Partida Rol por web

Te adormeces tras fumar tu pipa.Estás cansado de todo el día y la tensión de no saber quién te ha metido en la Cromería ni por qué hace que cuando consigues relajarte tu cuerpo se quede lacio.Casi ha anochecido cuando te despiertas y tu estómago protesta pues la hora de cenar se acerca.Por suerte la cabezada que te has echado ha eliminado el efecto de la cencellada y te diriges al comedor más o menos fresco.Una vez entras ves que gran parte del alumnado se encuentra allí.En una mesa hay varios de los mentores con una chica y un chico que no conoces.Tahes no está con ellos pero Liv sí aunque se mantiene un poco apartada y de hecho ninguno se dirige a ella

Flit terminó la tarea sin problemas. No le pareció aburrida, hacer cosas siempre era una liberación donde podía dejar aparcada su mente y centrarse en cosas sencillas. Incluso en una ocasión se encontró silbando una canción de pescadores olvidada hace tiempo atrás.

El relevo llegó  Flit se encaminó a su habitación. Debería comer, debería tener hambre, pero en su estomago solo revoloteaban mariposas que le susurraban juguetonas un nombre... Liandra

Tras terminar esa ultima clase,decido ir simplemente a los ascensores para usar su mecanismos para mejorar mi trazo. Intentado hacer esa bonita cabeza de dragon, con mi subrojo.

Las clases habían acabado y no había que hacer en ese momento. Espera. Si sabía que hacer. Tenía que ir a buscar a Eda y averiguar de una vez por todas que demonios estaba pasando con ella.

Esta vez no iba a irme sin una respuesta clara y concisa. Tenían la impresión de que era algo que me afectaba y no iba a dejar que me impidiera llevar una vida normal en la Cromeria.

Atrape a Naya que también estaba allí.

Naya. ¿Sabes donde puedo encontrar a Eda? ¿donde duermen los mentores?

Se giró hacia el muchacho al escuchar que se dirigía a ella.

- La verdad es que no tengo ni idea. No me llevo muy bien con el mio- puso los ojos en blanco antes de seguir hablando

- Si quieres te ayudo a buscarla -

De acuerdo. No sé ni por donde empezar. Deberíamos preguntar a alguien o podemos caminar y así nos familiarizamos con el sitio.

Ninguno de los dos parecía tener ni idea de como moverse por allí dentro, así que sería una buena oportunidad de aprenderlo y así podría conocer mejor a Naya. Empezamos a caminar

¿Y dices que no te llevas bien con tu mentor? ¿Quien es?

Habia pasado un día totalmente aburrido con los espejos, resultaba que casi ni se tocaba. Solo habia que estar ahí cuidandolos y si algo pasaba: -Llama a los tecnicos y no toques nada- me habia advertido Ceolan, por suerte no tuve que buscar a nadie, porque no pasó nada en especial. ¿A donde hubiera ido? Quizá la proxima vez tenia que preguntar mejor las cosas. Me retiro del lugar cuando se acerca la hora, despidiendome de mis compañeros para ir al comedor, antes de darme un buen baño, y a dormir. Por suerte el camino no era complicado, y ya entendía un poco sobre como orientarme en la cromeria.

- Si, caminemos. Iba a dar una vuelta para explorar todo esto así que... - le sonrió de medio lado mientras caminaba al lado de él. Soltó un largo suspiro meditando si decirle la verdad o no. Él había sido sincero así que pensó que sería injusto mentirle por una nimiedad como esa.

- Cameron. Moreno. Borde. Quizás por eso me cae mal desde el momento que me lo crucé. Somos demaisado iguales. Ahora está tonteando con mi hermana. De momento no voy a meterme porque la veo a ella feliz, pero... - endureció el rostro al pensar en aquello

- Espero que Eda esté mejor, en el comedor parecía estar mal -

Tras preguntar a algunos de los chicos mayores que encontrais os indican que los mentores,la igual que vosotros,duermen en la torre de su color primario

Al final nos dieron indicaciones sobre los dormitorios de los mentores. Eda debería estar en el dormitorio azul, donde duermo yo también

Iré al dormitorio azul, a ver si está Eda allí. ¿Vienes?

