Partida Rol por web

Los licanos no estaban, Creed había escapado en medio de las llamas, por eso no había rematado al príncipe, Alexander levanta su mirada, tiene la cara llena de sangre, y sus ojos demostraba los deseos de sangre, deseaba sangre, podías verlo, pero por lo menos, no iba a morderte porque aún no estaba demasiado transformado como para beber sangre de licano. 

- la te... tendrás...- murmuró el príncipe, ninguno de los dos estaba en mejor situación, y escuchan un automóvil  venir desde el otro lado del estadio, era uno de los vampiros.

- vamos suban, vamos!- les grita, puedes reconocerlo, es uno de los vampiros aliados del principe, Alexander te dice que vayan, mientras ambos cojean hacia el auto, que con el motor encendido espera poder partir. Mientras salen, el estadio termina por derrumbarse... Dante y Peyton seguían ahí, quizás ya estaban muertos.

-Hablas con sabiduría mi hermano, sin duda nos rastrearán muy fácil. Pero tampoco podemos dejar los vehículos aquí ya que podrían vincularnos con el evento, y en este momento es lo último que necesitamos- Patente, papeles, número del motor, todo aquello delataba nuestra presencia y no podía darse el lujo de empeorar las relaciones con los humanos, en estos tiempos donde todos parecen conspirar para el apocalipsis.

-Sugiero que nos alejemos lo antes posible y dejemos el vehículo en otra parte. En todo caso si nos siguen podremos despistarlos a pie, bajo el manto de sombras.- Se mantiene expectante a la decisión de su compañero mientras sujeta el picaporte con su mano, preparado para abrir la puerta.

Alexander prefiere huir rápidamente en el automóvil y en todo caso dejarlo estacionado en el centro.

Lo siento Alexander... pero no me voy a ir de aquí sin mi padre ni mi hermana, aunque me hayan encomendado protegerte, sabes que sus vidas son mas importantes para mi que la tuya. Sabía que su deber era irse con el príncipe y sus heridas hacían que lo desease. Dió media vuelta y se alejaba cojeando. -DANTE!!!! PEYTON!!! Gritaba con las pocas fuerzas que le quedaban, deseaba que estuvieran vivos e intentaba detectar su olor para seguir el rastro

Tarmes decide irse por su cuenta, mientras que tú subes al automóvil, cerrándose la puerta, y viendo a su compañero,estaba asustado. El estadio terminaba de derrumbarse,  y el automóvil sale a toda carrera tras esto. ¿a dónde iras? El vampiro es obvio que te llevará de vuelta al edificio del príncipe, ¿cómo darás la noticia? y más bien..¿que harás? ¨Piensas en esas cosas, Alexander debio morir a manos de Creed, de eso estabas seguro.

El automóvil evade a los policías y luego de un tiempo de viaje, llegas a la calle donde está el lujoso edificio, estás ansioso, con la adrenalina recorriéndote, si estuvieras vivo claro. El automóvil se detiene, y el vampiro aprieta el maniobro diciéndote que el príncipe está muerto, que los desgraciados habían logrado matarlo...

Las garras rojas habían demostrado su gran poder esa noche,esas ansias de destrucción que había terminado con el príncipe muerto hasta donde sabes y el estadio de los yankies en ruinas.

El príncipe asiente, comprende al licano, y cierra la puerta, el auto sale a toda velocidad rumbo a la mansión de seguro o quién sabe a qué lugar. Arkin lo ve partir y sin si quiera reparar aún en Illana que estaba cerca busca a Dante y a Peyton, estaba mal herido y la policía llegaría pronto, pero una brisa llega a ti, era el rastro de ellos, quizás si te transformarás en licano tendrías más oportunidad de escapar de la policía y seguir el rastro de tu familia.

He de informar al Príncipe... y ver a Temperance. Guardo la pistola y me dirijo rápidamente al coche, con la suerte que tengo seguro que me pusieron una multa. Una vez en el el apréto el acelerador y me alejó a máxima velocidad de allí, soy un vampiro conocido y lo último que necesito es que la policía, los bomberos, o algún periodista me vean cerca de un edificio derrumbado.

