Partida Rol por web

Vale, por fin he localizado esto. Creo que lo mejor igual es que se me retire el pase VIP, me debe hacer algun conflicto o algo. Para encontrar este tema he tenido que ir a mi perfil de usuario y meterme en la escena donde he escrito, pero solo veo la partida como VIP. No veo ninguna escena en la que pueda participar como marinero ni nada ni de hecho me aparece esto.

Siento cualquier retraso que haya podido ocasionar.

Oca terminará como foie micuit y lo sabemos todos.

Vale, estoy viendo que puedo quitarme yo el pase VIP ¿Donde hago eso?

Ya te lo quito yo :S. Al que me lo pida, ya cuando acabemos se lo doy.

PD: La verdad es que te has pegado un currazo de la ostia O_O

Gracias :)

Muchas gracias, ya lo tengo todo perfecto :)

Quiero decir, aun no has abierto la escena donde participamos la carnaza ¿No? Salvo el offtopic y este veo todas las escenas cerradas. No lo digo por meter prisa que conste, sino por asegurarme de que lo tengo todo correcto.

EDITANDO: Se me había olvidado un pasaje importante, que voy a marcar, para que no tengáis que repasar todo de nuevo. Comprended que son ya dos años y bastante de partida :)

Esperate Fritzpatrick, querido, que ahora viene lo gordo :D Has posteado mientras yo... bueno, al grano:

Deberíais leer, también con cierta atención, la escena llamada "Dramatis Personae: Expedición Starkweather-Moore, ya que habéis convivido bastante con muchos de ellos. Incluso parte, que se fueron a la Antártida en dos de los aviones, han tenido trato con la gente del barco en Nueva York, durante los trabajos de compra, clasificación y estibado del material.

A la gente de Lexington la conocéis de vista, quizá, porque son famosos (la jefa, sobre todo) o por (importante) cotilleos entre barcos. Digamos que toda la información que hay ahí la podéis utilizar, pero saberla requiere distintas justificaciones que saber sobre los otros. Está en otro contexto, vaya.

Pero es mucho material: leed tranquilamente que vamos a tardar y, narices, igual a vuestro marinero no le interesan esas cosas, así que solamente le tiene que sonar de algo.

Os voy a poner las ayudas de juego del principio de la aventura para poneros en antecedentes, por si a alguno si le molan los tochos.

SOBRE LA EXPEDICIÓN DYER-LAKE DE LA UNIVERSIDAD MISKATONIC, EN 1930

Sus objetivos se vieron colmados con creces. Desde noviembre de 1930 hasta mediados de enero de 1931, la expedición conseguía un objetivo tras otro, triunfo tras triunfo. Los resultados fueron radiados para el mundo a diario, desde los barcos atracados y la estación de Kingsport Head. Miles de kilómetros cuadrados de territorio inexplorado fueron rastreados y cartografiados por hombres equipados con trineos y aviones. Conducidos por los profesores Dyer y Lake tomaron muestras geológicas de distintos lugares situados en casi un cuarto del continente. Unas modernas perforadores ultraligeras, diseñadas y manejadas por el doctor Pabodie, permitieron a los equipos extraer muestras clave, atravesando gruesas capas de hielo, así como las milenarias rocas heladas de aquellas frías tierras.

Sin embargo, la historia no recuerda a la Expedición Miskatonic por sus éxitos, sino por su trágico fracaso final.

El fin de la expedición llegó cuando el equipo parecía estar en los albores de su más espectacular triunfo. El 23 de enero, una gran partida aérea conducida por el profesor Lake, biólogo, dio con un increíble tesoro escondido compuesto por antiquísimos huesos y fósiles situados en una serie de cavernas a los pies de una cadena montañosa hasta entonces desconocida. Durante dos días exploraron las cuevas, extrayendo espécimen tras espécimen logrando así un auténtico palimpsesto de la historia terrícola. Algunos especímenes descubiertos por los equipos de Lake eran totalmente diferentes de cualquier fósil o ser vivo estudiado por la ciencia, y se habían conservado íntegros debido a alguna extraña combinación de factores climáticos y del terreno, hasta el extremo que incluso sus tejidos permanecían intactos después de millones de años.

