionaba, la Serpiente de Plata se movía, como queriendo demostrar las cosas que él decía. Ver a los demás entes que ahora estaban junto a él le generaba una sensación extraña, pero hermosa. Sobre todo ver a Amanda, a quien saltó a las manos cuando Don las cogió y se enroscó en su muñeca. 

Minutos más tarde, al terminar la explicación del joven de rostro ennegrecido, cuando éste soltó las manos de la joven que le hacía tener aquellos curiosos y al mismo tiempo extraños pero familiares sentimientos de añoranza, la cadenita se desenroscó de la muñeca de la mujer y saltó de nuevo en manos de Don. Era cierto que ella le generaba calma, pero finalmente decidió que en el bolsillo de Don estaba segura, así que se dejó guardar allí de nuevo.

Al fin y al cabo, él era el único que sabía lo que era ser Serpiente de Plata. Él la había ayudado todo el tiempo, desde que sus caminos se cruzaron por primera vez. 

Contenta por la decisión que habían tomado los entes que la rodeaban, esperó a ver qué sucedía una vez dentro de aquel lugar llamado Iglesia. 

Cargando editor
24/04/2017, 13:12
Mike Hammer

Mientras el detective buscaba el pasador de la puerta con el pico, miro con el ceño fruncido a Don *

-¿Qué no soy tan buen investigador!?! Serán cabrones... y el maldito Fluffy... el día que lo pille, ya veré quien se mea en quien ya...

Un par de golpes bastaron para poder abrir la puerta de la iglesia. El grupo entró a toda prisa, y rápidamente Mike volvió a poner el pasador.

-¡Rápido! ¡Traer un par de bancos de esos para atrancar la puerta por si acaso!

Notas de juego

*

Así que Fluffy eh? el caso es que me suena...xDD

Cargando editor
24/04/2017, 13:22
Jimmy Abbot

Finalmente, con el pico que encontraron Mike fue capaz de abrir la puerta. Dentro, solo oscuridad, y una corriente de aire que traía un intenso olor, como a puerto pesquero de mala muerte. Aunque Don había insistido en que entraran, a primera vista no parecía haber nada... Eso sí, el tiempo apremiaba.

-Tenemos que darnos prisa. Mirad muy bien por donde pisáis, con ese olor, puede que haya un acceso a un embarcadero o cala en algún lado-y tras esas palabras, se adentró, asintiendo ante las palabras de Mike y empujando uno de los bancos. 

Cargando editor
04/05/2017, 13:18
Don Poppins

Entré en la oscura iglesia siguiendo a Mike, y para sentirme mejor después del disgusto que le había dado, obedecí ipso facto y, con la ayuda de todos, bloqueamos la entrada usando los bancos.

Al acabar, respondí a Jimmy: Te seguimos. ¿Quién mejor que tú para rastrear el salitre? ¡Vamos, vamos! Me pegué a sus talones y le seguí, usando el palo de mi hatillo para reconocer nuestro alrededor. ¿Nadie tiene lumbre?

Cargando editor
04/05/2017, 22:50
Guardián de los Arcanos

Estaban entrando por lo que el tacto, más que la vista, informaba que era una cripta abierta en mitad de la nave principal, cuando la puerta fue abierta por muchas manos. Y es que, aunque había sido bloqueada con uno de aquellos pesados bancos tras muchos pisotones y resoplidos en la oscuridad, se abría hacia afuera, con lo que poco bloqueo podía proveer el banco.

Antorchas se veían recortando el vano de la puerta recién abierta, y manos apartando el molesto obstáculo, y algunas voces susurrantes pero de airado tono. Un movimiento brusco, como de alguien que señalara y se hizo el silencio y la inmovilidad: ¡habíais sido vistos!

Notas de juego

¿hacia dentro de la cripta, supongo? ¿o alguien intenta otra cosa?

Cargando editor
08/05/2017, 10:56
Jimmy Abbot

Sinceramente, Jimmy no había pensado en que la puerta se abría hacia el exterior, así que cuando escuchó como se abrían las puertas, sintió bastante vergüenza por aquello, mezclada con miedo por lo que les podría pasar. Cosa que se acrecentó cuando quedó claro que habían sido vistos. 

-Vamos-dijo, con cierta urgencia, avanzando hacia el lugar de donde le parecía que provenía el olor a sal. 

Notas de juego

La cripta parece la opción.

Cargando editor
09/05/2017, 12:51
Mike Hammer

El detective se quedó a cuadros cuando vio que la puerta se abría hacia afuera. Eso era un error de novatos. Estaba claro que el nerviosismo jugaba en su contra. Sin más opción si no querían enfrentarse a una turba encolerizada, Mike siguió a sus dos compañeros hacia la cripta, mientras empujaba a Fawkes y Amanda.

