Partida Rol por web

La Farsa de Ávila

Escena I. Llegada a Ávila del Rey

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01/02/2022, 22:34
Director

Quedando así, pensativo Eleazar, fue Tomás quien se decidió a llamar. Al fin y al cabo, fuera quien fuera ese tipo, cuanto antes lo llevárais a la Catedral, antes acabaría aquel forzado favor (y antes estaría el señor arzobispo enterado de vuestro buen hacer).

Tras unos toques en la puerta con el puño cerrado para asegurar, una pequeña iluminación surgió de la rendija de la puerta y la rendija de la ventana. Entonces alguien abrió. Se trataba de un tipo entrado en años, campesino sin duda por su aspecto, y recién despertado.

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01/02/2022, 22:34
Pero Gómez

El hombre, de arrugas diversas en el rostro que delataban cierta edad y greñas en su cabellera en la zona de la nuca, había abierto con un pequeño candil en la mano. Sus ojos grisáceos (que alguna vez atrás debieron se azulados) brillaban al son de la pequeña lla mita. Al ver a cuatro personas se asustó un poco, y recorrió rápidamente con la vista vuestros rostros. Estaba algo atemorizado por las horas.

Bu... buenas noches... Diganme..., señores -os comentó con voz entrecortada-.

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02/02/2022, 16:59
Tomás Arizmendi

Tomás no escucho nada en el interior de la casa, o no había nadie, o estaban durmiendo. Pero si algunos ruidos y voces en otras zonas del barrio, que aunque tranquilo, aun mantenía una cierta actividad. Esto hacía que fuese aun más preciso, no montar ningún escándalo. Tras llamar a la puerta, un hombre mayor abrió con un candil en la mano.

-Buenas noches, buen señor y disculpe usted que le molestemos a estas horas. El arzobispo quiere verle y es menester que nos acompañe cuanto antes y en silencio a la catedral. Así que si es tan amable, podría usted ponerse algo adecuado y acompañarnos, por favor.-No sabía si era aquel el tipo que buscaban, así que miro al joven criado, para saber si estaba en lo cierto, o si se trataba de otra persona, en cuyo caso, habría cometido un peligroso error. 

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02/02/2022, 18:25
Ramón

Dentro de la casa no se veía a nadie, estaba todo tranquilo. Tomás golpeó la puerta para llamar al inquilino y a mi me dio por mirar en derredor, para ver si el ruido había alertado a alguien. En un callejón vi dos sombras, dos figuras escondidas que nos vigilaban. Le di un codazo a Eleazar y a Tomás disimuladamente, y en susurros les dije:

-"Parece que no somos los únicos interesados en este menda. Nos están vigilando dos personasjes desde ese callejón oscuro de allí, pero no os giréis a mirar; como si no nos hubiéramos enterado de su presencia. Esto me huele muy mal." Solté.

Una pequeña luz apareció en el interior de la vivienda y al poco tiempo se abrió la puerta. El hombre, entrado en años, se asustó un poco al ver a tantas personas en su umbral; y con las horas que eran...

-"Buenas noches..." Empecé a decir, pero Tomás se me adelantó.

Me quedé escuchando a mi compañero y suspiré y negué levemente con la cabeza al oír que mencionaba al arzobispo y que teníamos que llevarle a la catedral. Ya había dicho quién nos mandaba y el lugar a donde le llevábamos. Recordé ahora que el mayordomo había comentado que le vendáramos los ojos antes de introducirle a la catedral, por la puerta lateral. ¿Eso no significaba que no querían que este individuo viera las caras de los que le esperaban en la catedral? Ya estaba dicho, así que dejé a Tomás que fuera él quién llevara la voz cantante y me centré en vigilar, por el rabillo del ojo, el callejón donde estaban las dos escondidas figuras.

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02/02/2022, 22:12
Eleazar, el Manco

Andaba Eleazar como aturdido, distraido por la nocturnidad con que se desempeñaba aquel asunto. No era él hombre de andar rondando a la oscurecida, y sus ojos, ya cansados por los años, nada veían salvo el brillo del candil, ante el cuál quedaban cegados. Pero, en tanto Tomás convocaba a aquel hombre de aspecto humilde a que les siguiera (tal vez desvelando más de lo debido, pero era cierto que tampoco les habían dado gran detalle de cómo se debieran dirigir al hombre), Ramón señalaba que en un callejón cercano había ciertas figuras agazapadas, lo que nada bueno podía traer. No siendo él hombre de pendencias nocturnas, agarró con fuerza y temor el mango de la gumía, luchando contra el instinto de mirar hacia todas partes en busca de esos supuestos emboscados.

