Preguntas:
1)Las ventanas, ¿están tapadas por una cubierta única o están tableteadas (como para observar un poco hacia afuera a través del espacio entre tabla y tabla)?
2)Hora aproximada (amaneció, aún de noche, poco claro sin sol...)
Me ajusto en su totalidad la armdura, y saco el escudo y la espada, del modo más silencioso posible me voy poniendo todo el equipo, mientras me concentro en los ruidos del exterior, tras esto del modo más sigiloso posible, intentaré prepararme para aquello que se nos venga encima.
La ventanas están cerradas con contraventanas. No están clavadas, sólo sujetas con un pasador. Sin embargo, no son demasiado ajustadas y se puede ver entre tabla y tabla, aunque no demasiado.
La hora es en algun momento durante la tercera guardia, es decir pasada la medianoche, aún falta bastante para que amanezca. Está muy oscuro.
Me despierto sobresaltado sin saber ni donde estoy ni a que hora estoy, poco a poco voy volviendo a la realidad.
Preparo mi ballesta y me preparo hasta saber si los intrusos son hostiles o no lo son.
Daron se levanta y en voz baja dice: - Alguien que me ayude con la armadura, por favor - Acto seguido, comienza a colocarse su armadura, para después ponerse su escudo y sujetar su espada.
arrrggg! gruño entredientes.
Quien es el que osa perturbar mi sueño - musito
Me ajusto los nudillos y echo una mano a Daron
Con la espada en la mano, afino mis oídos para comprobar si reconozco las palabras que oigo, o al menos el idioma en el que son pronunciadas...
Me camuflo entre las sombras y sigilosamente me voy dando un rodeo dejando la luna frente a mi para obtener una visión mas clara de los posibles incursores.
Tirada: 1d20(+5)
Motivo: moverse en silencio
Resultado: 19(+5)=24
Tirada: 1d20(+5)
Motivo: moverse en silencio
Resultado: 12(+5)=17
Tirada: 1d20(+7)
Motivo: avistar
Resultado: 9(+7)=16
Tirada: 1d20(+6)
Motivo: escuchar
Resultado: 2(+6)=8
la segunda es para ocultarme
El grupo de guardias de caravanas y su reciente aliado elfo se preparan en silencio para lo que ha de venir. El escaso ruido que hacen es fácilmente tapado por los escandalosos ronquidos de uno de los caravaneros. Ronquidos que se ven pronto interrumpidos bruscamente cuando los conductores de las carretas despiertan. No se preparan para la batalla, pues no es su misión, aunque sí que se preparan para salir corriendo, si fuese necesario.
Ninguno de los ahora despiertos aventureros consigue indentificar las palabras que se oyen en el exterior, cada vez más cerca. Hasta que se interrumpen de pronto. No conocéis el idioma y no podéis estar seguros, pero se diría que se ha interrumpido en mitad de una palabra. Algo les ha hecho callarse de golpe.
Os miráis unos a otros comprobando que todos estáis preparados, cuando os dais cuenta de algo. Auris, que estaba haciendo la guardia con Steel no se encuentra en la casa.
Mientras los demás se van despertando, tu sales de la casa en el más absoluto silencio, y como una sombra en la oscuridad de la noche te deslizas más allá de los carros frente a la casa, en dirección a las voces. Sólo la luz de la luna ilumina la escena. Una luz demasiado escasa para alguien que no precise de furtividad. No es buena señal que no lleven luz con ellos.
Finalmente, refugiado tras una burda construcción que debe ser una especie de establo abierto (más propio del verano), que lleva tiempo sin ser ocupado, puedes por fin ver a uno de los dueños de las voces.
No ves a su interlocutor, pero debe estar varios metros más hacia la derecha, por el otro lado del establo.
El que tu ves es un humanoide pequeño, de cara plana, nariz ancha, orejas puntiagudas y boca amplia. Aunque camina ergido sus brazos le cuelgan casi hasta las rodillas.
En Aguas Profundas no hay gente así, pero en el tiempo que llevas por los caminos desde que saliste de allí los has visto antes: es un trasgo. Y donde hay un trasgo, hay más trasgos.
Este en concreto lleva una armadura de cuero tachonado, un escudo y una lanza. Aunque por como se mueve parece no esperar problemas. Hasta que todo cambia. Su voz se ve interrumpida de golpe cuando ve algo que le asusta y/o le sorprende: Las carretas junto a la casa donde están tus compeñeros. Cuando se recupera sale corriendo por donde ha venido y lo pierdes de vista.
Ya que parece que de momento sus sentidos naturales no le iban a aportar más información, solo le quedaba recurrurir, a otros no tan comunes, asi que dirigiendo su mirada, hacia el lugar desde donde procedian las voces, y entornando los ojos, elava un poco su mano, y conenctra su mente, en detectar presencias malignas.
Se que estan fuera de la casa, pero la aptitud del paladin, se supone que puede atravesar toda superficie, salvo gruesos muros de acero, o superficies protegidas magicamente, asi que intento concentrarme algunos segundos a ver si percibo algo maligno ;) (aunque bueno claro no es todo tan facil, hay mil formas más de evadir este sondeo, pero al menos lo intento :) )
Un cordial saludo, Eliatar
lo más rápidamente que puedo sin hacer ruido vuelvo a la casa comunal e informo de que he descubierto una partida de trasgos que se dirigían despreocupadamente hacia el interior del pueblo y al ver las carretas se han alertado
¿Has dicho trasgos? digo incrédulo.
No es normal que se internen en un poblado tan tranquilamente, a no ser... dejo la frase a medias dándome cuenta de algo.
Puede que halla una barrera mágica en el pueblo, pero no es probable. La razón más segura de que no percibas nada es que se encuentran demasiado lejos. La aptitud de detectar el mal atraviesa la mayoría de las barreras naturales, pero hay una con la que no puede: la distancia. No hay ninguna presencia maligna a menos de 60 pies de ti.
Trasgos?, si estan aqui con o sin razon, no saben lo que les espera, no debieron venir... pobrecitos.
Susurrando y mirando a mi arma - tranquila Hrunting, no te emociones, dejémosles que se acerquen un poquito mas.
Trasgos, ¿eh? Esos no traman nada bueno. Seguro que saben algo de lo que pasó aquí. Digo acariciando el pomo de mi espada...
Bueno, tracemos un plan .
Hay que coger a alguno con vida para que nos cuente lo que sepa .
Al poco de haber abierto los ojos, entró auris, tras su revelación, sus ojos se encendieron un poco, pero en seguida, volvió a la calma, tanto lleva el pueblo desierto, que los viles trasgos se pasean como si esto fuera su casa, seguro que algo sabian esas criaturas, o al menos sus lideres, era el momento de hacer algo
En eso estoy de acuerdo en lo de sacarles información, has visto aproximadamente cuantos eran o a que distancia estaban? En cuanto a lo de la estrategia, creo que lo mejor es dejar que crean que las carretas estan solas, mientras los rodeamos, y cuando los tengamos donde queremos podremos sacar algo de ellos, aunque todo depende de cuantos sean y como vanyan de pertrechados
Esperó a ver si le daba auris algo más de información y a ver que decian sus camaradas
Yo opino por machacarles y punto, no me va el sigilo y aunque vaya sin armadura mis pisadas se oyen alli por donde paso.
Ademas, alguien entiende trasgo?
Respondiendo a la pregunta realizada por Klaxtor.
Yo no hablo trasgo, pero mañana podré hablarlo .