-Rápido, vamos.

Cargando editor
09/05/2017, 20:10
La Iglesia de Central Hill

Unas oportunas fosforescencias prestaban una pálida iluminación en aquel trecho del camino. Mas el camino para llegar ahí había sido el verdadero infierno. Un infierno oscuro, un infierno lleno de aromas, texturas, sonidos delicados y horribles.

Bajar a los trompicones por lo que semejaba un tubo digestivo frío y gomoso, escuchar la respiración, los latidos de tierna carne humana, el aroma del miedo... Aquello era consolador al lado del hedor con que venía envuelto el olor del mar: podredumbre, podredumbre, podredumbre. Tanta intensidad hacía que fuera imposible de identificar qué clase de cosa podía ser, hasta que la realidad golpeaba como una maza. Aquel prólogo sin luz había acabado a la vez que el descenso, trayendo una luz que no revelaba sino más miserias.

Aquellas luminiscencias brotaban en pequeñas lenguas de los nichos a ambos lados del pasaje. En ellas, situados en vertical, había cajones con forma de ataud. Ocupando los espacios entre los cajones y el borde de cada nicho, había, como haciendo de argamasa, una masa de huesos húmedos y semideshechos plagados de gusanos palpitantes. Las paredes eran húmedas, el aire era húmedo. Hacía calor y pronto todos estuvisteis empapados en vuestros propios jugos.

El aroma del miedo y del sudor debía excitar a los que os perseguían, pero os perseguían sin ruido alguno. Nada sino un leve roce: el clásico fru, fru que hacen los ropajes monacales en las novelas de terror gótico, que oído en medio de la más negra miseria no provoca sino pánico.

Pronto alguien se dio la vuelta para ver, y no pudo más que chillar. Sombras informes iban llenando toda la caverna tras vosotros. Por el suelo, por las paredes, por el techo basto y mal acabado, devorando la luz sin sonido.

Fue cuando el camino se abrió a múltiples posibilidades, por fortuna o por desgracia, pues pronto se abrieron pasillos laterales, y no había uno al que pudiera llamarse principal. Y tras vosotros, la negrura iba rápida.

Notas de juego

Todos debéis tirar cordura en un post solo para el director.

No respondáis con decisiones esta vez. Todo el roleo, las sensaciones internas y tal y tal que deseéis. No podréis tomar decisión alguna hasta que hayamos visto cómo de cuerda es vuestra reacción. Ni siquiera sugerirlo. Rolead justo hasta el momento en el que aparecen las opciones de ir por uno u otro túnel, o enfrentarse a la cosa que os persigue, o esconderse, o lo que se os pudiera ocurrir.

Incluso la Serpiente de Plata debe tirar por cordura (con los bonos que sabemos), pues detecta todos vuestros pensamientos, y estos traen recuerdos confusos de quien fue en otra época, y puede que le confundan.

Tiradas de cordura solamente para el director. Habrá reacciones obvias si se falla, pero otras pueden ser no tan obvias, y tiene gracia que haya posibles confusiones con esto.

En tanto organizamos esto, me voy a ocupar de Everett :)

Cargando editor
09/05/2017, 20:34
La Iglesia de Central Hill

Everett se iba hundiendo más y más en sueños cada vez más extraños y abstractos. Su ser consciente, sencillamente, no podía encajar unas cosas con otras. Era demasiado incómodo pensar siquiera en ello y, sin embargo, se veía impedido de evadir sensación alguna. Soñaba conscientemente, como si estuviera despierto.

Tras un marasmo de sentimientos imposibles de describir, tras eones del más completo aburrimiento, incluso, tras retorcer su sentido del todo de maneras que jamás podía volver a recordar, llegó a él de nuevo el sonido de la campana.

Y es que, según esta nueva fase de su sueño, viajaba por algún extraño medio gelatinoso. Podía ver, como si fueran semitransparentes, los pequeños granos de tierra del subsuelo pasar a uno y otro lado. Era como si la tierra, con sus raíces de árboles, con los cimientos de las casas, con los leves perfiles de fósiles de eras remotas petrificados por los siglos de los siglos en cada lasca de esquisto, como si el subsuelo entero fuera un medio más o menos líquido por el que algo le llevaba.

Se encontraba en ese estado entre el sueño y la vigilia en el que se encuentra uno como paralizado. Con una fuerte disposición por el reposo, como diría algún especialista psicólogo, pero completamente consciente. Veía por entre sus párpados cerrados. Veía a los compañeros de su viaje, encontraba que no estaba respirando sino algo húmedo y con vida propia, que salía también por sus orejas, por los bordes de sus ojos, por cada orificio de su cuerpo. Oh, si. Por cada orificio de su cuerpo entraban y salían cosas palpitantes. Era una sensación extravagante.

