Los de muy abajo. ¿Será posible? ¿Puede ser que los de muy abajo sean los mismos de muy abajo en la casa Brockford?
Sientes como un escalofrío recorre tu médula hasta el cerebro. Es una sensación que te agobia, como ansiedad. No sabes cómo quitarla de ahí, es... muy desagradable, lo estás pasando mal.
Tratas de disimular para que no se te note, pero seguro que lo tienes escrito en la cara.
Lo siento. 4 puntos de cordura menos.
El oportuno descubrimiento del diario me hace salir de cualquier duda y lo "consumo" con avidez, haciendo incluso que me repitiesen algun que otro pasaje.
Con calma, y ante el silencio generalizado (de hecho todos estamos pensando en lo que hemos encontrado)me tomo mi tiempo para encender una pipa y luego de la primera bocanada digo al grupo:
-Bueno, ahora sí tenemos algunas cosas. Además de lo de los libros, de lo que me gustaría encargarme, hay algunos puntos de interés a investigar... los Mc Allan, su hijo borracho, y el señor Mc Guffin. Lo que aun no puedo ver con claridad es la manera de presentarnos ante los Mc Allan, que puede ser amistosa o no, pero una vez hecho esto ya no podremos cambiarlo.-
Y mirando a Elaine le digo:
-Señorita Gibson ¿Podremos pedir estos libros al Museo y que los envien lo antes posible?-
Elaine, bastante recuperada del shock que le privó por unos momentos de su flema inglesa, dice:
-Sí, pero, aún en correo urgente tardarían no menos de tres o cuatro días. Recuerde que estamos en mitad de Escocia. Aquí no funcionan las cosas como el Londres o Boston. De todos modos, podemos pedirlo, por si nos hiciera falta en ese supuesto día de llegada
Me he acercado a Elaine y le he pasado un brazo por los hombros, tratando de consolarla. Pronto se ha restablecido, sin embargo.
Me levanto, y miro el diario con curiosidad.
Mientras, medito en todo lo que el diario revela. Hay muchas pistas, muchos hilos. Libros, lugares, personas...
Asiento al comentario de Phillip. Y cuando éste saca un cigarrillo, casi lamento no fumar. Así sería más fácil evitar el miedo que me ha asaltado ante lo que se ha dibujado de nuevo en mi mente.
-Quizá lo más lógico sea que nos acerquemos a esos lugares, y quizá valdría la pena empezar por esa granja, la de Paton Mc Guffin, si es quien menos oposición va a ponernos...
yo no me pongo cruz en descubrir? he descubierto que el suelo es de losas en vez de tablas...
Lo que te voy a poner es una cruz en la frente, como sigas utilizando las notas del juego con tanta alevosía.
-Sí, pero, aún en correo urgente tardarían no menos de tres o cuatro días. Recuerde que estamos en mitad de Escocia. Aquí no funcionan las cosas como el Londres o Boston. De todos modos, podemos pedirlo, por si nos hiciera falta en ese supuesto día de llegada.-
-En ese caso pidamoslos YA MISMO y no perdamos mas tiempo. Luego podemos visitar a quienes quieran. Y gracias por recordarme, señorita Gibson, que estoy lejos de mi hogar, en un sitio completamente extraño, tratando de resolver algo que ustedes evidentemente no pueden hacer sin ayuda.-conesto secamente, descargando en la pobre Elaine toda la frustración que siento cada vez que tengo que alejarme de mi casa, de mi tierra y de mis lugares familiares.
... y es que William se aleja tres metros de su casa y ya se cabrea... sin embargo viaja por su curiosidad, aunque le desagarade hasta ese punto. Que le vamos a hacer, de locos esta el mundo lleno.
Phillip se desata la corbata y abre la ventana como si se ahogara o le faltase el aire. Sin embargo sigue fumando como un poseso. Con algo de esfuerzo dice:
¿Y no habrá una biblioteca en este pueblo o los alrededores? al menos para buscar los libros referentes a la historia del condado o de las leyendas de folclore popular...
Luego mira a William, algo impresionado por la reacción, pero demasiado ocupado con pensamientos de habitantes de las profundidades como para decirle algo.
Alzo la mirada del diario hacia William, con los ojos cargados de cierto reproche, pero en seguida me encojo de hombros, porque él es así y no se puede hacer nada para cambiarlo.
En cierto modo a mi no me sorprende, pero claro, soy el que más le conoce. Sin embargo, para el resto, puede llegar a parecerles un tipo demasiado arisco.
Con un leve chasquido de la lengua intento retomar la conversación.
No os olvidéis del menir que se encuentra en la isla del Loch Feinn - añado al comentario de Brenda - Creo que debemos seguir los pasos de Gibson y hacerlo de forma tranquila, sin precipitarnos.
Me vuelvo hacia Elaine - Por lo tanto estoy de acuerdo en solicitar los libros al museo, pues nuestras investigaciones nos llevarán más tiempo que esos tres o cuatro días.
-Si, si. Claro.
Afirmo a la sugerencia de Robert.
-Pues ¿qué os parece si empezamos a hacer una visita a todos esos lugares? No creo que esté muy lejos una cosa de otra, y con el coche podemos empezar a situarnos. ¿Qué lugar de los mencionados en el diario es el que nos queda más cercano...?
-Mientras deciden a dónde ir voy a ir abajo, a ver si el teléfono funciona y pedir los libros.
