Partida Rol por web

 Viendo los futiles intentos de Anur incpaz de lograr abrir la puerta, y viendo que no llega ni Aaron y ni se escucha a Thognar la joven se acerca a la entrada del pasillo para ver ques e ve desde allí.

 - Thognar había decidido investigar el lugar al que se llega por las escaleras... no me gusta este silencio.

 Sin más se acerca a la habitación donde había la cuerda para escuchar más detenidamente.

Cuando Weelsky da la vuelta a la puerta y se dirige al mismo sitio por dónde se había ido el enano se encuentra con lo siguiente: 
 

Desde las sombras, una larguirucha criatura gruñe a través de sus afilados y enormes colmillos. Se asemeja a un chimpancé sin pelo y es claramente carnívoro. Tiene unos brazos que parecen tentáculos y que acaban en unos apéndices enrrollados que podrían tratarse de unas manos deformes. La criatura está en el agujero del techo y desde ahi ataca, lejos del alcance del enano pero desde un lugar que si alcancen sus tentáculos.

Una de ellas se agarra desde el hueco en el techo y la otra está enrrollada alrededor del cuello del enano, sin dejarle respirar. El color azul empieza a hacer mella debido a la asfixia a que está siendo sometido.

Necesito que me tires otra presa. Voy a postear su turno.

Sientes como la criatura aprieta los dientes, y comienza a hacer fuerza alrededor de tu cuello. El oxígeno no llega a tus pulmones y la sangre no llega al cerebro con lo que empiezas a sufrir de ahogamiento y de falta de riego.

Sin embargo, después del daño que te hace en el cuello. Tus manos consiguen soltar el tentáculo y quedas momentáneamente libre.

En ese mismo momento, Weelsky, con cara sorprendida, aparece en la puerta portando su gran espadón y mirándote con los ojos desorbitados. Al menos, no ibas a morir allí sólo. Aunque tu "valentía" bien te podría haber costado la vida.

 Algo instintivo, una fuerza nacida del miedo y el pánico es liberada por un grito mientras sin dudarlo la pelirroja norteña se abalanza contra la criatura, esgrimiendo la mandoble contra el brazo extendido que se aferra al cuello de Thognar.

 YYAaaarrrrGGHH

 La ancha hoja del espadón cruza el aire con un sordo sonido zumbante antes de cortar la piel del brazo de la criatura.

Thognar ve aparecer la figura borrosa de Weelskys. Abre la boca en el momento en que se libera del agarre para decir algo pero esta tan atolondrado que no atina a decir nada inteligible.  Simplemente se limita a no soltar al bicho para que no le vuelva a coger y trata de girarse para encararlo y meterle un cabezazo en los dientes si es posible.

Ahorrrra...ve....rrras...!!

Escupe mientras el color va volviendo a sus mejillas junto al aire inhalado.

Aullando, por la rabia de que su presa se hubiera escapado, la monstruosa criatura vuelve a estirar el brazo para agarrar de nuevo al enano.

 Thognar ve aparecer la figura borrosa de Weelskys. Abre la boca en el momento en que se libera del agarre para decir algo pero esta tan atolondrado que no atina a decir nada inteligible.  Simplemente se limita a no soltar al bicho para que no le vuelva a coger y trata de girarse para encararlo y meterle un cabezazo en los dientes si es posible.

Ahorrrra...ve....rrras...!!

Escupe mientras el color va volviendo a sus mejillas junto al aire inhalado.

Pero la criatura es muy resbaladiza. Evita el agarre del enano y vuelve a arremeter contra su cuello.

 Algo instintivo, una fuerza nacida del miedo y el pánico es liberada por un grito mientras sin dudarlo la pelirroja norteña se abalanza contra la criatura, esgrimiendo la mandoble contra el brazo extendido que se aferra al cuello de Thognar.

 YYAaaarrrrGGHH

 La ancha hoja del espadón cruza el aire con un sordo sonido zumbante antes de cortar la piel del brazo de la criatura.

-De acuerdo.. yo tendre que echar esto abajo.

Con un ligero disgusto por recurrir a un metodo tan barbaro, esgrime el mazo a dos manos y comienza a golpear la puerta para romperla. 

La puerta no parece querer ceder. Muescas del material, parecido al mármol o piedra granítica, saltan en todas direcciones. Pero la puerta no abre.

