Partida Rol por web

¡Impresionante chiquilla!

Afirma impresionado el enano mientras se mesa la barba.

Yo jamás me hubiera dado cuenta, salvo que pidiese ayuda a Moradín... pero aún así. Te felicito compañera.

Una vez Merla dice que es seguro seguir, dejáis la sala y continuáis bajando por la escalera mientras se sigue escuchando el ruido de la cascada cuando el agua cae al fondo del pozo. Poco después, llegáis a una cámara llena de basura iluminada por la débil luz de las antorchas. Cajas y barriles están amontonados de cualquier manera junto al muro. En el lado más alejado de la sala, un par de corredores se pierden en la oscuridad. Entre ellos hay un montón de ropas al lado de un barril abierto.

Al darme el amuleto de Vecna, pongo una cara de asco bastante apreciable, asintiendo al comentario de Ubim aunque sin añadir más comentarios.

Sin apenas tiempo para ponerme a andar, Merla se agacha murmurando unas palabras y comienza a manipular algo del suelo mientras la miro con el ceño fruncido. No es hasta que se levanta cuando caigo en la cuenta de lo que ha hecho

Jajajaja, muy bien pequeña. Eso ha sido increible digo apoyándome el alfanjón en el hombre y disponiéndome a seguir de nuevo al resto hasta que llegamos a la nueva sala

Umm, mucho lugares donde esconderse y más caminos adelante. murmur mientras vuelvo a ponerme en posición de combate, intentando aguzar el oído

Merla se pone a investigar alegremente por la estancia antes de dirigirse a los corredores.

Los cajones y barriles contienen cosas diversas: hierro, herraduras, sidra, pan rancio. También hay una caja con herramientras para trabajar el cuero.

Al ver la sidra, me acerco para coger un poco y beber un trago

Esto esta hecho una porquería, aunque ¿qué podíamos esperar de un sitio como este? digo mientras le doy otro trago antes de girarme hacia el resto bueno ¿seguimos?

El túnel sigue veinte pies hasta llegar a una caverna cuyo lado derecho carece de muro y da sobre el abismo que estáis rodeando mientras descendéis. Al otro lagdo hay un túnel que sigue bajando, pero para llegar a él tendréis que tratar antes con los inquilinos de este lugar: cuatro zombis que os ven llegar y automáticamente se dirigen hacia vosotros para despedazaros.

Viendo el peligro que representan los zombis, me Adelanto pasando por delante de Merla para dejar espacio a Ubim y así que pueda intentar expulsar a estas criaturas como antes hizo, pero mientras, tengo que ganar tiempo.

Con un movimiento rápido, lanzo un tajo horizontal a una de las criaturas y, dejándome llevar por la inercia hago un giro de 360 grados para descargar otro golpe sobre otro de los zombis, aunque este ultimo pasa muy alejado de la bestia.

Los tres zombis que rodean a Azaghal comienzan a golpearle con sus brazos, pero solo uno acierta a pegarle.

Delilah saca la ballesta y la carga consciente de su incapacidad contra estos seres...