Partida Rol por web

Tu personaje es nada más y nada menos el heredero de los Uller o, al menos, se ha hecho pasar por él.

El grupo del heredero fue asaltado por unos mercenarios/bandidos y fueron masacrados. Aprovechando la oportunidad de ser el único superviviente (por alguna absurda razón como que el heredero de los Uller te provocó una esguince porque le habías mirado mal e ibas por detrás del grupo) adoptaste el rol de heredero y viajaste a Asperón para ser entrenado como si fueras el noble. Una vez allí te entrenaste en uno de los diversos campos de la guerra (aquí te dejo libertad para elegir, como guerrero normal, arquero, estratega como Lord Arron, maestro del veneno, etc)

Después de varios años volviste al castillo de tu "padre" y descubriste que este casi había iniciado una guerra contra los Martell por el ataque durante el que murió su verdadero hijo. Ahora, ocupando el lugar que te corresponde, estás pendiente de las intrigas de tu padre para vengarse de los que él cree estaban detrás del ataque, los Martell.

Te dejo más datos de la casa Uller. 

Casa Uller.

Lugar: Sotoinferno.

Lema de la Casa: - DESCONOCIDO ¿inventar?

Relaciones con otras casas:

*Casa Yronwood: la Casa Uller, al igual que la Gargalen, es combativa y rehusa a hincar la rodilla. La diferencia entre ellas es que la casa Uller no duda en levantarse en armas contra cualquiera, de forma impulsiva. Es por ello que el resto de las casas prefieren alejarse de esta, incluida los Yronwood, manteniendo una relación fría y lejana.

*Casa Manwoody: la Casa Uller, al igual que la Gargalen, es combativa y rehusa a hincar la rodilla. La diferencia entre ellas es que la casa Uller no duda en levantarse en armas contra cualquiera, de forma impulsiva. Es por ello que el resto de las casas prefieren alejarse de esta, incluida los Manwoody, manteniendo una relación fría y lejana.

*Casa Qorgyle: ambas casas tienen una buena relación pues la casa Qorgyle es una de las pocas que ha tratado estrechar lazos con los Uller y lo ha conseguido. O al menos eso parece.

*Casa Dayne: la Casa Uller, al igual que la Gargalen, es combativa y rehusa a hincar la rodilla. La diferencia entre ellas es que la casa Uller no duda en levantarse en armas contra cualquiera, de forma impulsiva. Es por ello que el resto de las casas prefieren alejarse de esta, incluido los Dayne, manteniendo una relación fría y lejana.

*Casa Toland: la Casa Uller, al igual que la Gargalen, es combativa y rehusa a hincar la rodilla. La diferencia entre ellas es que la casa Uller no duda en levantarse en armas contra cualquiera, de forma impulsiva. Es por ello que el resto de las casas prefieren alejarse de esta. Los Toland no son una excepción y ven a esta casa como un peligro por lo que la rechazan abiertamente.

*Casa Fowler: la Casa Uller, al igual que la Gargalen, es combativa y rehusa a hincar la rodilla. La diferencia entre ellas es que la casa Uller no duda en levantarse en armas contra cualquiera, de forma impulsiva. Es por ello que el resto de las casas prefieren alejarse de esta. Los Fowler han tratado de mermar su poder y el de la Casa Gargalen para evitar posibles amenazas futuras.

*Casa Dalt: la Casa Uller, al igual que la Gargalen, es combativa y rehusa a hincar la rodilla. La diferencia entre ellas es que la casa Uller no duda en levantarse en armas contra cualquiera, de forma impulsiva. Es por ello que la Casa Dalt ha estrechado mucho sus relaciones con esta casa, incitándolos a levantarse contra sus ahora enemigos, los traicioneros y egoístas Martell.

*Casa Gargalen: ambas casas mantienen una muy estrecha relación pues ambas son apartadas por la mayoría de las otras casas.

