Partida Rol por web

-Huu!!- digo levantando una ceja...

Observaba la ceremonia desde una esquina, desde casi las sombras. No se puede decidir quién es un líder sin conocerle y sin verle pelear, pero por sus palabras parecía valiente y entregado a su pueblo.

Ingrid decidió mantenerse en silencio, ya que no tenía muy claro que se hacía en esta clase de ceremonias, bueno, más bien, no tenía muy claro cómo comportarse en ellas y se sentía un poco fuera de lugar.

Pelear es más fácil que comportarse delante de la gente.. Piensa mientras ve como los hombres responden al nuevo líder.

Comienzo a observar a todos, analizando la situación... escuchando aquello que decían y conociendo en algunos, sus capacidades.
-Bróðir, ha llegado la hora entonces! Viendo las cosas como estan, creo que lo mas prudente que podriamos hacer en este momento es salir en busca de provisiones. Debemos abandonar nuestra tierra nuevamente, embarcandonos hacia el continente.-

Me acerco a Hildolfr con paso decidido y al llegar a su altura me inclino levemente.

Hildolfr-Jarl, me nave está a tu disposición. Por el Clan, ningún destino es imposible. Sólo dime cuando y hacia donde deseas partir, pues el drakkar ya está preparado.

Sea pues, Hildorf-Jarld, mi espada está a tú servicio. Solo dejame que mande un mensajero con las nuevas al astillero de mi familia y podras disponer de todos los barcos que necesites. Igual que el anterior Jarld dispuso con mi padre.

Aunque sin decir nada, como acostumbro doy un paso hacia delante cogiendo la empuñadura de mi espada evainada, dando a entender que yo también quiero ir.

Pensativo y con una notable alegría Hildolfr rascaba sus barbas.
-Deberiamos analizar nuestros mapas y hablar con Njörd señor de los mares para consultar a donde debemos dirigirnos-

Avancé hasta Hildolfr y puse mi mano no herida en su hombro -Yo iré a preparar mi equipo,dado que iré contigo a la incursion- dije sonriendo mientras me marchaba.

Me dirijo hacia Hildolfr  Y bien Jarl, ¿a donde tiene pensado ir? y susurrandolo practicamente imperceptible para los demas Jarl, hay algo que me tiene muy preocupado, ese maldito pueblo que nos atacó, ¿has pensado en tomar alguna medida?.- digo muy seriamente

Iré contigo, Hildolfr! A cualquier parte de Midgard, mientras haya cerveza y un buen combate!!

Ok, puedes tener mapas en casa si lo deseas. En cuanto al equipo, mientras no sean cosas extraordinarias (no se, un huevo de dragón) no pasa nada. Lo del escudo, arreglatelas como puedas. Yo solo te digo una cosa: "herrero".

Ya me parecía que estabas muy callado, viejo Olaf.

Sonrio afablemente ante el comentario, recordando las viejas historias de Olaf y sus juergas.

Como ibas ha perderte una incursión? Si es tu pasatiempo favorito...

- Si vas a por provisiones cuenta conmigo. Puedo rastrear osos con dias de diferencia y acertarle las flechas en un ojo en mitad de una tormenta.

-Ven aqui amigo-dice mientras lleva una de sus manos hacia abajo, esperando la respuesta de su fiel amigo Waglif.

El lobo que se encontraba tirado en la nieve da un salto rápidamente para encontrar su cabeza con la mano de su amo, moviendo su cuello y rosando su cabeza contra la mano de Hildolfr.

Mientras acaricia con mucho cariño a Waglif observa a Spaki.
-Si, a todos nos tiene preocupado eso... emprendamos el viaje y hablaremos sobre esto- Observa a Oled, se acerca a el pone una de sus manos en su hombro.

Miro al lobo con confianza, seguidamente me arrodillo delante de él y le ofresco la mano para que me huela. Lo miro a los ojos, sin miedo ni temor.

Me llamo Brynhild, espero poder ser tambien tu amiga ya que viajaremos juntos, fiel Waglif.

Yo estoy listo para cuando queráis partir, cojo unas cosas del taller y arreando.

El herrero permanecía por allí para ver si se aclaraba el momento de partida y el destino. Mientras tanto, para distraerse, hacía pequeños agujeros con su espada en la tierra del suelo.