al caminar casi no me doy cuanto de lo que estaba pasando a mi alrededor, hasta que escucho a alguien hablar, volteo y busco con la mirada de donde provienen la voz, al encontrar a Elessar, realmente no se que hacer, hasta que escucho que hay la posibilidad de que hayan mas de los que atacaron.se acerco corriendo asia donde se encontraba Elessar.
donde estan
El aviso de Vonotar me sobresalta, pero su consejo es acertado. Me echo al suelo y repto hasta su posición, procurando evitar hacer ruido. Al menos, no han muerto todos los hermanos...
Al poco tiempo, divisamos a otro hermano, Kond Fa, y con gestos de la mano le indico que se agache y que se acerque a nuestra posición.
El silencioso les indica el lugar donde estaria y se decide acercarse lentamente y con las manos en alto.
Pisa lentamente con pasos seguro hacia donde le parece que proviene el sonido.
Te cubres con un arbol, entonces ves como el Kraan vuelve a lanzarse contra el árbol, parece querrer derrumbarlo y asi aplastarte a ti también, pero lo único que consigue es hacerte unos arañazos a moverse el árbol
Vida: 22
Kraan: 9
-Bien compañeros. Parece que solo nosotros hemos sobrevivido. Como iniciados del Kai, nuestro deber es hacer lo que esté en nuestras manos por ayudar al reino de Sommerlund. Las opciones que se nos ofrecen son viajar a la capital huyendo como ratas del ejército enemigo, con la excusa de avisar al Rey de la inminente guerra que se avecina -como si las oleadas de refugiados que huyen de las tropas de los señores de la oscuridad no fueran un aviso lo bastante explícito-. Yo os propongo, hermanos míos, una alternativa valerosa que cribará de nosotros a los que merecen ser maestros del Kai de los que no: aprovechar que el maldito general que se encarga de esta invasión cree extinguida a toda nuestra orden, para infiltrarnos en su campamento, asesinarlo, y provocar el típico sistema de secesión que usan nuestros enemigos (la guerra civil). Con el caos sembrado por doquier, será fácil para el ejército de Sommerlund lograr una victoria decisiva, y nos ganaremos la eterna gratitud del reino o moriremos en el empeño. Los que estén a favor, viajaréis conmigo en busca del grueso de la fuerza enemiga, tenderemos una emboscada a algunos soldados y oficiales y nos camuflaremos con sus ropas. Después nos infiltraremos entre ellos, y a partir de ahí, solo espero que nuestro entrenamiento haya servido de algo.
Me paso a otro árbol y preparo mi hacha para lanzarla.
Un golpe mas y estara tan confunidodo que no verá mi ataque.
Tirada: 1d10
Motivo: Ocultarse
Resultado: 1
Tirada: 1d10
Motivo: Atacar
Resultado: 1
Me levanto y encaro a Vonotar. Apenas recuerdo su presencia en los pasillos del monasterio, pero su impetuosidad me ha encolerizado.
- ¡¿De que estás hablando Vonotar?! ¿No has tenido suficiente muerte y destrucción en esta noche, que quieres que nos lancemos contra el enemigo a morir?
Algo más calmado, vuelvo a agacharme para tener cobertura, y continuo hablando en voz baja.
- No creo que la mejor alternativa sea un ataque directo a su campamento. Dudo que siquiera pasáramos del primer control de guardia. Y no confundas prudencia con cobardia, Vonotar - miro directamente a los ojos al Traidor - si como parece, todos los señores del Kai han sido exterminados, y sólo nosotros, simples aprendices, hemos sobrevivido, tenemos como principal misión, aquí y ahora, rescatar todo lo que podamos de nuestra orden entre los escombros, e informar al Rey de lo ocurrido.
Miro a Sink y a Kond Fa, dirigiendo a ellos mis palabras.
- Obviamente, con la orden destruida, cada cual puede hacer lo que crea conveniente. Podeis seguir a Vonotar en su descabellado plan, o ayudarme a hacer lo correcto, lo que nuestros maestros esperarían de nosotros.
