Partida Rol por web

La maldición del Mithril

El asentamiento

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28/09/2010, 13:56
Fingar Cubremartillo

Fingar noto el ambiente calido, brillante, acogedor, alli, entre sus hermanos de linaje. No obstante, cuando se volvio a nombrar el Mithril de nuevo, le indujo una curiosidad de imprevisto de saber quien de ellos tenia los mismos intereses para con tal metal, quien agudizaba el oido ante las conversaciones acerca de la "gracia" de las montañas profundas, y quien cambiaba de rostro cuando la palabra "orcos" y "Khazad-d^um" eran contiguas... Intento´ percibir.

Notas de juego

Perdon por los acentos, pero me salen asi temporalmente: ´´ (de dos en dos).

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28/09/2010, 13:59
Fingar Cubremartillo
Sólo para el director

Serian 106 +40: 146 en total (pues se ha comido el +40 de mi habilidad).

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100(+97)
Motivo: Percepcion (2º tirada)
Resultado: 9(+97)=106

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29/09/2010, 00:02
Director

Pronto Fingar se dió cuenta de que enanos bajaban apesadumbrados la cabeza cuando se pronunciaba esos nombres y cuales miraban interesados en ver que se iba a decir de ellos.

Se pudo fijar que Halin Sobrágil se mostró interesado en la conversación del Mithril, pero era un interes de enano normal, sin saltarse la norma. No había nadie que aparentara oscuros propositos en aquella sala. Todos era perfectos enanos, codiciosos, sí, pero como cualquier otro enano.

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29/09/2010, 15:49

 

Mirando a Dain, -Mi nombre. Dejando una pausa entre medio -Yo creo que se debe de saber con solo cabeza nubosa pero aun así la contare. 

Esperó a que hubiese algo de silencio -Me lo pusieron después de que me encontrara moribundo por culpa de un derrumbamiento en una de las galerías de Erebor mientras trabajaba. Perdí completamente la memoria, no sabría deciros si antes de eso hice el bien o hice el mal, los únicos vagos recuerdos que tengo son lo de ese mismo día mientras se caía nuestro techo de piedra. Los curanderos descubrieron en mi pecho un símbolo grabado en fuego, era el único recuerdo de mi anterior vida. Poniendo la mano es su pecho -Investigaron de que procedía de una era estirpe de enanos que evito Moria.

-Tras todo esto fui llamado Shathur.

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01/10/2010, 13:03
Dain el Manco

Curiosa historia la tuya. Entonces, ¿no recuerdas nada de lo que ocurrió antes del accidente? Preguntó Dain interesado en la historia del enano, que al parecer había sobrevivido a una increible tragedia.

¿Quienes te encontraron?

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01/10/2010, 13:15
Fingar Cubremartillo

Fingar comenzó a citar en su mente las palabras del olvidadizo enano Shatur:

"no sabría deciros si antes de eso hice el bien o hice el mal"

Fingar comenzó a dudar. Pensaba que a lo mejor se trataba de un saqueador, un enano perdido, o un trabajador honrado, pero ¿acaso había alguna certeza en todo eso? La verdad es que era la mar de extraño...

¿un símbolo grabado en fuego...? -dijo Fingar. Sin duda ésta tenía pinta de ser la historia más extraña y cautivadora de la noche, al menos desde su punto de vista...

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04/10/2010, 21:45
Halin Sombrágil

 Halin pensaba en que hacía ya horas que debería de haberse ido a descansar, pero al final se lío como siempre entre historias y jarras de cerveza en la posada. Mañana tendría que levantarse temprano y seguir con el reconocimiento de unas galerias, que estaba seguro de que como las demás, estarían vacías. Últimamente le tocaba explorar zonas muy cercanas y recorridas, asi que la posibilidad de descubrir algo era casi nula, simplemente lo mandaban a él por pura precaución y un ejercicio de meticulosidad y hacer bien el trabajo.

Últimamente Halin fantaseaba con remotas aventuras, descubriendo nuevos parajes y nuevas cuevas de explorar, en zonas alejadas y con posibilidades de descubrir realmente algo fantastico y fuera de lo común, aunque el cansancio producido despues de sus turnos de trabajo normalmente acababan con esas ensoñaciones.