- Con presteza, os lo ruego. - dijo, con cierto temblor en la voz, al pobre hombre al que buscaban - Que aqueste frío cala hasta los huesos.

Quiso disimular así el miedo en su voz, girando como para calentarse (no se frotó las manos, pues no podía) y echando un furtivo vistazo hacia el callejón señalado por Ramón.

Entre tanto, fue extrayendo lentamente la gumía de la vaina, procurando no hacer ruido, y sin mostrar el filo, que mantuvo oculto tras las ropas para que no lo vieran ni el hombre, ni los temidos asaltantes (de los que nada veía).

- Tiradas (1)

Notas de juego

Pues eso, quiero desenvainar sin que se note que lo he hecho, dejando el filo oculto tras las ropas :).

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02/02/2022, 22:31
Pero Gómez

Justo entonces, Ramón alertó al resto sobre alguien que os estaba vigilando, susurrando en bajo mientras aquel tipo os miraba, algo tembloroso. Después, el primero en hablar fue Tomás, con un tono amable.

El... ¿arzobispo? -preguntó apretando el entrecejo, señal de extrañeza-. Tomás miró al joven criado, y éste se mostró sereno, dando a entender que ya sabía que aquel hombre era el que buscábais y precisábais. A la catedral... -el hombre seguía extrañado de que tres tipos le requirieran, por orden de un miembro de la iglesia, en la catedral de la ciudad a horas intempestuosas. Entonces Eleazar rogó prisa y colaboración, en medio del frío abulense.

Se... señores... el que os ruega soy yo en aclararme todo esto: el quien son todos vos, y qué quieren de mí, un pobre alfarero, y... y... a estas horas... -el hombre hablaba desde el temor y la sorpresa, pero se negaba a hacer moverse de su hogar. Levantó sus cejas, esperando que, como mínimo, le dieran ciertas razones de peso para poder seguiros con vuestra propuesta. Además, no parecía haber nadie en el interior de su casa (o al menos no se escuchaba a nadie más)-.

Entonces mirásteis todos disimuladamente hacia donde Tomás había descrito el origen de la vigilancia: efectivamente, dos siluetas indeterminadadas parecía estar esperando, en medio de la noche, a ver qué se cocía en la puerta de aquel hombre con un candil en la mano.

Notas de juego

Para tratar de convencerle con la palabra, habéis de sueprar una tirada de d100 de Elocuencia o COM (lo que más tengáis). Bonus de +25% en la dificultad (dada la escena de impresión que percibe el hombre delante de su puerta).

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03/02/2022, 10:56
Eleazar, el Manco

Eleazar comprendía que en verdad aquel asunto era extraño para el hombre, y no le hubo de sorprender. Él mismo habría pensado cuantas cosas terribles pudieran ocurrírsele, si le fueren a buscar de ese modo en medio de la noche.

- Señor, perdonadnos por tan repentina aparición. En verdad no somos más que mandados en este asunto, y nada sabemos del motivo concreto. Pero pensad que os han mandado a llamar, aunque sea a mala hora, y no a apresar, así que nada habéis de temer. Es más, a buen seguro el Arzobispo sabrá recompensar vuestra buena voluntad, y ello podrá haceros salir de las penurias pecuniarias que podáis sufrir, o tal vez pagaros un merecido retiro. Pensadlo así, aunque haga frío y sea noche cerrada, y de ese modo no os sentiréis tan mal. Que, de todas formas, siendo la voluntad de su Ilustrísima, bien sabéis que nada puede hacerse en su contra. Así que os lo ruego señor: venid con nos, antes de que el frío cale más hondo.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Si lo he entendido bien, tengo un bonus a la tirada, de modo que lo he añadido a mi Elocuencia. Si fuera al revés, la paso de igual modo :).

