Muchas gracias, señorita Janiel - le digo cuando nos despedimos - Su ayuda es tremendamente agradecida, y la de su maestra también.
Luego, cuando Janiel se retira (si es que lo hace), me dirijo al grupo:
Bueno... Mejor comencemos el viaje ahora. Esta isla, ¿está lejos? ¿Alguno sabe qué tanto, al menos?
Que conste que yo hablé cuando salimos, como mencioné en mi post :P
Ya fuera de las ruinas, me dirijo a los demás:
P.D: perdón por postear poco, es que tengo clases de tarde, y a la mañana estudio. Solamente puedo comentar a la noche en mi pais (a partir de las 12/1 am del horario del servidor de Umbria).
Tras mostrar una sonrisa de felicidad, Janiel vuelve a las ruinas a ayudar a su maestra con el trabajo de arqueologia, quien sabe, a lo mejor en un futuro cercano esta decision de ayudar a estas mujeres aporta algo de valor...
Ahora mismo os encontrais en el exterior de las ruinas, al lado del carro, divagando sobre vuestro proximo destino, aunque hay una cosa que hay que tener claro: Si os dirijis al norte, debereis coger primero ropa de abrigo, pues Haufman es una maldita tundra.
Yatusabi, me di cuenta de ese detalle durante la primera semana de juego, y sé, que si, literalmente, no puedes acceder, no voy a quejarme de cuando escribas.
Espero poder ayudarles, o al menos comunicaré lo que sepamos a Shiro a ver si él puede hacer algo... Pero ahora...
- Bien... - Con decisión, me acerco a Fénix y me pongo de rodillas para ponerme a su misma altura. - Fénix... Cielo... - Si está jugando con la pelota, se la sujeto para que me preste atención. - Sé que eres un chico muy inteligente y muy fuerte, ¿a que sí? - Le sonrío. - Lo que pasa corazón, es que estamos en una misión muy complicada y dificil, donde nos vamos a encontrar con hombres y mujeres bastante malos. Nosotros estamos aquí para protegerte, y estoy segura que tú también nos vas a proteger a nosotros... De todas maneras, cuando nos encontremos con un desconocido, será mejor que no te acerques hasta que no sepamos si es un amigo o un enemigo. ¿Sí? Así que te pediría que te quedaras detrás de nosotros hasta que veamos si nos podemos fiar de ellos. ¿Está bien? - Tras esto, asiento, le doy un ligero beso en la frente y le vuelvo a mirar. - Ahora puedes irte a jugar un rato.
Y le lanzo la pelota para que juegue con ella... Necesito que se aleje un poco, no quiero que nos vea discutir.
- Y bien... - Viendo como Fénix se aleja, me pongo en pie y miro al resto del grupo. - ¡¿Y tú de qué vas?! - Le preguntó a Huracano sin contemplaciones. - ¿No te diste cuenta que no dejé a Fénix acercarse? ¿Crees que fue porque me apetecía? ¿Porque no había nada mejor que hacer? - Intento mantener el tono, no quiero que Fénix se preocupe. - ¡No! ¿Y si Dinah era una enemiga? ¿Y si esas alas es algún tipo de defensa que ataca a todo el que se acerca? ¿Y si al acercarte se lo toman como una amenaza y nos atacan? - Por un segundo paro y tomo aire. - ¡Me parece perfecto que en tu tiempo libre hagas lo que quieras! ¡Pero estamos en una misión! ¡Si tú haces algo mal nos repercutes a todos! ¿Y si al tocarla te lanza algún hechizo de control? ¡Chicos! ¡Todas las precauciones son pocas! ¡Ante un desconocido tenemos que guardar ciertas precauciones!
Ahora me giro al resto.
- Nadie se acerca a nadie. Mantenemos la formación. Si queréis decir algo, perfecto, ¡pero cuidar vuestras palabras! Si no estáis seguros de lo que vais a decir, no digáis nada. Teóricamente me habéis nombrado la líder del grupo, entonces dejarme a mí llevar las negociaciones. ¿Queda claro? - Con Yatusabi y Aramil bajo bastante el tono. Han confiado en mí y tengo que estar a la altura, a parte, parecen tener más cabeza que Huracano. - Y ahora... ¿Qué hacemos?