Todo esto pasaba por su mente ahora mismo, mientras apuraba lo que sería su última cerveza de la noche.

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05/10/2010, 13:57
Director

La noche pasó tranquila, entre algunas canciones y muchas jarras de cerveza que el bueno de Dain el Manco iba repartiendo para todos. Luego llegó la hora de saldar las cuentas y cada uno pagó lo suyo o lo que habían invitado.

Según transcurría la noche, los enanos fueron marchandose uno a uno hasta que no quedó más que Dain, echó el cerrojo a su negocio y se dispuso a descansar tras una dura jornada de trabajo.

Los enanos salieron de la taberna y recorriendo las galerias del asentamiento se fueron dirigiendo a sus respectivas casas, hogares, refugios...

Notas de juego

Dejo un tiempo para que cada uno ponga que hace tras salir de la taberna y lo que hace el resto de la noche. Podeis escribir hasta el medio día del día siguiente.

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05/10/2010, 14:29
Halin Sombrágil

Halin se fue un poco antes del cierre de la taberna, su pequeño hogar estaba situado un poco alejado de los demás, en uno de los laterales del asentamiento. Aunque todos los enanos eran grandes bebedores, a él siempre se le había dado mejor la comida, así que iba andando mareado como podía y poco a poco se iba despidiendo de los conocidos hasta quedarse solo en el camino hacía su casa.

Una vez llego cayó rendido en un profundo sueño que duraría unas pocas horas, hasta que sus compañeros de trabajo le despertaron de su letargo dando manotazos contra una de las paredes para despertarlo. Su jornada normal concurría unas horas antes de los demás mineros, pues él se dedicaba a peinar las galerías y cerciorarse de que estaba todo en orden, comprobaba que los túneles eran estables y no había nada fuera de lo normal.

La jornada transcurrió con normalidad y llego la mejor hora del día para Halin, el mediodía dónde los chicos paraban su trabajo para ir a comer. Normalmente se congregaban en una zona del asentamiento dónde había varios calderos llenos a rebosar de comida que preparaban para los trabajadores. Los enanos eran buenos compañeros y entre ellos se consideraban hermanos, así pues las comidas solían ser un agradable pasatiempo dónde se compartían historias, comida y compañía.

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05/10/2010, 15:32
Fingar Cubremartillo

Fingar levantó la última cerveza por Dáin el Manco, aquel que le proporcionaba la exquisited del descanso. Cuando se marchó hacia su hogar en el retiro nocturno no habló con nadie. Se puso su pequeña capa y se internó entre las cuevas. Una vez en su aposento de roca, miró su preciada maza que poseía mithril en su interior, con la esperanza de realizar en alguna otra ocasión otra aventura más trepidante y peligrosa que cavar y extraer continuamente metal de las cuevas.

Si al menos una manada de huargos despertara nuestro sueño y turbiara nuestra paz... -pensaba Fingar-, ¡tendría un pretexto para la caza!

Sin más dilación durmió. Durmió mucho y bien, a pesar del alcohol, y pudo estar en condiciones para trabajar al día siguiente.

En la jornada el día despues, mientras trabajaba recordaba y comentaba con otros enanos las historias descritas en la taberna de Dáin, y alguna que otra cuestión sin resolver que le quedó pendiente, esperando que se repitiera una nocha como la del dia anterior.

En la hora de la comida, al medio día. Muchos de nosotros parábamos a descansar. Allá, a lo lejos, me pareció ver al hermano Sombrágil realizando el mismo descanso, al mismo tiempo.

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05/10/2010, 16:07
Batum

Batum apuró el último trago de su última cerveza y dejó encima de la barra las monedas que correspondian a todas esas cervezas, pesadamente el enano se marchó hacía su casa despiendose de todos entre carcajadas, la noche había sido ídonea para ir cogiendo confianza con los lugareños y compañeros e ir construyendo una mejor vida en esas montañas, olvidando los malos recuerdos del pasado.

Su casa era una pequeña cueva excavada en la montaña, donde solo vivía él. Al llegar después de una noche de alcohol acostumbraba a comer alguna hogaza de pan con algo de carne seca, ese ritual le ayudaba a levantarse mucho mejor y sin nada de resaca.

