Partida Rol por web

No dijo o hizo nada mientras Akira le reprendía por no considerar los intentos de asesinado sobre su persona. Poco debía decir al respecto.

Asintió mientras Shijo Kai contestaba a su compañero, y luego respiro hondo mientras este volvía a exponer sus faltas.

Sin duda, he cometido muchas faltas, que serian juzgadas por los míos como graves, y serian condenadas con severidad. Mi reputación como magistrado ha quedado destruida en el mejor de los casos.

Parecía que quería decir algo mas con aquellas palabras, pero pronto Yasutora realizo una pregunta que bien debía de ser respondida.

No, no tengo autoridad sobre los guardias de este distrito. Mis cometidos son investigar los delitos de grupos de personas que suelen trabajar en los distritos más pobres, en el pescador, y curtidor. Eventualmente tengo permiso para investigar en el distrito comerciante, pero no tengo relevancia alguna en este distrito o en el licenciado.

La explicación había sido muy clara. No tenía autoridad como magistrado, pero, pudiera ser que tuviera contactos o gente trabajando fuera de nomina mas allá de sus atribuciones. 

Entonces cabe la posibilidad que las acciones de su "sirviente" fueran orquestadas por alguien de más influencia , seguramente alguien quien tenga poder sobre el distrito licenciado ¿ puede decirnos el nombre de quien se encarga de tal asunto ? sin duda como magistrado de la ciudad lo conocerá . 

" Comienzo a pensar de que es solo alguien para pagar el pato en caso de que las cosas no salieran como quien quiera que sea lo haya planeado , tal vez podamos ponerlo de nuestro lado a cambio de salvar su reputación " . 

.-Teneis razón Shinjo-Sama. Solo es cuestión de tratar el asunto con la mayor imparcialidad posible-. Se dirigio de nuevo hacia el magistrado escorpion .-Efectivamente el resultado de esta investigación ha destruido vuestra credibilidad como magistrado y eso hace más extraño aun la idea de que hayais expuesto voluntariamente esa credibilidad ante los investigadores aqui presentes. Siendo como sois alguien con autoridad pudisteis resolver el asunto de vuestro sirviente por vuestros propios medios y sin embargo ¿Pretendeis que este camino tan embarazoso puede provenir de vuestra propia voluntad? Sereis el primer samurai que conozco que airea sus trapos sucios con indiferencia. Además la lucha contra las bandas organizadas era algo que os correspondia por lo cual es completamente irresponsable dejar la responsabilidad sobre el asunto de vuestro sirviente en manos de investigadores con menos medios y posiblemente por edad tambien capacidades-.

Entonces debo de entender que sois jóvenes e inexpertos y no los magistrados decididos de vuestros clanes que no solo han resuelto el robo y el incendio, sino también capturado a uno de sus cabecillas en menos de un día.

Su comentario era tan hiriente, que casi podía tratarse de un tanto lanzado contra el corazón de Akira.

Sin embargo, me temo que entendéis perfectamente que mi trabajo en concreto es muy laborioso, y que sin duda obro a mis propias espaldas para acabar acusado por estos señores tan respetables, y encerrado con la misma gente que pretendía detener.

Las palabras resonaron en el aire un poco más, y parecía que de repente todo se había vuelto muy incomodo.

Los segundo pasaron, y estaba claro que aquel tema estaba cerrado, sería mejor presentar más pruebas o argumentos para terminar de hundir al magistrado. 

Akira se decidio a clavar más profundo.

.-¿Tan laborioso es vuestro trabajo que tras meses de desconfianza sobre vuestro sirviente y dudas sobre que pudiera estar desarrollando actividades criminales hayan debido de demostrarlas investigadores bajo una autoridad ajena y en una investigación que iniciaron otras personas y cuya causa para conectar la razón de su investigación con vuestro problema sea el desarrollo de la misma y no vuestra propia intervención? Vuestra falta de diligencia es incomprensible. Si hubiesemos errado en el camino que nos ha llevado hasta encontrarnos con vuestro almacen, segun lo que exponeis quizas hubieran de pasar más meses, o tal vez arder más embajadas y sucederse más acciones asesinas para que otro grupo investigador resolviese lo que vuestra inacabable ocupación os impedia resolver. No os reconozco en la persona en la que recibe premios como esa ofrenda de sirvientes por la resolución de la captura del Jade Rojo.