Medita las palabras del Traidor y Siniestro , mientra se toca el mentón.
Traidor tiene ansia de sangre.Siniestro tiene tendencia por ahora inciertas.
Mira a un y otro. Chasquea uno de sus dedos. Se dirige hacia el Siniestro. Le palmea en la espalda como si fuera un simbolo que esta de acuerdo con lo que ha dicho.
Abro los ojos, lo primero que veo es la dura roca contra la que me he golpeado al caer al suelo; mi boca sabe a sangre, deduzco que ha sido por culpa de la caída. -Que torpe soy, me llega a ver el maestro me... De repente recuerdo lo que ha sucedido en el monasterio y salgo corriendo en su dirección, lo primero que invade mis sentidos es el fuerte olor a ceniza. -Ha habido fuego, espero que hayan podido apagarlo a tiempo. En ese preciso momento al traspazar una zona boscosa bastante densa que veo lo que ha quedado del monasterio. -No, no puede ser... Caigo de rodillas y lloro enfrente de los restos de lo que antaño llame mi hogar.
Tras pasar un rato desahogandome de lo acontecido una idea ronda por mi cabeza, con la que salgo de mi entristecimiento. -Supervivientes, puede que haya sobrevivido alguien. Aunque por juzgar todo el tiempo que he permanecido inconsciente puede haber pasado hasta un día. Me dedicó a buscar supervivientes o indicios de que alguien haya sobrevivido.
Pasan 10 minutos sin encontrar ni rastro de ningún ser vivo en las ruinas, empiezo a desesperarme. -Puede que solo yo quede vivo, no, no es posible, debo seguir buscando. Es entonces al cabo de 5 minutos que encuentro indicios de que alguién estuvo antes que yo en el monasterio. Al parecer era un grupo por la cantidad de huellas. -No estoy solo, debo de alcanzarlos. Con estas palabras y mi escaso equipaje pongo rumbo hacia donde las huellas se dirigen. -Deben dirigirse hacia la capital para avisar de lo ocurrido.
Mi idea es que esté por detrás del resto y vaya siguiendo su rastro.
Si te fijas en mis disciplinas de kai, no tengo ningún potencial a la hora de combate. Con esas malas tiradas de dados normal. Así que seré el que se encague de explorar, investigar, indicarles el camino correcto y esas cosas. Pero a la hora de un combate no se ve ni mi sombra.
Debes apresurarte, pues comprendes que es arriesgado permanecer entre los restos humeantes del derruido monasterio. Las bestias de alas negras pueden volver en cualquier momento. Tienes que partir hacia Holmgard, la capital de Sommerlund, e informar al Rey de la terrible matanza: que todos los guerreros más cualificados del Kai han perecido. Sin los Señores del Kai para dirigir sus ejércitos, Sommerlund está a merced de sus antiguos enemigos, los Señores de la Oscuridad.
Te alejas de las ruinas y precavidamente desciendes por la abrupta pendiente.
Al pie de la colina, el sendero se divide en dos direcciones, pero ambas conducen a un gran bosque.
Puedes elegir derecha o izquierda, no hay huellas que te indiquen por donde siguieron tus compañeros
Vonotar, pienso igual que tu, hay que atacar, y acabar con ellos, no creo que haya mucho que discutir es el honor de los señores del Kai, al fin y al cabo para esto estábamos entrenando.
me acerco un poco a Vonotar
no se lo que hagan los demás pero yo solo o en tu compañía iré por ellos, Elessar toda la muerte de esta noche a sido de amigos y maestros no es suficiente razón para luchar, pero querer venganza. somo su legado lo ultimo de los señores del kai.
