Partida Rol por web

El volus sorprendido y con aparente alegría se acerca al cadaver mirandolo fijamente.

- Bueno... no es la muerte más sutíl que he visto pero supongo que se lo merecía. Tranquilo no quiero problemas, no te preocupes yo esconderé el cuerpo, enseguida vuelvo.

Trás esto Harrot se agacha y poco a poco va arrastrando el cuerpo hasta meterlo en la trastienda. Miras a tu alrededor pero por suerte nadie te ha visto, en Omega no hay demasiada seguridad, esto hace que los asesinatos puedan cometerse más facilmente, "la ley del más fuerte" piensas.

Unos segundos más tarde Harrot vuelve al mostrador.

- Suerte que no hemos dejado sangre, no es fácil de limpiar ¿sabes?. Si alguién pregunta por el mantendré la boca cerrada, no te preocupes.

- Olvidemos este pequeño asuntillo... ahora hablemos del "descuento". Te ofreceré un arma gratis, la que desees. ¿Que quieres que te muestre? pistolas, escopetas, fusiles de fracotirador o de asalto?

Denotas una total falta de sensibilidad del mercader por lo ocurrido, imaginas que debe de estar acostumbrado a esta clase de "sucesos"

 Sonreí satisfecho, ahora si que estaba todo sucediendo a pedir de boca. Su generosidad era más alta de lo que esperaba, ¿un arma gratis? fantástico, se veía que ese tipo apreciaba su vida.

- Me decantaré por los rifles de asalto, su potencia de fuego vendrán más que de maravilla en situaciones peliagudas, y me alegra comprobar que sabe tratar bien a los clientes, si desea protección extra ya sabe - dije mientras guiñaba un ojo, ahora ya estaba todo hecho, tan solo esperaba que conseguir una nave no conllevase otro encuentro como éste o mi corazón no aguantaría.

Dahyra respira aliviada al tocar tierra firme ¡que cerca ha estado! piensa nerviosa. Pero ahora se le presentaba un problema aún mayor. Querría haber llegado a Omega sin llamar la atención y sin embargo ahí estaba, ante una humana que le preguntaba quién era ella. Buena pregunta...

Creyó que lo más conveniente era actuar de forma natural como cualquier persona que acabase de tener un accidente similar, es decir, nerviosa y un poco desorientada.

-Muchísimas gracias por la ayuda, dice con una voz un poco temblorosa, creí que no viviría para contarlo. Yo... se tambalea un poco hacia los lados, como mareada, cre...creo que no me encuentro muy bien. ¡Solo vengo a fotografiar las extrañas calles de Omega y me ocurre esto! susurra como para sí misma. ¿Podría traerme un poco de agua por favor? Me siento muy cansada...

Así que la Manada Sangrienta es quién podrá sacarme de este agujero ; pienso para mí.

- Y dime amigo: ¿Quiénes son esos a los que llaman la Manada Sangrienta y qué tendría que hacer alguien como yo, para estar dentro de ese “afortunado” grupo?

Pregunto mientras miro con firmeza sus ojos superiores, en busca de alguna muestra de mentira por su parte o algún indicio de que lo que me cuenta a continuación, no es otro de esos asuntos que acaba en una paliza por parte de un grupo de matones, en busca de algún pardillo incauto; y yo no soy de esos.

Observas como Harrot se acerca a una caja de cartón que tiene en una esquina tras el mostrador y empieza a rebuscar bien, como si de basura o un cajón desastre se tratara.

Por lo que puedes ver la tienda del volus no está precisamente ordenada, pocas son las armas que tiene colgadas en las diferentes estanterías o paredes del establecimiento, los cargadores apilados en un montón dejan entrever lo desorganizado que es su dueño. Por la ausencia de armas en los expositores puedes comprobar que en Omega la compra de armas es algo más que habitual.

Miras de nuevo al dependiente, agachado rebusca entre las armas desechando y tirando aquellas que no cree convenientes, parece que murmura algo entre dientes. Agudizas un poco más el oído y levemente escuchas "prssff esta.... no" "esta le estallaría en la cara... demasiado usada....".

Trascurridos 5 min el alienígena termina su búsqueda y saca un rifle de asalto algo gastado por los bordes y parece tener unas cuantas batallas encima.

- ¡Ajá! este es el arma que necesitas , está en perfecto estado a pesar de su apariencia. Claro está que ha pasado por unas cuantas batallas pero te servirá.

Harrot apoya el fusíl en el mostrador.

- Es todo tuyo, completamente gratis. Ah por cierto,no necesito tu protección por el momento, ese vorcha me cogió de improviso y no pude coger mi arma a tiempo. No creo que me vuelva a pasar...

- Si necesitas mantenimiento, instrucciones o cualquier cosa , ¡ya sabes donde estoy! (si no fuese por que lleva un traje de protección jurarías que se está riendo).

Datos del arma

Nombre: Tsunami I

Daño: 100 p.

Recarga: 3 Disparos por turno.

 Tomé el arma y la colgué en mi hombro, sabía que no me iba a dar lo mejor de su tienda, pero al menos no había tenido ningún coste. Si en un futuro tenía problemas con ella no dudaría en regresar para mostrarle mi "hoja de reclamaciones" con sabor a plasma.

- Perfecto, me la llevaré entonces, espero que tu decisión haya sido la acertada - di un golpe en la mesa a modo de despedida

- Hasta la vista Harrod, que te quede bien presente que si te vuelves a despistarte y te asalta un  Vorcha furioso no estaré para protegerte - comenté entre risas interiores a la vez que me perdía de nuevo por Omega.