Recordaba con vaguedad cómo su cuerpo dormido se había hundido despacio en el suelo de aquella cuadra. Cómo se había ido hundiendo en su cama de estiércol. Cómo dicho estiércol palpitaba como ahora todo su cuerpo palpitaba.

Saber qué clase de cosa era esa que con tanta liberalidad usaba cada centímetro cúbico de su persona fue lo que impuso al buen mozo la bendita inconsciencia.

Despertó dentro de algo húmedo. Duro. Texturas rugosas. ¿Astillas? Veía una fina luz fosforescente, verdosa. Una línea irregular delante de si. ¡Otra! Había luz fuera de su prisión. Cuán tenue era esa luz ya no lo sabía, pues acababa de recordar que existiera tal cosa como la luz, y aun no llegaba a rememorar la cálida luz del sol, o la de la leprosa luna.

Líneas de luz, verticales, que venían del exterior a su encierro. Un encierro que casi tenía la forma de su cuerpo. ¡Tablas! ¡Veía algún tipo de luz por entre los intersticios de las tablas! ¡Estaba metido en algún tipo de cajón de madera! Un ataúd. Estaba en un ataúd puesto de pie. Algo pasó por entre los inersticios entre aquellas tablas, silueteándose contra la horrenda luz de fuera. Algo grande, dado que lo veía de cerca. Algo, en realidad, muy pequeño, que pasaba por entra las junturas. Y bastantes más de esos "algos" que aparecieron después.

Notas de juego

No tomes una decisión hasta que hagas una comprobación de cordura. Rolea, claro, jejeje. Pon literatura incluso. Pero hasta que veamos qué tal te ha salido la cordura, no tomes decisiones.

Obvio: tardaremos en avanzar, pero nos veremos en la KDD :)

Cargando editor
09/05/2017, 21:36
Everett
Sólo para el director

Notas de juego

¿Cómo hago la tirada de cordura?

Cargando editor
09/05/2017, 22:16
Guardián de los Arcanos

Notas de juego

Tu valor inicial de cordura es tu característica POD multiplicada por cinco. O sea, cincuenta. Saca cincuenta o menos en un dado de cien.

Cargando editor
09/05/2017, 23:17
Everett
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Notas de juego

Vale, creo que no he superado la tirada.

Cargando editor
10/05/2017, 10:54
Serpiente de Plata
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Notas de juego

Hecho! ;) Depende de lo que me digas aquí, si me lo dices antes (y luego, cuando vuelva del curro) pongo post para todos ^^

Cargando editor
10/05/2017, 13:49
Mike Hammer

El grupo empezó a descender...a lo que parecía el infierno. Aquel hedor, aquellos huesos desparramados llenos de gusanos... el sudor empezó a empapar al bueno de Mike. Asustado, miró atrás y no pudo más que ahogar un chillido al ver esa legión de sombras pisandoles los talones. El susto fue tal que el detective tropezó y cayó al suelo. Sus manos tocaron las paredes al intentar apoyarse y el tacto era casi gelatinoso, realmente repulsivo.

No tiene claro quien, pero alguno de sus amigos le levantó al pasar, con lo que Mike siguió corriendo, hasta llegar a un punto donde el camino se dividía, como una tela de araña tejida hacía eones...

Cargando editor
10/05/2017, 13:49
Mike Hammer
Sólo para el director
- Tiradas (1)
Cargando editor
10/05/2017, 17:57
Jimmy Abbot
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Notas de juego

Hecho. 

Cargando editor
10/05/2017, 18:00
Jimmy Abbot

Aquello era terriblemente agobiante, aquella especie de huida hacia delante, en la que Jimmy tenía la sensación de que estaban siendo tragados más que adentrándose en las profundidades. La fuente del olor, con toda aquella putrefacción, casi consiguió nausear al marinero, sorprendido también por el repentino calor. Probablemente se debía a los procesos químicos que estaban ocurriendo, aunque eso por supuesto Jimmy no lo sabía. Solo sabía que quería intentar evitar tocar nada, no le agradaba el aspecto de esos gusanos. 

Pero todo eso fue desplazado con la llegada de las sombras. Jimmy estaba asustado, no podía negarlo, y su primer impulso era huir locamente... Pero en las tormentas en el mar había que conservar la cabeza todo lo fría posible, y en esa situación probablemente también sería lo mejor. Así que se controló lo mejor que pudo, luchando contra el miedo que sentía.