Exponeis como prueba de que somos buenos investigadores el hecho de que hayamos tardado un solo día en resolver la captura de este que llamais cabecilla. Y sin embargo hemos de suponer que no podiais disponer de un solo día para poner esfuerzos en tratar de conocer la confianza de alguien con influencia sobre vuestros asuntos. Asuntos que competen a la seguridad de toda la ciudad. Sinceramente yo no podría dormir tranquilo con las repercusiones que pudieran surgir de esa falta de acción.

¿Y si las acciones del sirviente no estuviesen dirigidas hacia el robo de objetos de valor en la embajada sino en el asesinato de autoridades?¿Y si pudiera haber sucedido que vuestra inacción sea responsable de asesinatos o muertes que escapen a lo que tratamos aquí y ahora? Realmente no sabemos por falta de una investigación previa por vuestra parte cuantos crimenes podria llevar en su haber el shujenga. ¿Las personas que tienen contacto con vuestra persona os consideran tan necio como pretendeis exponer que sois? ¿Como habriais podido llegar a ocupar la posición de vital importancia que ocupais para la ciudad si fuerais de verdad tan necio? En verdad poneis a prueba el juicio sobre vuestra habilidad de aquellos que han confiado su seguridad en vuestra persona-.

Los criminales que han muerto hoy a las puertas de esta embajada eran Yakuza al servicio de vuestro vasallo y este os debe lealtad a vos, sama...Decidme, tenéis algo que ver en todo esto?.-Le preguntó al hombre sinceramente mientras añadía.-Es mejor morir con honor y la conciencia limpia que ser capturado en mitad de una mentira, en esta ocasión creemos que el escorpión no sabrá nadar.-Dijo serio en referencia a la fábula de la rana y el escorpión.

Colocó una mano frente a Akira, censurando su acalorado diálogo suavemente para que se calmase.-Jóvenes e inexpertos que han realizado su trabajo, dígame en que lugar le deja a usted dicha revelación.-Yasutora estaba calmado aunque no dudaría en utilizar su lengua en incitar la ira del escorpión.-Son numerosas las pruebas que apuntan a que vos tenéis un pie en toda esta insidiosa intriga y os afanáis en que sois inocente alegando que no sabíais nada.-Tomó una pausa.-Sois un samurai honorable por lo que vuestra palabra posee un peso, mas las pruebas pesan aún mas y si no poseeis pruebas mas evidentes de vuestra inocencia mas allá de vuestra presunta palabra me temo que la justicia caerá sobre vos como lo estimen mis señores aquí presentes.

Poseéis tal vez testigos de otros clanes que comprueben vuestra coartada? vais a apoyar nuestros esfuerzos en hallar a el o los culpables de esta intriga política de numerosos cabos sueltos, vais a escudaros tal vez en vuestra inocencia? solicitaréis un campeón que os defienda con sangre de tamaño insulto aquí vivido?.-Yasutora preguntaba con real interés cada vez mas excitado, en sus ojos se notaba el ansia apenas velada.-Sea como fuere aún quedan mas argumentos y pruebas.

Miró a sus superiores.-Samas, podemos hacer pasar al reo para que testifique y confiese? tal vez sus palabras y la cercanía a su muerte le hagan intentar tener un paso honrado hacia Meido

Kenzo cerró los ojos mientras le caía el chaparrón de Akira, y aguanto estoico las increpaciones. No le pasaron desapercibidas luego las invitaciones a una muerte a manos de Yasutora en un duelo, pero cayó hasta ver que más había que añadir.

Tras un segundo de descanso, tomo aire, y luego contesto con calma.

Erráis al suponer que los asuntos a los que me dedico no son lo suficientemente importantes para no investigar, algo que simplemente era una sospecha.

Es más, erráis al suponer que soy capaz de ponerle nombre a la organización, que por vuestros comentarios y vuestros indicios está detrás de actos tan impíos.

