Partida Rol por web

La Farsa de Ávila

Escena I. Llegada a Ávila del Rey

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12/02/2022, 22:25
Eleazar, el Manco
Sólo para el director

Salió al exterior el buen Eleazar, caminando por los oscuros pasillos de la catedral, que a tan altas horas se le antojaba tétrica y desoladora. No comprendía porqué debían de estar en aquel lugar, o qué sentido podía tener todo aquel asunto, en general. Anduvo atento, pendiente de ruidos o luces que pudieran desvelar la presencia de otras gentes despiertas en el edificio, en tanto descendía lentamente por las escaleras, guiándose como podía con una vela. Se dirigió a la puerta de los apóstoles, y allí abrió, saliendo al frío exterior para buscar un sitio en el que dar descanso a sus humores, para luego volver a recoger los materiales que le había indicado el criado.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Voy a ver si veo o escucho algo.

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13/02/2022, 09:54
¿¿¿???

Desenfundaste tu bracamante, y decidiste avanzar por aquel callejón hasta llegar a la avenida más iluminada. Nada más dar unos pasos, apareció por el final del callejón un tipo que portaba una antorcha pequeñita. Corría y corría, cuando estuvo cerca de tí se paró en seco y viste que el fuego iluminaba el rostro de otro tipo a su lado. El de la antorcha se quedó en mitad del callejón, pero el otro (quien estaba en medio del camino y era un tipo con un porte bastatne corpulento) se echó hacia tí, con bravas y poco honestas intenciones. Llevaba prendas de protección y una espada en la mano. Quería acabar contigo a toda costa.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Es un combate.

Iniciativas:
Tú: 25 --> Declara dos acciones normales o una extendida (ver escena de acciones de combate).
¿¿¿???: 20 --> Dos ataques normales con espada contra tí
(el tipo de la antorcha no lucha, su corpulencia y predisposición no es muy bélica, que digamos, sólo queda observando).

Sólo tienes que declarar 2 acciones o 1 extendida, las tiradas las realizaré yo (ya que así las arbitro todas juntas, como suelo hacer siempre). Por cierto, tanto para tí como para tu rival, las acciones de ataque y defensa (las de combate, vaya) se verán reducidas al -25% por la sola iluminación de la antorcha en un entorno nocturno).

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13/02/2022, 10:00
Director

Tomás se espabiló por los ruidos que comportaba aquel lugar; ruidos procedentes de alguna callejuela cercana. Además, Eleazar le avisó con cuidado para que fuera recomponiendo su cuerpo, pues él necesitaba salir a por arcilla, tal y como había propuesto el joven criado. En breves instantes, éste abrió la puerta embarrotada para que el judío se marchara.

- Tiradas (1)
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13/02/2022, 10:04
Director

Quedaste allí, sólo con el alfarero y el criado. Una vez tu cuerpo se hubo espabilado, viste que aquel busto tomaba ya una bella forma. Poco a poco el alfarero Pero estaba haciendo bien su trabajo. El caso es que echaste una mirada por la ventana. Luna en lo alto de la ciudad de Ávila del Rey, y desde allí podía verse toda la ciudad. Si fuera de día, podría incluso verse el río Adaja, allá en el otro extremo de la ciudad amurallada...

El caso es que ahora de noche la inmensidad de palacios y casas tenían todos sus interiores apagados. Pero algo atrajo tu atención  no muy lejos de la posición de la catedral, donde te encontrabas; tu vista acudió hasta un pequeño fuego que había en un callejón a una manzana de la catedral, justo entre dos caserones. Había una antorcha o una vela grande allí posada, estática, y cosa rara te pareció aquello.

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13/02/2022, 10:09
Criado

El criado estaba ahora junto a Pero. Dadle más forma a ese mentón, y añadidle más carrillo hasta las orejas... -ordenó al alfarero-. Así no se parece nada al Rey... -escuchaste mientras mirabas la ciudad desde aquella altura- ¿Ocurre algo, señor? -te preguntó entonces el criado-.

