Partida Rol por web

Más allá de las frías y brumosas montañas

Escena 0: Un breve descanso IV

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12/06/2022, 23:59
Narrador

Cuando estáis los seis en la mesa, os ponéis a comer y a beber con bastantes ganas. Después de lo pasado en las últimas semanas, tener una comida tranquila se antoja algo bastante inusual. Aunque el día anterior estuvisteis de fiesta, no era una comida tranquila, dada la multitud de gente que había. Después de comer, algunos elfos os deleitan con música.

Os sentáis a un lado y observáis como una elfa de una belleza sin parangón canta una preciosa canción acerca de las tierras de allende los mares. Unas tierras eternas, imperecederas, más allá del vasto océano. Os quedáis extasiados, paralizados ante la sublime actuación, y os veis transportados hasta tierras ignotas y playas desiertas...

Notas de juego

Estáis juntos. Podéis hacer varios post y hablar entre vosotros. Podéis decidir qué hacer a continuación.

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13/06/2022, 06:35
Tatharina

Tatharina y Gláin llegan al nuevo comedor charlando animadamente de la cara que pondría Elrond si descubriera una quemadura de pipa en uno de sus lujosos sillones y de como en este lugar, pese a ser tan antiguo, parecía todo nuevo, casi como si no le dieran uso.

La joven se alegró de volver a reunirse con el resto y empezó a comer con voracidad. Cuando su estómago estuvo lleno, su mirada se ensombreció ligeramente. ¿Realmente merecía tantas atenciones? ¿Qué había hecho ella para ganarse tanto manjar? Por suerte, esos sentimientos negativos se disiparon en el momento que la espectacular elfa comenzó a cantar. La beórnida siempre había apreciado la música, pues consideraba que era capaz de sanar aquello que sus ungüentos no conseguían calmar. Esta actuación, sin embargo, era algo de otro mundo. No pudo sino mantener la boca abierta a la vez que una lágrima recorría su mejilla izquierda. - Debo conocerla. Se dijo a sí misma.

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14/06/2022, 18:12
Tolman Pulgarverde

Tolman bajó alegre y descansado las escaleras, pues se habían sucedido demasiadas cosas y con aún más tensión de la que casi cualquier hobbit en su plácida vida podría soportar, pero todo eso a Tolman le daba igual, siempre estaba alegre, trasteando y divirtiéndose.

Por detrás suyo iba Lily, la cual le había visto ya despierto en la habitación, y la que le había arrastrado ahí abajo... pues el explorador estaba distraído con uno de los objetos de la habitación.

Según estaba llegando a la estancia, pudo ver a lo lejos a Thatarina, la cuál le trató tan bien tras aquel encuentro fortuito con el cofre... si no llega a estar ella aún podría seguir mareado, y cerca de ella podía ver a Gláin, el cual parecía algo más distraído que la beórnida.

Tom levantó la mano en alto y la agitó a modo de saludo.

- ¡Buenos días compañeros! - gritó con entusiasmo mientras que se aproximaba a la mesa en la que le esperaba un estupendo desayuno muy completo... casi como el que se preparaba él en su hogar.

Frenó junto a la mesa, bien surtida y repararse de la música se puso a desayunar algunos de los mejores manjares que hacía tiempo que no tenía oportunidad de probar.

Mientras tanto, miraba a un lado y a otro, y con entusiasmo preguntó.

- ¿Y Gaphinnfff? - dijo aún con la boca llena - Ephe phindarr - escupió algo - no le phufta mapfugaff.

Siguió con su desayuno sin esperar una respuesta más clara que su pregunta.

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15/06/2022, 01:19
Gláin

Aquel lugar invitaba de tal forma al reposo y a la calma que, a pesar de las pocas horas que había dormido en la cama, Gláin se había levantado lo suficientemente descansado, y con hambre, para meterse un buen desayuno. Charlando animadamente con Tatharina, ambos llegaron al comedor mientras el enano sentía cómo sus tripas rugían cada vez más fuerte; solo esperaba que la comida no tuviera un exceso de... verde.