En esta ciudad hay más de una docena de agrupaciones criminales, unas mas legales que otras, otras más sanguinarias que unas. Y en cuanto una cae, otra, aun peor, se erige en su lugar.

Si pretendéis tratar el asunto con imparcialidad, no veo que vayáis a dar por sentado que puedo decir la verdad. Así que he de suponer que veis que me muevo entre sombras. Y de ser esa la verdad, os devuelvo vuestras preguntas.

Si no fuera un necio, y supiera que uno, o quizás más de mis sirvientes, o mis subordinados, que trabajan para una organización. En quien debo confiar, en otro sirviente, en otro subordinado.

Si hay mas allá de toda duda razonable, interés económicos muy fuertes, hacia qué lugar apuntar mis sospechas. En qué clase de trampa puedo hacer caer a mi subordinado.

Es más, si vos fuerais un hombre malvado, como haríais caer al único hombre que se enfrenta a vos. Con un arma envenenada, o haciendo que parezca el más vil de los hombres.

Miro directamente a Akira, pues este estaba hablando de manera muy personal desde el principio, y le parecía justo devolverle al fin un comentario personal.

Lo que quiero que tengas claro, Cangrejo san, es que si soy tan oscuro y manipulador, y aun así, estoy aquí sentado, sin haber usado argumentos en contra, sin haberme ocultado, salido de la ciudad después de la visita de vuestros compañeros Unicornio, debo de ser un verdadero loco, para intentar convenceros de que no soy culpable de los actos de otros hombres.  

Volvió a ponerse en la misma posición anterior, y luego tras recapacitar, volvió a hablar.

En respuesta a el argumento de que por ser mi vasallo, sus compinches han de profesarme lealtad, no dudo de que lo creáis firmemente, pero lo cierto es que desconozco a las personas de las que habláis. Nunca he hablado con ninguna de ellas, y estoy seguro de que no encontrareis a nadie que os diga que son conocidos míos.

A no ser, que efectivamente traigáis aquí a mi sirviente, y le preguntéis que implicación tengo en todo esto. Seguramente, dirá que soy la cabeza de una organización criminal, y que yo mismo ordene quemar este lugar hasta los cimientos para robar caballos y baratijas.

Y por el momento no considero que necesite un campeón, porque no encuentro pruebas que me impliquen directamente. No se me ha visto en las cercanías de esta embajada, no se me ha visto con ninguno de vuestros animales de clan, así como tampoco se me ha visto con lo que quiera que se robara.

Lo único que he hecho hasta el momento es comparecer aquí, de manera voluntaria, asumiendo, que encontrareis un culpable, y que vuestra justicia será más justa que otras que conozco.

El hombre estaba visiblemente mas incomodo, quizás porque no paraban de insultarlo, llamándolo necio y pretendiendo que la gran labor de este para con la ciudad no fuera más que un borrón mas sobre su presumible inocencia. O quizás fuera, que estaba a punto de cometer un fallo y decir algo que lo inculpara claramente.

Vuestros señores hacen llamar a un guardia, y se le dan órdenes de traer al reo, que está ya lejos en la cárcel, siendo “interrogado” por su implicación en estos asuntos.

Akira se dio cuenta de que aquel individuo debia caer por completo o el en concreto iba a ser de los que más sufriese las consecuencias.-Suponiendo la posibilidad de que se os escapase la estancia de caballos unicornio en vuestro almacen hay algo que se hace sin duda más raro. Trasladar caballos Unicornio con discreción desde la embajada de origen hasta su almacen no es una tarea sencilla. La razón por la cual alcanzamos a localizar tal almacen es el paso carros altos para el traslado de animales y el sonido de los portentosos Unicornio. ¿Es habitual que comercieis con caballos para disponer de semejantes carros? Y de no ser así ¿Como iba a justificar ante vuestra persona el sirviente la adquisición de los mismos?-.

Hida Akira san , si bien Bayushi sama se encuentra aquí para comparecer y esclarecer el asunto , no está aquí para escuchar vuestros insultos . Si no es para aportar pruebas es mejor que mantengáis vuestra boca a disposición de oidos de seres de más al sur de las tierras de vuestro clan . 