Recursos más importantes: al encontrarse Sotoinfierno a orillas del Río Azufre la casa tiene muchos recursos básicos, alimentos, agua, madera. Aún así su posición en el desierto no les hace muy aptos para el comercio por lo que no son demasiado ricos y su actitud beligerante no le ha otorgado nada bueno.

Ejército: 2 barcos de guerra, 1600 guerreros a pie, 300 arqueros, 200 caballeros, 400 batidores.

Sucesos recientes: los intentos de la actual princesa de Dorne de coronar a su propia reina de Poniente no dieron los frutos que esta hubiera deseado aunque ella no tuvo que pagar ningún precio, solo sufrieron las gente que la apoyaron o en las que pensaba apoyarse. Los Uller no son una excepción y Harmen Uller, señor de la casa, esperó las consecuencias durante años. Tras mandar a su primogénito a Asperón para que este fuera entrenado por Lord Arron se enteró de que su comitiva había sido atacada y todos sus hombres muertos. Su cordura se rompió con facilidad pues su sangre era Uller y reunió a sus ejércitos para partir a Lanza del Sol para matar a su señor, pensando que este era el causante del ataque. Por suerte, antes de que todo llegara demasiado lejos, recibió el mensaje de que su hijo seguía con vida por lo que cesó en sus intentos, buscando nuevas oportunidades para vengarse tarde o temprano.

Miembros actuales no PJ:

-Harmen Uller: señor de la casa Uller, un hombre combativo, vengativo, lleno de odio y con la cordura un tanto transtornada.

-... Uller: el hijo del señor, personaje de Shock.

La verdad es que me encanta el Transfondo.

Ya tengo más o menos pensado un motivo porque logro sobrevivir al ataque, que va a estar bastante bien. Escribiré un Preludio a la altura y lo plasmaré allí. También me inventaré un lema para la Casa.

El nombre del personaje, si te parece bien, será, Bleyk Uller.

Respecto a la relación con la casa Martell, entiendo que mi Casa apoyó en un inicio a la Princesa de Dorne como Reina de Poniente, luego pagamos las consecuencias de ese apoyo y luego nos enemistamos con ellos por considerarlos responsables del ataque. ¿Es así?

Voy a estar unos días en la playa, pero aprovecharé para darle vueltas y pulir el personaje.

El nombre me parece adecuado.

Es exactamente así, Doran Martell castigó a todos los que apoyaron a su hija pero no a su propia hija. Esta, tratando de pasar la responsabilidad a terceros, influyó en los castigos acrecentándolos aún más. Así tu familia se esperó lo peor y vuestro "padre" responsabilizó del ataque a los Martell. Si no fuera porque sobreviviste se habría iniciado una guerra en Dorne.

Tienes tiempo para pensártelo, shock. Luego seguramente pongamos un segundo personaje subordinado a tu personaje principal :)

Dijiste que quizás poníamos un segundo personaje subordinado al principal. Si tienes alguna idea que pueda desarrollar como segundo personaje ya dirás.

Me he comprado el Manual para hacerme el personaje en condiciones. En cuanto tenga tiempo me pongo con la ficha.

Eres libre de crear al personaje que desees (yo debo aprobar el concepto) siempre que apoye a tu casa. Por ejemplo, un bardo que va castillo por castillo enterándose de los rumores y creando otros nuevos, un asesino fiel a los Uller, un pirata aliado con esta casa, un caballero de otra casa que perdio el poder por los Martell, etc.

Tu escoges :)

Ya estoy con la ficha. Los personajes incorporados de nuevas empezamos con los puntos básicos, no?
Por edad me corresponde Adulto, así que son 210 puntos para Habilidades.
El Estatus hay que pagarlo con esos puntos, no? Cuanto Estatus debería cogerme por historia?
La verdad es que tengo miedo de dispersarme en las Habilidades, porque siendo noble hay que tener buenas aptitudes sociales, de armas y algo de educación.
Respecto a idiomas, hay alguno además del común que debiera conocer por geografía, o por haber sido durante un tiempo ayudante de un Septon?

Si, empiezas con los puntos básicos.