Los informes de Lake fueron devorados por el mundo científico. Las fotografías y muestras que había reunido prometían un salto cuántico en los estudios de biología. La retransmisión de las transcripciones de sus primeras disecciones han sido copiadas en innumerables ocasiones, y están disponibles en cualquier librería científica que merezca tal nombre. Es seguro que habría podido proseguir en su descripción de muchas maravillas de la ciencia, pero incluso los esfuerzos heroicos tienen un límite, así que Lake y sus subalternos decidieron descansar tras dos días de actividad frenética.

Nunca más se volvió a tener noticias de ellos.

En la tarde del 24 de enero, una tremenda tormenta antártica asoló el campamento, acabando con las vidas de los componentes del grupo de Lake y desperdigando las muestras, notas y equipo caprichosamente. Al día siguiente llegó una partida para rescatarlos, pero lo único que encontró fue silencio, piezas sueltas de maquinaria y los tristes restos de una tragedia. Ninguno de los miembros del campamento Lake volvió a casa. Los supervivientes de la expedición se retiraron al norte unos días más tarde.

¡NOTICIA!

Ahora, en 1933, se ha formado una nueva expedición a la meseta antártica y al Campamento Lake. El explorador británico James Starkweather y el geólogo norteamericano William Moore han unido sus fuerzas para retomar la expedición truncada. Estos dos hombres tienen experiencia en exploración y supervivencia en condiciones adversas; los dos han viajado al Himalaya, y Starkweather ha trabajado en el Polo Norte. Su fin último es retornar al interior helado del continente antártico y finalizar el trabajo que Lake y su partida comenzaron hace tres años. Los dos están reuniendo un equipo de científicos y técnicos expertos que les permitirán triunfar a pesar de los peligros. Como sus predecesores, planean usar aviones para moverse rápidamente de un lugar a otro.

- La expedición partirá en septiembre para volver antes de julio.

- Utilizan fondos privados y no deben lealtad a ninguna escuela ni corporación.

-Su misión está orientada a la exploración y el descubrimiento, no al estudio detallado.

RESUMEN DEL VIAJE

En septiembre de 1933 se comienza a reunir una expedición para seguir los pasos de otra, hecha hace tres años, en la que, al parecer, mucha gente murió por culpa de una tormenta muy violenta.

Durante el flete del barco, el SS Gabrielle, el primer capitán al que se desea contratar, J.B. Douglas, es asesinado en un barrio portuario en circunstancias poco claras.

Durante todo el tiempo de trabajo en el muelle, hay multitud de pequeños sabotajes que tienen a todo el mundo de los nervios, hasta el extremo de que entrar y salir del muelle de carga supone un dolor de cabeza, por las medidas de seguridad. En uno de esos sabotajes, el más grave, estallan varios barriles de combustible que se estaban cargando. Muere un joven expedicionario (un pj jugador), el topógrafo Alasdair McDonald.

La expedición, aun así, está teniendo tal apoyo mediático que cada uno de los hombres que tenga que ver con ella es casi un héroe, con lo cual la moral no se viene abajo. Además, parece que, casi al final, se transforma en una carrera contra la rica playgirl Acacia Lexigton, que quiere fastidiar a vuestro guapo y bigotón lider, James Starkweather.

Durante la primera parte del viaje, no se sabe muy bien por qué, el joven Orgelfinger, un meteorólogo de la expedición, sufre un grave trastorno nervioso. Sucede en los días en los que se procura esquivar un huracán, durante la travesía del mar caribe.

En el pacífico, al paso del ecuador, se hace el bautizo de muchos de los miembros de la expedición, y de algún marinero novato, por parte de Neptuno y su corte. La aparición por sorpresa de los representantes de Neptuno disfrazados con algas y saliendo de improviso por el borde del barco casi supone una desgracia, pues algún expedicionario ya está un poco de los nervios y tiene el gatillo fácil. La relación con los "paquetes" (los expedicionarios) se suaviza bastante. Con todos excepto con Starkweather (James) al que se comienza a llamar Rompehuevos, porque es un capullo de tomo y lomo, dicho con toda claridad. Los camareros meten el dedo en su sopa, su ropa sufre "accidentes en la lavandería"... cosas por el estilo.