Nada más llegar al hotel sacudo mi ropa para eliminar cualquier resto de suciedad, un vampiro siempre ha de estar sexy y elegante, y si no que se lo pregunten a Cristopher Lee. Entró velozmente al edificio y me subo en el ascensor más próximo dispuesto a ver a Alexander con la esperanza de que su sire no haya abierto la boca.

Mientras te preparas para salir, llega otro automóvil, y ves salir al vampiro, un chico joven de nombre Charles que corre a la puerta del pasajero y saca a nadie más ni a nadie menos que al príncipe, el muy desgraciado a salvado, pero estaba mal herido y se notaba que necesitaba con urgencia sangre, pero lo peor es que podría estar infectado con licantropía.

- señor... - dice musita el vampiro, mientras carga al vampiro al hombro y lo hace entrar en el edificio a un paso de caer o en estado de euforia o en letargo por la pérdida de sangre y sus heridas. El vampiro corre y lo hace entrar en el edificio, es lo último que ves de ellos a menos que decidas seguirlos.

Los lobos se retiran y las sirenas se acercan, peligroso. Muy peligroso.

-Gracias... por todo -digo con un leve deje de sarcasmo y molestia en mi voz- pero debo irme enseguida.

Tras acomodar rápidamente mis cosas y cubrir mi rostro, corro rápidamente hacia una zona segura, a través de la red de callejones que adivino como cualquier experimentado cazador.

La chica herida está ahora muerta, aplastada por el peso del mismo estadio, no pudieron hacer nada por ella, y por tu parte, estas demasiado herido en una pierna como para huir, corriendo, las estacas de  sombra te abrieron las carnes y sangras profusamente del muslo y del hombro, en donde te atrapó, ahora con los licanos fuera y el vampiro escapando, sólo te queda la ayuda del otro hombre que aún no se va de ahí.

Luego de limpiarte y estar fresco para ir a ver al príncipe,  como si nada hubiera pasado, te vas al edificio del príncipe, ha pasado una hora por lo menos desde que escapaste, y entras en el edificio sin mayores problemas, pero notas algo extraño, no hay vampiros, ni la mujer de la recepción está, ¿y si buscas al príncipe? ¿o a Temperance? ella debería estar aún en su habitación seguramente, pero podría estar el sire...

-Tú, necesito tu ayuda- digo deteniendome de golpe mientras siento como mis heridas se abren y empiezan a chorrear sangre- rápido, necesitamos salir de aquí, si llegamos a los callejones podremos escapar.

Aunque parezca mentira no hay absolutamente nadie en el edificio, al menos nadie de los mios,, todos se han esfumado, tal vez Alexander haya dado orden de evacuar, o tal vez hayan desaparecido por algún ataque de la orden. En realidad ni se la razón por la que no hay nadie ni me importa. Me dirijo a la habitación del Príncipe esperando encontrar algo, tal vez esté allí, o con un poco de suerte esté Temperance. Necesito información ya, tal vez haya sucedido algo similar en mi hotel y he de estar preparado para lo que sea.

El maldito estadio había estado apunto de sepultarme vivo
Mi moto estaba situada en la dirección contraria a las sirenas, el Sur, por lo que podría proporcionarme una escapatoria sencilla, o propocionarnos. El cazador que me acompañaba tenía heridas, pero no sabía su gravedad.

-No tengo la moto lejos, acompáñame.- Le dije, aunque después miré bien sus heridas.- ¿Estás bien? ¿Puedes moverte?

-¡Debes mantener la calma! Realmente aún no sabemos que ha pasado con el príncipe.- Levanta su mirada sobre el hombro para observar por el vidrio trasero, sus mirada barre con cada detalle sobre la ciudad para asegurarse de que nadie lo siga. -Pronto llegaremos y resolveremos este asunto. Con o sin Alexander, debemos mantener la calma o ellos lograrán su objetivo, desmoronarnos por dentro.- 

-Esa es la estrategia de Creed, cortar la cabeza de cuajo para desmoronar el resto, no podían permitir eso-

El automóvil deja marcada su llanta en el pavimento al frenar y antes de que termine de detenerse Longinus ya se encontraba bajando de este. En ese momento puede apreciar al joven Charles llevando a cuestas al Principe Alexander.