En ese momento me siento en el suelo y saco el libro.
- Podemos ir al norte, tanto al castillo de media noche o a la isla que hay cerca, aunque tendremos que parar a comprar ropa. Por otro lado podemos investigar sobre Sol Negro, y creo que en la capital podremos conseguir más información, aunque no estoy segura... ¿A vosotros qué os parece?
Ya taaaaa
Que te marque en todo el Post Fénix por si ponías la oreja.
Miro a Sophia y digo:
-Lider, llevo desde que entre a la taberna con un escudo levantado, si hubiera sido enemigo así lo abríamos delatado, saltándonos eso, estoy de acurdo, no hay que decir quienes somos ni que buscamos, ni para que, por el amor e dios, y si eran aquellos que quieren cargarse el mundo ¿que?-Luego sonrio y pongo mi cara de bromista como siempre.
- ¿Crees que estoy bromeando?
Pregunto visiblemente enojada. Noto como algunas descargas de electricidad salen de mis ojos.
- Al igual que tu escudo y que algunos de tus trucos no son visibles al ojo normal, no eres el único capaz de hacerlo. ¡Así que no me pongas de excusa ese escudo tuyo porque si quieren, lo pueden evitar!
-Sophia, ¿quieres buscarme las cosquillas?, porque llevas desde que salimos, que parece que buscas pelea, no quieres que hable, no hablare, no quieres que actue no actuaré-estaba muy mosqueado de nuevo y ahora actuaría en consecuencia.
pj mosqueado jugador no alaro.
- ¡Parece que eres tú quien me busca las cosquillas! ¿No viste que no dejé acercarse a Fénix? Venga, ¡Iluminanos a todos! ¿Por qué crees que lo hice? ¡Venga! ¿Qué se te pasó por la cabeza?
No sé lo que significa "Alaro" Huracano.
-instinto materno, de protección al mas débil, pero yo no necesito de esa protección-sin mas guardo silencio.
jugador me refiero perdon el jugador no esta mosqueado.
Bien, si no quieres protección, no la tendrás.
- Esta bien... Si no quieres protección... Me desentiendo de ti... Aunque te vuelvo a decir lo que te repetí en su día: si por tu incompetencia alguien de este equipo sufre algún daño, me ocuparé personalmente de ti. Y ahora que hemos dejado las cosas claras. ¿Qué hacemos? Yo puedo hacernos llegar al norte en un par de horas, aunque necesitaría descansar un par de días para estar a pleno rendimiento. Por otro lado, tenemos a Sol Negro por otro lado. Aramil, ¿crees que podrías saber dónde localizarlos?
Me alejo un poco persiguiendo la pelota mientras los demas hablan me interno un poco en el bosque ( lo suficiente para estar apartado, pero no tanto como para que me pierdan de vista), alli me pongo ha pegar saltos y acrobacias mientras golpeo la pelota distraidamente mientras estoy atento a los sentimientos del bosque y a todo en general.
Motivo: Acrobacias
Tirada: 1d100
Resultado: 73(+95)=168
Motivo: Advertir
Tirada: 1d100
Resultado: 81(+80)=161
Realmente no tengo mucha idea a pesar de que he ido tras ellos durante mucho tiempo. Están en todos lados y en ninguno. Son como fantasmas, aunque cuando partimos dejé a mis chicos investigando el suceso de Terrasanta. Seguramente ellos me puedan proporcionar algo más de información. Además, en la central tengo un registro de la poca obtenida, aunque no muy fiable. Son una plaga. Habla con un tono de sariedad absoluto, no le gusta el Sol Negro y su odio hacia ellos es profundo y se hace notar. Estoy de acuerdo contigo, Sophia, si vamos a la isla ésa de la que han hablado es mejor ir a comprar algo de ropa; de paso podría recoger un paquete. Su tono es más tranquilo.