Durante el viaje siguen los pequeños sabotajes. Los expedicionarios estrechan el cerco y se sabe (¡terrible vergüenza para el barco!), que seguro es uno de la tripulación. Se envenena a muchos de los perros de la expedición. Sabotean la nevera, pero los científicos ahí reunidos logran improvisar una usando los gases halógenos de las lámparas de maniobra del barco y mucha inventiva. Poco antes de llegar a Sidney, el Jonás (así es llamado por la tripulación el saboteador oculto, aunque los puristas no están de acuerdo con esa denominación, llamándole, sencillamente, hijo de Satanás) es atrapado a costa de la vida del topógrafo que habían contratado para sustituir al que murió abrasado: el señor Kleiver, un alemán que era bastante majo. El Jonás resulta ser uno de los pinches de cocina que, se rumorea, deseaba vengarse de Starkweather (Rompehuevos) a causa de la muerte de un hermano en una expedición al polo norte donde Rompehuevos fue especialmente inepto.

Se sabe que parte de los expedicionarios han emprendido viaje en avión desde Nueva York (algo propiciado por Starkweather, en plan macho, y por uno de sus pilotos, Dominique Pickwell -un pj jugador-) haciendo numerosas escalas a lo largo de América del Sur hasta conectar con la Antártida, donde un barco auxiliar ha establecido varios puntos de repostaje de combustible, alimentos y equipo para que puedan llegar al punto de encuentro con el SS Gabrielle en la Barrera de Ross. La única noticia que se tiene de los aviones, aparte de que viajan según el calendario, es que Albermale, el otro meteorólogo de la expedición, que viajaba con ellos, también sufrió trastornos graves (mentales) durante la travesía del Caribe.

Se reaprovisiona el barco en Sidney, y ahí se contrata a otro topógrafo (cargo maldito, parece) que resulta ser un hijo secreto (¿y cuantos tendrá repartidos por ahí?) del Rompehuevos. Resulta ser un chaval agradable pero muy revoltoso, medio indú y, al parecer, un cerebrito en lo suyo.

La moral sube, ya que se supone que se ha conjurado la mala suerte al entregar al Jonás a las autoridades. Las tormentas en el océano Antártico, aun así, provocan graves desperfectos en el avión que se lleva en la bodega, pero la tripulación lo considera casi una suerte, ya que los otros dos aviones han llegado bien a la Antártida, y la expedición puede seguir.

Se cotillea por radio que los de la Lexington también tienen un Jonás a bordo, y que no lo han podido atrapar. ¡La mala suerte ha cambiado de bando!

Abriéndose paso

EDITADO

Al llegar a la zona de los hielos hay que abrirse paso con dinamita. Por fin Rompehuevos vale para algo (es experto en el uso de explosivos) y se avanza con miedo y despacio, pero a ritmo constante. Hasta que, atrapado en el hielo, se descubre un naufragio. Es el Walaroo, un ballenero. Era, al parecer, el barco encargado de aprovisionar determinados puntos de la costa de la Antártida para que los expedicionarios que iban en avión pudieran cargar combustible y alimentos en sus etapas de 2000 kilómetros. La noticia buena es que esa misión está cumplida. La mala es que en el Walaroo, atrapado por el hielo, partido por la mitad, todos han fallecido. Algunos expedicionarios van a investigar. Vuelven muy conmocionados.

FIN DE EDICIÓN

Se llega al Antártida. Ahí, el Jonás de la Lexington provoca problemas en su campamento. También, la ineptitud de Starkweather (con las prisas por descargar en la barrera de Ross, que es, en puridad, hielo sobre agua al inicio del verano, hace que se rompa parte de la costra y se pierda mucho equipo. Los expedicionarios que fueron en avión son recibidos como héroes. Alguno ha perdido un dedo del pie, pero están bien.

Como las expediciones Starkweather-Moore y Lexington han perdido mucho equipo, se unen para poder llegar al Campamento Lake (es el campamento al pie de la Cordillera Miskatonic de la malograda expedición anterior).

SOBRE LOS PERSONAJES JUGADORES:

En principio, y para ahorrar esfuerzos, esta partida la comencé con dos grupos en "universos paralelos", independientes. Uno de los grupos resultó que no podían llevar el ritmo (estaban Warlock y Oca, aquí presentes) y lo disolví, recurriendo a una falla espaciotemporal onírica mitológica que me saqué de la manga para recuperar a dos de los pjs del grupo que se iba al garete y que tenían tiempo para el jolgorio. Por eso veréis personajes jugadores que no existen en este universo: ignorad a Enma Friederick, Mike Butterfingers, Nadine Sinkins y Patrick O'Maley. Ese universo paralelo fue presa del Dios Desconocido y se acabó.

