Partida Rol por web

Parece ser que con la fuerza de solo dos hombres al ser una losa muy grande y pesada no es suficiente para moverla.

El buen Anión, siempre voluntarioso miró con ojos de cordero la gruta en la que se encontraba. La única salida posible había caído con un sonoro Ni al fondo del pozo así la única oportunidad parecía seguir hacia adelante. Se arrimó a la pesada losa y trató de ayudar a desplazarla.

El enano miró la profunda oscuridad del pozo con rostro compungido.

- Era muy joven...

Lo sabía bien. No sería la primera vez que probaba el vino del templo. Joven, cosechero, barato, pero aún así mucho mejor que el que tenían en la taberna. Suspiró resignado antes de volver su atención hacia el tunel. 

Hacía mucho tiempo que no pisaba una cueva. De joven había correteado por cientos de kilómetros de galerías. Bueno correr, correr, más bien trotar o pasear rápido. Nunca había sido muy deportista. El caso es que hacía mucho tiempo que no estaba bajo tierra pero los olvidados instintos enaniles pronto volvieron a abrirse paso entre la sangre mezclada con alcohol.

Examinó las paredes con los ojos apretados tratando de estudiar quien y cómo podía haber echo esta gruta y si contenía alguna trampa o pasadizo oculto.

Antonio se acerca a la hexagonal piedra, en ella ve una extraña inscripción.
No creo que mi ayuda física os sirva de mucho para levantar está piedra, pero mirad, parece que hay algo inscrito en ella. Podría ser una adivinanza como las de Mellon, mi amigo elfo.

A mi a macho no me ganais

Como un relámpago Martín fue a ayudar con el levantamiento de piedra. No era muy fuerte, pero le encantaba chulear falsamente para creerse el mejor. El fantoche agarro por un lado de la piedra y apretó con todas sus fuerzas junto a los demás machotes.

Mientras Cortadillo Calabacillas se aproxima con cautela a la losa, observa con atención el lugar en el que se encuentran, en busca de alguna clase de tablón, o biga, y comenta:

- Cortadillo carece de instrumentos, pero si alguna de vuestras, oh, ilustradas mercedes, tuviera a mano alguna clase de herramienta alargada, podríamos utilizarla para hacer palanca.

Al llegar a la losa, se acerca con precaución, con la idea de ayudar a Antonio Strativari a identificar la inscripción, y dice:

- Paisano, ¿puedo ayudarle?

Bakus Ardientagua observa el lugar, llega a la conclusion de que a aprovechado la gruta natural del Bujero para exacabar un pasadizo transversal de algunos metros hasta la piedra, aunque los ultimos metros parecen ser mucho mas antiguos.

Antonio Strativari observa la inscripcion poniendose en medio de los que intentan apartarla....pero no deja de ser una inscripcion de un hexagono en relieve. Que seguidamente se une Cortadillo Calabacillas

Ya hay 7 mirando y 3 trabajando...algunos les recuerda la region del sur llamada espagnistane donde las casas solo tienen 3 paredes y el tejado ya que nunca terminan las obras.

Suelto la losa y me doy la vuelta. ¡Cagon sos, la puta! ¡¿Vais a dejar de ver putas mierdas dibujadas en la jodida piedra y ayudar de una puta vez o qué?!

Vuelvo a sujetar la piedra, pero espero que se una más gente.

No tocareis mi báculo digo, soltando la losa y sujetándolo con fuerza. Vale más que todo el dinero que nos van a pagar, es mágico respondo a Cortadillo.

Cordadillo insiste, mientras brinca, y se pone a hacer piruetas, cabeza abajo:

Mucho mejor sería valernos de algo con lo que hacer palanca, cochambrosos cicateros,

de lo contrario, la losa bien podría permanecer ahí quieta hasta que seamos muy longevos.

Sigue buscando algo con lo que hacer palanca.

-Yo tengo mis agujas de tejer, pero no os las doy ni que arrejuntéis toda la plata. -replica Cuarto. -Pero puedo ayudar a empujar si hace falta. -dice de mala gana. Con toda la pachorra se acerca a la losa y al resto de los que ya empujaban y se pone a intentar mover aquel pedrolo él también.

Al final la unica solucion es hacer fuerza entre todos, incluso son requeridos los que no tienen muchas ganas de colaborar, incluso Cortadillo Calabacillas usa un trozo de tronco encontrado en el vertedero cercano, o sea ahi mismo en el suelo, como palanca.

Después de unos segundos de esfuerzo, la losa comienza a moverse con tan mala pata y concentrados en hacer fuerza que no calculais el restultado de donde ira la losa y finalmente cae sobre todos vosotros.