A media noche, Batum despertó de un terrible sueño y se levantó con la mano en su empuñadura gritando, era habitual en él soñar que estaba luchando con el gran dragón, aunque nunca lograba matarlo. Se secó el sudor con un trapo limpio y se volvió a dormir hasta la hora de trabajar.

Por la mañana picar y más picar, no se acostumbraría nunca a esa rutina, no le gustaba nada ese trabajo, lo suyo eran las armas. Como cada día al terminar la jornada de trabajo matutina, fue corriendo a la pared donde se colgaban los dictados del reales para buscar alguna aventura militar y salir de ese agujero, pero nunca había nada, eran tiempos dificiles y de reflexión, por lo que todas las campañas militares parecían aparcadas.

Al comprobar que no había nada en esos papeles, se junto con los demás compañeros al lado de los grandes pucheros donde había abundante comida para todos. Batum estaba tristón ese día ya que añoraba las tardes al sol en Erebor entrenando con sus compañeros de armas.

.- que tal el día? .- comentó sin mucho entusiasmo sentandose junto a Fingar y Sombragil.

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06/10/2010, 07:26
Kâmdur Nagredog

 Pocos enanos quedaban ya en la casa de Nain el manco. Casi todos habian abandonado la estancia para dirigirse a sus casas o asuntos. Tranquilamente Nagredog se levanta de la mesa y tras pagar al buen posadero, se dirige hacia su humilde cubiculo. No es mas que un pequeño hueco escavado en la roca, con apenas un camastro y algunas posesiones sin apenas valor, salvo sus herramientas.

Tras descansar toda la noche, de un tiron, mas debido al alcohol que al cansancio, el enano logra despertarse y ponerse en marcha. Un rapido desayuno a base de pan duro, jamon ahumado y un poco de vino caliente le activa el cuerpo.

Coge sus herramientas y se dirige a su puesto de trabajo. Hoy tenia que acabar los capiteles de varias columnas de una de la salas que estaban por terminar. Durante toda la mañana cincelo suavemente unas bolutas y motivos geometricos en lo mas alto de las columnas, subido a varios metros de suelo en un precario andamio de madera, no obstante alli era feliz. Moldeo la piedra tranquilamente, sin prisa pero sin pausa, hasta que su estomago le recordo que tenia que comer. Habia estado absorto en el trabajo, tanto que no habia parado a almorzar o a desbeber.

Hambriento bajo del andamio tras recoger sus herramientas y se encamino a la explanada donde cada dia le daban de comer. Cuando llego casi no quedaba nada, pues sus compañeros llevaban bastatne tiempo alli. Por suerte un enano no escatima comida y aun le quedaba algo para calentarse y llenar el estomago.

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06/10/2010, 23:56

 

Cogió sus cosas, pago a Dain y se encamino a una de las galerías donde trabaja, echo la manta en el suelo. Intentando recordar lo que paso en ese derrumbamiento, Shathur cayó de sueño.

Shathur se encontraba picando en la galería de Erebor con sus compañeros de trabajo. Picando en la piedra escucho a uno de sus compañeros –¡he encontrado algo en la piedra! Cuando le dio el último golpe del pico, toda la galería se vino a bajo. Se despertó de un golpe con todo sudor por la cara. Cuando se tranquilizo se echo otra vez a dormir.

Esa mañana, los pasos de sus compañeros hicieron despertarlo, luego se estiro por el duro suelo de piedra.  Recogió sus pertenecías, cogió el pico y empezó a usar su arte de desprender la piedra. Luego se a la hora de comer se acerco con sus compañeros.

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09/10/2010, 12:20
Fingar Cubremartillo

Hola, eres Batum no es así -Fingar le saludó mientras se acercaba. El día como siempre, ahondando más y más. Espero que pronto encontremos alguna buena veta y hagamos brillar estas cavernas.

De momento el descanso era tranquilo, ameno, sin prisas.

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09/10/2010, 19:52
Halin Sombrágil

Al ver como se acercaban los demás enanos Halin fue haciendo sitio y poco a poco iba entablando un poco de conversación, a la par comía. Todo parecía transcurrir con normalidad.