Pero no quedó decepcionado de la espléndida y abarrotada mesa que los estaba esperando. Tal maravilla merecía toda su atención y, mientras quedaba embobado observando la comida, escuchó el saludo que lo sacó de su ensoñación.

Buenos días... Buenos días... —dijo, devolviendo el saludo a Toman a la vez que se sentaba a la mesa.

Aún no estaban todos pero Gláin, ante aquellos manjares y sintiendo cada vez más hambre, comenzó a servirse de todo un poco mientras observaba de reojo y con una sonrisa en los labios el buen apetito de la beórnida. Pero esa observación solo duró unos segundos, los necesarios antes de enfrascarse por completo en su plato de comida. Solo levantó la mirada cuando escuchó a Tolman farfullar algo que no entendió. Sin dejar de masticar, enarcó una de sus pobladas cejas mirándolo un instante esperando que repitiera sus palabras; al no recibir ninguna aclaración, Gláin se dedicó a seguir disfrutando de la comida hasta que se sintió completamente lleno.

Se repantigó en su silla y encendió su pipa, preparándose para disfrutar de la música que los elfos habían empezado a tocar. Pero fue la voz de una hermosa elfa lo que hizo que Gláin se olvidara hasta de chupar su pipa. Lo dejó extasiado, emocionado, casi a punto de que las lágrimas se escaparan de sus ojos. Era la voz, pero también la historia que contaba lo que conmovía al enano y, cerrando los ojos para disfrutar aún más de aquella bella canción, se dejó arrastrar a parajes que ni en sueños habría podido imaginar.

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15/06/2022, 04:40
Gallind

Ingresando por una puerta lateral que daba paso al jardín Gallind llegó hasta el salón donde manjares habían sido servidos. Gracias al paseo relajante que acaban de hacer, estaba ahora algo más tranquilo de las inquietudes que le habían atormentado durante la noche. Hizo un ademán gentil y caballeresco para que su compañera Rilwen pudiese pasar. - Adelante, creo que somos los últimos en llegar. Seguro nos esperan - E ingresó detrás de su amiga saludando con la mano en alto a todos sus amigos. 

Al llegar hasta su nariz los bellos aromas de la comida se sintió hambriento y buscó cerca de sus compañeros una silla para acompañarles. - Veo que todos ya están aquí. ¿Cómo habéis pasado la noche? - Preguntó curioso el elfo. De Tolman solo salían incoherencias inentendibles y de los demás algunos jocosos comentarios. Gallind como buen elfo comió con mesura pero en abundancia. Había algo demasiado difícil de negar, el sabor de la comida era irresistible.

Una vez habiendo comido bien, fueron sus oídos deleitados con la música propia de su pueblo que tanto podía oir en la lejanía cuando acampaba en las noches del campo. Los relatos de la bella elfa recordaron a Gallind las cosas que más allá del mar le esperaban y soltó una lagrima pesada, imperceptible. - ¡Qué hermoso es todo esto!¿Y cuánto tiempo me quedará de este lado?

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15/06/2022, 14:07
Rilwen

Al parecer se había despistado y entretenido más de la cuenta, y fueron de los últimos en llegar.

-¡Buenos días amigos! Espero que hayáis descansado bien.- Escucho conversaciones y a sus compañeros de aventuras. No estaba aquella mañana muy habladora, ni quería pensar en nada en aquellos momentos, más allá del desayuno y de tener unos días de descanso. Ya habría tiempo, para que comenzasen a planificar que harían a continuación y ha buscar la forma de poder cumplir con los diferentes cosas que tendrían que hacer cada uno. Tenían que poder compaginar sus obligaciones personales y el trabajo de grupo. Para no romper aquel grupo de amigos, de buenos amigos, que habían formado.