Notas de juego

Postea sólo para tí.

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13/02/2022, 10:18
Director

Fue entonces cuando saliste de la catedral. Nadie diría que un judío pudiera caminar entre aquellos fuertes y altos muros cristianos en plena noche con total libertad, pero así era; al abrir el portón el frío te golpeó con una bocanada de aire que te heló bien adentro. Bajo aquel pórtico  Las puertas de la catedral se cerraron a tus espaldas, quedando entornadas, y quedaste al único abrigo de las figuras esculpidas en el pórtico circular y divino. Luego decidiste avanzar por la plaza para encontrar cuanto antes un callejón donde vaciar tu vejiga, y tal que así te introdujiste en el más cercano (cuyo final era inapreciable por la oscuridad).

Y mientras la vejiga se vaciaba escuchaste un golpe a un lado, en lo profundo del callejón. Giraste rápidamente la cabeza, pero sólo divisabas oscuridad. ¡¡Aaaghh!! Tras el golpe, alguien se quejaba en ese callejón. No supiste si fue un alarido ahogado o un intento de pronunciar palabra; el caso es que unas varas más allá había alguien.

¡Ayu...da! -escuchaste desde lo profundo del callejón-.

Notas de juego

Postea sólo para tí.

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13/02/2022, 12:17
Eleazar, el Manco

Temíase Eleazar que algo turbio aconteciese, y sintió que el vientre se le aflojaba al constatar sus miedos de forma más cercana. Conteniendo sus instintos primarios, Eleazar miró en la dirección de la cual venía el ruido, en tanto echaba un vistazo también en derredor para tener bien claro por donde huir, si tal hiciera falta. Una voz en su interior le decía que se diere la vuelta, y se metiese otra vez en la catedral. Empero, no podía el judío resistir el impulso de indagar, pues temía que quizá pudiera ser Ramón el atacado (aunque, ¿qué haría allí si tal era el caso? Hacía horas que marchó).

Echó mano de su gumía, e hizo por acercarse sin hacer ruido. Empero, no era Eleazar hombre de acechanzas, y pronto tropezó con un pedrusco, que rodó por la calle haciendo evidente su presencia allí. Aquello le dejó helado, pues comprendía que, desvelándose, atraería sin duda la atención de quienes se encontraban en el callejón, los cuales, por otro lado, a buen seguro que no querrían ser hallados.

Con el muñón de su mano izquierda, tocó el medallón que guardaba bajo las ropas, temiendo que no bastara.

 

- Tiradas (1)
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13/02/2022, 13:49
Ramón

Como había esperado, un par de tipos aparecieron al final del callejón y arreciaron contra mi. Uno se quedó con la antorcha, de sujeta velas, mientras que el otro se lanzó como un toro embravecido. Yo, que ya tenía el bracamante en la mano, me preparé para darle matarile a estos tipos que me atacaban sin saber yo por qué. Quizás fueran los dos que vi en el callejón, cuando fuimos a recoger al alfarero. Me lancé contra mi adversario y cruzamos estocadas, pero las mías fueron nefastas. Nunca había sido un gran artista del acero.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Dos ataques normales.

Joder! Ya empezamos, xD! En Aquelarre siempre suelo tener muy malas tiradas. La primera fallo y la segunda pifiote.

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13/02/2022, 16:51
Tomás Arizmendi

Aquello podía ser un gran problema, era ni más ni menos, que al mismísimo rey a quien tenía que parecerse aquel busto. Pero en aquellos momentos, lo que llamo la atención de Tomás, fue una hoguera en la calle, no a mucha distancia de la catedral, quien podía estar haciendo eso allí y a estas horas.