- Si, claro. Sólo espero que a Eda no le moleste. Solo la conozco de vista - dijo con cautela. Realmente la había visto afectada en el comedor y no sabía si querría ver a una desconocida en su habitación...

Os dirigís a la Torre Azul cruzando varios pasillos y tras dar unas cuantas vueltas y perderos otras tantas,conseguí llegar a vuestro destino.Preguntais varias veces hasta que por fin un chico os indica la puerta de Eda,que se encuentra en el pasillo contrario al de Threkor

Tantas emociones de entrar en la Cromería, que no había sido consciente de lo cerca que estaba la habitación de Eda de la mía. Escuché atento antes de llamar para ver si escuchaba algo dentro y llamé a la puerta con unos golpes suaves con los nudillos de la mano.

Eda. Soy Threkor. ¿Puedo entrar?

Tras un largo silencio por fin escuchais la llave dando vueltas y la puerta se abre un poco aunque la chica apenas asoma media cara y se sorprende al ver allí a Naya aunque no dice nada.A pesar de que apenas muestra el rostro y enseguida agacha la cabeza podéis ver que tiene grandes ojeras y está muy pálida

-"Threkor,perdona que hoy no te haya atendido pero estoy un poco indispuesta¿no te lo dijo Liv?Mañana estaré mejor y responderé a todas tus dudas"-su voz denota cansancio mientras comienza a cerrar la puerta de nuevo dando por concluída la conversación

Pongo la mano sobre la puerta cuando Eda intenta cerrarla para impedir que me dé con ella en las narices.

No, Eda. No más excusas. Dime qué te pasa. Me tienes preocupado y no me dices nada.

Miro a Naya detrás de mí por si tenía algo que decir.

Voy a entrar.

-"¡No!"-exclama en un susurro nervioso-"No pasa nada,Threkor,por favor.Yo...es solo un poco de fiebre...iros por favor"-pide mientras intenta que no abras la puerta a pesar de que al empujarla consigues abrirla un poco más,lo suficiente para colarte en el cuarto si lo deseas.La chica está con los ojos cerrados empujando la puerta para tratar de cerrarla aunque no parece tener mucha fuerza

Aprovecho el hueco que deja la puerta y mi fuerza superior a la de Eda, para colarme en la habitación. Así podría saber con exactitud qué estaba pasando y qué poder esperar de la situación.

No sabía qué podría encontrarme dentro, pero tenía que saber a qué atenerme allí dentro y cuánto podría confiar en Eda en el futuro.

No estaba demasiado al tanto de las intrigas palaciegas de la Cromería, pero tendría que empezar a estar al tanto de ellas para poder sobrevivir allí.

Cuando te cuelas la muchacha alza la cabeza, asustada y puedes ver que su cara,la parte que no había mostrado,tiene un enorme moratón producto de algún fuerte golpe.Sus brazos,vestidos con una bata ligera están cubiertos de moratones y arañazos y parte del labio lo tiene partido.Aterrada da un paso para atrás,y se cruza de brazos,intentando esconder las magulladuras mientras niega con la cabeza y te mira suplicante

-"Que no entre,por favor,no quiero que nadie me vea así"-te pide dándote la espalda

Abrí los ojos como platos mirando el estado del cuerpo de Eda. Las palabras de Eda me sacaron de mi estupefacción y reaccioné al instante. Saqué la cabeza por la puerta para decirle a Naya que no pasaba nada, que ya me ocupaba yo y le di las gracias por acompañarme, aunque me sabía mal despedirla de aquella manera.

Me giré hacia Eda y en voz baja para impedir que Naya pudiera escucharnos desde el otro lado de la puerta si se hubiera quedado.

¡Dios mío, Eda! ¿Qué demonios te ha pasado? ¿Quién te ha hecho eso? - intento tocarle los moratones de la cara con la mano suavemente, pero no sabía cómo reaccionaría ella a mi contacto. - ¿Quién te ha pegado, Eda? Dímelo.