Ante el discurso de Sophia me quedé quieto totalmente. Escucharía todo lo que tenía que decir. Además de que no era yo específicamente a quien se le dirigían esas palabras. No dije nada por respeto, simplemente callé....
Luego, cuando se bajaron un poco los humos, era hora de hablar sobre nuestro próximo movimiento.
Acerca de Sol Negro, ¿los buscaríamos para negociar con ellos, o...? - dejo abierta la pregunta, insinuando si íbamos a pelear o a negociar simplemente.
Considerando lo que dijo Aramil sobre ellos, si es que están en todas partes... ¿No sería mejor ir a Haufman primero? Digo, si es verdad que están en todas partes entonces en el camino podríamos cruzarnos con alguno de los miembros de ese grupo, ¿no? En lugar de ir hacia ellos... No importa dónde fuéramos, podríamos encontrar a alguien de Sol Negro.
Mantengo un ojo sobre Fénix, quien se encuentra a una distancia segura, para que no haga nada fuera de lugar.
Por un segundo cierro los ojos y aprieto el pendiente... A los pocos segundos vuelvo a abrir los ojos.
- Le he comunicado al caballero Shiro lo que nos ha contado la señora Dinah... La mayor parte de la información... Dice que no tenemos un lugar claro para buscar a Sol Negro. Me ha sugerido que nos dirijamos al norte, donde están las 2 armas, puesto que nuestra prioridad es esa... Y de camino dudo que nos encontremos con Sol negro Yatusabi... Yo puedo salvar la distancia a Hauffman en apenas dos horas, aunque requiero cierta... Preparación... Lo que podemos hacer es que dos de nosotros vayan a comprar algo de ropa para el frío mientras yo hago los preparativos. ¿Qué os parece?
-Estoy de acuerdo, dinos quienes van a por la ropa-Mi tono era serio y de respeto pero a la vez frío y distante.
La bronco me había mosqueado mucho mas de lo que les dejaría ver, peno no podía echarme para atrás se lo debía a ella mas que a nadie y no lo jodería por una maga de aire.
solo curiosidad, ¿estais esperando que yo haga los grupos? porque estais todos muy callados...
- Pues... Por ejemplo... Ya que lo has comentado. - Digo mirando a Huracano. - Puedes ir tú y... Aramil. - Yatusabi puede que llame demasiado la atención.- Comprar ropa de abrigo para todos, algunas mantas y todo lo que creáis oportuno. - Espero que no traigan unas chanclas... - Fénix y Yatusabi se pueden quedar aquí por si ocurre algo mientras preparo el hechizo. Tenéis tres cuartos de hora para ir y volver. ¿Os parece?
yo estaba esperando para ver si alguien decía algo más... Pero eso, que se vayan de compras.
Estoy de acuerdo - digo mientras me siento en el piso. Quería descansar un poco luego de tanta aventura preliminar - ¿Qué necesita para hacer lo suyo, señorita Sophia?
Bueno, Huracano, vayamos hasta Hod. No sé a cuanto tiempo estará, pero queda cerca. Allí poseo una tienda, en la que se venden perfumes y ropas, cogeremos lo que nos haga falta. Así también doy órdenes a mis compañeros de la organización. Le digo a Huracano. Adiós, refiriéndome al grupo de Fénix, Sophia y Yatusabi esperamos no tardar mucho digo mientras el carro marcha.
Estoy suponiendo que Huracano conduce el carro.
Me siento en el sitio del conductor, y cuando Aramil sube, empiezo a ponerlo en marcha directo a la dirección que el a dicho.
No le había hablado, no por nada si no porque no me apetecía hablar en ese momento, luego le explicaría cuando estuviéramos solos.
Una vez ya alejados del grupo y mientras le voy dando indicaciones a Huracano, comenzamos a hablar
Parece que Sophia, la líder, no te cae muy bien, o por lo menos, ya ha habido ciertos roces. ¿Pasa algo? Es porque podría interceder por ti, si lo crees conveniente. Realmente no me gustan las rencillas dentro de un grupo; sino quieres hablar sobre ello lo entenderé, pero es por ofrecer mi ayuda. Estoy aquí para lo que necesites.