En principio si, el estatus se paga con esos puntos pero mira, como te estoy limitando bastante, empieza con estatus 3. Por historia deberías tener al menos 4, si puede ser 5.

Los idiomas no tienen demasiada importancia en la partida, ya es bastante complicada de por sí como para meterle más cosas raras :)

Shock, ve pensándote el segundo personaje y haz el primero. Cualquier duda me avisas. El 15 o poco más volveré de las vacaciones y me pondré a mirar fichas y arreglar detalles.

Un saludo.

Hecho. Yo acabo de volver hoy de vacaciones y me pongo a ello.

¿Alguna sugerencia para el segundo?

Ya tengo pensada la foto. Ahora la subo

Ninguna, eres totalmente libre. Principalmente algún tipejo que pueda ayudaros a ti y a tu casa.

A continuación, el Preludio de Bleyk Uller.

Igual me he emocionado demasiado y me ha salido un poco largo. 

No he puesto el nombre del Noble con el me entreno como Caballero. Quizás puede ser otro Uller o alguno de una Casa amiga como los Gargalen.

La identidad

Mi nombre es Bleyk Uller. Pero no siempre fue así. Nací como Marclis Droven, en el seno de una humilde familia, en la castigada región de Sotoinferno, sin más posesiones que la manta que me envolvía y el aire que respiraba.

Cuando termine mi historia, considerarás que mi vida ha sido un cúmulo de desgracias, sin embargo yo siempre me sentí afortunado y en cierta forma…especial.

Mi padre sembraba por las mañanas y por las noches se hundía en el fruto fermentado de lo que otros habían sembrado. El alcohol retorcía de tal manera su ser que evitar pasar tiempo en casa se convirtió en mi juego preferido de la infancia. Siempre esperaba a que él se hubiera caído dormido para volver.

Una noche, cuando el silencia ero absoluto, volví feliz a mi hogar. Una calma como la que no recuerdo reinaba en los aledaños de mi casa. Entrar en ella me bastó para averiguar el motivo. Ninguno de mis padres se hallaba allí. Salí corriendo, sumido en el incierto temor de que algo no iba bien. Llegué a la plaza de la aldea y el temor se hizo certeza. Mi padre se encontraba de rodillas, sometido por dos miembros de la guardia del Señor local. Junto a él, había un puñal ensangrentado. Unos metros más allá, alguien arrastraba el cadáver de mi madre. Los comentarios de los vecinos aseguraban que la había matado en un ataque de celos, sin duda espoleado por el alcohol. Fue entonces cuando comencé a odiar ese brebaje.

A los dos días el Señor llegó para administrar su justicia. Pena muerte para mi padre, conmutada por el Juramento de servir en el Muro. Yo, sin muchas más posesiones que aquellas con las que había venido al mundo, fui entregado al Septón para servirle como ayudante.

El Septón era un bueno hombre. En el fondo lo era. Él me enseñó a leer y escribir, para que pudiera servirle como escribano y copista. Me enseñó historia. Me enseñó a amar a los dioses y a nunca perder la esperanza. Pero como todos los hombres, él tenía sus vicios. Y el suyo era el juego. Apostaba en cualquier cosa que pudiera apostar. Y por supuesto bebía. Asediado por las deudas, se sirvió de las ofrendas que el Señor de los Uller enviaba para gracia de los Siete y el mantenimiento del templo, aplicándolas a sus propias necesidades ludópatas. La Casa Uller terminó por advertirlo y vinieron a cobrar su deuda, pero ya era tarde. El Septón estaba arruinado. En su lugar me ofreció a mí. Asegurando que era un joven despierto y bien instruido, me entregó para servir en la fortaleza de Harmen Uller.