Las palabras del joven shinjo , si bien no variaban su tonalidad , si eran más firmes , advirtiendo a su compañero de nuevo que insultar era una forma más de tomarse esto de forma personal , y cuando el trabajo se junta con lo personal uno expone sus sentimientos , sentimientos que no debe mostrar un buen samurai en público . 

.-No he realizado ningun insulto. Es el quien se ha declarado como necio para justificar sus acciones-. Respondio con simpleza. Akira se sorprendio por el movimiento de Shinjo Kai tratando mostrar una animosidad por parte de Akira después de que el magistrado sugiriese que este tenia motivaciones en su contra.

Yo no me declaro necio. Ni mucho menos, es mas, actué en todo momento con mucha cautela. Y quizás por mi buena labor mis enemigos han usurpado estos caballos dejándolos en una de mis propiedades.

En cuanto a los carros, no tengo ninguno en propiedad, y sería prácticamente imposible haberlos comprado sin mi consentimiento. Pero os pido que me enseñéis esos carros.

Guardo silencio un momento.

Ahora que hemos aclarado estos puntos. Tienen algo más que añadir, tienen pruebas de que yo organizase el robo, o que ordenase que quemaran esta embajada. 

.-Existe un testimonio que indica la presencia de tales carros. Si no son de vuestra propiedad es razón de investigación el como pudieron obtenerse y donde se puedan encontrar ahora-. Dijo Akira .-Es poco probable que nadie haya intentado tenderos una trampa, dado que esta mafia se ha esforzado bastante por cubrir sus huellas. ¿Como explicar los intentos de asesinato contra investigadores o el incendio para borrar las huellas del robo? La limpieza con la que consiguieron la llave de la embajada es especialmente resultado de una maniobra astuta y encubierta. ¿Por que iban a vender las joyas que estaban en la embajada tal y como estaban haciendo, en vez de ponerlas en vuestro almacen si esto fuese una maniobra para desacreditaros? La razón por la que estuviesen los caballos en vuestro almacen ha de ser otra distina-.

No olvidéis lo sospechoso de que tuvieran a un mercader de tierras Tejón coaccionado para que malvendiese las joyas a un precio inferior al real, no era una maniobra urdida por criminales que dan un golpe por dinero...si no algo político.

Entonces entiendo que no había joyas robadas en mi almacén.

Asintió ante sus propias palabras como si estuviera calculando algo.

No tengo carros, y si los encuentra y demuestra que me pertenecen hará un trabajo increíble.

Sobre como pretendían vender las joyas, no tengo ni la más remota idea de que es lo que hacían, o quien las vendía por ellos.

Lo que se sobre joyas es que es fácil moverlas, la mayoría de las veces que se roban joyas están suelen aparecer en otra ciudad importante. Este invierno se incautaron unas joyas robadas en Otosan Uchi que habían desaparecido la primavera pasada.

Si las estaban vendiendo a un precio incorrecto, o bien tenían mucha prisa por librarse de ellas, o bien estaban intentando llamar la atención. Yo me hubiera enterado de la venta de joyas en unos días, no me cabe duda.

Hizo una pausa, y volvió sobre un punto que habían comentado, que le parecía de justicia explicar. Porque tenía la sensación de que aquellos jóvenes sentían que por ser quienes eran las personas no deberían de atentar contra su vida. Y lo gracioso, si es que lo fuera, es que atentar de frente contra uno, era la maniobra menos peligrosa que podían usar contra alguien.

Y volviendo al asunto principal, el intento de asesinato o el incendio son tácticas bastante comunes para los grupos subversivos. En el distrito pescador a un grupo de “extinción” de incendios que sospechamos causan estos mismos en los comercios que no les pagan su cuota de seguridad.

Luego, si ustedes les estaban siguiendo la pista, es muy normal que fueran atacados. Pero, he escuchado en varias ocasiones que todos sufrieron percances de ese estilo, espero que se encuentren todos bien.

