Partida Rol por web

La Marca Roja es el grupo de bandidos al que pertenecía Rosco antes de abandonar Phandalin. Fue traicionado por uno de sus "compañeros" y le costó tener que huir para salvar el pellejo. 

Entendí de tu historia que te llevabas algún objeto importante (el del tal Jusuff), que aún portas contigo en tu vuelta para tratar de salir indemne del conflicto.

En cualquier caso no importa. Si no tienes nada más que hablar con Qelline, me lo comentas y pasamos al día siguiente.

Amanece en Phandalin con un sol brillante, radiante junto a un cielo desprovisto de nubes. Finalmente se alargó la noche en la posada, con Dwalin, Dastar y Aleyte agotando los últimos barriles de hidromiel junto a los parroquianos del pueblo con quienes tuvieron una competición de "el brazo más fuerte" (unos pulsos). Haced una tirada D6 y le sumáis la FUE: el resultado más alto ganó la contienda.

Cuando salís al exterior veis a Laor aproximándose por la calle que llega a la posada desde la plaza principal de Phandalin. Al contrario que vosotros, parece más despejado y sonriente de lo habitual. 

Sin embargo, no hay ni rastro del pequeño bribón Rosco.

PD: Desactivad a Rosco en esta conversación, por el momento.

La noche prosiguio con bastate favorable para los dos humanos y el enano, que tuvieron oportunidad de participar en un toneo de pulsos. Tras esto, se retiraron todos a sus respectivas habitaciones.

Cuando el sol ya asomaba por el Este, los tres aventureros salieron de la taberna pudieron ver a Laor aproximarse.

Vaya, te veo con buena cara, amigo. Que nuevas traes del templo? Por cierto... alguien ha visto a Rosco? 

rayos xd

Luego de una noche algo agitada entre las bebidas y la interacción con los lugareños que departían en la posada, Dastar se fue a la habitación que habían alquilado y se propuso descansar lo que faltaba de noche para emprender al día siguiente la misión que tenían ahora.

Al día siguiente con un poco de resaca por la pequeña juerga de la noche anterior sale junto a los que se quedaron en la posada también para recibir al elfo que volvía su asunto personal. Estaba listo para emprender el viaje pero aún faltaba el mediano y era mejor esperar un poco más para que el grupo estuviera completo.

Laor se acerca observando los alrededores como quien da un paseo y les asiente con aquella sutil sonrisa a penas reconocida por el entornado leve de los ojos.

- Bienaventurados días Dwalin, he hablado con la persona que buscaba y creo que además de información, su diosa nos ha bendecido. Soñé con ella, después de todo. La diosa de la fortuna estará de nuestro lado en nuestra misión para con nuestro amigo Gundren. Y no...me temo que no lo he visto, ¿se encuentra bien? ¿Como les fue en la posada? Señorita Aleyte, ¿Encontró el confort que buscaba?- 

Espera a estar al tanto del proceder de sus compañeros y continua. 

- Tengo pendiente hacerle una visita a una granja, a hablar con una tal Qelline. Tal vez veamos a Rosco por el camino, ahora poseo...un par de ojos adicionales.- señala al cielo para que vean a un cuervo sobrevolando el area.

- Si rosco se deja ver, me percataré. Y sobre lo que hable con la hermana Garaele...pues al parecer una mafia o gremio de criminales ronda la zona, extorsionando a sus habitantes y aunque no puedo asegurarlo, podría apostar a que esa tal araña negra esta involucrado...me dirigo hacia esa grana precisamente por mas información. Parece que nuestro amigo gundren está metido en un asunto bien complicado...-

Vaya nosotros tambien hemos escuchado rumores sobre una banda llamada la Marca Roja que mantiene este pueblo en jaque. Si todo esta conectado, creo que tenemos algo para empezar a buscar al bueno de Gundren.

El enano hizo una pausa y se acaricio la larga barba trenzada

Tal vez seria buen comienzo preguntar a la gente de este pueblo como encontrar a esa banda y cual es su "modus operandi", luego seria todo de cuestion de trazar un plan para darles lo que se merecen...