-Si tan solo no fueras tan impulsivo...- suspira mientras se acerca a ellos -Maldito afortunado, aún sigues con vida. Esto no está tan mal como aparenta-

Se pega contra el principe y lo abraza pasando su brazo bajo el hombro para ayudarlo a entrar al edificio. -Ve por Maxwell O'Connor, que esperas! Yo ayudare al príncipe. Vamos corre! Le grita a Charles.

Alexander realmente se ve muy mal, necesita sangre y podría estar infectado. Longinus busca un lugar donde ayudarlo a reposar y examinar su cuerpo por mordidas de licano. Lo último que necesitaban era otro berseker y mucho menos uno con sangre de la realeza en sus venas.

Charles asiente asustado y sube las escaleras a dos trancos para buscar al sire del príncipe, mientras cargas el cuerpo del Príncipe contra el tuyo, él se queja y te murmura - de todos eres el ultimo que me imaginaría ayudándome...- y cerró los ojos, se notaba que le dolía mucho las heridas, Creed se había encargado de darle una buena zurra, realmente iba a matarlo,  y si no fuera por Arkin que lo salvó con su movida pero el licano estaba lastimado. 

Lo arrastras dentro del edificio y sale la vampiresa de la recepción, ella  grita y dice que todos los humanos se mantengan alejados, el príncipe podría atacarlos si se descontrolaban, y te ayudó a llevarlo al salón donde estuviste antes con Temperance, lo dejaron en el sillón y Alexander levanta la cabeza hacia él.

- Creed... nos estaba esperando... - señala lo evidente y se ríe de medio lado, la rubia grita a dos de los vampiros que trajeran  sangre para el príncipe, lo antes posible, el príncipe  cierra los ojos, y pone su mano en su hombro, - estoy apunto de infectarme... pero no tuvo tiempo, hubo una explosión, Arkin me salvó - mira a Alexander - ve donde Temperance, estaré bien...- era una extraña orden viniendo de él, pero era evidente que en ese momento lo único que le importaba era la muchacha.

La puerta se abre y entra el sire con dos bolsas de sangre y se las lanza al regazo del príncipe que las agarra y comienza a morder para beber la sangre, esta corre por su boca, y mancha aún más sus ropas, era evidente su alteración, sus ansias de beber sangre.

- ¿que pasó? - preguntó el hombre, clavando la vista en Alexander - era sólo ir a ver un presagio dela chiquilla y miren como llegan ¿dónde está Tarmes? - pregunta aún más incisivo y severo como si les estuviera dando una reprimenda.

-Aún puedo moverme por mi mismo, pero adelantate y ve por la moto.

Al avanzar por su moto cogeo ligeramente y acelero el paso, el tiempo es vida.

Jake busca la moto, y vuelve al rato, ya estaban encima los policias y con el estadio destruido les haran preguntas. Jake detiene la moto delante de Gabriel y salen rumbo contrario a las sirenas, van a toda velocidad, metiéndose entre las calles y las sombras. Habían presenciado horrores, cosas que no logran comprender del todo, pero ahora debían llegar a un lugar, y cruzan el Bronx hacia Queens, Gabriel está herido, pero no es buena idea llevarlo a un hospital y Jake decide llevarlo a uno de sus refugios, en la azotea del American Museum of the Moving Image, ahí suben por la escalera de emergencia, Jake debe ayudar a Gabriel a subir hasta aquel lugar, la amiga de Jake lo espera, su nombre es Leah, una muchacha que aprende a ser cazadora que al escuchar los pasos se asoma por la ventana y los ayuda a entrar.

- qué ha pasado? en las noticias dicen que se derrumbó el estadio - pregunta, estaba con un pijama, una camiseta blanca y pantolonsillos, era joven y vigorosa, preciosa, de pechos dadivosos y una mirada calenturienta, Jake la había conocido hacia  casi un año cerca de Arisona, cuando escapaba de unos vampiros que habían asesinado a su familia, y desde ese día Leah no se separaba de él.

- está herido - exclama y va al baño para buscar un botiquin - déjeme curarlo -  le dice al cazador.- ¿estas herido Jake?- le pregunta sin verlo.