No dijo mas, por el momento creía haber respondido a todas las preguntas. Ellos esperaban que asumiera que unos caballos robados en su propiedad eran motivo suficiente para hacer justicia con él. Y en realidad lo único que le preocupaba era que sus superiores no pidieran su cabeza, literalmente por lo sucedido.

.-No estoy diciendo que tales metodos no sean al uso-. Indico al ver que habia desviado intencionalmente la cuestión .-Sino que esto es revelador de un deseo de ocultar el camino. Argumentais que existe una acción en vuestra contra y que alguien haya colocado los caballos deliberadamente con animo de inculparos. El primer intento de asesinato coincide con el descubrimiento de la venta de las joyas lo cual contradice el hecho de que la banda mafiosa quisiera llamar la atención con ello. Además que resulta incomprensible una infiltración de meses para que el daño se realizase justo ahora. Podeis volver al argumento de que el sirviente pudiera tener sus propios intereses, pero desde luego que se intentase dañar vuestra reputación es algo completamente ilogico-. Luego paso a lo que habia iniciado Yasutora

.-La posibilidad de que se deshacieran de las joyas con rapidez y a precio incorrecto, puede deberse a una reducción de coste propia de un producto robado o tal vez a que no se persiguiese un objetivo economico con el robo. Es posible alguna clase de afrenta o daño intencional contra algun miembro o miembros del Unicornio disfrazado de este modo-. Lo que queria provocar Akira es alguna clase de reactividad por parte de la autoridad que supiera que iba a ser perjudicada de no resolverse la cuestion. Provocar el movimiento entre bastidores para forzar la mano. Incluso aunque no hubiese evidencias suficientes el saber que se tenia a alguien en contra era suficiente para que estos individuos afectados hiciesen su parte.

.-Este es al punto que deduzco que Yasutora-dono queria llegar-.

Si los caballos han sido puestos de forma ilegal en el álmacen, entonces vuestros hombres encargados de vigilar que no se os robe estarán evidentemente involucrados o cuanto menos enterados de las idas y venidas de material en vuestro almacén, lugar donde de seguro guardáis mercancías lo bastante importantes como para no dejarlas solamente bajo la protección de un sencillo y fácil de romper cerrojo ¿no?.

No solo eso es sospechoso, sino la negativa a que entrásemos en el almacén a investigar lo que en su interior se hallaba después de que escuchasemos todos los presentes los relinchos de los animales hacinados en el lugar..tal vez sentíais miedo por que descubriésemos algo turbio que acabase con vuestra carrera política o realmente nos creíste lo bastante necios y sordos para no percatarnos de la presencia de las bestias.

Es de verdaderos necios robar unas joyas y malvenderlas en el mercado público de la ciudad a la mañana siguiente, mercado que por cierto está custodiado en parte por el propio clan unicornio , que de seguro estarían ya informados de los objetos desaparecidos siendo bastante raro que ni se percatasen, ni los idiotas de los causantes del entuerto pensaran en que deshacerse lejos de la ciudad de la mercancía era la mejor opción. Tras la muerte del pobre comerciante coaccionado y su asesino, los dos hombres que le acompañaron fueron a dar muerte a la esposa del difunto comerciante¿Con que fin? a fin de cuentas el hombre había fallado y muerto, no había pruebas que nos guiaran a ellos y la mujer desconocía de seguro todo cuanto pasaba....algo de lo que ahora no estoy tan seguro... mas aún después de todo eso los hombres intentaron silenciar a la mujer por que sí, un movimiento sobradamente errático y sucio para ser cometido por una supuesta banda criminal astuta, peligrosa y organizada....hasta hacerme pensar que no son mas que títeres de un marionetista de esta misma ciudad en la que nos encontramos.

Yasutora no lo acusaba de todo lo que decía aunque lanzaba una lluvia de ideas al aire con la esperanza de despertar recuerdos y pistas en las mentes de sus acompañantes, sobre todo en la silenciosa Otaku que aún no había hablado.

El magistrado Kenzo negó con la cabeza.

Tengo la sensación de que queréis mostrarme un camino que seguir, y como no lo estoy siguiendo, pensáis que soy un villano.

