Partida Rol por web

Me puse a recargar nerviosamente el revólver:

- ¿Cómo lo vamos a hacer? En cuanto vean la sala de máquinas llena de... cuerpos... pararán el barco y registrarán a todos los pasajeros. ¡Encontrarán nuestras armas! Eso si el barco sigue en rumbo, cosa que tampoco sabemos.

-Está bien, pues intentemos ocultar los cuerpos por aquí, pero lo más rápidamente posible. Adam, vigila la zona mientras lo hacemos, por si llega alguien.

Adam asintió.

Adam registra con rapidez al sobrecargo, ataviado con una túnica extraña y con algunos trazos de pintura en la cara, el cuerpo yace inmóvil en el suelo. Adam encuentra lo que parece la llave de un camarote, posiblemente del sobrecargo.

A continuación, Farid y Joan ocultan los cuerpos en alguna zona oculta de la inmensa sala de máquinas, para así ganar tiempo antes de que se enteren de lo acontecido. Una vez acabado el trabajo los tres abandonáis la estancia con disimulo, evitando que los trabajadores, que siguen afanados en su trabajo con las grandes calderas y los ruidosos motores, os puedan ver.

Al salir al exterior veis que todavía no ha amanecido, sigue reinando la oscuridad, aunque no tardará mucho en mostrarse el astro rey por el horizonte, pero la tormenta se ha disipado y el mar está más tranquilo. ¿Es posible que vuestra acción tenga algo que ver en ello al interrumpir el ritual? os preguntáis conscientes de la gran amenaza a la que os enfrentáis, y del poder que hay en ella.

Esconder los cuerpos fue una de las tareas más deshonestas que había hecho para la sociedad, haciéndolos ver como cuerpos inservibles y no hombres que merecieran sepultura. Estaba al límite de mi razón: no me fijé demasiado en como había cambiado el tiempo en salir, sino en lo que faltaba para terminar este infernal viaje:

- Tal vez debamos registrar el camarote del sobrecargo para acabar con esto de una vez...

Farid vio cómo se oscurecía el ánimo de Joan, y no le faltaban motivos. Este viaje en barco estaba resultando una pesadilla. Aunque finalmente llegaran sanos y salvos a tierra, con la satisfacción de haber impedido los planes de la logia, los acontecimientos aquí vividos les dejarían una nueva huella imborrable.

-Sí, vayamos a ver. Ojalá saquemos algo que valga la pena.

Adam no dijo nada. Se limitó a seguir a sus compañeros mientras seguía atento a cada pasillo.

Salís de la sala de máquinas con disimulo y os dirigís hacia la zona de la cubierta C donde están situados los camarotes del capitán y los oficiales de la tripulación.

Esta parte suele estar más vigilada por el trasiego de marineros y oficiales, pero en estos momentos no está muy concurrida debido a la gran cena/espectáculo que se está celebrando en la otra punta de esta misma cubierta. Una puerta con un cartelito dorado que indica "Sobrecargo" os hace deteneros, probáis la llave y la puerta se abre.

El camarote es bastante lujoso, compuesto de dos secciones con baño propio. Las paredes y el techo, de color blanco, están decorados con molduras al estilo art decó y las ventanas, que dan al mar, son más grandes y tienen elegantes cortinas. La primera de las secciones tiene varios muebles de madera de calidad entre los que se encuentran un escritorio, una librería y varias sillas; la otra sección, al fondo, es el dormitorio, con una amplia cama con cabecero, una pequeña mesilla, un armario y un espejo de cuerpo entero. Al baño se accede desde el dormitorio.

A simple vista no parece el camarote de un señor del mal, pero sabéis que la Logia del Crepúsculo de Plata sabe guardar las apariencias muy bien. Ahora toca actuar con rapidez, y evitar que os detecten en aquel lugar.

- Haré lo que pueda con la librería en el poco tiempo que tenemos. Vosotros ocupaos de lo demás -dije para dividirnos el trabajo e intentar no pisarnos el trabajo.

-Vale, vamos allá.

Farid se encargó de registrar el escritorio.

Adam hizo lo propio con la mesilla junto a la cama y el armario.

Con rapidez os ponéis cada uno a registrar una parte del camarote. Encontráis lo siguiente:

En un cajón del escritorio hay un telegrama:

y una anotación en un papel:

En la librería, detrás de unos libros, hay un tomo oculto, es el catecismo del Caballero del Vacío Exterior de la Logia del Crepúsculo de Plata. Visteis uno similar en el edificio de la asociación "Mirando hacia el Futuro", en Nueva York.

En la mesilla del dormitorio hay un revolver del .38 cargado [Daño 1D8+2]

Cojí el libro por si podía ser de utilidad a la sociedad y me dispuse a salir si mis compañeros habían acabado el registro.

- Volvamos a nuestro camarote conjunto. De todas maneras, puede que sospechen de nosotros por no haber ido a la fiesta... -dije preocupándome por la situación. Cuando estuviéramos en el camarote les pediría poner en común lo que habían encontrado en la habitación del sobrecargo y analizarlo.

-De acuerdo, salgamos de aquí.

Farid se guardó lo que había encontrado en el escritorio y siguió a Joan en dirección al camarote.

Adam decidió dejar el revólver donde estaba. No tenía intención de coger una arma de fuego de esos asesinos a no ser que estuviera en un momento de necesidad.

Se marchó de allí junto a sus compañeros.

Abandonáis con cuidado el camarote del sobrecargo y volvéis al vuestro.

Ya es bastante tarde, el día se acaba y por el camino os encontráis con varios grupos de pasajeros que abandonan la fiesta, algunos de ellos más contentos de lo normal, retirándose a sus respectivas habitaciones a descansar. Intentáis no establecer algún contacto visual con ellos para pasar lo más desapercibidos posible.

Llegáis al camarote de Farid, que utilizáis como lugar de reunión. Todo parece en orden.

- Parece ser que el falso cura y el señor Kurosov están directamente relacionados con los asuntos de la Logia y no son un caso independiente. Pero no sé porqué necesitan destruir la espada del zar, ¿deberíamos dejar al señor Kurosov a un lado o debemos convencerle de que nos siga o se una a la organización? Por otra parte, ¿que significará Belphegor?

-Yo también me hago esas preguntas. Sería oportuno poder hablar con la organización, pero desgraciadamente temo que las comunicaciones en esta barco estén comprometidas. Creo que deberíamos esperar hasta llegar a tierra, y dejar transcurrir estos días con discreción. Una vez allí, contactamos con la asociación, le contamos nuestros descubrimientos y que elaboren un plan a seguir. Si quieren reclutar a Kurosov, o entrevistarse con él, seguro que tienen los recursos para hacerlo.

Farid se encendió un cigarro.

-Sea como fuere, por lo menos tenemos la satisfacción de haber frenado los planes que tenía la logia en el crucero.

Adam se acostó en una de las camas y cruzó los brazos tras su cabeza.

-Eso es verdad. Desde luego, en este viaje nos hemos ganado nuestro sueldo...

Amanece en el Atlántico norte, el USS Leviathan continúa su camino surcando las gélidas aguas del océano hacia su destino, son las primeras horas de la mañana del cuarto día cuando un estruendoso bufido de la sirena os despierta..

Después de unos segundos vuelve a sonar..

Si os asomáis fuera observáis como la gente se agolpa en la barandilla entusiasmada y curiosa..