Pasare una tarde agradable con mi tía, y pasare la noche en su casa antes de volver a reunirme con mis compañeros de aventuras. Antes de marcharme le preguntare si conoce a una tal Halia Thornton, debe ser nueva en el lugar y no de quien se trata, quizá mi tia ha escuchado hablar de ella. Si no es asi, antes de llegar al lugar de reunión con mis camaradas pasare por algunas tabernas buscando esa información.

Salgo de la granja de mi tia, con el estomago lleno y una bolsa repleta de bollitos de miel para dar a mis nuevos amigos.

El problema es que hay un conflicto entre los nombres que vienen en las fichas de los pjs y los del módulo, ya que deben ser de ediciones distintas. En tu ficha vienen con el nombre de los Carmesíes en lugar de la Marca Roja.

De todas formas Qelline conoce perfectamente a Halia Thornton, y te indica que podrás encontrarla en la Lonja Minera de Phandalin (en el mapa Casa de Cambio). 

Antes de marchar sales con esos bollitos de miel de tu tía envueltos en una tela que guardas en tu zurrón.

Todo el grupo atravesáis el pueblo de Phandalin en dirección a la granja Alderleaf, donde os han dicho que vive Qelline, la mediana nombrada por Laor.

Poco antes de llegar os encontráis a Rosco, que al parecer viene del mismo lugar al que os dirigís, canturreando bajo el reluciente sol de la mañana. 

- Rosco. Así que ahí estabas. Pareces de buen humor. ¿Resolviste lo que te preocupaba al llegar? Justo nos dirigíamos hacia ahí. Parece una tal Qelline, está al tanto de lo que ocurre en ese lugar. ¿Alguna noticia?-

Diría deteniéndose ante el mediano en su postura habitual.

Todo bien, Rosco? Espero que traigas buenas noticias Dijo el enano a su risueño compañero, que al parecer, parecia bastante contento.

Cuando se cruza con sus compañeros alza el brazo a modo de saludo y una sonrisa ilumina su rostro aniñado, sus ojos brillan. Tras intercambiar algunos saludos se dispone a sacar algo que guarda en un saco que porta colgado al hombro, cuando Laor nombra el nombre de su tía. El rostro del mediano refleja sorpresa.

-¿Tía Quell?, bueno si granja esta siguiendo el camino tras esos dos robles he pasado allí la noche, pero ¿qué queréis hablar con ella?¿Por qué la buscáis? - la mirada de Rosco escrutina uno a uno a sus compañeros de viaje - No creo que tía Quell pueda ayudarnos.

- ¿Le preguntaste lo que sabe sobre los extorsionadores del pueblo y el castillo que buscamos? Según sé, suele recibir la visita de un druida esquivo que está informado al respecto. Esperaba, de no poder concertar una cita inmediata para hablar con él directamente, que tu tía nos contase lo que le haya escuchado decir al respecto...- cruza un brazo y se sujeta el mentón con una mano frunciendo el ceño pensativo.

- Si hay algo que nos pueda servir, es el conocimiento. Cualquier mínimo detalle puede ser crucial en todo esto...-

Da unos cuantos pasos hacia la granja donde le había señalado.

- No tardaré, así podremos partir de inmediato.-

-¿Un druida? ¿el castillo?, ¿pero que dices Laor? Mi tía no sabe nada de eso, solo es una granjera, nada mas - el mediano se quedo pensativo, como contrariado, porque buscaban a su tía, ella no podía estar metida en cosas de esa índole.

-¿E.. espera donde vas? - Rosco apreta el paso para ponerse a la altura del elfo que se dirige hacia la granja donde se crió a grandes zancadas - Bueno, esta bien, hablaremos con ella, pero no creo que sirva de nada, mi tía es una mujer tranquila, no creo que se meta en esos asuntos.

