Partida Rol por web

Los goblin estaban cayendo como moscas, Auric estaba acabando con goblin en cada ataque, sin embargo Dalya no estaba teniendo tanta suerte en sus ataques.

Auric acabo con otro, pero Dalya seguia disparando y moviendose como una mediana nerviosa, algo muy normal en su raza, aunque mas que esconderse iba como buscando un lugar mas cómodo para disparar.

Los goblin volvieron a atacar al Paladín, a uno consiguió esquivarlo, pero en esa defensa, permitió que el segundo de ello cortara su rostro, dejándole una fea cicatriz que comenzo a sangrar sobre el ojo del semiorco.

Por otro lado los goblins arqueros solo querían acabar con esa escurridiza mediana, que volvio a ocultarse bien esta vez, apuntaron lo mejor posible, pero impactaron ambas flechas en el madero del carro, el combate se alargaba y se podia ver que el semiorco estaba sufriendo muchos daños.
 

¡Auric, cuidado!-advirtió Dalya. Aprovechando que el carro le proporcionaba cobertura contra los arqueros, pues se había situado en la parte contraria disparó un virote a uno de los goblins que acosaban a su compañero. El virote rojizo atravesó la garganta de la criatura que cayó como un fardo al suelo con un sonido gorgoteante.

Auric notó el ataque del goblin impactar en su rostro y, habiendo recibido ya tres golpes, las heridas empezaban a debilitarle. Aunque tenía aún más goblins delante, Auric clavó momentáneamente su espadón en el suelo con una mano.

"¡Otorgame tu magia sanadora, Tyr!"

Su mano empezó a relucir con energía divina y, al tocarse en el pecho, sus heridas comenzaron a cerrarse.

En esta ocasion Auric empleo sus habilidades sobrehumanas, reduciendo y cerrando las heridas frente la mirada atonita de los dos goblins que estaban junto a el, pero esto fue algo nefasto para uno de ellos que antes de darse cuenta, tenia un virote clavado directamente en su corazon, cayendo lentamente muerto a los pies del paladin ...

Aquello ya fue el momento en que los goblin parecían temer de poder perder , sin embargo, de forma unisona, los tres goblin gritaron - GAR ZULAR SIGOSSSSSS - recuperando el valor para no huir

El goblin que estaba con al Paladin, consigue escapar de la presion del paladin y lanzarse a atacar a la mediana, ese disparo le habia asustado mucho y no estaba dispuesto a sufrir otro ataque a traición, impactando con violencia contra la mediana, golpeando con violencia un costado.

Por otro lado, los arqueros deciden atacar a un blanco más claro, al paladin , un objetivo mucho mas facil ... y el paladin , solo pendiente del guerrero es incapaz de evitar el ataque, recibiendo dos disparos en su espalda, y tras ellos desaparecen de la vista ( si quereis localizarlo teneis que sacar en percepcion 22 o mas).

Auric se detuvo, agarrándose el pecho con una mano. Las dos flechas que brotaban de su espalda un claro recordatorio de que había sido herido a medida que notaba la sangre empezar a salir. El paladín no podía permitirse parar ahora. Persiguiendo al goblin que seguía a Dalya, Auric cayó sobre él deslizando su espadón en un arco vertical, que no llegó a impactar en él, causando que el paladín rechinase los dientes de frustración.

Dalya disparó contra el goblin que acosaba a su amigo. Si no se daban prisa en matarlos quizás acabasen siendo trofeos y Dalya sabía lo que hacían los goblins con las chicas como ella y no estaba dispuesta a algo así. Sin dudar ni un segundo disparó su ballesta contra la criatura, sin embargo los nervios por no dar a su compañeros hicieron temblar su pulso y fallo el tiro.

Los dos heroes habian fallado su ataque, no esperaban que el goblin atacara a la mediana, el goblin habia esquivado ambos ataques con un poco de suerte, y volvio a alzar su cimitarra contra la median, sus dientes afilados apra que parecieran una sierra se mostraban cuando el goblin se relamía pensando que haria con la mediana.

Termino asestándole un nuevo corte en su `pierna, estaba claro que dejaria marcado el cuerpo de la mediana en aquel combate.

Sin embargo no apareció ninguna flecha desde los arboles, parecia que se habian esfumado.

El paladín no tenía tiempo de agradecer que los goblins se hubieran ido, aparentemente. Su deber no estaba completo aún.