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16/06/2022, 14:08
Lily Pulgarverde

Era agradable volver a verlos a todos allí juntos, comiendo tranquilamente en aquel lugar tan bonito. Habían pasado muchas vicisitudes desagradables para llegar a este momento. Pero yo no tengo mucho apetito, lo cual ya es preocupante teniendo en cuenta lo anterior. Por supuesto que no pierdo la oportunidad de dar cuenta de un buen desayuno, aunque no lo hago con las ganas que me caracterizan. Permanezco pensativa dando mordiscos pequeños de tiempo en tiempo mientras balanceo los pies desnudos que me cuelgan de la silla. Aún masticando un bocado bajo de un salto y me acerco a Tatharina para compartir con ella mis preocupaciones, a ver si regresa el apetito con un poco de desahogo:

- Necesito tu ayuda, Tatharina. Si no me ayudas puede que muera de hambre - me hago un poco la melodramática para llamar su atención.- A penas he dormido por culpa de la curiosidad. No vas a creerlo pero donde nos hemos alojado encontramos una mandolina que perteneció a nuestro padre, el que murió cunado éramos unos niños- jamás nos contó madre que padre hubiese estado aquí, ¿puedes creerlo, una hobbit guardándose tal secreto hasta de sus hijos?¿no te parece extraño? Y para colmo voy y me entero de que Gallind también nos oculta un secreto que puede ser muy importante para él, y peligroso. Estoy muy disgustada a causa de saber  que haya tantos secretos en este lugar... que tengan tanto que ver con personas en las que he confiado tanto. ¿crees que soy una boba por sentirme así? no quiero ser descortés con Gallind, ya sabes, es un elfo... Ayúdame con ésto, tú tienes más tacto que yo y no quiero que me tome por una curiosa metomentodo... aunque lo cierto es que puede que sea un poco curiosa metomentodo. Pero Tatharina, era mi padre y estuvo aquí y Gallind no me ha dicho nada, él debe saber. ¿lo ves?, de repente Gallind es un cofre de secretos. Anda, por favor, habla con él a ver qué te dice a ti. Si no me lo ha contado a mí o a mi hermano debe ser por algo, ¿no crees?

Espero que Tatharina me ayude, es mi mejor amiga, seguro que ella sabe como hacer que Gallind nos cuente lo que oculta sin hacer que se enoje con nosotras.

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16/06/2022, 22:17
Narrador

La bella y grácil elfa terminó de cantar y el silencio que vino después os sacó a todos de vuestro letargo. Os habíais alejado mentalmente de la estancia, de Rivendel, incluso de Eriador, para soñar con maravillosas tierras lejanas. Muchos de vosotros os disteis cuenta de que algunas lágrimas habían corrido por vuestras mejillas, lágrimas de felicidad, no de melancolía o tristeza. Nunca habíais sentido o visto una cosa así en vuestra vida, a excepción de Gallind y Rilwen, y tal vez nunca más lo volveríais a ver y sentir. Vuestro corazón latía alegremente, tranquilo, lleno de paz y amor.

La elfa se acercó a vosotros y se presentó como Arwen, la Estrella de la Tarde, hija del señor de Rivendel, Elrond. Su belleza no tenía parangón entre los elfos, ni qué decir entre las demás razas de La Tierra Media. Su sonrisa era cálida, amable y sus ojos rezumaban bondad y sabiduría. Os indicó que la siguierais y así lo hicisteis, embobados, hacia una estancia aledaña donde había varios cómodos sillones y sillas. En una de ellas estaba sentado Elrond, uno de los grandes señores del Oeste. Os quedasteis en la entrada y Arwen se deslizó hacia donde estaba su padre, sentándose a su lado. Después os hizo un gesto para que entrarais y os distribuyerais por los asientos.

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16/06/2022, 22:17
Elrond

Ataviado con una lujosa ropa y pertrechado con diversas joyas, el noble semielfo tomaba una infusión aromática.

