Partida Rol por web

Kellen, encuentras un lugar que cumple las condiciones que buscas, al este del camino alejandoos apenas diez o quince minutos ves que las colinas están bastante cerca de vosotros, desde ahí sería fácil ocultaros del camino y del viento.

Kellen encuentra un lugar donde podrían pasar la noche algo recogidos así que vuelve al camino y se lo dice a sus compañeros.

Chicos, he encontrado un lugar donde podríamos pasar la noche, dice el gnomo. Quizás podríamos aprovechar para parar ya y descansar. Además deberíamos repartirnos las guardias, pues no soy amigo de dormir en la superficie sin vigilancia, les dice mientras les indica donde está el lugar encontrado.

primo, realmente yo no pensé al decidir irme contigo, un paladín de prestigio, que tendríamos que dormir con el resto de animales del mundo. Te propongo que cuando tu hagas guardia yo dormiré en tu saco y así no tendremos que darnos la vuelta, te parece bien?

miro hacía kellen y digo

Ok, si piensas que es un buen lugar, por mi no hay problema en acampar aqui, aunque preferiria que caminaramos un poco mas y aprovechemos que nosotros somos buenos en la oscuridad.

Ahhhh - saco con presteza el saco de dormir - ya era hora, tengo los pies molidos.

También deberíamos pensar en conseguir algo de comida para el desayuno, pues no todos tenemos raciones de viaje - digo mirando alrededor, como esperando que alguna pequeña presa salga de entre los arbustos.

Ah, mataría por una hogaza de pan y un buen queso, o unos huevos - digo pensando en la oportunidad perdida de haberlos comprado en la últimas granjas que vimos.

Prima, mientras tu no tengas saco de dormir usarás el mío, sea o no mi guardia.  Yo, con quitarme esta armadura de hermoso y ruidoso metal ya me siento afortunado y cómodo cual rey del bosque.  No hay problema. 

Y bien Nyx, si tu ya estas muy cansada, claro que si acampemos.  No vale la pena retrasar mucho el trayecto de mañana por no haber descansado hoy un poco.  Pero si te sientes con fuerza para caminar un poco más, mejor hagámoslo, cómo dice Victoria.  El tiempo apremia allá en Hondonada...

Kellen escucha las palabras de sus compañeros y pregunta ¿Y cuanto más hemos de caminar?, porque la verdad, aunque me maneje mejor en los bosques, prefiero dormir de noche y levantarme temprano para caminar de día, dice el gnomo. No quisiera encontrarme con un peligro en el bosque y que no pudiésemos reaccionar a tiempo...

Por cierto, yo tengo 10 raciones de viaje, que compartiré con los que no tengáis, dice mientras le tiende a Nyx un pedazo de pan de raíz de braefur, una comida que preparan los gnomos.

Joooo - protesto con desgana - bueeeeenooo, pero solo un poco más.

Gracias Kellen - empiezo a devorar la ración, pero tras solo un bocado la dejo, con mente en el desayuno de mañana.

No os preocupéis, aunque no fui precavida al pensar en que lío nuevo me iba a meter con Koya, si lo fui para la comida y también tengo un poco para compartir. Si que me gustaría saber si alguno de vosotros sabéis cazar o forrajear dado que ambas habilidades nos vendrán muy bien para los descansos que hagamos..

Miro hacia el horizonte y comento...

¿Recordáis que el barquero tenia esa camisa del consorcio?

Junto unas ramitas si ninguno lo había hecho ya, y hago que prenda mágicamente (thaumaturgy, cantrip).

Me acerco a Koya y le doy un besito en la mejilla...

Gracias primo, espero que puedas descansar.. y me metro dentro del saco de dormir pensando lo calentita que voy a estar. Después de acurrucarme completamente digo en voz alta .. Buenas noches.

Era su turno de guardia.  Koyaanisqatsi puso el cuenco de agua clara en el piso, la forma en que se le reza a Eldath en la noche, para meditar y ganar claridad.  Justo tenía que colocarse para ver el reflejo de la luna en el agua.  Ahí, justo la veo...  Puso la mente en blanco, lo mejor que pudo.

Se dio cuenta de que le ayudaba a estar más atento al entorno, a los sonidos del bosque, a las múltiples sombras que se movían con el viento.

Luego, pensaba en la bruja, pero eso lo distraía de su concentración.  ¿Que querrá por salvar a los de Hondonada?  ¿Que querrá en general de la vida?  ¿En que se parecerá a Naamah?  -muchas preguntas y nada para contestarlas, mejor regresaba a estar atento, a los sonidos, al reflejo de la luna en el agua....

zzzzZZZZzzzz....zzzzZZZZzzzzz....

(Mi subsconsciente sabe que mi primo esta pensando en mi)

Buenas noches - dije metiéndome en el saco de dormir - guardaré esta comida para el desayuno.

Desafortunadamente no tengo mucha idea sobre conseguir comida, aunque puedo hacer una guardia para que Kellen pueda dedicarse a forrajear - asumí que el Explorador sabría mejor que yo moverse por estos lares.