 Viendo que aún me quedaba mucho tiempo por delante, decidí activar de nuevo mi localizador para averiguar la dirección de la tienda de armaduras. Su slogan era bastante bueno, ¿pero sabrían dar la talla? gracias al suceso de la tienda de armas tengo bastante poder adquisitivo para hacerme con alguna pequeña joya de la tecnología nanoregenerativa. Aceleré el paso para no distraerme demasiado con la mente y fui directo a mi destino. 

- Por supuesto, esté tranquila ahora mismo le atenderemos. Estas situaciones generan traumas en algunas personas , pero trate de no dejar que lo sucedido le afecte.

- Acompáñeme.

Acompañas a la humana que te rescató al puesto de emergencia, te ofrecen un vaso de agua y te dicen que te mantengas en la sala de espera mientras ellos tramitan el papeleo. Tienen que registrar el accidente redactando lo ocurrido y dar parte a la chatarrería para que vaya a buscar la nave siniestrada.

La sala de espera no es muy grande, tiene las paredes pintadas de un tono gris y varias sillas situadas junto a las paredes. Parece que desde esta sala tu oido asari que es más agudo de lo habitual puede escuchar lo que están diciendo en la oficina donde trabajan los operarios. Chrisstina la humana que conociste antes está hablando sobre lo ocurrido con alguién.

Chrisstina: Si, hemos evitado que se estrellase contra el puerto señor.

????????: ¿Había algún otro ocupante en la nave?

Chrisstina: Parece que no, hemos registrado toda la nave pero no hemos encontrado a nadie más.

????????: ¿Algún documento que indique quién es la ocupante rescatada?

Chrisstina: No señor, lo único que hemos encontrado es este disco óptico en el puesto de mando de la nave.

????????: Introdúzcalo en el extranet, a ver que podemos encontrar.

Chrisstina: ¡Enseguida señor!.

Disco óptico: (voz salariana) Nos dirigimos al puerto de Spartan, mi compañero y yo mismo esperamos hacer buenos negocios allí, el cargamento de mecas "defectuosos" que tenemos situados en el compartimento trasero nos dará enormes beneficios, los compramos mucho más baratos.... ¡¿ Eh ?! ¡¿Quién es usted!? ¡¡uarggg!! pfsssssss...

????????: Parece que sus ocupantes son dos salarianos, además la emisión del diario se interrumpe ¿Donde están entonces?.

Chrisstina: Supongo que habrá que preguntárselo a la asari que encontramos, no se preocupe parece inofensiva.

????????: Ándese con cuidado oficial, las apariencias engañan.

Mientras escuchas la conversación el corazón se te acelera, el pulso te va cada vez más rápido. Cuando acaban de hablar oyes el ruido de las sillas arrastrandose en señal de que se han levantado de sus asientos.

Sabes que evitar una confrontación te salvará de ir a la cárcel o bien puedes mentir y esperar que te declaren inocente en un juicio, miras rapidamente a la otra puerta de la sala de espera, detrás de ella esta situada la recepción y tras esta la salida.

Los pasos se suceden y tienes que tomar una decisión....

- Primero, no soy tu AMIGO que te quede claro turiano (sus dos ojos superiores miran ladeados a la izquierda en señal de desprecio) segundo; en el caso de que tuvieras la "suerte" de que te comprara la Manada Sangrienta no formarías parte de ellos, si no que serías de su propiedad reservándose el derecho a que hacer contigo, por último decirte ingenuo turiano que la Manada Sangrienta es una banda de mercenarios, está formada mayoritariamente por Krogan y Vorcha que usan Varrens combinados con ferozes guerreros regenerativos que combaten cuerpo a cuerpo.

- Sobre lo de cómo podrías hacer que te comprasen, la verdad ni idea. Los compradores suelen venir de improviso, piden unas características en aquellos individuos que desean adquirir y luego se van...... con una sonrrisa a casa ¿a ti que te parece?  (notas un cierto tono irónico en sus palabras).

Si quiero salir con esta debo darme prisa, piensa Dahyra mientras oye los pasos acercarse. Sabe que no puede arriesgarse a que investiguen más sobre ella pues tiene mucho que ocultar. Debe escapar. Sin perder un segundo se dirije a la puerta que da a la recepción mirando con cautela si hay alguien en el exterior para intentar pasar inadvertidamente o echar a correr en caso de que no haya nadie y perderse lo más pronto posible en una de las muchas callejuelas de Omega.

De pronto en tu conversación con Parisqui notas una presencia cerca de ti, como si alguién te estuviera observando. Cuando te giras ves a un krogan más bien adulto con una amadura de combate y una porra electrica en la mano derecha. Está apoyado sobre la barandilla de metal, enfrente de la celda donde os situais.

- Como estamos señores, ¿hablando sobre las últimas novedades de este paraiso? (agita la porra y la golpea contra la otra mano) creo que os voy a tener que "enseñar" como comportarse en la Purgatorio....

- No otra vez NO... esta vez no te dejaré Rengal, sabandija asquerosa.... ¡¡aunque me deje el pellejo aqui mismo!! (los ojos superiores del batariano se mueven agitados de un lado para otro).

Enfurecido el batariano iracundo saca el "arma" con el que lo viste antes y carga freneticamente contra el krogan. Un esfuerzo inútil puesto que Rengal le propina un puñetazo de lado tan potente que lo tira por la barandilla, incrédulo observas como Parisqui cae y se estrella contra el suelo unos 15 metros más abajo, la sangre del batariano se expande desde la cabeza lentamente por la superficie que paró su caída. Sus cuatro ojos han dejado de moverse y ahora permanecen en blanco...