-"Tomad asiento, por favor. Espero que hayáis descansado bien y hayáis recuperado fuerzas." Os dijo con voz tranquila.

Varios elfos aparecieron de repente, trayendo bandejas que portaban infusiones, frutas silvestres y licores. Las dejaron encima de mesitas que había distribuidas entre los asientos y volvieron a desaparecer.

-"Mi hija Arwen nos ha honrado con su presencia y nos ha deleitado con una magnífica canción. Quería daros las gracias de alguna manera, por haber traído ese antiguo mapa que encontrasteis. Espero que os haya gustado, tiene una voz celestial." Vuelve a deciros, mirando a cada uno de vosotros.

-"Quería deciros que podéis pasar el tiempo que necesitéis aquí. He ordenado que os preparen ropas limpias y dispongan de todo lo que hiciera falta en vuestros aposentos. ¿Necesitáis algo en concreto?" Os pregunta suspicaz.

Notas de juego

Rivendel, 2951 de la Tercera Edad. Es verano y el tiempo es agradable. Es por la mañana.

Gallind recibe 1 PX por postear y tiene un total de 1673 PX.

Gláin gana 1 PX por postear y tiene un total de 1421 PX.

Lily gana 1 PX por postear y tiene un total de 1480 PX.

Rilwen gana 1 PX por postear y tiene un total de 1696 PX.

Tatharina gana 1 PX por postear y tiene un total de 1323 PX.

Tolman gana 1 PX por postear y tiene un total de 1465 PX.

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17/06/2022, 07:20
Tatharina

Antes de seguir a Arwen, asiento sutilmente a la petición de mi amiga. - No debes desconfiar de Gallind, si sabia algo de tu padre y no te lo ha dicho seguramente fuera para protegerte. De todas maneras intentaré hablar con el en privado y, si sabe algo, persuadirle para que os lo explique. Le dedicó una sonrisa afectuosa y le susurro al oido. - Y estáte tranquila, aunque seas una curiosa metomentodo te queremos igual.

Ya una vez en presencia de Elrond, Tatharina se encuentra maravillada por la hospitalidad de estas gentes. Pega un sorbito a la infusión de hierbas que amablemente le habían traído. Es capaz de reconocer en ella hinojo y jengibre, pero hay algo más que no sabe que es, lo cual le molesta un poco.

Cuando Elrond les pregunta por sus necesidades, la joven ve la oportunidad que estaba esperando. Se aclara un poco la garganta para atraer la atención hacia ella y expone: - Mi señor Elrond, no querría abusar de su generosidad, pues ya ha superado con creces la que creo merecer. Sin embargo, hace años que una duda ronda por mi mente y podría ser posible hallar una respuesta aquí. Hizo una breve pausa, buscando en sus adentros la templanza necesaria para hablar de su herida sin que le temblara la voz. Con una mirada resuelta prosiguió: - Mis padres biológicos huyeron de la foresta del Monte Negro y eso les llevo a la muerte, pero nunca nadie ha sabido decirme de que huían. ¿Sería posible consultar los, sin duda extensos, archivos de vuestra mansión para intentar dar respuesta a la curiosidad de esta huérfana? Quedo esperando una respuesta, pero ella ya se sentía sorprendentemente aliviada de haber compartido su dolor con el resto de sus compañeros.

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17/06/2022, 17:15
Rilwen

Escuchar a Arwen siempre era un placer, la bella y dulce hija de Elrond era una excelente cantante, con el poder de trasportarte a los lugares de los que hablaban sus bellas melodías. Luego la acompañaron y fueron a ver a Elrond, el señor de Rivendel.