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03/02/2022, 18:26
Tomás Arizmendi

Tomás no era de los que saben hablar y convencer a los demás, trataba de ser educado y de estar en su lugar, pero de poca más ayuda serviría en aquella violenta situación en la que se encontraban. Escándalo, no podían montar, pues aunque poca, si que había algo de actividad en aquella calle. Y habían sido avisados de que no deberían llamar la atención. Agradecido, escucho a su amigo Eleazar, tratando de hacer ver al alfarero, la acuciante necesidad de que nos acompañase, con buenas y elegidas palabras. A las que poco el podía añadir:-Esté usted tranquilo, buen hombre. Seguro que algún buen motivo hay para que asista a ver al Arzobispo, y este le pagará holgadamente por su tiempo.-

Pero en esa situación, no quería intimidar al hombre, y se aparto unos pasos, para con cierto disimulo, vigilar la calle y los alrededores, no quería que les sorprendiesen. Podía haber otros intereses y movimientos aquella fría noche en la ciudad, y verse en medio de fuerzas opuestas, mejor estar alertas y vigilantes. 

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04/02/2022, 12:43
Ramón

Me estaba poniendo algo nervioso al sentirme observado desde las sombras. Si le sumaba el extraño encargo y que el tipo no se decidía a venir, mi cabeza era un hervidero de ideas para hacer que el alfarero se decidiera de una vez en acompañarnos. Al escuchar las buenas palabras de Eleazar y Tomás, decidí seguir su discurso apaciguador, aunque estaba algo más serio que los otros.

-"Vuesa merced, haced caso a estos dos, que dicen la verdad. No venimos para hacerle daño alguno, si no para escoltarle ante la presencia de su Ilustrísima. Y le recomiendo que no se lo piense más y se vista rápido. Tenemos que irnos ya, no hay que hacer esperar a la Iglesia... Ya me entiende." Dije muy seriamente.

Si el tipo se había sentido intranquilo, esperaba que con las bonanzas que le habíamos dicho los tres, recapacitara y decidiera venir con nosotros sin más preámbulos. Miré de reojo al callejón para ver qué hacían las dos figuras escondidas.

- Tiradas (1)

Notas de juego

¡UFFFF! Criticazooooo

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04/02/2022, 12:54
Pero Gómez

Las palabras del judío Eleazar le hicieron mirar con cierto recelo alfarero (tal vez por su condición de etnia). Sin embargo, aquellas palabras fueron extremadamente cálidas y convincentes, y no es que Tomás o Ramón fueran tampoco hombres de mal aspecto e intenciones insanas (de hecho éste último también le inspiró una imprevista confianza que acabaron por ablandar del todo al sujeto). El tipo resopló entonces, resignado. Tomó aire y sopló las velas de su candil hasta que se apagaron, y luego se agachó para dejarlo al lado de la puerta, en parte interior de su vivienda. Se internó un momento para coger una chaquetilla y calzarse unos zapatos, que el frio en la ciudad era sobrado y fehaciente de aquella ciudad era robusta en sus cimientos.

Vayamos pues... si es deseo del arzobispo... -señaló, mientras se colocaba aquella prenda sobre sí-. Y tras un ligero portazo el tipo dio un paso y se dispuso a seguiros, con aquel mandato velado a modo de petición. En aquel momento, fuera de la vista durante un instante de aquel alfarero, el criado de Fernando y del arzobispo Carrillo sacó de entre sus ropas un pañuelo pardo de material simple y lo extendió a Ramón, para que lo tomara y, una vez en la catedral, le vendara los ojos antes de introducirle en ella.

Por otro lado, tras un ligero oteo hacia donde estaban las figuras del callejón, notásteis que ya no estaban allí.

Notas de juego

No narro más al no saber si hacéis algo con respeto a las figuras. En caso contrario narraremos la vuelta al interior de la ciudad (sólo teneís que confirmadme sin narrar).

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04/02/2022, 14:28
Ramón

Recogí el pañuelo que el mozo me daba y lo guardé para ponérselo más tarde al alfarero. Las figuras habían desaparecido, así que teníamos vía libre. Miré a los demás y asentí con la cabeza. Me puse el primero, junto al muchacho, para ir abriendo la marcha hacia la catedral. Cuando llegáramos allí, a ver cómo le explicaba que tenía que taparse los ojos...

Notas de juego

Creo que vamos hacia la catedral. No sé si mis compis quieren ir al callejón para ver quién se escondía allí...