-Allí en aquel callejón, hay una hoguera y veo una antorcha. ¿De que podría tratarse a estas horas? Y tan cerca de la catedral.-Trato de divisar algo más o algún movimiento en aquel lugar, esperaba que no se tratase de problemas, pero mucho se temía que así podía ser. Y Eleazar había salido solo, desde luego esperaba que no fuese que estuviese ya en problemas. Pero el tenía que permanecer allí, habían dado su palabra y a un importante señor. 

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14/02/2022, 10:31
Sancho de Berceo

Aquel tropezón con un pedrusco te hizo trastabillar un poco (y eso que no era demasiado grande, pero sí estaba oculto entre la sombra). Ello te hizo dar un paso final para equilibrarte y no caer de bruces, y si esperabas pasar desapercibido en aquel instantes la idea se había evaporado al momento... Pero tuviste suerte. No había nadie allí esperando, al menos con intenciones hostiles; lo único con lo que te topaste fue con un tipo en el suelo, tratando de levantarse y gimiendo de dolor. No le veías muy bien el rostro al princpio, pero al poco te sonaba de algo. No era Ramón, aunque estabas seguro de haberlo visto en la comitiva del arzobispo durante varios días atrás. Era un tipo de prendas elegantes, joven y de buena posición (sin duda). Se llevaba la mano al estómago, pero la oscuridad tapaba muy bien todo...

¡Ayu... ayúdame! -te suplicó al verte extendiendo un instante la mano antes de desfallecer-. Ra... R... -el tipo apenas ponía pronunciar palabra-.
 

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14/02/2022, 10:35
Criado

El criado se levantó ante tu señal, y echó un vistazo por la ventana. Con el dedo apuntaste al callejón, y escudriñó el muchacho la creciente oscuridad de la noche hasta que dio con el punto iluminado. Un gesto en su boca de indiferencia lo dijo todo.

No sé qué puede ser... -dijo, y se volvió hacia el alfarero, que seguía trabajando-.

* * *

A los quince minutos, el criado estaba de nuevo en pie. Quince minutos. Si bien no temía por que Eleazar no volviera, sí que lo hacía porque Pero no acabase a tiempo el busto (ya que necesitaba los materiales).

¿Vuestro amigo es de fiar? -te preguntó-. Tarda demasiado... Creo que será mejjor que vaya a echar un vistazo o el trabajo se verá entorpecido...

Notas de juego

Espera tu contestación. :)

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14/02/2022, 10:37
¿¿¿???

Turno 1.

Aquel tipo se abalanzó hacia a tí, y pese a que reaccionaste el primero, no lograste acertarle con tu bracamante, pero lo único que hiciste fue trastabillarte con una piedra y dejar caer tu arma al suelo... En éstas que el tipo, espada en mano, levantó la hoja en medio del oscuro callejón y te asestó una severísimo corte en el pecho...

Daño a Ramón: crítico (daño máximo e ignora armadura): 13 puntos  . . . . . . . . .................

Sentiste un fuerte golpe y dolor bajo elmentón y el cuello, tus ojos se cerraron y tu consciencia se detuvo...

- Tiradas (3)

Notas de juego

Fin del combate.

Tu porcentaje no sería 56, sería 31 (por el -25% en la oscuridad que te comenté).

El tipo  te deja con la secuela "Cicatriz: Una vez curada, la herida dejará una gran cicatriz en el pecho, espalda o costado del personaje", pero eso no es lo importante; su valor de daño con la espada era ((1d8+1+1d4, máximo 12), y tu tenías 13 pv.

Quedas por tanto a 0 pv... Inconsciente (y perdiendo), pero en vista de con quien estás será imposible que trate nadie de ayudarte (y ellos menos), o de reanimarte..., pues quedas a su merced. :(

Asique de momento tu juego con Ramón ha acabado. La aventura está muy cerca de concluir, por lo que no merece la pena hacer otro PJ. Queda a la espera del epílogo final y explicativo si te parece (ah! y no digas nada en el oFF del destino de Ramón para no hacer metajuego ;D)

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14/02/2022, 17:11
Ramón

Notas de juego

Jajajajaja. ¡Joder! Yo pifio y tú sacas crítico, xD! Rápida ha sido la liza, xD!

