Partida Rol por web

- Mie-a tío, -a me tie-e- ha--a lo- hue-o-...¿-ue -oño -e im-or-a? -o -as a o-vi-ar... ¡-A-ULLO!

Es la voz de Andrés. Está delante tuyo, tapándose media boca con la mano, con la espalda contra la pared de una habitación que no recuerdas. Habla como si le costase pronunciar las palabras, tal vez como si alguien le hubiera dado un golpe.

Te mira con rencor, casi con odio. Notas un sabor amargo en la boca. Bilis. También notas que tu camiseta está como mojada. Te sientes algo débil, con los ojos llorosos. La nariz te pica. ¿Tal vez acabas de vomitar?

- "¿Que ha pasado?"

Andrés te observa sin moverse.

- ¿Y aho-a que? ¿Ya -e ha vul-o a da- un yuyu de e-o-? ¿Que -oño mi-as?

La habitación es pequeña, solo hay sitio para tres sillas y una especie de armario-archivador. Está iluminada por una lampara fluorescente. La única puerta está cerrada. No hay nadie más. Sólo tu y Andrés.

Y muchas preguntas.

David observa la habitación, sin prestar atención a Andrés. ¿Donde demonios estoy? Parece que he vomitado ¿o ha sido Andrés?

Que, ¿que coño está pasando tío? Quítate la mano de la boca y vocaliza, no se te entiende una mierda.

David vuelve a observar toda la habitación ¿Estamos encerrados?

Andrés ¿Donde estamos?

Andrés se queda un momento quieto, mirándote a los ojos. Aparta su mano de la cara y ves que un hilillo de sangre mana de su labio hinchado. La cara se le está hinchando...alguien ha debido golpearle.

Empieza a hablar, esta vez despacio. Se le entiende algo mejor, pero le sigue costando vocalizar.

- ¿Dónde estamos dices? ¿Lo has olvidado? Joder. Ahora si que si...

Se da la vuelta y apoya las manos y la frente contra la pared, dándote la espalda. Notas como respira hondo un par de veces.

Sientes un ligero entumecimiento en tu mano derecha. Las náuseas parecen estar remitiendo. En general parece que te sientes mejor. Miras a tu alrededor. No hay rastros de vómito. El archivador parece vacío. La puerta es una puerta de chapa, bastante corriente. No sabes si estará cerrada con llave.

Andrés se da la vuelta y te mira a los ojos. Inspira profundamente, y empieza a hablar.

- Tío...me vas a llamar chalado, pero tienes que creerme a pies juntillas. No tengo tiempo de explicártelo todo, porque se te va a olvidar. Si. Se te va a olvidar, quieras o no. Tenemos que salir de aquí. Tu sígueme la corriente.

David está realmente consternado por encontrarse en tal situación sin recordar que cojones ha pasado. ¿Me habré golpeado la cabeza? Andrés no deja de repetir que voy a olvidarlo, que lo he olvidado. Maldita sea que coño le pasa a este tío. Ciertamente, David no se encuentra nada cómodo y una ligera sensación de miedo se asienta en su espalda.

Tranquilizate y salgamos de aquí, joder. Y deja de repetir que voy a olvidarlo. No voy a olvidar nada tío, así que cuéntamelo mientras salimos de aquí. Vamos.

David se dirige hacia la puerta con decisión, dispuesto a abrirla sin dudarlo. Veremos a ver en que follón me has metido esta vez, Andrés.

Abres la puerta con decisión. Hay una pared delante tuya. La puerta está en un lateral de un pasillo. Sales y miras a tu izquierda, al fondo del pasillo hay una escalera que sube a algún lugar. Miras a la derecha.

Hay un tipo enorme que te mira con los brazos en jarras.

- ¿Dónde coño crees que vas, yonki?

Antes de poder decir nada, se oye la voz lastimosa de Andrés en el vano de la puerta.

- Se le ha vuelto a ir la olla. Dejadnos ir, ya no va a liar nada. En serio, lo prometo. Se manejarlo.

Las palabras de Andrés no parecen importarle mucho al grandullón.

- Ya, seguro que lo puedes manejar, como antes, ¿no? - mira hacia atrás y grita- ¡eh! ¡Avisa al Anfitrión! ¡Dile que ya se ha calmado el yonki!

David esta completamente confundido ¿como cojones ha llegado hasta allí? Por la situación, intuye que han tenido algún follón en una discoteca o bareto, si no en algún sitio mucho peor. Mejor no hacer conjeturas y seguirle el rollo a estos notas para salir cuanto antes de allí.