La primera vez que contemplé al que sería mi Señor me impacto el aura de fuerza que emanaba de su figura. Parecía capaz de matar a un hombre con sólo mirarlo. Tras cruzar unas pocas palabras conmigo, me asigno como paje de su único hijo mayor, Bleyk. Bleyk era el primogénito y heredero, pues aparte de él sólo había otra Uller en aquella fortaleza. Su hermana pequeña Rinsa. Harmen quería que yo ayudara a su hijo, pero también que le educara. Quería que le contara cómo había sido mi vida, pues Bleyk era un niño consentido, arrogante, sin límite alguno a su despotismo. Yo no entendía bien por qué. Bleyk carecía del porte de su padre. Más allá de sus vestiduras y su hablar refinado no había nada intrínseco que hiciera de él un noble. A mis ojos era como cualquier niño de mi edad. Incluso se parecía a mí. Un habitante de esas tierras normal y corriente.

Servir al primogénito fue la tarea más dura de cuantas había vivido. Su menosprecio era hiriente, como un látigo lacerando la carne de mi espalda. No podía quejarme, pues la comida y el techo no me faltaban, pero no podía evitar odiar a Bleyk Uller. Siempre que podía compensaba ese odio charlando con las sirvientas de Rinsa. Incluso la propia hija de Harmen me trató mucho mejor que su hermano y llegamos a tener alguna que otra agradable conversación.

Y así pasó algún tiempo, hasta que Bleyk tuvo la edad suficiente para aspirar a ser un Caballero. Los Uller son una Casa belicosa y todos sus varones tienen la obligación de obtener el título de Caballero. Como era costumbre, el primer paso consistía en servir como escudero de algún otro noble, también Caballero, con el que se guardara buena relación.

Emprendimos el viaje hacía allí, escoltados por una pequeña comitiva compuesta por unos pocos guardias, algún que otro sirviente y uno de los consejeros de Harmen más. Durante el camino, el consejero y Bleyk departían sobre grandes gestas bélicas que se hubieran librado en aquellas tierras. La conversación fue centrándose en la vida de Geloir Breden, un guerrero de la Edad Mítica del que los Uller se consideran descendientes. Bleyk, recordaba al consejero como consiguió hacer frente a quince enemigos con una espada quebrada junto a la puerta de Brodas.

“Nueve”. Se me ocurrió decir. No pude evitarlo. Fue algo que se me escapó sin remedio. Bleyk, con la ofensa tomando forma en su rostro me preguntó a qué me refería. Yo, con mi voz y mi excusa más humilde le expliqué que no fueron quince los enemigos que venció, sino nueve. Los nueve hijos del Señor de la Guerra de Brodas. Yo lo sabía por mi tiempo de instrucción con el Septon. Bleyk no soportó que yo le corrigiera. Entonces el recordó que Geloir Breden portaba bajo a su armadura una flor, que decía que le traía buena suerte. Una adianara de seis puntas. Algo totalmente inusual, pues esa flor, de color azul intenso, tiene normalmente cinco hojas. Bleyk dijo que sería un bonito homenaje en su andadura como Caballero el portar una flor igual y así me ordenó dejar la compañía para buscar una por los alrededores, aclarando que no podría regresar hasta que la hubiera encontrado. El consejero y los demás criados trataron de disuadirle, advirtiéndole que era una tarea que me podía llevar días, si es que llegaba a encontrar alguna, y que con seguridad perecía yo sólo en el bosque antes de lograrlo. Más el primogénito de los Uller no conocía la piedad y su orden se mantuvo inflexible.

Así, yo me quedé atrás, con el corazón encogido, sólo, en aquel terreno salvaje. Durante horas busqué llevado más y más por la desesperación, con el anochecer en ciernes, sin tan siquiera encontrar una adianara normal y corriente. Las lágrimas comenzaron a amontonarse en las cuencas de mis ojos, pues verdaderamente temía por mi vida. Empecé a correr de una dirección a otra, rezando a los Siete para que me auxiliaran, hasta que tropecé con la raíz saliente de un árbol. Rodé por una pequeña loma, arañándome las manos y golpeándome en un pómulo. Alcé entonces la mirada y el mundo se detuvo. Ante mí, como llevada por la providencia de los dioses se alzaba solitaria una adianara. Y no tenía seis hojas. No. Tenía siete.