Elaine utiliza un tono de voz seco, y en las últimas palabras mira fijamente a William, aunque no dice nada más y sale de la habitación para dirigirse abajo.
Phillip parece algo más calmado, mira al grupo y se encoge de hombros en gesto interrogante.
¿Y no sería mejor estudiar el libro de los megalitos de Gran Bretaña antes de ir a ver el menhir? por lo menos para saber que tenemos que buscar en el la roca gigante esa, al fin y al cabo ese libro lo tenemos ya.
Vuelve a colocarse la corbata apretando el nudo y le dice a Elaine.
Perdone, Srta. Gibson, la acompañaré abajo para preguntar si hay alguna biblioteca cercana.
-Antes de ir a algun sitio a la desesperada yo perosonalmente preferiria pasarme por el periodico local, si es que hay uno aqui, y estudiar un poco las noticias de desapariciones de personas para ir cotejando fechas y cosas asi. De paso, tambien podriamos ver si hay algo acerca de las dos familias enfrentadas que nos pueda ser de utilidad. Despues de todo, y hasta donde yo se, nadie nos ha puesto una fecha de tiempo limite o algo asi ¿verdad?-digo tranqulamente y como si la mirada de Elaine jamas hubiera existido (aunque si hubiese sido un tio al pasar con esa mirada probablemente le habria soltado una torta).
Cada cual iba proponiendo sus opciones, pero en realidad, la que más me llama la atención es la de Philip, que sin embargo parece dispuesto a buscar el resto de libros.
De acuerdo - digo finalmente - yo me quedaré aquí esta tarde y leeré el libro de los megalitos hasta la hora de la cena. Es cierto que hay que averiguar qué es lo que le llamó la atención a Gibson sobre ese libro.
Me quedo allí de pie, observando como aquellos que quieran abandonan la habitación. Esperaré a estar solo para comenzar la lectura.
Esta vez le dedicaré tiempo a la lectura, no como en la partida anterior.
Master, ¿buscar libros o ciencias ocultas?
Brenda asiente a los planes de cada uno, se vuelve a su habitación, ordena sus cosas, y se baja a preguntar por algún plano detallado de la zona. Si no lo hay en la casa, verá de que le digan donde adquirirlo.
Cuando lo tenga cogerá el coche, y propondrá a quien quiera acompañarla hacer una pequeña ruta turística por los alrededores del lago. Depende de lo desperdigados que estén los lugares mencionados en el diario hará un itinerario u otro. Si nadie quiere acompañarla, irá sola.
Si por casualidad existe algo parecido a un archivo de prensa o cualquier sitio donde pueda consultar noticias atrasadas, iré alli y rebuscaré en lo que pueda haber.
Por favor, decirme que tiradas van a hacer falta... en caso de que haya algun sitio como el que William busca.
Los investigadores van haciendo sus propios planes, lo cual requerirá la separación en grupos. En principio, Robert decide quedarse en el hotel a leer Megalitos en Gran Bretaña, aunque quizás cambie de opinión al saber que existe una biblioteca en Gregor, donde quizás se pueda encontrar algo más de interés, aparte, claro está, de estudiar con tranquilidad el libro de los megalitos.
Es la señora Mc Kenzie la que le ha dicho a Philip la existencia de la biblioteca. De todos modos, Elaine ya ha llamado al museo, para pedir los libros, y os dice que estarán en Gregor en cuatro o cinco días, según el encargado del asunto en el museo británico. Un contratiempo, pero al menos lo tendréis con seguridad, aunque sea tarde.
William pregunta por un archivo de prensa, o algo parecido, y la señora Mc Kenzie le dice que quizás podría probar en una pequeña editorial del pueblo que publica noticias locales, aunque por lo visto es más bien a nivel aficionado, ya que tiene muy poca tirada.
Brenda pregunta por un plano, pero la señora Mc Kenzie niega con la cabeza. Luego, en tono educado pero seco informa de que no tiene ni la menor idea de dónde puede haber un plano de la zona.
Se abren varios caminos, pero lo cierto es que la investigación ha comenzado y promete ser interesante.
Concretad lo que hacéis cada uno y crearé escenas nuevas para los grupos:
Robert: Estudiar el libro de los megalitos, ¿en el hotel o en la biblioteca?
Philip: ¿Acompañar a Robert o a quien?
William: ¿Periódico local?
Brenda: ¿Dar una vuelta de reconocimiento?
Kassius: ¿Qué vas a hacer?
Cuando hagáis los grupos Elaine escogerá el suyo.
acompaño a Brenda en la vuelta de reconocimiento,escoltandola y esas cosas que se suelen hacer...como reconocerla,por ejemplo
Efectivamente, William ira al periodico local y acordara con el resto que si termina antes de tal hora va a la biblioteca. Si no, se veran directamente en el hotel por la noche.
PD: No pongo la hora porque no se que hora es ahora, pero la idea es que si le da tiempo al terminar, va; y si no se ven en el hotel por la noche
Phillip llama brevemente a la habitación de Robert y abre la puerta asomando la cabeza entre la puerta y el marco.
La señora McKenzie dice que hay una biblioteca en Gregor, tal vez encontremos alguno de los libros que buscamos o algún otro de interés. Creo que me pasaré a preguntar, si alguien se viene mejor, los libros y yo no nos queremos demasiado.
Tuerce la boca y arquea una ceja.
Ahora que lo pienso, es más que probable que el profesor hiciera alguna visita a la biblioteca, puede que allí me puedan decir algo de él.