Por el camino escucho a Tatharina y les dijo, a ella y a Lily. -Lily Gallind es tu amigo, tal vez no se diese cuenta de que conocía a tu padre. O tal vez tiene algún motivo por el que no te ha hablado de el hasta ahora. Pero todos debemos seguir confiando en nuestros amigos, al menos yo lo hago.-

Luego tras las palabras de Elrond, se dio cuenta de que a ella le gustaría quedarse allí más tiempo, pero no sabía hasta cuando podría demorar la urgente devolución a su dueña de aquel colgante, que sin darse cuenta tenía en sus manos. Las promesas son para ser cumplidas. Y esta hacía ya tiempo que debería haberla cumplido. Aunque no le gustase la idea de separarse del resto, ella tendría que ir a Lorien.

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18/06/2022, 21:19
Tolman Pulgarverde

Al ver a Lily acercarse a Thatarina tan de cerca, Tolman puso un poco la oreja mientras que no perdía bocado. Escuchó algunos fragmentos, y cuando le pareció escuchar que Gallind nos ocultaba cosas...

- Cof cof ccooooofff - Tolman tosió mientras se medio atragantaba al escuchar lo que decía Lily.

No se creía lo que escuchaba de su hermana, Gallind era un sindar y a sus ojos un buen compañero... de ahí a estar engañándoles.

- No sé Lily. Antes de tensar el arco deberíamos de preguntarle. ¿No crees? - se metió en la conversación sin querer - No estamos seguros de que ese laúd fuese de nuestro padre, aunque estaba seguro que sí masculló - Luego le preguntamos.

No le dio tiempo a decir nada más, para cuando vio a Elrond aparecer. Toda su atención se presto ante él, pues parecía llenar toda la sala con su presencia. Con un simple gesto del elfo, aparecieron aún más bandejas de desayuno... parecía que Tolman hoy iba ha hacer las ocho comidas a las que estaba acostumbrado en una sola.

Al escuchar que mencionaba el mapa por el cual el explorador no tenía ni idea de qué significaba, a Tom se le nublaron los sentidos y solo existían él y su mente. "¿Sabrá que quiere decir? ¿Qué indica? ¿Habrá reliquias escondidas en esas ubicaciones?" esas y muchas más preguntas se le sobrevenían a la cabeza.

Al ver que había acabado de hablar Tolman se impacientó un poco dejando de lado el tema de su padre y Gallind.

- Entonces... ¿Sabes qué significa el mapa? ¿Y esos símbolos? ¿De qué son? ¿Qué representan? - comenzó la furia incontrolada de preguntas atropellando unas a otras hasta el momento que le dio la impresión de que estaba siendo descortés - Bueno... sí perdona. Su hija ha estado estupenda, casi podía hipnotizar con su voz a los aquí presentes... y que no estamos acostumbrados a estos bellos cantares. -se sonrojó mientras acababa la frase y pensaba en que no la había prestado demasiada atención y quizá podía haber desperdiciado una de las pocas oportunidades que quizá podría haber tenido de escuchar atentamente del canto de una elfa.

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19/06/2022, 07:36
Gallind

Luego de salir del ensimismamiento propio del canto de Arwen fue conducido junto con el resto de sus compañeros hasta los aposentos donde se encontraba Elrond. 

Tomó asiento y se acomodó sobre uno de los agradables sillones de la estancia. - Gracias - Dijo luego de que trajeran las infusiones con ese aroma tan propio y tan particular. Hizo un amago a levantarse mientras se llevaba la mano a la solapa de su saco pero Tatharina se le adelantó. No pudo sino guardar silencio y esperar su momento. Parecía que la beornida tenía mayores razones para hablar. Mientras tanto él sostendría con sus dedos índice y pulgar la carta que desde aquél túmulo trajeran. 

Por su parte Tolman no tenía la misma paciencia por lo que disparó sus dudas. Gallind lo miró de reojo con reprobación, sin embargo no había nada que le divirtiera más que el caótico y poco solemne comportamiento de Tolman. En su fuero interno la actitud del hobbit le parecía la mar de chistosa. A él, como buen bardo, siempre le había aburrido un poco tanta pomposidad. 

