Partida Rol por web

Es la primera vez que el doctor ve el objeto que encontrase Boone en la selva días atrás. Inmediatamente después de llegar, los tres hombres que os acompañan, expertos en el mundo de la construcción, se ponen a examinar la puerta. Hurley siente un desagradable estremecimiento nada más ver la escotilla, como si bajo ella se escondiera algo misterioso y peligroso que no debería salir a la luz.

-Es curioso -dice uno de los hombres-. No hay bisagras, ni manivelas, ni nada por el estilo. Es como si los que lo construyeron no quisieran que se abriese desde fuera. Primero tenemos que asegurarnos bien de cuáles son sus dimensiones y para eso tendremos que excavar alrededor. Hay que traer troncos y madera para que el futuro hoyo aguante y no se derrumbe con nosotros dentro.

-De acuerdo... deberíamos intentar ingeniar alguna especie de palas con troncos también, si no nos quedaremos con las manos en carne viva- no me sorprende demasiado la primera información que nos dan dado que ya lo habíamos deducido nosotros sin ser ingenieros, pero la idea de excavar no parece mala del todo así que dejo la mochila a un lado y tras mirar a Hurley y Jack, el cual probablemente esté algo más impresionado con lo visto, me pongo manos a la obra para buscar troncos suficientemente resistentes.

La visión de esa enigmática escotilla enterrada en la tierra, me recuerda mis últimos descubrimientos en mi primera exploración en la montaña. Después logro recordar algo que quizás pueda ser útil.

Chicos, tengo en esta mochila una pistola Luger alemana. Sé poco sobre armas, pero tengo entendido que esta pistola y su munición es bastante perforante. Tal vez podamos disparar a ese cristal para intentar hacer palanca después, o disparar contra esas gruesas bisagras... puede que salten echas pedazos. ¿Qué decís?

De nuevo en la escotilla...A Jack se le ocurre una idea, pero...
No se tio, pero si es un bunker...¿no crees que tendrá el cristal antibala como poco? Imagina que rebota la bala y te da en la cabeza. Si muere el médico, estamos apañados- digo acordandome de tantas peliculas de zombies y guerra, donde el que no puede morir es siempre el medico o enfermero.

-Hurley tiene razón, lo más probable es que sté todo blindado porque ya intentamos darle varios golpes y ni se ha arañado... Pero supongo que un disparo será mucho más contundente, quizá valga la pena probarlo- miro de reojo a Hurley reflexionando sobre su precaución y después a Jack, al cual acabo por acercarme.

-Lo haré yo, si la bala rebota esperemos que puedas extraerla- extiendo la mano hacia él, no pienso arrebatarle el arma -Tranquilo, no voy a quedármela- aclaro dado que se ha mostrado siempre tan precavido respecto a quién pude manejarlas y quién no. Yo no soy una buena opción, nunca las he usado, ¿y él...?

El comentario de Hurley parece de lo más sensato, y aunque Boone se ofrece a ejecutar el plan, no me gustaría cargar con la responsabilidad de un herido, o quizá un muerto, por culpa de una idea estúpida.

No sé Boone, no es que no quiera dártela, pero no me gustaría que te hicieras daño por mi culpa. Será mejor que lo haga yo... alejaos, voy a disparar.

Intento buscar un ángulo con la pistola en dirección al cristal de la escotilla de forma que, si va a salir rebotada, describa una "V" en su trayectoria desde el arma hasta el posible rebote.

Boone y Hurley se apartan cuando Jack saca la Luger de su mochila. El doctor se pone a una distancia prudencial y apunta cuidadosamente al cristal de la escotilla. Aprieta el gatillo y la detonación sacude los alrededores. La bala impacta contra el objetivo y sale rebotada contra un árbol. Os acercais a ver los efectos y desanimados comprobais que ni se ha arañado.

Entonces escuchais algo en la selva, suena como un grito lejano.

Levanto las manos a modo de rendición y accedo a la petición de Jack. No me parece lo más razonable pero es él quien decide así que nos limitamos a esperar... hasta que se ejecuta el disparo.

-Ni un rasguño, es increíble... Debe de ser el mejor cristal blindado del mundo- que yo sepa un balazo debería ser capaz de al menos resquebrajarlo un poco pero este debe de ser casi igual de grueso que una pared de hormigón... o vete a saber.

-¿Habéis oído eso?- pregunto girándome repentinamente en la dirección de la cuál procede el grito, lo cual resulta bastante difícil de precisar en realidad.

Tras comprobar que tenia razón en cuanto a la dureza del cristal, lo cual dibuja una pequeña sonrisilla en mi cara, del estilo "te lo dije", un grito me sobresalta, e instintivamente intento saber de donde proviene.