Una carcajada brotó de mis labios. La arranqué de la tierra con preciso cuidado y me apresuré a volver al camino antes de que la oscuridad me impidiera encontrarlo. Aquella noche no dormí, sólo anduve con la esperanza a vislumbrar el campamento de mi señor antes de que partieran al día siguiente. Tuve que esperar hasta el alba para encontrarlos. Más ninguno quedaba ya con vida.

El campamento estaba arrasado y los cadáveres de toda la comitiva se hallaban dispersos a lo largo del terreno. No podía creerlo. Alguien, un grupo numeroso seguramente, les había atacado en plena noche. Estaba perdido. Ya no tenía a nadie a nadie. Me vi a mi mismo sobreviviendo sólo en aquel paraje. En el mejor de los escenarios podría encontrarme con algún viajero que me auxiliara. En el peor, moriría allí, solo. Entonces me topé con el cuerpo de Bleyk Uller, quien también yacía  muerto. Vi sus ropajes, mucho más cálidos que los míos, y pensé que me ayudarían a sobrevivir. Entonces, una idea grotesca se me apareció en la mente. Yo sería Bleyk Uller. Al menos hasta que saliera de aquel bosque. Él tenía poder e influencia y cualquiera que me encontrara ayudaría antes a un noble bien posicionado que a un criado con ropas manchadas de barro. Me apresuré  a desvestir el cadáver. La punzada mortal y sangrante que encontré en su pecho casi me hizo vomitar. Al sacar una de las mangas de su jubón, descubrí que le habían cortado el dedo meñique de la mano izquierda. Entonces pensé que si quería hacerme pasar por él, si mi plan funcionaba y lo mantenía en el tiempo, tendría que cortármelo, pues los atacantes sabían que se lo habían cortado. Puede que no recordaran dónde le habían herido, pues había sido una emboscada nocturna. Pero quien le cortara el dedo lo había hecho a conciencia. Es más, era probable que se lo hubieran llevado.

Antes de nada, vestí el cuerpo de Bleyk con mis ropas. Después arañé mi pecho, tratando de imitar la herida que él tenía, pero sin tanta profundidad. Apuñalé su estómago muerto, para distinguir nuestras heridas y corté su mano izquierda, para que no hubiera confusión posible. Las arcadas me interrumpían, pero no tenía comida en el estómago que expulsar. Finalmente busqué la espada más afilada, coloque mi dedo meñique sobre una piedra y lo corté de un tajo. La sangre brotó y la envolví con un paño. Apreté. El dolor era insoportable, pero aún había algo que debía hacer. Me separé de la escena y enterré mi dedo amputado en la tierra, pues no estaba seguro de que los atacantes no se hubieran llevado el original como un trofeo. Sabía perfectamente como dar verosimilitud a mi plan. Nunca antes se me había ocurrido que mi mente pudiera funcionar así. Volví, a duras penas. Mi herida aún sangraba. Quise salir al camino, pero no pude. La pérdida de sangre y la extenuación por andar toda la noche hicieron que perdiera el conocimiento.

No lo recuperé hasta un día más tarde, cuando desperté en el castillo del noble aliado al que nos dirigíamos. Inquieto por el retraso había enviado a sus hombres a buscarnos. Ellos me rescataron, me curaron, y me llevaron allí. El Noble me acogió admirado por mi enorme fortaleza, pues yo había sido el único superviviente. Y no sólo eso. Entre mis ropas encontraron la adianara de siete puntas. Sin duda una señal de que los dioses me habían salvado la vida. Sin duda una señal de que estaba destinado a ser un personaje relevante en la en su obra divina.

Con esa gran consideración, el Noble me tomó Escudero. Me instruyó durante cinco años. Me nombró Caballero y me devolvió con mi padre. Mi nuevo padre. Harmen Uller. 

Es una historia digna de novela. Me dejas con un sabor de boca increíblemente bueno para las vacaciones. Si tu nivel en la partida es la mitad de bueno me lo voy a pasar genial contigo.