Ok, no te preocupes, no diré nada hasta que se termine la partida.

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14/02/2022, 19:48
Tomás Arizmendi

Tomás se estaba preocupando, ya que aquella hoguera podría significar problemas, y Eleazar no volvía con los materiales. Todo se estaba complicando, y había que tomar alguna decisión.

-Mi amigo es de fiar, si aun no ha regresado será que ha tenido algún problema. Así que será mejor que yo vaya en su busca, para traer los materiales y terminar a tiempo el busto.-

No le gustaba la idea de dejar solo al alfarero, pero sin materiales poco podría este hacer, y además era muy probable que Eleazar se encontrase en apuros.

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14/02/2022, 22:03
Eleazar, el Manco

A Eleazar se le heló la sangre un momento al tropezar con el pedruño. Suerte tuvo de que allí no hubiere ya nadie, más que aquel que parecía haber recibido algún tipo de herida. Una estocada, se pensaría uno por el modo en que se llevaba la mano al vientre, aunque ciertamente no había forma de ver nada con aquella luz.

- ¡Por Dios! - exclamó Eleazar, sin poder reprimir la blasfemia - ¿Qué os ha pasado, señor?

Un joven noblezuelo, supuso Eleazar. ¿Estaba a punto de decir Ramón? Quién sabía, de poco serviría preguntarle estando en semejante estado. No es que el judío pudiera hacer gran cosa por él, y menos siendo manco, pero aún con eso se acercó y se echó su brazo por el hombro.

- Venid a donde haya un poco más de luz, que os vea mejor.

Trató de ayudarle a llegar a la puerta de la catedral, confiando en echar mano allí de una vela y poder examinar al hombre, para ver su estado. No abandonó del todo la vigilancia, mirando en derredor con ojos inquietos, temeroso de una celada que le cobrase la vida. Pero él no tenía tales enemigos...

- Tiradas (1)

Notas de juego

Tiro un Sanar por si el hombre se estuviese desangrando, para intentar ayudarle a detener la hemorragia. Aunque bueno, dadas las circunstancias, lo mismo le va a dar... xD

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14/02/2022, 22:29
Criado

El criado te miró, miró a Pero y lo pensó unos instantes.

No intentéis nada, y volved cuanto antes, o no cobraréis lo vuestro -te dijo el muchacho-. Y con ello aceptó tu propuesta, y tenías en la mente a Eleazar.

Tal que así, saliste de la sala embarrotada y bajastes las escaleras de caracol que bajaban hacia abajo. Tras cruzar las capillas de la planta inferior, te encaminaste por el amplio pasillo hasta la puerta de los Apóstoles. Decidiste mirar afuera un instante, por si había noticias en el exterior del manco.

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14/02/2022, 22:30
Sancho de Berceo

Ram... ¡agghhh! -el tipo se levantó con tu ayuda, y cargaste todo el peso del mismo sobre tí-. Menos mal que a pesar de ser alto era delgado, porque sino no hubieras podido llevarle por la plaza. Sus pies arrastraban, y tu hacías de improvisada muleta. Ahora veías mejor, una vez saliendo del callejón, que su estómago escupía sangre, y sus ropas estaban empapadas de rojizo líquido. El hombre tiritaba.

Y estando delante de la puerta de los Apóstoles, bajo su incorrupto grabado de piedra, trataste de intentar taponarle la herida, manchando tus propias manos.

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14/02/2022, 22:31
Sancho de Berceo

En ese instante la puerta de los Apóstoles se abrió, pues estaba entornada, que no cerrada.

