Partida Rol por web

Mil balas sobre Avalon Hill.

Capítulo 3. El último argonauta.

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05/01/2009, 23:57
Tommy "Bonito" Smith

Silencioso y taciturno, Tommy decidió desmontar y ganarse a la izquierda del Pingo.

Sus ojos buscaban algo... Alguien que quiciera obsequiarlos con plomo quizá.

Las palabras de Potter le repugnaron por instantes

Quien tiene que hacerlo viejo... Tu y nadie más...

Ya en su tiempo había visto como los superiores se quitaban el lazo cuando la mano venía negra.

Aún así, guardó silencio y solo se sobresaltó al ver que Josephine volvía a aparecer sana y salva ante sus ojos...

"Y los demás?" Preguntó Thomas... ¿Qué sucedió aquí? Pensó en su lugar el joven veterano...

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06/01/2009, 10:12
Darius Potter.

El capataz experimentó un alivio infinito al descubrir a Josie y se sumó a las preguntas de Lewis:

-Sí, ¿están tu hermano y tu madre bien? Cuéntanoslo todo.

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06/01/2009, 10:14
Catherine Wales.

Catherine, mientras tanto, había aparecido por detrás de su hija.

-Estamos… estamos bien, Darius. Oh, dios, regresan empapados, tienen que cambiarse de ropa, rápido, les prepararemos café y… -Interrumpió con un gemido su perorata: había visto los cadáveres. –¿Es… es Bobby? ¿Se trata de Bobby?

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06/01/2009, 19:01
Sarah Hudson-Parker

Sarah no podía creer lo que veía, los pedazos del cerebro del pobre Bobby estaban desparramados por allí. Una sonrisa se le vino a la mente y esa era la del pobre chico destrozado allí, ella sintió deseos de vomitar, se volvió hacia atrás esperando que nadie notase las arcadas que le había provocado ver el cuerpo inerte de uno de los más jóvenes de aquel rancho. Se llevó las manos a las sienes, estaba totalmente helada, casi congelada se diría; las mejillas al rojo vivo, la nariz le dolía para respirar y aún así se mantenía en pie. No sabía cómo podría moverse de allí siquiera, sentía que cada pierna pesaba toneladas y en verdad debía ser así pues no alcanzaba a hacer que su cuerpo se moviera.

-Pobre Bob...-musitó.

Se quitó el sombrero y se sacudió la larga melena, al menos sacar un poco del agua que estaba en su pelo, le hacía recordar que estaba viva aún y que debía moverse si no quería terminar allí más dura que un animal en invierno. Se movió dos pasos y se sintió feliz de haberlo conseguido, ante el mutismo de Josie, no se dirigió a ella sino a la señora, intentando quitar su atención de aquel cuerpo.

-Será mejor que nos contemos todo adentro, señora...

Temía estar cometiendo una insubordinación pero era mejor eso a aceptar que sus fuerzas estaban flaqueando.

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06/01/2009, 19:14
Josephine "Josie" Wales

-Estoy bien... estamos to... -iba a decir todos, pero eso habría sido mentir, no estaban todos bien, el inerte cuerpo de Bobby estaba ahí, junto a la barandilla con el cráneo destrozado a causa de los golpes.

Cerró los ojos, sólo entonces se permitió sentir y lamentar en silencio la muerte del chico. Como era de esperar las preguntas de los vaqueros no se hicieron esperar, pero no tuvo tiempo de responder pues la nerviosa presencia de su madre no se lo permitió.

-Madre será mejor que entres a la casa mientras yo me ocupo aquí fuera -miró a los jinetes y les hizo una seña con la cabeza-, vayan con ella con ella y que Gertrudis les de algo caliente de beber... lo necesitan -la expresión de Josie era seria, daba la impresión de estar molesta, pero más que eso lo que estaba era preocupada.

Se quedó de pie en el porche, observando los dos cuerpos que yacían allí tirados. De los dos sólo le importaba uno, el de Bobby, lo que ocurriera al cuerpo del forajido poco le importaba, lo arrastraría con Zaina y lo dejaría tirado en algún sitio para que sirviera de alimento a los carroñeros.

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07/01/2009, 19:45
Thomas Lewis

La mirada silenciosa de Lewis se detuvo un instante en la señora Wales, sin comprender demasiado bien porque se sobresaltaba tanto con el cuerpo del muchacho. ¿Acaso no había estado ahí todo el rato? Y el hecho de que sólo haya dos cuerpos también resulta extraño, ¿se mataron a la vez? Demasiada casualidad...
Su atención se desvió entonces hacia su hija, sin sorpenderse ante su actitud distante y fría para con todos los presentes, no sólo con él.

No le agradaba demasiado la idea de que se quedara allí sola con la única compañía de dos cadáveres, pero bien era cierto que se encontraba empapado, cansado y entumecido. Además, quedándose sólo conseguiría más desprecio, de eso no le cabía la menor duda, así que tras unos segundos de duda se interno en la casa deshaciéndose del sombrero y el largo abrigo para quedarse junto alguna estufa o chimenea.

