Partida Rol por web

Mientras el explorador intenta amansar a los lobos, Tormenta busca un posible lider cercano de los lobos...

Kettembar con la mirada fija en la torre a la espera de sus dos compañeros no se habia percatado de la amenaza y sale de su ensimismamiento cuando Clevor grita y se apresura a enzarzarse con los enemigos más cercanos.

Mas preocupada de su capa que de otra cosa, Jerra se muestra un tanto desubicada al escuchar el grito de su compañero.

En el revuelo inicial, Clevor  es el único  que  reacciona segundos antes del  sorpresivo ataque de los lobos. Instintivamente, ordena moverse al Wilden para proteger el flanco izquierdo, y este automáticamente  saltó a enfrentarse a la jauría  que  se abalanzaba sobre ellos.  Mientras tanto, en el flanco derecho varios lobos  asaltan a la enana y la maga  que apenas pueden reaccionar a la embestida.

Los lobos del flanco derecho  golpean sin piedad al guerrero wilden, pero gracias a su armadura y su escudo apenas siente los mordiscos de los lobos. 

Por el flanco derecho  la suerte esta de parte de los lobos. Aunque Shana consigue esquivar  por poco el mordisco del lobo, Jerra no tiene tan buena suerte. Ambos lobos atacan feroces a la maga derribandola y  desgarrandole a mordiscos  parte de la túnica mientras la sangre sale a borbotones.

(mensaje editado por el DM)

Kettembar que estaba encarado al unico lobo que tenia cuerpo a cuerpo para la embestida del lobo mas grande que le venia por su izquierda. De repente pega un tajo al aire a su derecha con su arma.

El elfo le susurra a Tormenta: esto chicos están muertos de hambre déjame darle un poco carne y no nos molestaran por algún tiempo, solo cuida mi espalda ¿quieres? el elfo se gira con calma hacia el otro lobo saca otra ración de carne, se para entre tormenta y el canino, mira al lobo y con movimientos calmos le susurra con tono condecendiente, chico se que tienes hambre, come esto y regresa a casa, no queremos dañarte.

Como un resorte, Kettenbar saltó al encuentro de la jauría de lobos que atacaban por la izquierda, al oír la orden marcial de los labios de Clevor. Aguantando  la embestida inicial, el wilden consiguió dibujar un arco con su espada que golpeo al aire, a escasos  palmos del  lomo del lobo mas fornido.

Los lobos que atacaban por el flanco derecho ,se regocijaban en su éxito, golpeando una vez mas a  la shaman enana y a la maga genasi.

Debido al  sorpresivo ataque inicial de los lobos, estos volvieron a  lanzar sus afilados dientes sobre sus presas iniciales: el guerrero Kettenbar y la pobre Jerra.

Los lobos del flanco derecho, alentados por su lider,  Aciertan a  hundir  repetidas veces sus colmillos sobre el wilden. El primero de ellos, encontrándose una abertura en la defensa del guerrero, desgarra  sin piedad parte de la armadura que cubría  el muslo derecho.  Mientras la sangre  manaba de dicha herida, los otros dos; animados por el éxito de su congénere,  hunden de manera exitosa sus colmillos sobre el wilden. La sangre comienza a  fluir por las heridas y un débil rechinar de dientes  es el único sonido del wilden ante las dolorosas mordeduras.

En el flanco derecho los lobos   muerden con ahínco a la enana y la genasi. El lobo que solitariamente atacó a la shaman, muerde  uno de los brazos de la enana con sangriento resultado. Los otros dos lobos  lamiéndose de gusto al encontrar un suculento bocado,muerden con insistencia a la maga.Por suerte,uno de ellos tan solo desgarra de mala manera la túnica de la genasi, dejando  las piernas de esta última al aire...

Jerra se levanta y invoca el poder del rayo sobre sus enemigos.

Clevor empuñó con rapidez su escudo y se lanzó en carrera para apoyar a Jerra que se encontraba en una situación complicada, ya que carecía de armadura y los lobos la iban a despedazar a dentelladas. Mientras se desplazaba aumentando la velocidad, el acero de sus espada brillaba como nieve al sol y cada paso era como el golpe de un mazo de guerra apisonando la tierra helada. Pasó casi rozando a Shana y exclamó Ayuda a Kettembar con tus habilidades para luego lanzarse como una topadora contra uno de los lobos que pretendía devorar a la genasi.

Cuando llegó a distancia de combate, mientras lanzaba la estocada al salvaje animal la espetó ¡Vamos Jerra, yo los contengo!

Era una situación desesperada, por lo cual haciendo uso de todas sus fuerzas, volvió a lanzar un sablazo a la bestia, mostrando a sus compañeros que no todo estaba perdido ¡No van a aplacarnos sin encontrar el filo de nuestras espadas!

Kettembar recibe estoicamente los ataques de los lobos y se prepara para contraatacar. Aleja todo lo que puede su espada larga que empieza a acumular energia que en seguida envuelve al wildes, momento en el cual descarga con toda su fuerza la espada contra el lobo más grande. Sin dejarles respirar y aprovechando el impulso del primer golpe, realiza un barrido horizontal atacando a todos los lobos a la vez.