Tras eso, dejé al paladín de guardia y me dormí.

Koyaanisqatsi, si quieres yo haré la 2ª guardia, dijo Kellen cuando las chicas se habían dormido. No debe estar uno despierto toda la noche.

Podemos hacer 2 turnos. A mitad de la noche, o cuando te sientas cansado, despiértame y yo haré la siguiente guardia hasta el alba. Por ahora tengo comida suficiente, así que mejor será descansar que perderse por ahí buscando hierbas. Eso lo dejo para el día, dijo. Mientras hablaba, iba desplegando el saco.

Se quitó los cinturones y dejó su arco y espada cerca del saco, mientras que la mochila la apiló junto a las demás.

Hasta luego, dijo antes de cerrar los ojos con un bostezo mientras el crepitar del fuego le recordaba el calor del hogar y se sumía en el sueño...

Al pasar su mitad de la noche, con la luna lo más arriba que estaría en toda la noche, Koyaanisqatsi decidió que el que quiere verdaderamente ayudar tiene que estar bien fresco para poderlo hacer mejor, cuando se podía, así que finalmente besó el espejo de agua pidiéndole a Eldath que los guardara sanos y salvos esta la noche y se dispuso a despertar al gnomo.

Kellen, Kellen... psst.  Levántate amigo.  Ya es medianoche.  -lo sacudió un poco para que notara que no era un sueño.

El tiefling empezó a quitarse la armadura para dormir cómodo.  Es de hermosa manufactura, si, pero a la piel le viene bien la soltura al dormir.   

A duras penas se desperezaba el gnomo, cual marmota, por cierto, uno de los animales con los que puede hablar esta raza.  A lo mejor de ahí les viene lo dormilones.  Al ver que ya éste abría sus ojos faéricos, empezó a platicar con él en voz baja, casual.    

Kellen, te agradezco mucho que hayas venido a ayudarnos, más importante aún ahorita en el bosque, que es tu especialidad, pero, ¿que hay de lo de tu amigo perdido?  ¿Te preocupa no estar buscándolo?  ¿Que piensas hacer luego?  Acomodó unas hojas a forma de almohada. 

Yo te ayudaré cuando le demos a Lauren los componentes, claro, luego luego saldríamos, sin duda, sabes que cuentas conmigo, pero ¿por donde comenzaremos?   No tengo ni idea al respecto.  ¿Tu si?

[ Medianoche, Día 4 de Tarsakh ]

La luz de la medialuna, las estrellas y vuestra hoguera os permiten veros claramente los rostros mientras habláis durante el cambio de guardia. Dos criaturas extremadamente distintas al fuego de una misma hoguera, el fuego causa un efecto completamente distinto en los dos rostros, en el caso de Koyaanisqatsi parece deslizarse a través del mismo, como si fuera parte de él, por contra parece algo ajeno al rostro de Kellen, lo cambia, crea sombras y lo hace difícilmente reconocible.

El lugar elegido parece haber sido bastante acertado y apenas notáis una ligera brisa donde os encontráis, no está de más el taparos con algo de abrigo, pero sigue siendo una noche perfecta para acampar al exterior.

A parte de vuestras voces y el crepitar de la leña, no se escucha ningún otro sonido en la zona, estas colinas parecen ser demasiado abiertas para el gusto de las bestias, y salvo algún ave ocasional y el susurro del viento no hay ningún otro sonido natural en la zona.

Kellen se despierta desperezándose y escucha las palabras del tiefling. La verdad es que no se muy bien por qué lo cogerían, pero tengo cierta idea. Se para un momento a pensar. Lo cierto es que los trasgos nos han atacado muchas otras veces. Si no lo mataron en ese momento, sería por algo, le dijo al paladín. Creo que seguramente lo quieran vender como esclavo, o quizá algún necio humano, ávido de saber donde vivimos, les pagase un dinero por él. Siempre se creen esos cuentos de vieja de que guardamos riquezas y joyas...

De todos modos, añade, ahora nos dirigimos a otro bosque. Quizá ahí pueda encontrar alguna pista, pues no creo que lso trasgos se entretengan mucho en las llanuras.

Duerme ahora si quieres, yo vigilaré, dice mientras se vuelve a poner sus cinturones y a enganchar la espada.

Kellen, vas viendo como la luna continúa poco a poco su recorrido por el cielo durante la noche... esa es casi la única distracción que tienes durante tus horas de guardia, por lo demás apenas ves movimiento o escuchas ruido alguno. Ha sido una guardia realmente aburrida que ha puesto a prueba tu capacidad para mantenerte despierto.

Poco a poco vas viendo más y más claridad aparecer por el este, el amanecer ya está aquí y con él ves que llegan los primeros animalillos, pájaros piando y pequeños animales moviéndose entre los arbustos.

Ambos os encontráis algo cansados, las 4 horas que habéis dormido cada uno esta noche son claramente insuficientes.