Los jugadores que han estado en esta partida son el resto. Pongo una lista de fallecimientos y bajas, ya que no aparecen en la escena de Dramatis Personae: Expedición Starkweather-Moore.

De la Starkweather-Moore han fallecido o son baja:

- Douglas Halperin, gravemente trastornado.

- Douglas Orgelfinger, trastornado durante el viaje en barco, justo al principio, durante las observaciones de un huracán en el Caribe, aunque bastante recuperado.

- Pierce Albermale, trastornado gravemente durante el inicio del viaje en avión. Dicen que observando el mismo huracán que, desde el mar, estaba observando Orguelfinger, que es su becario, por cierto (ambos son meteorólogos).

- William Moore, afectado por una vieja úlcera estomacal, parece que ha sido evacuado con destino Buenos Aires con carácter de urgencia del campamento Lake por los alemanes, en el Graf Zeppelin.

- Sir Montagu Sutton III, (personaje), muerto durante un terremoto y posterior tormenta más allá de la cordillera Miskatonic.

- Timothy Pooster, (personaje), muerto durante un terremoto y posterior tormenta más allá de la cordillera Miskatonic.

- James Starkweather, muerto durante un terremoto y posterior tormenta más allá de la cordillera Miskatonic.

- Nandan Starkweather (personaje), muerto durante un terremoto y posterior tormenta más allá de la cordillera Miskatonic.

- Rudolf Kleiver (personaje), muerto durante la travesía, antes de llegar a Sydney, quemado por el ácido y por asfixia al respirar los vapores provocados por la reacción del ácido con sus carnes...

- Richard Hirsch (personaje), muerto durante un terremoto y posterior tormenta más allá de la cordillera Miskatonic.

- Alexander Peabody (personaje), trastornado por causas desconocidas, vive, pero está preso acusado de sabotaje en el Campamento Lake.

- Charlene Whitston (antes pnj y personaje ahora) evacuada junto a su prometido (prometidos durante y después del terremoto, se dice) Chester Field, y junto a Moore a Buenos Aires por los alemanes.

- Chester Field (personaje) gravemente trastornado durante el terremoto y tal y tal...

Además, han causado baja:

- Charles Myers, de la expedición Barsmeier Falken, los alemanes, vaya. Muerto durante un terremoto y posterior tormenta más allá de la cordillera Miskatonic.

- Herman Baumann, alemán también, muerto durante un terremoto y posterior tormenta más allá de la cordillera Miskatonic.

- Maxwell Rucker, alemán, muerto en extrañas circunstancias (no aclaradas, muchos rumores) en el Campamento Lake, al regreso del viaje, tras el terremoto y etc, etc...

- Kyle Williams, de la Lexington, muerto durante un terremoto y posterior tormenta más allá de la cordillera Miskatonic. Resultó que era el Jonás de la Lexington, lo que sorprende a todo el mundo, ya que parecía majo.

- Se dice que el fotógrafo de la Lexington, Albert Priestley, también está bastante tocadete del ala.

El tiempo que ha pasado desde que los expedicionarios abandonaron el barco ha transcurrido entre maniobras destinadas a que la tripulación no perdiera el ritmo, no se ablandara ni se aburriera.

El capitán Vrendenburgh, que se ha ganado el respeto general de la marinería, lo ha decidido así porque el viaje ha sido muy accidentado y, aunque la moral ha subido desde que al común de los mortales le fue claro que la mala suerte se les había pegado a los de la Lexington, no las tiene todas consigo.

Además, eso de la mala suerte es algo que tiene unas leyes y dinámicas muy precisas, y, dado que las dos expediciones se han unido en el continente, muy bien puede ocurrir que la mala suerte se les pegue otra vez a vuestros "paquetes" y que, por tanto, la vuelvan a traer a bordo pegada al culo, lo que no os hace ni puta gracia.

Y es natural que no os haga puñetera gracia: el cabrón del Jonás estuvo a punto de volar el barco con dinamita. Quién sabe qué podría pasar ahora.

El primero oficial, Turlow y Vrendenburgh han decidido, por tanto, que salir a alta mar será beneficioso.