El combate acababa de empezar y estas bestias sarnosas ya estaban dándolo todo, sobre todo se habían cebado con Kettember y Jerra, esta última parecía estar más debilitada.

Ethys, acude a mi llamada. Digo mientras conjuro a mi compañero oso para que le ayude contra el lobo que parecía más peligroso. Justo al lado de Kettenbar surge una explosión de niebla y en una fracción de segundos se materializa un oso semitransparente. Seguidamente me muevo un paso y apunto con mi totem al lobo alfa y en ese momento, Ethys ruge con el poder de un trueno. 

Finalmente miro a Jerra. Tranquila compañera, no dejaré que desfallezcas. Espíritus del mundo, escuchad mi llamada, cerrar sus heridas. Acto seguido las heridas de Jerra comienzan a cerrarse y el wilden también se ve beneficiado.

Lanzándose como alma que lleva el diablo, Clevor desenfunda su arma mientras carga contra los lobos del  flanco derecho que  estaban castigando a la genasi.  Su primer golpe  apenas roza a su enemigo pero el segundo encuentra a su victima, degollándola con un preciso corte en el gaznate. El pobre cánido  cae redondo en el frío suelo mientras su sangre se esparce y su cuerpo  se sacude con los últimos espasmos de vida.

Por su parte, Kettenbar después de aguantar estoicamente el envite de los cuatro lobos del flanco izquierdo, golpea con éxito al lobo que parece ser el líder de la manada, golpeándole una de sus patas. Aprovechando la fuerza de su primer golpe, el wilden se retuerce  dibujando un extraño circulo frente al resto de los lobos,golpeándolos salvajemente. El primer secuaz lupino que recibe el primer impacto es volatilizado con la fuerza del golpe. Un amasijo de huesos sanguinolentos  regando el suelo es lo que queda del pobre diablo. Advertido de la fuerza que lleva dicho golpe el segundo lobo lo esquiva en el ultimo momento. pero el tercer lobo no tiene tanta suerte y disfruta del mismo fin que su compañero.

Con  una sonrisa de satisfacción , el wilden   carga sin pensarlo dos veces  para ayudar a sus compañeros en  el flanco derecho. En ese mismo instante una  imagen espectral de un enorme oso  se materializa al lado del lobo alfa y le gruñe mientras resplandece con un aura  verdosa.

Por ultimo, la dolorida genasi, consigue desplazarse del combate gracias a Clevor e invoca el poder del rayo  frente a ella. Una extraña nube de rayos impacta sobre los lobos.  en el mismo instante  en el que Clevor  asesta su  exitoso golpe, el cadáver del dicho lobo  se le chamusca su pelaje debido a los rayos invocados por Jerra. El segundo lobo recibe una descarga mortal y de su cadáver solo  sale un olor a pelo quemado y un humo enegrecido que pronto se lo lleva el viento.

Mientras observas a tu alrededor mientras tu compañero elfo  intenta apaciguar al lobo que te amenazaba, a tus oídos llegan sonidos de batalla: Aullidos ,gruñidos, el repiquetear del metal contra  hueso, el  sutíl sonido de  carne sesgada y el goteo de sangre caliente...

Todos estos sonidos   provienen   de  tu espalda,mas concretamente del improvisado campamento donde vuestros compañeros  aguardan vuestras  novedades. Oyes como los bueyes  resoplan, la voz de Clevor aullando ordenes, los quejidos de una voz femenina que no consigues identificar y finalmente un aullido feroz  y profundo que reconoces instintivamente como el  aullido del líder de la manada.

Tragando saliva, bajo tu forma felina tus músculos se tensan como un resorte para  acudir a ayudar a tus compañeros  de un salto. Tus ojos se vuelven un instante hacia tu compañero elfo....

A diferencia del anterior animal este se muestra mas arisco al encanto animal del intrépido explorador, pero este no pierde la calma ni tampoco el arrojo y sigue adelante con el plan, unaque un poco terco el el animal Deidos se sigue aproximando, su mirada es amable aunque sabe el riesgo que corre, sigue tratando de acercarse al animal, puede ver los ojos de miedo y deseperacion del lobo, casi proboca lastima el semblante del animal, el xplorador deja salir un sispiro y lo acaricia mientras este como el pedazo de carne...

Bien hecho chico come esto y regresa al bosque, con algo de suerte tiempos mejores llegaran pronto. Deidos pone su frente contra la del lobo, este da un giro y se aleja en la espesura del bosque.

el elfo se incorpora mira a tormenta Tormenta creo que hicimos lo correcto regresemos y hagamos que nuestros compañeros tomen esta posición desde aquí deberían poder darnos algo de apoyo de necesitarlo dicho esto el explorador regresa a la carreta

Tormenta, escucha como sus compañeros están enfrascados en un combate y viendo como el explorador se está manejando con los dos lobos y teniendo claro que no erán excesivamente fuertes, tomó una rápida decisión...

Deidos, están atacando a nuestros compañeros... Encargate de estos amigos. Yo voy a ayudar a nuestros compañeros que no parece que lo estén pasando bien.

Dijo, esto suave y firmemente y tras decir las palabras sin titubear, salío corriendo en su forma felina en pos de sus otros compañeros.