Respecto al caballero, no sería raro que te acogiera Lord Arron Qorgyle, pues es el único señor que os muestra confianza y apoyo, además de ser un comandante increíble y un temperamento nacido para la diplomacia y la guerra.

Lord Arron Qorgyle: es el señor de esta casa, un general aclamado por todo Poniente, paciente y bondadoso.

Gracias, intentaré mantener el nivel.

Me encanta lo que me cuentas de Lord Arron Qorgyle. Es justo la guinda que me faltaba a la historia.

La ficha la tengo casi a punto. Me falta reordenar algunas Habilidades, porque los puntos no me dan para todo lo que quiero y elegir algunos Beneficios.

Espero que disfrutes de una buenas vacaciones.

Bleyk, ve mirando el segundo personaje :)

Sí, sí. Estoy en ello.

La ficha del primero ya la tengo sobre el papel. Me faltan los últimos retoques. En cuanto pueda la subo para que la revises.

En cuanto al lema de la Casa Uller tengo las siguiente ideas:

"No hay ofensa sin castigo"

"Nuestra ira quema"

"No provoques nuestra ira"

"Hay honor en la ira"

"Nuestra ira es rápida, nuestra espada más"

Como ves, todos muy amigables. ¿Dime cuál crees que queda mejor?

Ya estoy dando mis últimos retoques. Dado que una de las motivaciones de mi Casa es una retorcida forma de Justicia en forma de Venganza, mi personaje va a ser un asesino, que también puede cumplir las funciones de espía. Algo así como un agente de inteligencia en el mundo de Juego de Tronos. 

Había pensado que fuera miembro de alguna guardia de élite destinada a reparar las ofensas contra nuestra casa. Sería un tipo callado, de carácter distante, muy expeditivo, experto en matar de forma sigilosa (venenos, a distancia) pero sin desmerecer el combate cuerpo a cuerpo.

No es oriundo de Sotoinferno, pero fue acogido por la casa de los Uller. De alguna forma, siente que tiene una deuda con sus ancestros, los cuales le observan. Para él, una muerte cobarde sería el peor de los finales. Tiene una idea algo particular del honor, la muerte y el combate.

Tiene el pelo moreno y los ojos verdes.

Sus habilidades más destacadas serán las físicas, combate, discreción, ingenio y también disfraz.

En cuanto pueda desarrollaré un preludio a la altura.

Respecto a Bleyk, ya he colgado parte de la ficha. Me falta tan sólo los puntos de destinos, de los cuales invertiré un par en Méritos, uno de los cuales será sin duda el de ser afortunado (sangre de ándalo) Quizás le ponga alguna desventaja más, pero con mesura.  

Shock, el segundo personaje lo veo bien, ponte con ello en cuanto puedas.

Respecto al Uller, mira, lo que estoy haciendo ahora es dar una subida automática de estatus de 3 a 4 o 4 a 5 gratuita (30 puntos) por lo que si no me equivoco tienes 20 puntos más para gastar.

En cuanto tengas ambos corrijo las fichas.

Un saludo.

Este fin de semana tendré sin falta terminados los dos personajes.

Un par de cuestiones. Con los 20 puntos que me comentas no tengo claro que hacer, porque me gustaría, más que subirme 2 habilidades a 2 esperar y subirme alguna a 4. ¿Se pueden ahorrar esos puntos hasta el reparto de experiencia por historia y acumularlos?

Respecto al segundo personaje, he pensado que fuera en origen de Braavos o alguna otra ciuedad libre al que Harmen Uller dio cobijo por algo. No quiero que sea un Hombre Sin Rostro, aunque quizás en su día lo intentara. Más que un asesino sería también un investigador, con una gran capacidad de observación. Es posible que por ello conozca el secreto de Bleyk, pero se haya callado en espera de que sea un heredero mejor que el original. También es posible que le hayan encargado la investigación de quién llevó a cabo el ataque contra la comitiva.

Si, apúntalos en tu ficha y déjalos ahorrados.

Respecto al segundo personaje me parece una idea bastante sugerente por lo que adelante con ella.