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19/06/2022, 17:07
Gláin

La voz de aquella elfa era comparable a la belleza de su rostro y a la elegancia en su porte. La hija de Elrond había conseguido que el corazón de Gláin vibrara de emoción. Parecía que, durante todo el tiempo que había sonado la canción, ningún mal podría afectarles ni nada feo podía existir en la tierra. Un sentimiento que aún perduró cuando la voz de Arwen se apagó y que solo desaparecería con el pasar de las horas.

Tan embelesado había estado, primero con la comida y después con la música, que no había prestado atención a lo que Lily le había pedido a Tatharina; consideraba que no era de su incumbencia y, en el caso de que alguna de ellas necesitaran su ayuda, estaba convencido que no tendrían problemas en ir a buscarlo. Así que, con el corazón henchido de felicidad y calma, Gláin siguió a la elfa hasta la estancia en la que su padre, Elrond, los estaba esperando. Fue el último en entrar y, tras saludar con una leve pero respetuosa inclinación de cabeza, se acomodó en uno de los asientos para disfrutar de un delicioso y digestivo licor elaborado con hierbas.

Quedarse en aquel agradable y tranquilo lugar... Sería una tentación para cualquiera, y en su caso una buena oportunidad de renovar el comercio con los elfos; pero Gláin no pudo evitar también pensar en su madre y en toda la ira y el rencor que albergaba en su alma.

Mi señor Elrond... —dijo el enano cuando todos sus compañeros parecían no tener nada más que añadir—. Os agradezco enormemente vuestra hospitalidad y, si fuera posible, me gustaría curiosear por la fragua.

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20/06/2022, 00:09
Elrond

La cara de Elrond era seria, noble, pero amable y sincera. Sus ojos rezumaban sabiduría a raudales, dado que el medioelfo había vivido varias edades del hombre. Parecía conocer todo, aunque por desgracia no era así. Prudente y atento, escuchó vuestras respuestas. La primera en hablar fue la beórnida y a ella fue la primera a la que respondió.

-"Me temo que casi todos los archivos son de difícil comprensión para una joven humana, además de ser muy extensos, como bien dices. Tardarías una vida en encontrar lo que buscas, si es que está escrito en esos legajos. Pero no te preocupes, mandaré llamar a Farlan, el bibliotecario, para ver si puede ayudarte. Solo espero que lo que encuentres no te condicione para el resto de tu vida." Dijo en tono amable.

Ante las atropelladas preguntas del mediano, sonrió abiertamente, cosa que hacía poco, ya que solía cargar sobre sus hombros el peso de muchas cosas. Observó a ambos hermanos detenidamente, asintiendo para sí.

-"Veo que no estuviste atento ayer, pequeño hobbit. Ese viejo mapa muestra viejos refugios que usaban antaño los enanos y los elfos para cruzar las tierras de Rhovanion sin ser detectados por la Sombra. Los marcados con hojas de mallorn son refugios élficos y los marcados con martillos son refugios enaniles. Como dije, el mapa será de gran utilidad para todas las gentes que salgan de viaje, y puede ayudar en la lucha contra el Nigromante." Respondió despacio.

Miro a su hija, a su lado sentada, y asintió.

-"Sí, Arwen tiene un don y sabe usarlo, desde luego. Su voz es reconocida por todos." Sonrió a su hija.

Seguidamente respondió a Gláin.

-"Por supuesto, maese enano. Tiene permiso para visitar la fragua cuando quiera. Allí podrá ver a nuestros maestros forjadores en acción." Le dijo amablemente.

Miró a Gallind y a Rilwen, y les habló:

-"Os veo a ambos sumidos en largos pensamientos. ¿Qué os preocupa? ¿Puedo ayudaros en algo?" Os dice a ambos.

Arwen está atenta a toda la conversación, mirando a los presentes con unos ojos que parecen dos rubíes. Su larga melena morena le cae por un lado, con pequeños tirabuzones. Parece que quiere intervenir en algún momento, pero se abstiene por el momento.

