Partida Rol por web

Y ahora es cuando viene el final boss...

Los gritos proceden de la casa y hacía allí os dirigís rápidamente cruzando el jardín rápidamente. La lluvia y el frío viento os ataca duramente mermando vuestra resistencia física y mental a la vez que pensáis en lo bien que os vendría ahora un baño con agua caliente pero al volveros para observar el cielo podéis observar claramente como si un huracán se dirigiera hacía vosotros con toda su fuerza y poder destructivo.

La entrada principal a la mansión esta abierta pero no perdéis el tiempo en limpiaros los zapatos porque el sonido sigue llegando desde lo que parece la planta superior. Seguramente se trata de vuestros anfitriones, el matrimonio busquet, pero algo llama vuestra atención y es que la puerta que se dirige hacía el sótano esta abierta.
¿Que es lo que pensáis hacer ahora?

Pierre ve de reojo la puerta del sótano, pero sigue corriendo en dirección a los gritos, armado con la pata de la silla.

Sin lugar a dudas el enigmático Cheng había dado con el escondrijo del sótano, solo de pensar de que había desatado el poder del espejo maldito me daba mareos. Tras los pasos de Pierre subí las escaleras ya que sería una locura bajar solo al sótano.

Vamos al Sótano grito para que me sigan.

Me dirijo hacia el sótano ya que proceden los gritos de allí.

Siguiendo a sus compañeros, el cuasi-fornido capitán, sonrojado por la carrera que acaba de realizar, se mete en la casa como si fuera el jardín lo que se quemaba.

Al entrar, al igual que sus compañeros, escucha los gritos en la planta superior. Sin poder parar a tomar aliento, William sube las escaleras detrás de sus compañeros. No podía pararse, a pesar del acaloramiento que sentía en... en todo el cuerpo. pero eso sí, sin soltar la pesada pata de la silla, por si era necesario sacudir manporros.

mmm... dejame meditarlo y ya te digo a donde me dirijo.

Pierre Teilhard de Chardin, Zhang Wei y William Connor suben rápidamente las escaleras hacía la planta superior dejando a sus compañeros atrás.

Subís los escalones que se dirigen hacía la planta superior con celeridad pero es William Connor quien se adelanta un poco por delante de Pierre Teilhard de Chardin quedando Zhang Wei en último lugar como si esto fuera una carrera. Fuera de la casa el viento parece crecer en intensidad intentando entrar también dentro de la mansión. El mareo que estabais sufriendo también crece en intensidad como si una taladradora estuviera a toda potencia dentro de vuestro cerebro.
Vuestras ropas húmedas dejan manchas en la moqueta del pasillo pero ninguno de vosotros resbala pero os sorprende ver al viejo Cheng en la puerta del dormitorio de los Bousquet con un kimono negro bellamente adornado y mirada pensativa centrada en sus pies. Al acercaros se limita a echarse un lado y haceros un lento gesto con la mano para que paséis dentro de dormitorio.

Es una vez dentro de la sala cuando os lleváis una sorpresa mayúscula ante lo que tenéis delante vuestra. Las sábanas de la cama están manchadas de sangre fresca y la joven mujer sostiene en sus brazos una manta con algo enrollado dentro. A los pies de la cama el joven señor Bousquet llora en el suelo con la expresión perdida. Sin embargo vuestros ojos se dirigen directamente hacía lo que Tian sostiene entre sus brazos pues es una horrible criatura con cuerpo de gato y cabeza de bebé humanoide, ensangrentada y llorona.
Curiosamente en este momento un suceso en el que hasta ahora nadie había pensado viene a vuestras mentes y es que precisamente hoy da comienzo el nuevo año chino siendo ahora el año del dragón.

La revulsión que pudiera sentir Pierre inicialmente al ver la escena se dulcifica de inmediato al darse cuenta del milagro de la Creación, si bien es incapaz de entender si el pequeño ser que Tian sostiene en brazos es enteramente natural.

De todas formas, y de forma discreta, se recoge unos instantes para ofrecer una plegaria por la vida del nuevo miembro de la familia Bousquet.