Parece que los gritos provienen de algún punto de la jungla cerca de vosotros. Por el mismo lugar en que las otras tres personas se fueron a buscar maderas para construir el andamiaje de la excavación.

Tio, eso ha sonado cerca...¿qué pensais que puede ser?- pregunto sin estar seguro de querer saber la respuesta.

No sé que habrá sido eso, pero últimamente esta isla me ha sorprendido varias veces, y no de una forma muy grata. Tomad estas pistolas, pero no las useis a no ser que sea estrictamente necesario... Lo mejor será echar un vistazo.

Tiendo la Luger a Hurley, mientras saca dos nuevas armas de mi mochila, una para Boone y otra para mí, al tiempo que comienzo a avanzar en dirección a donde provienen los gritos.

Asombrado por el gesto, cojo la pistola, con mucho respeto. No soy muy de llevar armas, y mucho menos de usarlas. Un poco nervioso le pregunto:
Tio...¿y esto como va?¿solo debo apretar le gatillo?...me da un poco de repelús...

-¿Las llevabas encima?- pregunto un tanto sorprendido mientras recibo la pistola. Pesa más de lo que esperaba pero supongo que seré capaz de usarla... o al menos eso espero.

-Dispara sólo si estás seguro- le digo a Hurley dándole unas palmaditas de ánimo en su ancho brazo. Después me pongo un dedo sobre los labios para indicarle que será mejor que intentemos permanecer callados mientras nos dirigimos para allá dado que como bien ha indicado Jack no sabemos lo que podemos encontrarnos y ya nos hemos topado con demasiados enemigos... así que habrá que intentar ser precavidos.

Jack abre la marcha seguido por Boone y Hurley. Apenas lleváis diez minutos cuando empezáis a escuchar gruñidos y gritos humanos. De pronto, frente a vosotros, encontráis uno de esos extraños árboles con las raices en forma de jaula. Dos de los supervivientes se han metido dentro huyendo de lo que parecer ser un oso polar. El tercero está tendido en el suelo, cerca del animal, con el cuerpo ensangrentado e inmóvil.

Nada mas ver al oso, detengo en seco mi marcha.
Joder...-se me escapa la expresión, aunque retengo cualquier otro sonido que pueda emitir.
Poco a poco empiezo a dar pasos hacia atrás, pero sin volverme ni hacer ruido...procurando no llamar la atención del oso.
Dios, como me vea viene hacia a mi, debo ser un banquete con patas para ese osaco...

Mi reacción no es demasiado distinta a la de Hurley en un principio. Me paro en seco y me quedo mirando al oso con ojos desencajados. Si fuera uno normal ya sería extraño, dado que son animales de bosque y no se selva, ¡pero encima parece polar! Eso debería ser directamente imposible... y sin embargo ahí está, frente a nosotros. ¿Verdaderamente esta isla obedece a los límites de la coherencia? Cada vez tengo más dudas.

-Está mosqueado... quizá si nos subimos a un árbol podamos dispararle sin que nos alcance hasta abatirlo- propongo con poca convicción, pero es lo único que se me ocurre. Espero por si Jack o Hurley proponen algo mejor pero está claro que el tiempo apremia, en cualquier momento puede alcanzar a nuestros compañeros o sencillamente dirigirse hacia nosotros.

Un oso polar... el cupo de cosas extrañas en tan pocos días ya se había llenado. Ciertamente no tiene ninguna lógica, pero la vida de esos dos hombres es algo perentorio. La idea de Boone parece sin duda la más acertada, pero no me imagino a Hurley trepando ágilmente por un árbol por lo que no me gustaría verlo morir atrapado en las fauces del oso por una mala decisión de grupo.

Creo que no hay tiempo de subir a un árbol, chicos, abrid fuego.

Disparo todo lo que pueda a ese maldito oso.

-Jo.... joder- mascullo claramente asustado ante la decisión de Jack, pero no hay vuelta atrás porque abre fuego y el animal vendrá hacia nosotros seguro así que levanto el arma intentando apuntar lo mejor posible y también abro fuego.

Supongo y espero que entre los tres impactemos lo suficiente como para tumbarlo o que simplemente se largue...

Boone y Jack levantan las pistolas y disparan sobre el oso polar. Las balas silban alrededor del oso levantando tierra del suelo o haciendo saltar trozos del árbol. Escuchais unos gritos de sorpresa provenientes del interior de la jaula vegetal. El animal cesa en su empeño de intentar alcanzar a los hombres escondidos dentro del árbol y se gira hacia vosotros antes de cargar hacia adelante.