Es cierto colega, ya estamos más tranquilos. Nos largaremos y no volveremos a tener problemas.

¿Por que no puedo recordar nada? ¿Debo de haberme golpeado, si, eso es. Pero, si me he golpeado, ¿por que Andrés no deja de decir que se me va la olla y que voy a volver a olvidarlo? Esta claro que aquí hay alguien que está pirado, y por el momento, parece que soy yo.

Andrés vuelve a hablar:

- ¿Ves? Ya marcha todo bien. No hace falta que estemos aquí.

El tipo grande te ignora y mira directamente a Andres, y niega lentamente con la cabeza. Por detrás de el llega un tipo viejo y gordo, vestido con un chandal, acompañado de otro tipo con pintas de gorila de discoteca.
Conforme llega, empieza a hablar con Andrés, ignorándote por completo.

- ¿Ya se le ha pasado la gilipollez a tu amiguito? Me cago en Dios... Esta es la última vez que me jodes, Adresito... Métete en la puta habitación, tu y yo tenemos que hablar de algo serio.

Se gira y te mira con la cara que pondrías al ver que has pisado una mierda.

- Tu, ¡Puerta!. Espera fuera a tu amiguito.

Acto seguido, le pega un empujón a Andrés y lo mete en la habitación de dónde habéis salido... es curioso, Andrés se ha dejado empujar como un pelele... y estás seguro de que se le podría haber puesto chulo. No le pega esa actitud... ¿tal vez sean los gorilas?

Joder, en que mierda andará metido Andrés. Ese tipejo lo conoce bien, y Andrés sin duda también lo conoce a él ¿que debo hacer? Si intento ayudarle saldremos mal parados los dos, Andrés probablemente peor que yo. Si no hago nada... bueno, esperemos que no sea nada demasiado grave.

David hace caso al gorila y se dirige a la puerta señalada. Esperar fuera a que vuelva Andrés parece sin duda una buena opción. Una vez salga ya tendremos tiempo de aclararlo todo.

Recorres el pasillo hasta el final y empiezas a subir las escaleras. Un tramo de escalera, rellano, otro tramo de escalera. Una puerta de chapa. Abres la puerta.

Es un pequeño pasillo, con una puerta doble al fondo. Hay un candado y una cadena como cierre, y otro tipo con pintas de boxeador sentado en una silla de plástico al lado de la puerta. Lleva la misma ropa que los otros gorilas: vaqueros y una camiseta negra.

Ves como se lleva una mano a la oreja...parece que lleva un auricular. Te mira, se levanta con tranquilidad, saca unas llaves del bolsillo y abre el candado. Empuja la puerta y te señala el exterior, una calle no demasiado iluminada.

- Venga, ahueca el ala.

Sales por la puerta, algo intimidado por lo que sea que está pasando.

BLAM

Ha cerrado la puerta dando un portazo. Puedes oir como vuelve a colocar la cadena y el candado. Miras la calle. Frente a ti hay varias naves industriales. La puerta por la que has salido está en otra de esas naves.
Parece un polígono industrial.

Pero nunca has estado en ESTE polígono. No tienes ni la más remota idea de dónde estás.

Un par de luces aparecen por el fondo de la calle. Un coche. Y se acerca despacio.

David observa con detalle su alrededor. Un polígono...Mierda, esto no es una discoteca sino un putaco ¿donde coño estará esto? Joder Andrés en que follones me acabas metiendo siempre colega.

De pronto unas luces aparecen a lo lejos y comienzan a acercarse. Mierda, puede que no sepa donde estoy, pero un polígono es un polígono en todos lados. A ver que coño hacemos. Si me quedo a descubrir que quieren los amables señores del coche probablemente lo pase mal, y si intento esconderme probablemente lo pase peor. Joder.

David permanece quieto con actitud altiva delante de la puerta del local. David sólo puede esperar un poco de suerte, aunque sabe con certeza que no la tendrá, nunca la ha tenido. Miles de respuestas a infinidad de preguntas comienzan a dar vueltas por su cabeza.

El coche rueda lentamente hasta parar justo frente a la puerta, dónde se detiene con el motor apagado. Es un BMW negro, con las lunas traseras tintadas. El tío que lo conduce te dedica una mirada fugaz, y fija su vista en la puerta por la que has salido. Parece que va solo.