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13/10/2010, 10:54
Batum

.- Si, ese es mi nombre, tu eras Fingar, no? .- contento de fraternizar con sus nuevos compañeros y empezar a hacer amigos en su nueva vida.- pues yo más de lo mismo, picar y picar y picar, empiezo a sentir nostalgía de mi antigua vida, esto es demasiado aburrido... .- Batum cogió un mendrugo de pan y lo mojo en la sopa .- aunque la comida no esta nada mal...

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20/10/2010, 19:02
Director

A lo largo del día los grupos de exploradores iban llegando y se reunian con los demás en la zona donde comían. Ellos no llevaban un ritmo fijo, y cada grupo regresaba a una hora, dependiendo de la cantidad de tiempo que la retorcida fisionomia interna de la montaña les permitiera invertir en la busqueda de nuevas vetas.

Cuando un grupo regresaba nadie prestaba mucha atención, normalmente lo único que habían descubierto era nuevos caminos, nuevas salas o alguna veta de un mineral menor, como cobre, hierro. Importantes sin duda, pero no eran nada extraordinarios.

Durante aquella comida, regresó un grupo más que venía del otro extremo de la montaña donde el grupo de exploradores entre los que se encontraba Halin había estado explorando. Era aquella una zona nueva de la montaña y donde esperaban encontrar grandes vetas de hierro para abastecer las herrerias principalmente.

Poco a poco un rumor generalizado fue elevandose y muchos enanos comenzaron a congregarse frente al grupo que acababa de llegar. El rumor fue creciendo hasta convertirse en voces alzadas, gritos y demás. Nadie sabía que estaba pasando realmente y se produjo un cierto desconcierto durante unos instantes.

Desde donde Batum, Fingar, Halin, Kamdur y Shatur estaban comiendo no conseguían enterarse de nada de lo que ocurría y allí el desconcierto era todavía mayor, mucho enanos dejaban su comida para correr al bullicio de gente a enterarse de que estaba pasando. El grupo de exploradores se encontraba alejado de su posición y desde allí solo conseguían ver una infinidad de cabezas enanas.

Finalmente el explorador jefe de aquel grupo fue alzado en bolandas y pidió silencio, sonreía conteniendo la emoción y con un grito que resonó en las galerías pronunció una palabra que hizo que a nadie se le olvidara en la vida aquel momento.

¡¡¡Mithril!!!

 

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20/10/2010, 19:54
Kâmdur Nagredog

 Estupefacto miraba la escena, ese hermano alzado pregonaba a los cuatro vientos la gran noticia. Habian encontrado el precioso metal.

Ya habia acabado de comer y con una alegria sosegada por la noticia, imaginaba las consecuencias. Riquezas, muchas riquezas, eso en definitiva daba renombre a nuestro asentamiento, y seguramente tambien distincion y fama. Con el tiempo el asentamiento podria llegar a ser una ciudad importante, con comerciantes, mercados, atrayendo mas y mas riquezas. Tendria que esculpir miles de columnas y estatuas para los heroes, grandes salas de forja... Trabajo, mucho trabajo, y riquezas muchas riquezas, y eso sin tener que compartir el preciado metal con otros pueblos, hombres y elfos mirarian con respeto...

- ¡Bravo!- vitoreaba como el resto de hermanos, deseaba ir a ver la veta...

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20/10/2010, 20:53
Fingar Cubremartillo

No tuvo tiempo de responder a Batum... Alguien había pronunciado el nombre de la motivación enana, el preciado metal.

¿Mithril he escuhado? -pensaba Fingar.

En esos momentos se levantó, dejando a un lado la comida, pues se le había pasado el hambre. Fue trotando hasta el grupo de exploradores y la muchedumbre enana... Ahora si. Lo había confirmado. Las colinas del hierro pasarían a ser consideradas como herederas de una posible beta de mithril...

¡Bravo! -gritó Fingar al tiempo que Nagredog. Un bramido por nuestros exploradores. Auurrrgggg!!!!

¿Cómo habra sido?¿dónde?¿cómo será su acceso...?

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21/10/2010, 00:37
Halin Sombrágil

Halin dejó a medias su comida. Solo había sucedido eso dos veces en su vida. Cuando murió su padre y ahora. El Mitrhil era lo más preciado para los enanos, aunque solo fuera un rumor necesitaba ir ahí como sea, quería verlo con sus ojos.

Se acerco con la muchedumbre, al lado de Fingar y Kâmdur, a escuchar posibles detalles.