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04/02/2022, 19:58
Tomás Arizmendi

Costó, pero al final el alfarero se decidió a acompañarnos a la catedral, en un momento estuvo presto para aventurarse en las frías calles de su ciudad. Todo parecía ir bien, pero el que las figuras hubiesen desaparecido, le dejo inquieto. Sabía desde que se vieron forzados a esta tarea que estaban en medio de un juego peligroso, y algún otro señor les podía estar vigilando. Mas no veía, sino problemas y nuevos quehaceres, en ir tras aquellas sombras. Así que en voz muy baja dijo a sus compañeros:-Mejor que vayamos cuanto antes a la catedral, y que mantengamos bien abiertos ojos y atentos los oídos.-

Tal vez, de nada se tratase, pero los señores de la ciudad, o algunos de la comitiva, tal vez no fuesen lo que aparentaban. Como bien sabía, por el encargo de su señor.

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05/02/2022, 21:58
Director

Sin buscar respuestas en quienes podrían ser aquellos dos curiosos, regresásteis por el mismo camino por el que vinísteis, llendo muralla adentro. Tras un rato de caminata, llegásteis en compañía del constante frío a la puerta occidental, la principal de la catedral, pero no os detuvísteis allí; andásteis unos pasos más, llegásteis hasta la puerta de los Apóstoles, en cuyo tímpano de portada se desarrollaba el Juicio Final, con Cristo Juez rodeado de ángeles en dos niveles, quedando a sus pies algunas escenas de la Pasión, como la Última Cena o el Lavatorio.

Enseguida, bajo este prólogo divino,  le vendásteis los ojos a Pero, que así os había dicho que se llamaba aquel alfarero (aunque no había comentado nada más, dado que estaba nervioso y expectante por todo lo que estaba aconteciendo).

El criado del mayordomo del arzobispo extrajo de entre sus ropas una llave, abrió el portón y pudísteis introduciros en el grandísimo templo-fortaleza. Enseguida el frío dejó de azotaros, como la fe que reconforta al desvalido.

Momentos después, guiados por el criado del Mayordomo Fernando, todos caminásteis por el interior del templo, ligeramente iluminado con velas y candelabros aquí y allá (el criado tomó uno de ellos), dejando a un lado las capillas de la Concepción y de la Piedad. Enseguida seguísteis al muchacho a través de  una escalera de caracol ascendente (escaleras de la magnánime torre principal de la catedral). En ese momento las campanas tronadoras en lo alto repicaban con fuerza, y escuchábais algún que otro murciélago en el interior del templo aleteando seguramente muy cerca.

Finalmente a medida que subíais por la escalera vísteis a mitad de ella una puerta cerrada que debía dar a una sala contigua. Sin embargo, seguísteis subiendo varios escalones Enseguida llegáteis de uno en uno, en fila, a un espacio cuya puerta la formaban unos gruesos barrotes (nada de puertas ni ventanas).

Notas de juego

Abajo, la puerta NORTE (o puerta de los Apóstoles).

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05/02/2022, 22:12
Criado

Señores, era orden de Fernando que el alfarero aguardara aquí unos minutos, así como vosotros con él. Enseguida voy a avisar a mi señor -os hizo una reverencia y el joven muchacho bajó las escaleras de nuevo. Aquella sala estaba diáfana: era una especie de prisión. Al tal Pero se le veía nervioso, y no era para menos.

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06/02/2022, 00:32
Ramón

El pobre alfarero estaba casi temblando de los nervios... ¡pero es que yo también! Habíamos cumplido con nuestra parte y ahora estábamos esperando a que el Mayordomo viniera. La sala era una especie de prisión, dado que había rejas en la entrada. Eso no me gustó ni un pelo, la verdad. Seguro que había otras salas menos siniestras que esta en la catedral. El muchacho habia desaparecido por el pasillo y allí nos encontrábamos nosotros cuatro, recuperando un poco el calor corporal perdido por el paseo nocturno. Me acerqué a calentarme las manos a una de las velas que iluminaban el lugar. Les dije a mis compañeros que se acercaran a mi, dejando a Pero sentado en un lado de la estancia.

-"¿Qué creéis que pasará ahora? ¿Por qué tanto secretismo? ¿Quién serían esos dos que nos espiaban? Todo esto me huele muy mal. Si hemos terminado con el trabajo, sugiero coger nuestra recompensa e irnos con viento fresco de aquí rápidamente." Les susurré.