Puede que haya una acción en mi contra. O puede que no, pensad lo que gustéis, yo en mi caso tengo claro que la hay.

Pero lo que también tengo claro es que seguís dando vueltas alrededor de pruebas que solo conocéis vosotros. Y que poco tienen que ver conmigo.

Los guardias de los almacenes son los guardias de la ciudad. Insinuáis acaso que las autoridades de la ciudad son corruptas, y dejan que los malhechores de su conveniencia actúen de manera fraudulenta. Pues acusad a quien queráis, y luego asumid las consecuencias.

No creo que os dejen ir acusando a todo el mundo sin pruebas. En algún momento alguien pedirá vuestras cabezas.  

Y yo en todo momento he colaborado con vosotros, y no me he negado a que se revisara mi almacén, todo lo contrario. Pero entenderéis que no puedo dar autorización a entrar a mis propiedades a cada samurái que aparezca en mi casa sin saber quién es, a quien representa y que motivos tiene para solicitar entrar en mis propiedades. Eso sí sería una Necedad.

Hizo hincapié en esa palabra, pues ya la había escuchado muchas veces, y resultaba del todo insultante.

Así que os solicito que me mostréis las pruebas o los testimonios en mi contra. Porque estoy cansado de escuchar hablar de cosas que poco tienen que ver conmigo, sobre vuestros intentos de asesinato, y sobre comerciantes y joyas, que  no tienen que ver conmigo.

El hombre estaba decidido a guardar silencio, y parecía más que probable que sin no había un nuevo argumento o prueba este guardara silencio se dijera lo que se dijera. Se había llegado a un punto de inflexión en el que el supuesto culpable no hablaría de temas que no tuvieran que ver con si mismo.

Por otro lado, los dirigentes del Unicornio ni pestañearon ante las sugerencias de que quizás hubiera un titiritero en la sombra, o que le incendio y el robo fueran un mensaje para alguien del clan.

El único que se mostraba un poco incomodo al mencionar las joyas era Shinya sama. Quizás porque las joyas eran un regalo para vuestro clan, y tendría que explicar porque están no estaban de camino a Hida Shiro.

Se me antoja que no tenemos las pruebas que nos pides, pero sí las suficientes para que su persona quede en duda; o es que pude usted corroborar con pruebas, que teniendo varios almacenes a su cargo ¿treintena dijo?, cantidad de sirvientes y demás posesiones, resulta que no tiene ni idea de lo que pasa con sus bienes. ¿Tiene pruebas de que nada de esto tiene que ver con usted? ¿Que aparezcan posesiones de otros en sus almacenes, no tiene nada que ver con usted?

Yo le digo que si es así, exponga pruebas que le eximan de la responsabilidad de lo que ocurra en sus almacenes o con sus sirvientes. 

Otaku hizo una pequeña pausa, quizás para pensarse si decirle o no lo siguiente que le gustaría decirle a aquel Magistrado, si podía decir en voz alta lo que pensaba o estaba quizás fuera de lugar, pero, lo dijo.

Le diré lo que pienso. Pienso que se lo penso mucho antes de colaborar con nosotros para enseñarnos los almacenes, que no fue sincero en aquel momento y que no lo está siendo ahora, que intenta evadirse con excusas quitándose responsabilidades que le corresponden y que si de verdad es cierto que usted no es resonsable directo o idirecto del incendio y los robos, exponga pruebas que le defiendan. Si usted no manda sobre lo que pasa en sus almacenes y sobre lo que hacen sus sirvientes o a qué clase de sirvientes tiene a su cargo, ¿usted no manda sobre sus posesiones? Entonces ¿Quién?

El magistrado agacho un poco la cabeza, y luego asintiendo contesto a la guerrera.

Tiene razón, no tengo pruebas que apoyen mi inocencia. Es por eso que me someto a este consejo y acatare cualquiera que sea la pena. Yo soy responsable de que en mis propiedades o alguno de mis subordinados hayan cometido fechorías.

El hombre guardo silencio. No tenía mucho más que añadir. Y parecía que había reconocido algo que era una obviedad.

Es más, sonaba mucho más sincero que antes, o quizás fuera otra cosa.