Restallaron los goznes por el frío, y entonces salió de ella el bueno de Tomás, preocupado por su compañero. Y tal que así, como si Dios hubiera dispuesto aquello, encontró bajo el arco de la misma puerta a Eleazar, agachado y sosteniendo aun hombre indeterminado (que no era Ramón), joven de rostro, y que tenía las preciadas y de buena calidad ropas impregnadas en sangre. El judío lo tenía entre sus... entre su mano y su cuerpo, tratando de taponarle una feísima herida que debía guardar bajo los pliegues, pero que a buen seguro era de estocada, filo o tal vez más de uno.

El tipo estaba ahora boca arriba. Trató de hablar antes de expirar.

En el callej... Ra...món... han... ma... ma....mat... ¡Augh! -su cabeza cayó a un lado, y escupió un flemón de sangre-. Aquel hombre acababa de morir en la puerta de la catedral. Aquel asunto se estaba emponzoñando.

Notas de juego

Ya podéis postear para los dos. Estáis en la puerta de los Apóstoles, por fuera. Notáis el frío nocturno.

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15/02/2022, 18:26
Tomás Arizmendi

Cuando Tomás fue a la búsqueda de Eleazar y los materiales que necesitaba el alfarero, si suponía que algo podía haber retenido a su amigo, pero desde luego no se esperaba lo que se encontró nada más salir de la catedral.

Un señor, y herido de muerte. Y sus últimas palabras citan a Ramón y en el callejón que han matado. Bastante malo era ya aquello, terrible problema del que ya se vería si podrían salir o no. Como para que alguien hubiese matado a su amigo Ramón. Todo aquello de golpe, era demasiado para el joven Tomás. Menos mal que Eleazar estaba allí.

-¡Santa madre de Dios! ¿Qué es lo que ha pasado? Y que son esas últimas palabras de este señor, ¿le ha ocurrido algo a Ramón?-

Pero de nada servía abrumar a preguntas a su amigo, tenían que pensar que hacer con aquel cuerpo, y mirar de conseguir los materiales que necesitaba el alfarero para terminar el busto del rey.

-¿Qué hacemos con el cuerpo? ¿Tienes los materiales para el alfarero?-

Tomás estaba muy nervioso, aquello se había escapado por completo de control, y el no sabía que hacer a continuación, pero al menos tendrían que evitar que les echasen a ellos la culpa de aquella muerte. Y que Eleazar le contase lo que el sabía, ya que Tomás nada sabía de lo ocurrido.

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16/02/2022, 12:13
Eleazar, el Manco

En nada había pensado Eleazar, salvo en ayudar a aquel señor desgraciado que se desangraba. Ahora, empero, lamentaba su acción, pues de nada había servido, y encima tenía las ropas y las manos manchadas de sangre. Temblando de frío y miedo, miró a Tomás, negando con la cabeza.

- Nada me dijo de Ramón, no podía hablar el desgraciado. - miró el cuerpo sin vida - Pero témome lo peor. Lo encontré allí, tras oír un ruido al salir a orinar. - señaló el oscuro callejón - Nada se veía, y apenas alcancé a distinguir a este señor, y tratar de ayudarle.

Se habría llevado las manos a la cabeza, pero no quiso llenar su rostro también de roja sangre.

- Judío y manchado de sangre, está claro que si me encuentra así la guardia nadie se va a parar a hacer muchas averiguaciones. - negó con la cabeza, desesperado - Debo limpiar mis manos y mis ropas, lo antes posible. O esconderme hasta que este asunto pase.

En verdad estaba aterrado. ¿Qué diría su señor de todo aquello? Se había ausentado sin nada decirle, perdido hasta altas horas de la noche, y ahora se encontraba en una situación que le ponía en gran peligro. No podía aparecer por allí y rogarle protección.

- Cojamos unas velas y veamos ese callejón, a ver si tenemos pista de Ramón. ¿Podrías conseguirme ropas limpias? - no tenía con qué pagárselas a Tomás, pero ya arreglarían ese asunto.