-¿Qué demonios ha pasado aquí?- pregunta con tono algo más molesto y apremiante después de que los primeros intentos de conseguir explicaciones concluyeran con evasivas, esperando que la matriarca del rancho o la propia Gertrudis vertieran algo de luz a todo el asunto.

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07/01/2009, 22:23
Darius Potter.

-Está bien, de acuerdo –reaccionó Potter ante la inquietud del explorador. Se aclaró la garganta antes de proseguir: -Bonito, Sarah y tú, Lewis, séquense y tomen algo caliente. Ustedes también, señora y señorita Wales. La noche ha sido dura, y parece que esto aún no se ha terminado. Voy a encargarme de este estropicio. Bonito, estate presto tu antes que nadie, corre hacia los dormitorios y cámbiate esas ropas –indicó por último señalando hacia los aposentos que ocupaban la parte superior de los establos.

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07/01/2009, 22:25
Catherine Wales.

El rostro de Catherine pugnaba por descomponerse en un mohín de pena y espanto. En vano, porque su voluntad se había fraguado en las llamas de un sufrimiento que los presentes ignoraban. Unas llamas que se resistían a extinguirse…

-El señor Potter tiene razón: entren, muchachos. Pero he de advertirles que tenemos un… invitado.

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07/01/2009, 22:26
Darius Potter.

-¿Un invitado? –se extrañó el capataz, aferrando el Winchester.

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07/01/2009, 22:27
Carlos Príamo.

-¿Me permite, señora? –habló entonces una voz desconocida.

Catherine se apartó para dejar paso a un hombre de estatura media y complexión recia, con la tez oscura y quemada por el sol y la escarcha, y ojos pequeños aunque penetrantes, densos como el carbunclo. En la mano izquierda llevaba su rifle, mientras que con la derecha buscó apoyo en uno de los pilares. Su rodilla derecha aparecía vendada, esa pierna del pantalón hecha tiras. A todas luces se trataba de un mestizo con un aspecto entreverado de marcial y errante.

-Me llamo Carlos y mi apellido es Príamo -proclamó.

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07/01/2009, 22:30
Darius Potter.

-¿Príamo? –repitió Potter. Meditó mordiéndose el labio y por fin: -Serviste con el teniente Wales, ¿no es así?

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07/01/2009, 22:30
Carlos Príamo.

-Así es –respondió el mestizo. -Y ahora, será mejor que usted también corra a cambiarse de ropa y se prepare para afrontar lo peor. El tipo al que venía siguiendo logró escapar y… -Sacudió la cabeza y concluyó: -Es una larga historia. Vamos, dense prisa, la señorita y yo mismo vigilaremos mientras tanto.

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07/01/2009, 22:31
Darius Potter.

El capataz lanzó una mirada inquisitiva hacia la señora Wales, quien asintió, y tomó su decisión:

-Muy bien, vamos, Lewis, Bonito, a por una muda seca.

Y realizó un breve galope hasta los establos.

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12/01/2009, 05:20
Sarah Hudson-Parker

Miró a Josie que les ordenaba ir a por algo caliente sin antes explicarles que estaba pasando pero no le sorprendía, de cierto modo ya sabía como se manejaba la hija de la señora; asintió cuando fue Potter quien le dio la orden y se encaminó hacia su cuarto para cambiarse la ropa pero no quería saber nada de volver y beber algo caliente, así que entró en lo que era su cuarto, se sentó en la cama luego de quitarse las ropas mojadas y lentamente se fue poniendo ropa húmeda. Se preguntaba qué rayos estaba haciendo ahí, ella quizás no había nacido para aquello, para ver sangre y arrastrarse por el fango, pero siempre había sido mejor que terminar de ayudante o de algo peor en el bar del pueblo. Un escalofrío la recorrió entera, podía quebrarse, nadie la estaba mirando. Podía pero su orgullo le obligaba a tiritar, quizás un poco menos que al llegar pero quizás más desangelada. Pensaba en el pobre Bobby, se dejó caer sobre la cama, mirando al techo; sintiendo el frío aún en sus huesos, cerró los ojos. Fingiría haberse quedado dormida, no quería salir y enfrentarlos y saber... Quizás era hora de largarse a donde nadie la conociera, quizás estaba a punto de tomar una decisión trascendental pero antes quería quitarse el frío.

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12/01/2009, 22:20
Director

Estaban reunidos en la casa, luego de haberse cambiado. Potter no había podido disponer sus órdenes, puesto que se había retirado en compañía de Catherine y de aquel tipo extraño a una de las habitaciones. Lewis y Bonito se sentían febriles, en ese estado de decaimiento que precede a los fuertes catarros. Tomaban el café y el desayuno a base de huevos y bacon que diligentemente les había preparado Gertrudis, y Josephine los acompañaba. Sarah, por su parte, llevaba un buen rato dentro de su habitación, tal vez había caído rendida, eso suponían.

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12/01/2009, 22:28
Director

A menos de media hora del rancho, se iban sintiendo febriles, en ese estado de decaimiento que precede a los fuertes catarros. El ganado avanzaba a buen ritmo, deseosos como ellos del aprisco.