-En cuanto a la Marca Roja, también me interesa averiguar unas cosas sobre ellos, pero no quiero que mi tía tenga problemas con ellos, son peligrosos, conozco historias.. - el mediano guardó silencio unos segundos y tragó saliva, como si recordara alguna cosa - Tengo información al respecto, una mujer llamada Halia Thornton, me dirigía a hablar con ella antes de encontraros. - se gira hacia el resto de la comitiva mirandolos con curiosidad, antes de clavar los ojos en el elfo inquisitivamente como si estuviera atando cabos. - Un momento.. ¿Qué asuntos tenéis con los carmesíes de la Marca Roja?, no estáis aquí de casualidad. ¿Me equivoco?

- Ninguno. Solo tenemos suposiciones por ahora. Pero está bien, si dices que tu tía no sabrá nada, pues entonces vayamos por esa Halia que mencionas. Quien sea, mientras nos cuente algo de lo que está pasando está bien.- dice deteniéndose y cruzándose de brazos, volteando hacia el resto.

Dwalin asintio y añadio:

De momento solo son rumorea rumorea de taberna, pero si todo esta esta conectado, puede que encontremos al bueno de Gundren si seguimos las pistas de la Marca Roja.

Espero que esa Halia nos facilite algo de informacion.

Se detuvo cuando el resto del grupo hizo lo propio, su mirada se desvió hacia el roble que marcaba el linde de los terrenos que poseía su tía. No quería involucrarla, pero, y si sus compañeros tenían razón.

-Bueno.. ya estamos cerca, podemos pasarnos por la granja de tia Quell, además os prometí que probaríais sus delicias y aquí estamos, no seria un buen anfitrión si no lo hiciera. - recuperando su sonrisa retoma sus pasos en dirección a la granja - Os prometo que no os defraudara.

Mientras caminamos la silueta de la granja se distingue cada vez mas cercana, un hilo de humo sale de la chimenea.

-¿Quien en el pueblo os dio esa información sobre mi tía? ¿cuales son esas suposiciones y porque os interesa la Marca Roja?, no es bueno hacer preguntas, tienen informantes en muchos sitios, hay que ser mas discretos. Unos extranjeros haciendo indagaciones siempre llaman la atención. - saca un bollo de un saco que tiene y le da un gran bocado - Ya lo decía mi primo Ringo Saltacharcos, "por la boca muerde el pez Rosco", era pescador ¿sabéis?, un día su barca zozobró y cayó al lago, no sabia nadar - se encoje de hombros sin que su sonrisa manchada de migas se desvanezca - Pero era un tipo sabio, siempre sabia los refranes correctos, es mejor ser callado y discreto, como yo, nunca digo mas palabras de las necesarias, deberíais aprender de mi. Con los Carmesíes toda precaución es poca, ¿por cierto quereís uno? - ofrece el saco con varios bollos de miel, huelen deliciosamente. - Son para vosotros.

Nos acercamos hacia la granja, veo a mi tia y la saludo con la mano, mi cara se ilumina como la de un niño pequeño.

- ¿Recuerdas que mencioné a una sacerdotisa que me podía ayudar con mi misión? Garaele es su nombre, pasé la noche en su santuario dedicado a la diosa de la fortuna. Ella mencionó al druida, pero no tengo muchas esperanzas de hablar con él, no si no queremos esperarlo una semana. Pero menciono esta granja, parece ser su destino frecuente cuanto hace sus visitas al pueblo.-

- Sobre la discreción... tal vez tengas razón. Pero lo único que sé, es que no se nada y eso me molesta. Gracias.- dijo tomando el bollo con gracia, llevándoselo a la nariz y dándole un bocado, para consiguiente comérselo a buen ritmo hasta la llegada a la granja.

Había escuchado atento todo lo que habían dicho sus compañeros, y al parecer todo indicaba que era necesaria una visita a la tía del mediano. Toma uno de los bollos que le ofrece Rosco, seguro era una delicia ya que los medianos son bastante frugales y se especializan en tener buenos alimentos.

—Espero que tu tía nos de más información Rosco, pero la mantendremos lejos del peligro. Finjamos que solo vamos en una visita social.

Dastar se mantiene atento de que no hayan llamado la atención de aquella banda de delincuentes que ronda en la zona.