La cerradura parece mirarte directamente a los ojos. Retándote.

 Lejos de estar satisfecha al ver como la criatura retrocede dolida ante su ataque, se lanza de nuevo acosando al ser.

 Acompañada de gemidos y gruñidos la pelirroja blande con energía el acero de su mandoble lanzando un tremendo ataque que daña con gravedad de nuevo a la bestia, salpicando con su sangre las paredes y el suelo de la pequeña cueva.

Deja de golpear para examinar nuevamente la puerta, en especial las partes marcadas. Esos ataques habrian roto una espada, un escudo o una piedra normal... Rasca un poco con la uña enguantada las hendiduras y junta alguna de las esquirlas que logro arrancar, examinandolas. Luego regresa a la otra salida de la habitacion, para ver que ha sido de Weelksy y el enano. 

Thognar finalmente logra librarse del agarre y jadea con fuerza recuperando el aire robado a sus pulmones. No pierde tiempo en recuperar su pesado hacha del suelo y con la daga que empuñaba lanza un feroz tajo hacia la criatura junto a la exploradora.

Aghh... llegas a tiempo pelirrrrroja! Te debo una..

La criatura alargó el apéndice que tenía por mano en dirección a Thognar, trantando de agarrar su cuello una vez más, pero ésta vez el enano estaba preparado y la rechazó con ambas manos antes de atacar de nuevo a la criatura.

 Thognar finalmente logra librarse del agarre y jadea con fuerza recuperando el aire robado a sus pulmones. No pierde tiempo en recuperar su pesado hacha del suelo y con la daga que empuñaba lanza un feroz tajo hacia la criatura junto a la exploradora.

Aghh... llegas a tiempo pelirrrrroja! Te debo una..

La daga silba en el aire sin encontrar carne que cortar.

 Lejos de estar satisfecha al ver como la criatura retrocede dolida ante su ataque, se lanza de nuevo acosando al ser.

 Acompañada de gemidos y gruñidos la pelirroja blande con energía el acero de su mandoble lanzando un tremendo ataque que daña con gravedad de nuevo a la bestia, salpicando con su sangre las paredes y el suelo de la pequeña cueva.
 

La criatura aulla una vez más de dolor, molesta por el daño sufrido y entonces, cae al suelo de la cueva con un sonoro ruido. El cuerpo del "chimpancé sin pelo" da un par de convulsiones antes de quedar inherte para siempre.

Thognar enfunda la daga en el cinto y sigue jadeando mientras se permite el lujo de palpar su cuello dolorido ya fuera del peligro. Se mantiene en silencio cabreado consigo mismo por haber estado tan cerca de morir ante semajente simio esperpéntico. Gruñe y maldice entredientes algo en enano mientras recupera su hacha y gira la cabeza hacia Weelkys.

Se me tiró encima cuando subía por la escalerilla.. 

 La criatura, tras recibir dos profundas cuchilladas cayó al suelo, con un agónico chillido en el último instante antes de la caída fatal. El peligro pasó, y con este la joven se tranquilizó. Con respiración agitada, fruto del gran dispendio de energía y fuerza usada, la pelirroja fue recuperandose del esfuerzo.

 Escuchó las palabras de Thognar, a quién terminaba de rescatar, este parecía ofendido y enfadado consigo mismo. La joven comprendía ese sentimiento, el del orgullo herido, el ser rescatada por otra.

 - Lo vi, te pasó a ti como me hubiera podido pasar a mí. Por eso es importante que no nos separemos y nos quedemos solos por este lugar. Está repleto de peligros a cada esquina.

 Mirando hacia atrás esperando que llegue el paladín en cualquier momento por los sonidos de la escaramuza, la joven se agacha para examinar a esa extraña criatura mientras limpia el filo de su mandoble.

Es en ese momento cuando comenzais a escuchar el ruido metálico de la maza de Anur golpeando la puerta doble de la habitación contigua. Quizás vosotros estabais diciendo algo, pero la realidad era que tanto Anur como Aaron estaban por su cuenta ahora mismo.

 Tras escuchar los mamporrazos a la puerta la joven se levanta.

 - Al parecer Anur está ensimismado con la puerta, mejor nos juntamos y vemos qué hacemos.

 La joven da un último vistazo antes de emprender la marcha de nuevo hacia donde estaban todos hace unos momentos.