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12/01/2009, 22:49
Lee Miles

Cabalgando al paso del ganado no pude evitar pensar en mi pasado y en todo lo que había sucedido hasta el momento, rememoré los hechos recientes e intenté olvidar aquellos que volvía a revivir con angustía y dolor.

Limpié el sudor del rostro, a tiempo de rescatar una lágrima perdida por tales recuerdos. Espoleé a plomo con suavidad y me colé por entre las reses con calma, sin apenas soliviantarlas, dejándolas seguir por donde abandonaba mi camino.

Una vez a la par con Buckner, permanecí unos minutos callado antes de dirigirme a él - No me importa mucho en lo que estuvieras metido antes de trabajar con nosotros, el pasado está ya muerto y enterrado  y lo único que debe quedar es una buena capa de polvo que vaya engrosando lentamente con el paso de los años.

Le escruté seriamente, buscando sus ojos - Importa lo que estes haciendo aquí y ahora, importa que seas una persona en la que se pueda confiar, y de la que ninguno debamos dudar... - luego detuve la montura dejando que él siguiese unos trotes más antes de concluir la conversación - Hay comentarios que no deberías hacer...  - me quedé callado mirando al ganado, antes de volver a colocarme en mi lado, pasando por detrás de las ultimas bestias.

Notas de juego

Cita :

Si alguien busca eso, no es un ladrón común, si terminas de esa manera con un rancho, quitas una posibilidad de robar, yo nunca haría algo así

 

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12/01/2009, 22:35
Josephine "Josie" Wales

Josie jugaba con la taza de café medio vacía de la cual había estado bebiendo y la hacía girar sobre la mesa. Su semblante era algo sombrío, se la veía pensativa... preocupada... ¿pesarosa?

-Traten de descansar -les dijo-, pero tengan sus armas listas, esos hombres van a volver y esta vez los voy a estar esperando -se llevó un trozo de pan a la boca y miró hacia la habitación en que estaban encerrados conversando Potter, su madre y Príamo. Baja la vista, ahora sí no existen dudas de que está pesarosa-... Si lo preguntan yo soy la causante de que ese hombre tenga la pierna en ese estado, me precipité y por poco lo mato -golpeó la mesa con el puño, se puso de pie bruscamente y de dos grandes zancadas quedó junto a la ventana- si no le hubiera disparado seguramente no estaríamos aquí esperando que esos malnacidos regresen...

Notas de juego

Mel, fíjate en los destinatarios, Lee Miles y Zacharias Buckner no están con nosotros, tienes que desmarcarlos.

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13/01/2009, 15:05
Thomas Lewis

Lewis observó a Príamo concienzudamente en cuánto éste hizo su aparición, alternando después con el capataz Potter y relajándose un poco tras quedar claro que era "de los suyos" y estaban en el mismo bando.
Dejó que ambos se marcharan con la sra. Wales a pesar de sentirse algo ofendido porque dieran de lado a los vaqueros después de todo lo vivido durante la noche, y por eso mismo no se sentía con fuerzas para oponerse o si quiera protestar, así que fue a secarse y cambiarse de ropa para más tarde agradecer la comida servida pro Gertrudis antes de empezar a engullirla con cierta prisa. No le agradaba la idea de perder el tiempo.

Finalmente se centró en beber el espeso y caliente café, el cuál le reconfortó bastante los músculos e incluso las ideas, sintiéndose algo menos entumecido aunque aún así distaba mucho de estar al 100% de sus facultades habituales.
Su expresión se ensombreció parcialmente en cuánto Josie empezó a dar una explicación que nadie había pedido, dejando así clara su propia preocupación y sensación de culpabilidad.
-Hiciste lo que pudiste, todos somos humanos y cómo tales cometemos errores. Lo importante es que ambos seguís vivos- probablemente eso no la consolaría en demasía ya que el cuerpo de Bobby sí resultaba irrecuperable, todavía en el frío porche sin que los presentes tuvieran suficiente tiempo para darle digna sepultura.

-Cuando regresen se arrepentirán- sentenció escuetamente pero con convencimiento, volviendo a colocarse el sombrero una vez terminado el improvisado desayuno para después levantarse de la silla y quedarse observando en silencio la espalda de la que antaño fue su amada.
-Deberías comprobar qué le sucede a Sarah...- propuso entonces con un tono de voz más suave, mirando de reojo la puerta por la que había desaparecido la joven, preocupado por ella pero seguro de que no era el apropiado para consolarla. Además eso mantendría a la joven Wales algo distraída de sus propias turbaciones.

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14/01/2009, 03:30
Josephine "Josie" Wales

Lo miró y por vez primera desde que Lewis llegara al rancho pareció hacerlo sin hostilidad. Podría decirse que en su mirada le leyó un escueto gracias y eso era bastante tratándose de ella y él.

No pronunció palabra alguna, no dirigida a él al menos. Sirvió otro tazón de café y cogió uno de los panes que Gertrudis había dejado preparados en el plato que estaba sobre la mesa.

-Voy a ver a Sarah -dijo con voz cortante tomando el tazón y el pan.

Al pasar junto a Lewis lo miró de soslao y continuó caminando rumbo a la habitación de la vaquera.