Girandose hacia el goblin que aun quedaba, le cargó con su espadón, deseando terminar por fin la batalla.

Antes de que Dalya pudiera siqueira poner el virote y disparar, ve como una enorme espada atraviesa el cuerpo del goblin y se parte por la mitad cayendo toda su sangre sobre Dalya, empapandola de arriba a abajo como una ducha sanguinolenta.

Parece que el combate ha acabado, 12 goblin estan en el suelo muertos por flechas, virostes, espadazos o cortados por la mitad. Sobre el asiento de conducción del carro esta el cuerpo de un elfo con un arco entre sus manos y numerosas flechas negras atraviesa su torso, y en medio de la lucha, y como visteis cuando llegasteis, un draconiano con armadura esta arrodillado lleno de cortes y ensangrentado

Una vez derrotados los goblins, Auric relajó su postura y bajó su espadón antes de enfundarlo. Dirigiéndose hacia Dalya, pronunció una oración en honor a Tyr y su mano resplandeció con luz sagrada que, al ponerla sobre la cabeza de Dalya, restauró sus heridas.

"Buen combate. Me alegro de haberte tenido cubriéndome las espaldas. Estos goblins eran peligrosos..."

-Fiuh, estoy oxidada. Esto ha sido más peligroso de lo que esperaba-dijo la mediana con un pequeño silbido de alivio-. Gracias Auric, ese goblin asqueroso casi me corta la pierna-le dijo mientras miraba a su alrededor asegurandose de que no quedase ningún otro enemigo emboscado- No me ha gustado esto-dijo al cabo de un rato tras recapacitar- deberíamos entregar las cosas y volver aquí con ayuda. Esas criaturas estaban bien organizadas, deben tener su guarida cerca y dejarlas escapar es un peligro para cualquiera que pase-le dijo a su amigo.

"Estoy de acuerdo. Debemos completar la misión que nos entregó Gundren, pero ese tal Yammik... Me preocupa que hayan bandas organizadas de goblins en estas regiones. Veremos qué podemos hacer. ¿Quizás deberíamos echar un ojo por aquí?" — musitó el paladín, casi para sí mismo. No se le daba muy bien buscar cosas, él era más de castigar al mal que tenía en frente, pero parecía que algo de información debería haber cerca, así que se dedicó a buscar pistas de la identidad de los comerciantes.

Dalya se acercó a un árbol en el camino y lo marcó con una gran X.

-Seguirlos ahora sería un suicidio pero podremos volver con ayuda, seguro que en Phanladin hay algun soldado o milicia que nos pueda ayudar con esto-le hizo un gesto a su amigo- mejor registremos el carro, no creo que hayan dejado nada útil pero quien sabe...-le dijo.

"Adelante, tú misma." — invitó Auric a Dalya mientras él terminaba de buscar efectos personales en los cuerpos de los mercaderes — "Tú que eres más avispada que yo, seguro que tienes... más experiencia con estos asuntos."

No es que quisiese robarles a los muertos, ni mucho menos, pero los mercaderes tendrían familia, y esa familia se merecía... Algo, por lo menos. Aunque fuese simplemente informarles de que sus familiares habían fallecido. Una vez hubo revisado los cadáveres, haciendo una ojeada a la situación general del carro y el camino, Auric observó el reguero de cadáveres que cubría esta zona.

"Por cierto... No te va a gustar, pero no deberíamos dejar todos estos cadáveres aquí. ¿Podríamos, por lo menos, enterrarlos? Merecen un digno reposo, aunque sea como mínimo los mercaderes."

Cuando te acercas al arbol ha hacer la marca , antes de que Auric le de tiempo a nada,  miras a la zona de atras del camino, y puedes ver como 4 viajeros se acercan, parecen humanos, pero estan a gran distancia, unos 300 metros o asi

-Me niego a tocar a ningún cadáver de goblin para enterrarlo Auric-dijo la mediana sin darle mucha importancia- pero se lo puedes preguntar a esos cuatro que vienen por ahí-le dijo señalando el camino por la dirección en la que había visto a los hombres. Sin decir mucho más pegó su espalda al árbol y se escondió tras él ballesta en mano preparada para lo peor.

Escondiéndose junto a Dalya rápidamente, Auric se preparó con mano en el acero, igual que vio hacer a su compañera mientras decía entre dientes:

"Me refería a los mercaderes, a los goblins pretendía quemarlos. ¿A quien has visto?"