Escuchas el ruido de la cadena de la puerta. El machaca aparece por la puerta, y la mantiene abierta, mientras sonríe. Dos tipos trajeados salen por la puerta, uno de ellos muy sonriente, y el otro con cara de cabreo.

Al pasar a tu lado, el tipo sonriente te dirige unas palabras, y deja caer un billete de 50 euros a tu lado.

- Stand up man! You're a winner horse! I'll bet always for you! Hahahahah!

A lo que el otro tipo, el cabreado, parece responder:

- ...motherfucker... shut up, you bitch! Fucking mad junkie...

Sin detenerse, se acercan al coche, cada uno por un lado, abren las puertas traseras y se introducen en él.

El chófer pone en marcha el coche.

David observa la llegada del coche totalmente acojonado. Vamos, vamos, vamos. Un poco de suerte por un vez en la vida no estaría mal.

Cuando los tipos salen por la puerta el joven se siente algo más aliviado. Menudo mal rato. El primer tipo deja caer un billete de 50. Bueno, algo de dinero nunca viene mal. Th..thanks, dude.

Es extraño. Ese tipo parecía conocerle de algo. Sin embargo, David está completamente seguro de que es la primera vez que ve a ese nota.

Los guiris cierran las puertas traseras del coche, y el vehículo se pone en marcha... recorre la calle, gira a a derecha y lo pierdes de vista.

- "Hace frío aquí fuera."

No sabes muy bien que hacer, y te mueves de un lado a otro, para no coger frío. Aparte de una furgoneta aparcada a lo lejos, no ves más vehículos.

- "¿Como coño habré llegado aquí?"

Hay un par de carteles viejos pegados en la pared, anunciando a varios DJ's famosos en discotecas de Madrid. Miras a tu alrededor. Definitivamente, nunca has estado aquí. Esas naves son muy grandes, desde luego. Miras a lo lejos, al final de la calle y por encima de la naves que se adivinan al final. Nada, ni un maldito punto de referencia.

Miras otra vez a la furgoneta. A su matrícula.

- "De Madrid"

Miras los carteles de las naves. No te suenan de nada los nombres de empresas que hay escritos.

Otra vez el ruido de cadenas. Se abre la puerta, y sin tanta ceremonia como antes, sale el machaca y Andrés, con cara de haberse enterado de que le han extirpado el pene. El machaca te mira y te señala la furgoneta, mientras agita unas llaves en la otra mano.

- ¡Hey, tu! Venga, que no tengo toda la puta noche.

Vaya, por fin sale Andrés, aunque por su cara no parece que todo haya ido del todo bien. David mira al gorila unos instantes, sin saber muy bien lo que quiere decir. ¿Quiere que coja las llaves? ¿O quizás nos va a sacar de aquí el mismo? Eso último no me parece probable.

David se acerca con decisión a su interlocutor: Vale tío, ya vamos. David se acerca a él con ademán de coger las llaves, listo para salir pitando del lugar y acosar a preguntas a Andrés.

- Eh, tranquilo, yonki. Prefiero que conduzca él.

Ves como le da las llaves a Andrés, que sube con desgana en la furgoneta. Te abre la otra puerta desde dentro.

- Sube.

Andrés arranca la furgoneta y se pone en marcha, saliendo por el mismo lado que se fué el coche de los quiris. El machaca regresa a la puerta, y la cierra sin prestaros atención.

Parece que ya estás solo con Andrés. Tal vez sea el momento de enterarte de algo.

David se apresura a subir a la furgoneta, manteniendo el silencio unos segundos. Cuando se han alejado un poco, comienzan las preguntas:

Bien Andrés, la cosa es sencilla !!!¿Que cojones estabamos haciendo ahí dentro y donde mierda estamos?!!! Esto no se parece precisamente a Cuenca.

Andrés te mira de reojo mientras conduce. Aun tiene cara de estar jodido...pero en la mirada fugaz que te ha hechado parecía que te estaba evaluando.

- ¿Qué es lo último que recuerdas?

Te pregunta, ignorando tus preguntas, con una calma que te resulta perturbadora.

Joder esa habitación de los huevos, antes de que llegara el viejo ese de mierda. Por cierto, ¿quien era ese nota? Nunca te había visto acojonarte de ese modo. Tras el arrebato inicial, David para un poco y piensa, medita sobre lo que está ocurriendo.

Andrés, ¿que coño me ha pasado? ¿porque no dejas de repetir que voy a olvidarlo? Parece...parece que no es la primera vez que me ocurre. En esta ocasión se puede intuir el miedo en la voz de David.