- La banquisa todavía esta soltando trozacos de hielo peligrosísimos, salir a mar abierto dará maniobrabilidad al barco, y permitirá que capeéis cualquier temporal que se presente.

- La tripulación se mantendrá ocupada y, estando los paquetes fuera, existirá la oportunidad de volver a asentar la disciplina sin gente de tierra adentro que pueda hacer comentarios tontos.

- Hay combustible más que suficiente: recordemos que este viaje no ha sido de carga, las bodegas no han ido ni a media capacidad. Ni siquiera si hubieran ido cargados los tres boeing que se pensaba que iban a ir en un principio se hubiera notado mucho. De hecho, lleváis mucho, pero que mucho más lastre de lo normal, para evitar naufragar cuando una ola más grande de lo normal os pille a trasmano.

- Se había dejado a Rompehuevos la responsabilidad de parte del avituallamiento, y el muy cabrón se ha olvidado de las agujas para el gramófono. Se pensaba que había, bien guardadas, en una cajita empaquetada con pulcritud. Por eso, en Sidney, os habíais confiado. Pero esa cajita resultó estar llena de agujas de coser. Esa y otras pequeñas cosas han animado a vuestros oficiales a buscar un encuentro en alta mar con el Wihelmina, que viene y va desde el campamento base alemán en la Isla del Engaño hasta Australia. Oh, bien, podríais haber pedido las agujas al Talahasee, el barco de Lexington. Pero McHilvaine, vuestro radio, ha mentido por toda la cara y ha dicho a vuestro capitán que ellos tampoco tienen suficientes. Y es que, con buen criterio, ha pensado que la mala suerte podría pegarse con cualquier tipo de contacto. Así que todos conspiráis para que se reduzca al mínimo.

Entonces, ya en alta mar, con el Wihelmina a la vista, os han comenzado a llegar malas noticias por radio. Muertes, un puto terremoto, tormentas... ¡Narices! ¡Ya está otra vez la mala suerte!

Habéis comenzado a ver a los expedicionarios como a unos gafes de tomo y lomo, y no dormís de la prisa que tenéis por que acabe esta maldita singladura. Por eso, ha comenzado una carrera a muerte por hacerse con la mayor cantidad de amuletos que se pueda, para conjurar la perra fortuna que os está tocando. Entendámonos, es un juego medio en broma, medio en serio.

Dos de las guardias de máquinas habéis hecho bastante buenas migas. Sois buenos elementos, bien acostumbrados al trabajo, amigables. Os dais buena maña para dejar de lado las rarezas que siempre surgen en cualquier hombre que convive con otro. Bajo la responsabilidad directa de Pacquare sois (valga la redundancia) una máquina bien engrasada.

En el trato con alemanes se han hecho visitas de cortesía en las que se han intercambiado (cómo no) correo y noticias. Una vez han sabido de vuestras necesidades, el tema de conjurar la mala suerte ha sido fruto de delicadas negociaciones: el Wihelmina, al decir de varios marinos que venían con el bote de su capitán, se ha librado de una buena. Justo empezaron los problemas en su campamento base cuando se largaban, y los poseedores de los ópalos fueron traídos a bordo por pura casualidad, evitando así (siempre según la versión de los marinos alemanes) una muerte horrible. Porque parece que los alemanes también están teniendo problemas en la Tierra de la Reina María, junto a la Barrera de Shackleton.

Nada menos que tres cuernos de Narval excepcionalmente largos y bellos han costado esas piedras de un curioso color negro. Pulidas. Los alemanes las han sacado de quién sabe dónde, pero les confieren gran valor, y creen (y lo han sabido vender muy bien) que traen buena fortuna, tanta que, a decir suyo, no tienen precio. Como tienen cuatro, os han "regalado" dos de ellas.

Humpries es, ahora, el tesorero y el responsable de la guarda de los amuletos.

Consulta/duda, ¿empezamos a postear en plan rutinas de lo que estamos haciendo, o esperamos a que pase lo de las piedras?

Esperad todavía un poquejo, una vez la lógica de la situación haga necesario que estéis en primer plano, será el momento en el que podréis comenzar a desfogaros alegremente :)

Comenzamos. Cuando ponga post inicial, podéis ir añadiendo post, aunque todavía no para los pjs, sino entre vosotros, para haceros a vuestros compañeros, cómo ha decidido su jugador que es... para ir haciendo ambiente. Tened en cuenta que estáis como destinatarios ocultos y por defecto, así que os va a llegar todo o casi todo, por lo tanto, debéis tener muy en cuenta el contexto antes de decidir qué sabéis y qué no.

