Partida Rol por web

Los hombres de Lord Bragost estaran esta noche intranquilos, es mejor que nos acompañeis. mañana, a primera luz de dia yo mismo os acompañere y usare mis artes para sanar a vuestra hermana si es precisi... pero preveo sombras en esta noche que no son naturales. El mundo esta avanzando hacia la oscuridad y creerme si os digo que es apremiante ir a cubierto, ahora.

- Como les dije... es evidente que no hay otro camino... ¿vamos? - agregó Tiberio con una expresión amistosa

Miro a la chica que me habla y sonrio un poco avergonzado por mis malos modales.

Perdona, mi nombre es Sargón... se que estoy mejor con vosotros... al fin y al cabo acabais de salvar a mis padre, solo pense que querrías saber que pasa en el castillo. Vamos a la torre pues. Seguia desconfiando de la magia pero realmente no parecían tan malos como decían los rumores.

- Sargón... la torre está en el castillo... quizá ese detalle unido a la desconfianza que te generamos es lo que estaba confundiendo la situación... - con cortesía Tiberio respondió - ... ensillen y salgamos... - miró a Kaen antes de continuar - ... ¿y bien joven?

No quería herir los sentimientos de aquella gente... pero al menos había conseguido saber sus nombres...

Después de hablar Tiberio dije... como si la conversación siguiera el mismo curso: Yo soy Laia.... encantada de conoceros...

Una chica con un arco impresionante asintio.- Mi nombre es Laurielle, arquera de profesion.- aseguro la joven, que aunque de cuna humilde parecia haber recibido un entrenamiento digno de un principe, por su porte y saber estar.

Era noche cerrada cuando divisasteis la torre, era un ala algo apartada del castillo donde Lord Bargost ejercia su dominio de aquellas tierras.

El brujo lanzo una especie de hechizo que hacia que todo el que se cruzaba con vosotros os ignorase como si no os estuviera viendo. Dejasteis los caballos en el establo de atras y subisteis por la pequeña escalinta hasta la puerta de la torre.

La puerta se abrio solo sin que nadie la tocara, como reconociendo a su amo, cerrandose tras el ultimo de vosotros en pasar.

Morgul os guio por una escalera de caracol, plagada de puertas a ambos lados, abrio una mostrando una habitacion sencilla con dos camas que parecian recien hechas para esperaros.

- Podeis dormir aqui pero antes, seria mejor que comieramos algo.- dijo continuando su andadura, ascendiendo con el rostro serio por la escalera hasta llegar a un comedor amplico, con una mesa de madera en el centro y calentado por una chimenea que se encendio sola en cuanto el mago la miro. Habia un caldero a su lumbre que al recibir la llama comenzo a oler a un estofado delicioso calentandose.

-Por favor, sentaos, debemos hablar.

Las cosas no pintaban bien mas por un segundo Tiberio se paró a observar la torre, mirar sus ángulos, sus muros... Incluso en la noche oscura es un hogar... tenía ganas de ir a su habitación a descansar, si podía y decir adiós al día de hoy... por desgracia parecía que aún quedaba bastante para eso, sus sospechas se confirmaron con las palabras de Morgul Rast.

Dejando sus cosas sobre un aparador del salón se giró hacia los visitantes

- Si necesitan algo no duden en pedirlo... por el momento tenemos algo urgente que tratar... - señalando con la mano extendida hacia las sillas vacías en la mesa central antes de ponerse junto a una sin llegar a sentarse con educación a la espera de los demás

De pie tras el respaldo de la silla Tiberio esperaba

Toma asiento... por fin tendremos respuestas... creo... creo que prefiero una Laia Laos sentada a mi lado... es posible que lo que sospecho sea cierto y nos afecta a los dos...

Tome asiento en la silla que Tiberio guardaba desde atrás y dije:

Comamos y descansemos... creo que el día de mañana estará lleno de sorpresas para todos y no todas muy agradables... dije con gesto aflijido.

No te preocupes... estoy y estaré a tu lado... pero mantenme informada... yo no puedo entrar en las mentes de los demás...

o al menos aún no he aprendido... creo...

Lo que sé y sospecho es todo fruto de aquello que he aprendido o deduzco... no suelo entrar en la cabeza de nadie... la mayoría no tienen nada interesante... prefiero que sea algo... puntual por el momento... y este asunto de intercambiar ideas... es exclusivo de Morgul Rast y contigo...

Me encontraba totalmente fuera de lugar en esa gran torre del mago viendo todo con ojos bien abierto y con miedo de tocar cualquier cosa.

Me siento donde me dicen, sabiendo que no tengo los modales elegantes que esta gente ve como "normales" esperando que ellos hablen.

Kaen se sentia bastante incomodo, quizas por que debia ir con su familia y si no recibian noticias de su persona quizas pensarian lo peor aunque su padre.... sabia que era de meterse en problemas y salir de ellos aireoso bueno en la mayoria.

-Gracias - Dijo el joven cirquero - Aunque de algun modo debo avisar que estoy con ustedes - si estos años se habia apegado mucho a ese grupo de personas que una vez le salvaron la vida.

Cuando todos tomaron asiento Tiberio se colocó en su silla esperando las palabras de Morgul Rast

Morgul miro al leñador un segundo y el hombre se levanto de la silla bostezando. Casi de un modo automatico se dirigio de vuelta a la habitacion como un sonambulo.

- No le hice nada, solo condicione su mente para que fuera a dormir dado que lo que vamos a tratar no le atañe, contra menos sepa o recuerde de esto, mejor.- Aseguro el mago barriendo a cada uno de vosotros con la mirada.

- Señores, lamento ser portador de nefastas noticias... tambien tengo alguna buena aunque no se como van a tomarla.- Aseguro cruzandose de brazos pensativo.

- Podria decirse que es una leyenda... si no fuera real, que un ser de poder fue encarcelado hace cientos de años. Ahora su prision se desmorona. Esta noche a roto uno de los ultimos sellos y una oleada de maldad esta pasando por el mundo. Aquellos de mente mas devil se dejaran arrastrar por su locura y mataran, violaran y quemaran incluso sus propias casas... Aqui estamos a salvo pero me temo que no podemos hacer nada por evitarlo.

Las buenas noticias son que solo durara hasta el alba y si no se rompe otro sello no volvera a suceder, ademas ustedes comienzan a reunirse.- dijo con una media sonrisa.- Ustedes son parte de los escogidos, personas que el destino selecciono desde la cuna para detener el mal del mundo... son heroes, aunque aun no lo sepan.

Morgul espero la reaccion de sus jovenes oyentes esperando contar algo mas.

Tiberio se mantuvo en silencio a la espera con un rostro serio

Conocía la profecía... me la contó Morgul hace años... es lo que me temía pues llega el momento... las cosas parecen estar sucediendo rápido... también era consciente... por mi visión al oráculo... de unos niños elegidos... algo sobre un viaje para reunirlos... argh esperemos a ver dónde están las buenas noticias