Partida Rol por web

- Retiraos de Vodevil e iros a otra parte muy lejana, si no queréis una pelea a muerte. Asquerosos - le digo, procurando disimular el miedo.

.-Bien. Tendré que conseguir que me lo contéis usando la espada...-. Voltea su arma hacia vosotros preparandose para atacar.

.-¡Muerte a los lacayos de la perra!¡Quien me traiga la cabeza de Rossie tendrá una parte de mi botin!-. Dicho esto se lanza el solo contra los enemigos de tal manera que el resto al ver como este avanza se decide a atacar tambien. Se escuchan gritos .-¡A por ellos!¡Sangre!-.

.-Chusma-. Dice con tono aburrido .-¡En formación!¡Flancos cerrados!¡Avancen!-. Así pues los soldados del Dragón Rojo marchan mucho más organizada y pausadamente.

Lourdes antes de ir con el resto comenta .-Esto es un desastre. Nos van a aplastar-.

Me acerco a la Lurdes y le digo disimuladamente a la oreja, con un murmurio:

- Larguémonos de aquí mientras aun podamos. Espero que no se fijen en nosotros. A la porra con nuestras promesas a Varak. Ya volveremos en un dia o dos para ver qué ha quedado de todo esto.

Y le digo lo mismo a mi amigo Vazlo, con disimulo.

Y me dispongo a correr al bosque más cercano...

Justo cuando todo parece perdido aparece más gente. Son algunos de los ciudadanos de Vilevil. Algunos de ellos corren al combate desde diversos sitios. Hombres jovenes y viejos. Hasta algunos niños han aparecido con piedras para tirar. La ciudad no quiere a los del Dragón Rojo allí por lo que se ve.

Varak carga contra Adrastos, el cual interpone su mandoble al hacha del bestia. Adrastos tiene que echarse a un lado contra la embestida, pero Varak no entabla combate contra el, sino que sigue hacia la formación de enemigos asestando un hachazo brutal contra uno del frente y luego arrojandose al interior de modo que rompe la formación enemiga.

.-¡Mirad podemosh ganar!-. Dice con tono sorprendido.

- Yo creo que deberíamos aliarnos con Varak, al menos por ahora, y salvar a la ciudad. Luego ya veremos. A ver, Lourdes, Vazlo, ¿estáis de acuerdo conmigo?

Los dos te responden con sus actos. Cargan sus armas y se lanzan al frente. Todo comienza a suceder muy rápido. Varak por un lado con su poderosa hacha hace verdaderos estragos. Por su parte Adrastos también mata de forma muy elegante con sus armas a sus enemigos. Los delincuentes son muy inferiores que los hombres del Dragón Rojo, pero aun así les plantan cara.

Con la formación rota todo se vuelve muy caótico. Te das cuenta de que te has separado del resto de tu grupo, pero para poderte unir a ellos tendrias que abrirte paso luchando. Estas rodeado de una mezcla de ciudadanos, delincuentes y soldados y escuchas las detonaciones del arma de Vazlo, pero hay alguién que se interpone en tu camino...

Con suaves movimientos el Capitán decapita con su arma a uno de los delincuentes y ahora coloca su guardia mirandote fijamente. Su gesto indica desafio .-Pareces distinto-. Dice con su tono indiferente.

- ¿Ah, sí? ¿Que te parezco distinto? ¿En el sentido de que te parezco neutral? Explícate, por favor. - Mientras digo esto, desenfundo la espada y le miro fijamente.

.-Que más da...-. Avanza hacia ti lentamente volteando su mandoble en circulos mortales.

Consigues acertar en tu adversario con tu bastón y herirle. Al golpearle retrocede agilmente con el ceño fruncido mientras libera su mandoble en un tajo que te corta en la cara y en el hombro. Tus heridas son leves pero vistosas. Tu adversario parece especialmente rápido.

El combate es un completo caos. Aunque estan centrados cada uno de los contendientes en su contrincante más inmediato, tu notas algo distinto. El día se ha vuelto más oscuro de repente. Es algo casi impercetible quizas y desde luego que menos preocupante en este momento que el terrible adversario al que te enfrentas...