O sea, funcionáis como una especie de pnj con muchas cabezas: todo lo que ponga uno de vosotros, llegará a los demás (no así a los jugadores, si no lo decidís)

Recuerdo los puntos fijos de los que no debéis salir:

En un momento dado, las piedras "desaparecerán". Comenzará una pelea. Humpries acusará del robo a White y a Beakins, con los que, dentro del buen ambiente que hay, no se lleva del todo bien.

Fuera de eso, sois libres.

Ok. Yo a lo mío. Que no paren las máquinas...chu. Xchuui...piufff.

AL turrón!

Entonces, enviamos el mensaje tal cual sin marcar a los pj, así el resto de marineros lo ven no?

Exacto. Por eso tenéis que estar muy al tanto del contexto. Dónde está quien y demás. Así también podéis espiar en qué andan los pj y elegir el momento :) Pero, lo dicho: ojo con el contexto. Por ejemplo, espero que quede claro que ahora estáis en alta mar, yendo a la costa para recogerles. Y que ellos están llegando en el aeroplano desde el interior. Ergo sería tonto montar ahora el rollo de la pelea ¿no?.

De 00:00 horas a 04:00 horas Webb, White, Pacquare, Montaigne y Fitzpatrick. Tenéis la guardia diurna entre las 12:00 y las 16:00.

De 04:00 horas a 08:00 horas Brunel, Hartz, Girolamo, Beakins y Humpries. La guardia diurna es entre las 16:00 y las 20:00.

Procuraré ser más claro en la hora que es: ahorita mismo está comenzando la guardia de 00:00 a 04:00 horas. O sea, en la sala de máquinas deberían estar Webb, White, Pacquare, Montaigne y Fitzpatrich. Los demás acabáis de cenar y os váis o a dormir un poquejo (en el mar se duerme a ratos) o a vuestras cosas.

Pues entonces no debería haber posteado... :s

Borra mi post por favor y pongo otro para cenar y demás. Mis disculpas.

No fastidiéis, si están muy bien. No soy tan purista. Pero... yo que se. Pongamos que toca revisión, y esta primera media hora os ha tocado a las dos siguientes guardias. Ale. Arreglado. No voy a borrar más de cinco post ¿verdad?

Pero atentos al contexto :)

Entiendo que seguimos en stand by el turno 2 ¿No?

Podéis rolear cuanto queráis, y reaccionar a aquellas cosas que se entiende que os llegan de lo que sucede: muchas no son "públicas" en el barco, pero siempre podéis preguntarme qué cotilleos rulan sobre lo que os interesa saber.

Una fuente de cotilleos fenomenal es uno de los expedicionarios: el becario de uno de los arqueólogos, Avery Giles.

La desaparición de las piedras todavía no tiene lugar, eso si.

Ok. Es bueno saberlo, porque estaba un poco indeciso. Qué decir y cuándo.
Entendido

Reproduzco lo que os he puesto en la escena principal, en notas:

Salen de su guardia de la tarde (entre las 16:00 y las 20:00 Brunel, Hartz, Girolamo, Beakins y Humpries.

Webb, White, Pacquare, Montaigne y Fitzpatrick están de descanso hasta las 00:00.

En escena: Humphries, White y Beakins. Humpries está furioso, durante toda su guardia ha estado pensando quién le ha podido robar sus piedras. Por fin, cuando termina con sus obligaciones, habiendo llegado a la conclusión (motivo: el que le apetezca a Sandman) de que los culpables son Beakins y White, que son sus compañeros de camarote en la cubierta de popa, la emprende a bofetadas con los dos, junto con los más chocantes improperios que se le ocurran.

Paquare anda cerca e interviene. Otros de sus compañeros pueden también andar por ahí. Seguramente Turlow aparecerá pronto.

Incluid a los investigadores como destinatarios cuando andéis a las voces. Poner solamente para vosotros (no hace falta que hagáis nada, salís como destinatarios por defecto todos los marineros) lo que no pueda percibir quien no esté cerca.

Comienza el jaleo, amiguitos.