Notas de juego

Tolman, lo que preguntas del mapa, viene en la escena de Introducción.


Rivendel, 2951 de la Tercera Edad. Es verano y el tiempo es agradable. Es por la mañana.

Gallind recibe 1 PX por postear y tiene un total de 1674 PX.

Gláin gana 1 PX por postear y tiene un total de 1422 PX.

Lily gana 0 PX por no postear y tiene un total de 1480 PX.

Rilwen gana 1 PX por postear y tiene un total de 1697 PX.

Tatharina gana 1 PX por postear y tiene un total de 1324 PX.

Tolman gana 1 PX por postear y tiene un total de 1466 PX.

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20/06/2022, 07:59
Tatharina

Conforme con la respuesta recibida, respondió brevemente: - Muchas gracias, mi señor, intentaré no entretener demasiado a vuestro bibliotecario. Se sentía un poco avergonzada de haber sido la primera en hablar de sus preocupaciones cuando el motivo de su visita era otro, uno de carácter más oficial. Había sido inapropiado por su parte o, al menos, eso opinaba Tatharina. Además, que había querido decir Elrond con eso de condicionarle el resto de su vida. Estaba segura de que el medioelfo no lo había dicho por decir. ¿Qué sabía ya él que ella todavía desconocía? Un escalofrío le recorrió el espinazo solo de pensarlo, pero algo estaba claro, debía reunirse con Farlan.

El resto de la reunión permaneció cordialmente silenciosa, atenta a las peticiones y asuntos de sus demás compañeros. Se fijó especialmente en Gallind, parecía inusualmente impaciente, casi nervioso. ¿Tan pesado era el peso que Gandalf había depositado en sus hombros?

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20/06/2022, 14:08
Rilwen

En verdad que Rilwen estaba profundamente sumida en sus pensamientos. Trataba de estar pendiente de lo que allí se hablaba, pero su mente estaba muy lejos en Lorien.

Las palabras de Elrond, la sacaron bruscamente de su ensimismamiento. -Muchas gracias por tu amabilidad y hospitalidad Elrond, te estoy profundamente agradecida, y en deuda. Hace tiempo que le hice una promesa a una amiga.- Dice mientras coge en su mano el colgante que lleva en el cuello. -Creo que es necesario que cumpla con esa promesa y vaya hasta Lorien a devolverle lo que es suyo. Es mi obligación, las promesas son para ser cumplidas. Pero me apena tener que marchar pronto de Rivendel, y tener que separarme de estos, a los que considero mis amigos.- Dice mientras mira a los compañeros de aventuras. 

Contar las cosas, liberaba de cargas, y aunque apenada y triste, se sentía mucho mejor. Una vez cumplida su promesa y devuelto el colgante a su legítima propietaria, podría buscar a sus amigos y unirse a ellos en lo que estuviesen haciendo. 

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20/06/2022, 21:20
Lily Pulgarverde

Sentada en la silla contemplo las exposiciones de mis amigos con los brazos cruzados y la nariz arrugada. No es algo que me agrade tener que esperar. La respuesta de mi amiga no me ha tranquilizado, no desconfío de ninguno de mis amigos, pero mi paciencia es fácil de colmar. En general, tener que esperar me desespera. Aunque intento concentrarme en la belleza que me rodea para encontrar algo de sosiego, como no tengo ni un carboncillo con el dibujar unos bocetos al final sólo consigo ponerme más nerviosa. Comienzo a tamborilear sobre la mesa con mis dedos, después a juguetear con un par de uvas, hasta que finalmente levanto la barbilla y echo el cabello de mi flequillo a un lado. No sé cómo no he caído antes en algo tan obvio como que Elrond seguro que sabe si mi padre estuvo aquí en el pasado. Cuando se hace un pequeño silencio levanto la mano con el dedo extendido para que Elrond repare en mí.