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06/02/2022, 09:29
Tomás Arizmendi

No le gusto a Tomás tener que dejar aquellos curiosos sin investigar, pero aquello podría traerles muchos peligros, así como demora en su misión. Pero aun menos le gusto el sitio en el que les toco esperar, al menos el alfarero tenía los ojos vendados, y no se asustaría aun mas de lo que ya estaba. Ante las palabras de Ramón, en voz baja y algo apartado del alfarero contesto:

-No me gusta nada que hubiese gente pendiente de nuestros movimientos, supongo que será cosa de los señores. Y espero que pronto nos saquen de esta espera, y nos permitan retirarnos a descansar. Pero mejor no aventurar nada. Y esperar pacientemente, ya se solucionará esto. Aunque no creo que nos aclaren nada, no.-

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06/02/2022, 22:10
Eleazar, el Manco

Como los demás, temblaba medio helado Eleazar, aterido por el frío que le había calado hasta los huesos. El judío sentía tanta inquietud como el alfarero que hasta allí habían traído, pues nada comprendía del asunto, y le parecía que la tarea encomendada, al margen de ser poco agradable, no tenía mucha razón de recibir gran recompensa. Ir a buscar al alfarero y traerlo a la catedral, guiados por un criado que mejor conocía las calles... algo turbio tenía que haber en el asunto, o nadie les pagaría un maravedí por ello. Y casi que a Eleazar le daba ya lo mismo: si se torcía la historia, a saber dónde acabarían, si en el cadalso o en algún lugar peor. Él tenía un señor que le esperaba, y ya se preguntaría este por su ausencia.

- Creo que en verdad, en estas lides, es mejor no saber. - dijo Eleazar, acercándose como Ramón a una vela, para intentar calentarse el cuerpo, sin gran éxito - Esperemos y veamos, igualmente.

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07/02/2022, 22:24
Fernando de Alarcón

Con las dudas y la incertidumbre acerca de qué pasaría en esos momentos, notásteis pocos minutos después una luz que subía por las escaleras de caracol de nuevo. Otra vez el candil del joven criado y un saco de esparto al costado. Esta vez estaba acompañado de otro hombre. Era Fernando, criado del arzobispo. Enseguida se puso a vuestra altura y se acercó a aquella celda. Se quedó entonces mirando a Pero, el alfarero, un instante.

Bien, señores, parece que sois bien mandados -añadió-. Entonces el alfarero le devolvió la mirada, pues tenía delante de sí a otro hombre al que no conocía de nada. No temas, buen hombre, pues nada malo habemos de hacerte -decía con palabras amables-. Dadas tus dotes como alfarero, os digo, que habéis de fabricar un busto de hombre de tamaño natural... ¿Seréis capaz?

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07/02/2022, 22:24
Pero Gómez

Pero levantó las cejas, y sus ojos brillaron un instante en el tenue espacio de luz iluminado. Señor, debéis estar confundido  -respondió el hombre-. Mandáis modelar bustos humanos a quien no hizo en su vida más que vasijas y pucheros... -y en eso tenía razón-. Además, ¿a quien hay que representar?

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07/02/2022, 22:25
Fernando de Alarcón

No te preocupes, alfarero, lo harás debidamente -hizo un gesto y mandó a su criado abrir el saco que éste había traído-. He aquí arcilla, ungüentos y materiales y herramientas para modelar -efectivamente, allí había herramientas necesarias y materia prima para hacer un busto provisional, de los que los alfareros y artistas fabrican antes de esculpir la obra final en piedra viva-. Entonces Fernando, dicho esto, sacó una bolsa bajo sus ropas-. Vos id haciendo el busto, que ya te diremos a quien se ha de parecer... Además, tened a buen seguro que vos pagaré por adelantado, como haré con estos buenos hombres... -refiriéndose a vosotros-. Bueno, vosotros... -os dijo-, habéis cumplido, está claro; aunque acaban de llegar deseos de su Ilustrísima para con mi persona, y debo ausentarme. Por ello: el contrato se ve ampliado, si os place. Espero que no tengan prisa -os preguntó indirectamente, esperando si aún estábais dispuestos a conceder la merced de Fernando y por extensión del Arzobispo-: necesito a alguien que quede esta noche vigilando a este buen hombre, junto a mi criado. Será él quien dará instrucciones sobre la obra -esto último dirigido a Pero-. Tendrá por ello que trabajar esta noche en lo que le he pedido, hasta que el sol salga de amanecida.

Notas de juego

Fernando espera vuestra respuesta y decisión sobre quedaros con Pero mientras trabaja. Podéis, si os parece, acompañar con vuestros post las tiradas que creáis convenientes.