-Entonces está decidido. Elessar y Sink tomarán el camino de la capital para advertir al Rey de la destrucción del monasterio. Kond Fa tomar y yo tomaremos el camino opuesto, para buscar al ejército enemigo y tratar de sumirlo en el caos asesinando a su general. Que los dioses y el Kai os protejan amigos mios. No confieis en nadie, y recordad que posiblemente los agentes de la oscuridad ya se habrán infiltrado en la capital para ayudar a sus tropas desde dentro -digo, estrechando las manos de los dos guerreros de los que me despido, y pensando que tal vez nunca los vuelva a ver-. Adios.
les doy la espalda a los que se quedan
suerte y honren a los señores de kai
le pongo mi mano en el hombro a Vonotar
vamos puede ser haya algunos rezagados de ellos cerca
Corro como nunca antes habia corrido, baco la pendiente sin apenas percartarme del desnivel, a mi paso encuentro dos caminos uno hacia la izquierda y otro a la derecha, sin parar a pensar cual es el camino correcto escogo el izquierdo y sigo corriendo sin parar esperando que no estén muy lejos los demás supervivientes del monasterio y que sea el camino correcto que lleva hasta la capital.
Estoy atento a todo lo que sucede y se mueve a mi alrededor, no quiero encontrarme con ningún enemigo, estaría en una clara desventaja y mi misión es avisar de lo que ha ocurrido aquí.
Has seguido el serpenteante sendero durante unos veinte minutos cuando oyes un batir de alas por encima de los árboles. Miras hacia arriba y ves a un enorme kraan que se aproxima desde el norte, proyectando con sus alas negras una gigantesca sombra sobre los árboles.
Montadas en él van dos criaturas armadas con largas lanzas. Son giaks de las montañas, feos y pequeños seres llenos de odio y maldad. Hace muchos siglos, sus antepasados fueron empleados por los Señores de la Oscuridad en la construcción de la ciudad infernal de Helgedad, situada en los desiertos volcánicos que hay al otro lado de la cordillera Durncrag. La construcción de la ciudad fue una larga tortura y sólo los más fuertes de los giaks sobrevivieron a la atmósfera asfixiante y venenosa de Helgedad.
Rápidamente te lanzas en plancha buscando el amparo de un gran árbol cuando el kraan pasa volando sobre tu cabeza. El corazón te late con violencia y das gracias a tus rápidos reflejos que te han salvado de ser descubierto.
Los kraans y sus jinetes aterrizan en el camino a escasos diez pies del lugar donde tú estás escondido.
Los giaks desmontan de los escamosos lomos de los kraans y se dírigen hacia ti con las lanzas en alto y listas para atacar. Te han descubierto.
Al notar que he sido descubierto de mi escondite, me levanto y saco el hacha con la que estuve cortando leña para el monasterio antes de su destrucción. -Si mi destino es morir aquí al menos os llevaré conmigo. Me lanzo al combate a atacar al más cercano con la intención de ser el primero en provocar daños y con suerte la muerte de mi oponente.
Tirada: 1d10
Motivo: Daño
Resultado: 5
Holy shit...
La disciplina de kai de camuflaje no me ayuda o que? xD Y el sexto sentido no me avisa con suficiente tiempo?
PD voy a morir...xD
Mi destreza es 24 se supone que se resta con la del oponente.
Los despide con la mano a sus hermanos.
Nuestra obligación con el pueblo y su rey. Ahora tocaba preparar las cosas para su largo viaje al tierras de monarca.
Se giro hacia su compañero de viaje. Hizo un gesto con la mano abierta hacia arriba para rebuscar lo quedaría útil y mirar si hay un superviviente.
Avanzais en vuestro camino despidiendoos de vuestros hermanos, cuando llevais un buen rato andando veis un nuevo superviviente del monasterio, pero no esta solo, esta luchando contra un Kraan
con lo que contesteis picaros a vosotros dos y a Ashram
Os desviais en el camino hacia el lado opuesto por el que vuestros hermanos han ido, entonces después de andar un buen tramo, veis a otro superviviente del monasterio, esta luchando contra dos giaks
Picaros a vosotros mismos y a Corvo
Tras lanzar una mirada sorprendida e interrogativa a su compañero, Vonotar apresta con la mano derecha el centro de un largo palo de caminante; mientras la izquierda empuña un escudo de construcción sólida. Y armado de esta complicada y extravagante manera, que sin duda es fruto de algún misterioso entrenamiento del monasterio, el aprendiz da un rodeo al combate con la intención de cargar al Kraan por la espalda.