- Mi señor Elrond, tengo para usted una pregunta que no me deja descansar de su amable hospitalidad. Así que creo que lo mejor es preguntarle a usted, cuya edad y sabiduría son legendarias. En la habitación que tan amablemente han preparado para alojarnos había una mandolina allí abandonada. No parecía un objeto propio de los elfos, por eso llamó la atención de mi hermano y la mía. Iré a a la cuestión sin más rodeos:¿sabe usted a quien pertenecía esa mandolina y cómo llegó aquí? Para mí es una pregunta importante, aunque pueda parecer ridícula para alguien de vuestras preocupaciones. Por eso os ruego una respuesta... os la suplico.- Coloco las manos en las caderas e inclino la cabeza en gesto de súplica.

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21/06/2022, 23:50
Gláin

Las palabras de Elrond fueron recibidas con agrado por parte del enano. Aún no había encendido su pipa a pesar de que el licor que estaba tomando invitaba a fumar; pero Gláin había preferido escuchar la respuesta del elfo a su petición por si ésta hubiera sido una negativa.

Sin embargo Elrond no solo aprobó su petición sino que también le había dado permiso para observar a los elfos en su trabajo. ¡Oh, cuánta belleza podía contemplar! Porque Gláin estaba orgulloso de la manufactura y la belleza de los objetos creados por los enanos, los cuales eran capaces de crear grandes maravillas; pero tampoco podía negar que los elfos tenían una delicadeza especial en la confección de bellos objetos. Eso sin contar con el abanico de posiblidades que se le ofrecían para comerciar con ellos.

Será un placer para los sentidos contemplar su trabajo —dijo emocionado. Sus palabras no estaban cargadas de vana lisonja sino de auténtica admiración.

Asintió con la cabeza en señal de agradecimiento y, arrellanándose en su asiento, se dispuso a encender su pipa para escuchar lo que los demás tenían que decir. No tenía prisa por el momento así que, antes de acudir a la fragua, prefería disfrutar del buen licor y de su pipa.

Escuhó a Tatharina y deseó con toda su alma que la joven encontrara en la biblioteca lo que buscaba; se entristeció con la partida de Rilwen a la cual, a pesar de no tener el mismo apego que tenía por la beórnida, le había cogido aprecio. Y no pudo evitar sentir curiosidad por lo que preguntaba Lily. Se mantuvo en silencio, intentando pasar todo lo desapercibido que un enano podía, mientras el humo de su pipa ascendía en volutas hacia el techo.

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22/06/2022, 06:37
Gallind

Gallind regresó la mirada a Elrond. Una mirada llena de melancolía. - Lo has notado, por lo que veo. - Suspiró profundamente y dijo a continuación. - Rilwen no ha dicho todo, mi señor. Yo también partiré con ella, hay asuntos de familia que me esperan en los caminos de la tierra media y es una estupenda oportunidad para continuar con mi búsqueda. No veo por qué desaprovechar la ocasión, ya que también puedo ayudar y acompañar a una gran amiga. Así no tendrá que viajar sola - Algo de alivio llegó a su semblante pero continuó con su discurso. - Pero eso no es todo. Traigo conmigo malas noticias. Noticias antiguas, pero funestas. - Y se levantó de su asiento a la vez que retiraba del bolsillo de su prenda la carta que hubieran encontrado en aquél túmulo. Se acercó hasta el escritorio de Elrond y la extendió frente de sí con la intensión de entregársela. - Esta carta creo que te pertenece. Quien quiera que haya sido portador de esta misiva no ha tenido la mejor de las suertes. La hallamos en un corrupto túmulo habitado por un ser de ultratumba en las quebradas cercanas a Bree. Me apena mucho, sinceramente, ser portador de malas noticias. - Y tras una pausa solemne. - Mi sentido pésame, mi señor. - Dijo con una respetuosa reverencia mientras regresaba a su asiento.